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Food & Wine Mayo 2020

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#QUÉDATEENCASA<br />

COMFORT FOOD<br />

Una comida<br />

en familia con<br />

Mercedes<br />

Bernal y<br />

Rodney Cusic<br />

COCINA PARA SENTIRSE BIEN<br />

MAYO <strong>2020</strong><br />

FOODANDWINEESPANOL.COM<br />

MÉXICO EDICIÓN GRATUITA


CASA MADERO


CASA MADERO,<br />

LEGADO QUE TRASCIENDE<br />

VINOS CUIDADOSAMENTE ELABORADOS DESDE 1597.<br />

VALLE DE PARRAS, COAH. MÉXICO<br />

WWW.MADERO.COM<br />

EL ABUSO EN EL CONSUMO DE ESTE PRODUCTO ES NOCIVO PARA LA SALUD<br />

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24<br />

Oda al caldo<br />

de pollo<br />

Un homenaje a la sopa<br />

que, cuando se trata de<br />

alivio, es tan eficaz<br />

como un abrazo.<br />

76<br />

Dale un upgrade<br />

a tu cena<br />

Un arsenal de<br />

recetas para darle<br />

un ascenso a tu<br />

menú de la semana.<br />

FOOD & WINE EN ESPAÑOL<br />

<strong>Mayo</strong><br />

58<br />

70<br />

Tijuanera<br />

Entre churros, chilaquiles<br />

rojos y tacos, la chef<br />

Claudette Zepeda ofrece<br />

un relato desde<br />

la frontera.<br />

Agüitas, botanical<br />

wisdom<br />

Un ensayo en imágenes<br />

sobre la sabiduría<br />

botánica que habita en<br />

nuestras alacenas.<br />

90<br />

110<br />

El nuevo arte<br />

del sake<br />

La revolución se avecina<br />

entre los productores<br />

de esta bebida<br />

tradicional japonesa.<br />

Café escencial<br />

Una guía, de la mano de<br />

un experto, para preparar<br />

la taza perfecta en casa.<br />

36<br />

30<br />

48<br />

Comfort food<br />

Los chefs de Meroma, Mercedes<br />

Bernal y Rodney Cusic,<br />

comparten un recetario<br />

para levantar el ánimo.<br />

Hecho en casa<br />

La cocina casera está<br />

marcada por eventos<br />

sociales, inventos y<br />

platos reconfortantes.<br />

Aquí una radiografía<br />

de 1920 a <strong>2020</strong>.<br />

Family meals<br />

Así es como tres familias<br />

de restauranteros,<br />

dedicados al servicio de<br />

otros, se nutren entre ellos.<br />

Foto de portada: Juan Pablo Tavera.


CARTA<br />

EDITORIAL<br />

Nos lo merecemos<br />

Todos los días, justo a la media tarde, un antojo<br />

viene a mi cabeza. A veces es pasajero, a veces<br />

irresistible. A veces es inventado, un ejercicio<br />

creativo, la respuesta a qué puedo cocinar hoy<br />

con lo que tengo a la mano.<br />

Trabajando desde casa, como millones de<br />

personas en el mundo, empecé a experimentar<br />

con estos antojos. A verlos menos como un<br />

tormento —sin reparar mucho en las calorías— y<br />

más como una inspiración, un motivo de<br />

entretenimiento. Cada antojo se convirtió en<br />

una oportunidad: de cocinar algo nuevo, de<br />

comer algo que me quita el sueño o de animar a<br />

otros a meterse sin miedo a la cocina.<br />

Un trozo de chocolate con centro de caramelo<br />

y un puntito de sal. El panqué húmedo de<br />

ricotta con zarzamora de la Panadería Rosetta;<br />

un sorbo a una copa de riesling, cítrica,<br />

brillante. Una galleta de naranja; un bocado de<br />

piccata de pollo con limón y alcaparras.<br />

Calabacitas tiernas, tallos de apio crujiente,<br />

champiñones; un plato de macarrones con<br />

queso, otro plato de macarrones con queso. El<br />

pescado a la talla de Agua y Sal. Migas con<br />

huevo, migas de pan, una naranja muy dulce,<br />

un bowl de palomitas, pepinos con chile y<br />

limón, rebanadas de queso Oaxaca, más<br />

riesling, etcétera.<br />

Una lista de todo lo que como —cocino o pido<br />

a domiclio— durante el distanciamiento. Una<br />

foto que se ensancha con cada día de resguardo, una enumeración de platos que<br />

me brindan cobijo. Platos que me ayudan a ponerle una pausa al día. Platos a los<br />

que agradezco porque me ayudan a ver en la mesa un espacio de bienestar. Un<br />

merecido descanso. Uno que, si me preguntan, todos necesitamos.<br />

Esta edición está dedicada a la lista —escrita, mental o documentada en Instagram—<br />

que todos tenemos. A la cocina de confort anclada a los recuerdos (un<br />

testimonio fiel está en el artículo ‘Comidas familiares’, página 48) o que consumimos<br />

como recompensa porque sabemos que nos dará un levantón.<br />

No estamos hablando de platos hipercalóricos, ni bañados en fuentes de queso<br />

(o bueno, no solamente) sino de los vínculos emocionales que se forman en la<br />

mesa. Estamos hablando de una oda al caldo de pollo (un tónico casero con<br />

propiedades restaurativas), de la alegría de un ritual alrededor de una taza de<br />

café, de platos con acidez y ensaladas que son un vuelve a la vida, de tragos que<br />

con nombrarlos nos producen alegría —hola, querida Margarita—, de recetas<br />

que son el combustible para rendir en la semana, de antojos que son estimulantes<br />

como un abrazo; ese que, tras semanas de distanciamiento e incertidumbre,<br />

nos merecemos todos.<br />

MARIANA CAMACHO<br />

MCAMACHO@FOODANDWINE.MX<br />

6<br />

MAYO <strong>2020</strong>


¿Qué cocinas para<br />

sentirte bien?<br />

MAYO <strong>2020</strong> NÚMERO 28<br />

FOOD & WINE EN ESPAÑOL<br />

DIRECTORA EDITORIAL Mariana Camacho mcamacho@foodandwine.mx<br />

EDITORA ADJUNTA Mary Gaby Hubard<br />

EDITORA SR. Fernanda Castro<br />

EDITORIA JR Paulina Gutiérrez<br />

COMMUNITY MANAGER Loredana Flores<br />

“Tortellini in brodo.”<br />

DIRECTORA DE ARTE Griselle Montejo<br />

EDITOR DE FOTOGRAFÍA Juan Pablo Tavera<br />

EDITOR DE VIDEO Pablo Angulo<br />

PRODUCTOR JR. | F&W TABLE Mariana Rojas<br />

SOUS CHEF | F&W TABLE Antonio Garrido<br />

CHEF ASESOR Sergio Camacho<br />

“Chiles rellenos.”<br />

TRADUCCIONES<br />

Ana Dávila Cook<br />

PORTAFOLIO<br />

Espacio Crudo<br />

CORRECCIÓN DE ESTILO<br />

Daniel Sánchez Poitevin<br />

DIRECTOR DE FINANZAS Sebastián Castro<br />

PUBLISHER Alejandro Ortiz<br />

DIRECTORA COMERCIAL PRINT Diana De Ramery dramery@foodandwine.mx<br />

DIRECTORA COMERCIAL EVENTOS Elisa Cadenas ecadenas@foodandwine.mx<br />

COORDINADOR COMERCIAL PRINT Manuel Nava mnava@foodandwine.mx<br />

COORDINADOR COMERCIAL WEB Erika Gómez egomez@foodandwine.mx<br />

FOOD & WINE USA<br />

EDITOR-IN-CHIEF Hunter Lewis<br />

DEPUTY EDITOR Melanie Hansche<br />

CREATIVE DIRECTOR Winslow Taft<br />

PHOTO DIRECTOR Tori Katherman<br />

MEREDITH PARTNERSHIPS, LICENSING & SYNDICATION<br />

“Caldo de pollo<br />

VICE PRESIDENT, BUSINESS AFFAIRS – Tom Rowland.<br />

y chilaquiles.”<br />

EXECUTIVE DIRECTOR, LICENSING OPERATIONS – Paul Ordonez<br />

SENIOR DIRECTOR, BUSINESS DEVELOPMENT – Wendy Zhang<br />

MANAGER, BUSINESS DEVELOPMENT – Nicholas Arnold<br />

ASSISTANT MANAGER, BUSINESS DEVELOPMENT – Thomas D. Rodriguez<br />

MEREDITH<br />

CHAIRMAN & CEO – Tom Harty<br />

CHIEF FINANCIAL OFFICER – Joseph Ceryanec<br />

CHIEF DEVELOPMENT OFFICER – John Zieser<br />

“Tortilla española.”<br />

GERENTES COMERCIALES Y DE PROYECTOS ESPECIALES<br />

Antuanet Lajud, Paola Fernández, Héctor Segura, Gwendolyne Morales<br />

GERENTES COMERCIALES DIGITALES<br />

Bárbara Galindo, Karla Zavala, Verónica Meza,<br />

GERENTE DE TRÁFICO Y PROGRAMMATIC Iván Romero<br />

VENTAS PROGRAMMATIC Diana Rico<br />

DISEÑADORAS COMERCIALES Ana Cecilia Pérez, Tania De la Mora<br />

DIRECTORA DE MARKETING Y RELACIONES PÚBLICAS María Escrivá de Balaguer<br />

DIRECTOR DE EVENTOS Y NUEVOS NEGOCIOS Alejandro Rodríguez<br />

DIRECTORA DE ADMINISTRACIÓN Mary Carmen Velázquez<br />

DIRECTORA DE CIRCULACIÓN Eréndira Sánchez<br />

DIRECTORA DE PRODUCCIÓN Laura Vega<br />

PRESIDENTE PARA AMÉRICA LATINA Mariano Menéndez<br />

PRESIDENTE PARA MÉXICO Y CENTROAMÉRICA Marco Landucci Lerdo de Tejada<br />

FOOD AND WINE EN ESPAÑOL: Año 3, No. 28 mayo <strong>2020</strong>; es una publicación mensual editada distribuida y publicada por Media<br />

Business Generators, S.A de C.V: con domicilio en Boulevard Manuel Ávila Camacho #126 Piso 8 Lomas de Chapultepec, CP 11000, Ciudad<br />

de México, por contrato y bajo licencia de Time INC. Affluent Media Group, con domicilio en 225 Liberty St, New York, NY 10281, EE.UU.<br />

Editor responsable, Mariana Camacho. Certificado de Reserva de Derechos al Uso Exclusivo 04-2017-110812012600-102 y Certificado<br />

de Licitud de Titulo y Contenido otorgado por la Comisión Calificadora de Publicaciones y Revistas Ilustradas de la Secretaría de<br />

Gobernación en trámite. Suscripciones: suscripciones@foodandwine.mx, o al teléfono: (52 55) 5520-0044. El contenido y las opiniones<br />

expresadas en los artículos de la publicación son responsabilidad exclusiva de sus autores, por lo que no necesariamente reflejan la<br />

opinión de Business Generators y/o del editor responsable de la publicación. El contenido y alcance de la publicidad de la publicación son<br />

responsabilidad exclusiva de sus anunciantes, en consecuencia Business Generators no es responsable de su cumplimiento. Todos los<br />

FOOD & WINE EN ESPAÑOL<br />

Media Business Generators, SA de CV<br />

Bajo licencia de Time Inc. Affluent Media Group<br />

Vigencia: septiembre 2019-agosto <strong>2020</strong><br />

derechos reservados. Se encuentra totalmente prohibida la reproducción total o parcial por cualquier medio de esta publicación sin previa autorización de Business<br />

Generators. © 2012 MEDIA BUSINESS GENERATORS, SA de CV.© 2012 FOOD AND WINE, todos los materiales publicados en la edición de <strong>Food</strong> and <strong>Wine</strong> Estados<br />

Unidos. Todos los Derechos Reservados.<br />

8<br />

MAYO <strong>2020</strong>


ADVERTORIAL<br />

D<br />

etrás de cada taza de café hay<br />

una historia, una que cuenta el<br />

lugar de origen de los granos,<br />

el cuidado que involucra procesos de<br />

cultivo, secado y tostado.<br />

SF Bay Coffee trabaja con pequeños<br />

productores en México y alrededor<br />

del mundo, por eso que puede ofrecer<br />

cafés de especialidad, de las mejores<br />

cosechas del mundo, con orígenes diversos<br />

como Ruanda, Etiopía, Kenia,<br />

Tanzania, Hawaii, Panamá, Colombia,<br />

Nicaragua, Honduras y por supuesto<br />

Chiapas, México.<br />

Estos cafés, que provienen de micro<br />

lotes que solo producen un número<br />

limitado de kilos, pasan por procesos<br />

muy particulares desde la cosecha<br />

hasta el tostado y son catados por<br />

asociaciones certificadas de catadores<br />

Q. Los catadores califican el<br />

aroma, acidez, el cuerpo, el sabor y<br />

retrogusto del café, si la calificación<br />

es suficientemente alta puede considerarse<br />

como ‘taza perfecta’.<br />

DE LA PLANTA A LA TAZA<br />

El origen<br />

Cada lugar tiene una longitud y latitud<br />

diferente, dos factores que influyen en<br />

la calidad y las propiedades del café.<br />

La temperatura, la humedad, la luz,<br />

la sombra y el suelo son otros factores<br />

a tomar en cuenta. Un fruto cosechado<br />

en Hawaii no será el mismo que<br />

uno cosechado en los altos cafetales<br />

de Chiapas o de Boquete en Panamá.<br />

El fruto perfecto<br />

Durante la cosecha SF Bay Coffee<br />

selecciona manualmente el fruto en la<br />

maduración perfecta para garantizar<br />

la calidad del grano.<br />

El secado<br />

Existen diversos procesos de secado.<br />

SF Bay Coffee usa el método de<br />

acuerdo al tipo y características del<br />

grano. Otro factor que determina el<br />

proceso para el secado, es el uso de<br />

agua y energía. Antes de llegar al tostador,<br />

el café de esta gran marca es<br />

estrictamente seleccionado y evaluado<br />

con base al tamaño, dimensión,<br />

peso y color del grano. Estos procesos<br />

les asegura que todo el café que se<br />

van a tostar tenga los estándares de<br />

calidad perfectos.<br />

El tostado<br />

Este punto del proceso le da vida a<br />

todas las notas, sabores y cualidades<br />

del grano. “Es un arte y una ciencia”<br />

dicen los expertos. Los tostados de todos<br />

los cafés de SF Bay Coffee tienen<br />

un tostado artesanal para resaltar las<br />

mejores notas de los granos de acuerdo<br />

a su origen y características.<br />

Tostado claro: son de cuerpo suave<br />

y tienen mayor acidez, resaltan notas<br />

cítricas, brillantes y frutales.<br />

Puntos de Venta: Costco ,Chedraui Rappi, Cornershop, Tiendas Super Aki.<br />

(Quintana Roo, Campeche y Yucatán)<br />

Tostado oscuro: resaltan notas más<br />

dulces, chocolatosas, tienen un retrogusto<br />

más prolongado y cuerpo más<br />

cremoso.<br />

El método de preparación<br />

El café en grano preserva todas las<br />

cualidades y frescura del café, sin oxidaciones.<br />

El tipo de molido se puede<br />

personalizar a la preferencia y tipo<br />

de cafetera que tengas en casa: una<br />

prensa francesa, un sifón japonés, en<br />

cápsula, una chemex, una cafetera<br />

espresso o tradicional. Si no tienes<br />

como moler el café, SF Bay Coffee<br />

también cuenta con presentaciones de<br />

café molido.<br />

El café 100% arábica es de mejor<br />

calidad. Durante 40 años SF Bay Coffee<br />

ha trabajadopara brindar café 100%<br />

arábica garantizando la mejor calidad y<br />

sabor en cada una de las presentaciones<br />

de café de especialidad y gourmet<br />

a sus consumidores.<br />

COMERCIO<br />

JUSTO<br />

SF Bay Coffee trabaja en México con más de<br />

1,000 pequeños productores, a los que brindan<br />

capacitaciones, recursos y un pago justo.<br />

A través de su fundación han podido construir<br />

escuelas, clínicas, guarderías y cocinas<br />

comunitarias, siempre con la mira de romper<br />

con el ciclo de pobreza y mejorar la calidad<br />

de vida de las comunidades.<br />

Comparte la taza perfecta<br />

@SF Bay Coffee @SFBayCoffee SFBayCoffee


CLUB<br />

HAMBRIENTO<br />

ACTRIZ<br />

La actriz e influencer más fit, Bárbara de Regil, nos<br />

confiensa que a veces fuera del set hay más que<br />

proteína, pepinos y zanahorias en su dieta.<br />

ANTOJOS DENTRO Y FUERA DEL SET<br />

Lo que más me gusta en el set son verduras:<br />

zanahoria, jícama, pepinos. Pero lo que más<br />

como es zanahoria. Afuera me gusta el sushi.<br />

Todo lo que sean rollos me encanta, sobre todo<br />

de Ryoshi y Nobu.<br />

COMIDA EMOCIONAL<br />

Cuando estoy triste me gusta comer pizza. La pido de puro<br />

queso o también las típicas estilo Chicago.<br />

DOTES CULINARIOS<br />

Las hamburguesas me quedan wow, porque les<br />

pongo triple queso. También hago chilaquiles<br />

light. La verdad es que todo me queda rico.<br />

EN EL CARRITO DEL SÚPER<br />

Siempre hay proteínas: pollo, pescado, así como pan integral,<br />

avena. Hay mucha fruta porque la amo.<br />

MECAS GASTRONÓMICAS<br />

Cuando viajo lo hago para comer. Me gusta ir<br />

a los restaurantes. Mis favoritos de la ciudad<br />

son Ryoshi, Nobu, Mochomos, Sylvestre<br />

y claro, mi casa.<br />

DULCE O SALADO<br />

Toda la vida, dulce. Sobre todo cualquier cosa que tenga<br />

que ver con cajeta y helado de vainilla.<br />

TU RECUERDO DE LA INFANCIA<br />

Yo creo que la pancita. Mi papá la preparaba<br />

y yo la amaba.<br />

pasta: juan pablo tavera / retrato: cortesía / picarones: renzo vallejo.<br />

10<br />

MAYO <strong>2020</strong>


OBSESIONES<br />

LA VIE AU<br />

EL CHOCOLATE ES<br />

LA MATERIA QUE DA<br />

FORMA Y FONDO A<br />

CREACIONES QUE NOS<br />

ALEGRAN LA VIDA EN<br />

UNA SOLA MORDIDA.<br />

CHOCOLATE<br />

SEGÚN EL ESCRITOR HAROLD MCGEE, los indígenas<br />

utilizaban el cacao para hacer una bebida espumosa<br />

que los españoles llegados a México definían como<br />

‘exótica’. El cacao se cultivaba en la península de<br />

Yucatán –y algunos lugares de Centroamérica– y se<br />

lo vendían a los aztecas, quienes lo tostaban y<br />

molían para convertirlo en su bebida ritual. Era tan<br />

importante, que incluso se consideraba como<br />

moneda de cambio. Los españoles lo introdujeron en<br />

Europa en el siglo xvi y con ello vinieron una serie<br />

de cambios —agregaron leche, azúcar y algunas<br />

especias— que convirtieron al cacao en lo que ahora<br />

conocemos como chocolate. Durante el reinado de<br />

Luis xvi, el chocolate era considerado un producto<br />

de lujo y se servía durante las extravagantes fiestas<br />

en Versalles.<br />

El holandés Conrad Van Houten fue el pionero del<br />

cacao en polvo y la prensa de manteca de cacao. Esto<br />

después se convirtió en los redondos y perfectos<br />

bombones que vemos hoy en las cajas de chocolate.<br />

En 1828, las brillosas mezclas de chocolate sólido ya<br />

se hacían presentes en las chocolaterías de Holanda<br />

e Inglaterra.<br />

¿DE DÓNDE VIENEN LAS CAJAS?<br />

Aunque no hay un registro oficial, la popularización<br />

y creación de las cajas de chocolate se le atribuyen a<br />

Richard Cadbury, en Inglaterra, quien comenzó a<br />

venderlas en esta presentación para subir las ventas<br />

durante los festejos de San Valetín. Actualmente se<br />

venden más de 36 millones de cajas de chocolate<br />

en esta fecha.<br />

¿POR QUÉ SON TAN RECONFORTANTES?<br />

La física especializada en medicina, Katya Vázquez,<br />

explica que el chocolate en esas coloridas cajas nos<br />

hace sentir bien porque libera serotonina: la<br />

hormona de la felicidad. La emoción de abrir una<br />

caja es real y hay mucho placer en descubrir las<br />

variantes de los chocolates en ella: los hay de<br />

rellenos crujientes o untuosos, como el caramelo.<br />

12<br />

MAYO <strong>2020</strong>


NUESTRAS CAJAS FAVORITAS<br />

Con estos cofres del tesoro nada puede salir mal,<br />

porque sea cual sea el chocolate que escojas, todos<br />

saben bien.<br />

“Mi mamá me<br />

dijo: ‘la vida es<br />

una caja de<br />

chocolates:<br />

nunca sabes<br />

qué te<br />

va a tocar’.” -<br />

TOUT<br />

CHOCOLAT<br />

La chocolatería<br />

mexicana tiene<br />

un sinfín de<br />

mezclas, pero<br />

la consentida<br />

es la de<br />

chocolate con<br />

caramelo y<br />

flor de sal.<br />

GUYLIAN<br />

Los pequeños<br />

bombones de<br />

chocolate de<br />

leche y chocolate<br />

blanco<br />

tienen forma de<br />

conchas<br />

de mar.<br />

BACI<br />

PERUGINA<br />

Dentro del<br />

papel azul<br />

metálico hay un<br />

pequeño papel<br />

con frases de<br />

personajes<br />

famosos y un<br />

bombón relleno<br />

de avellanas.<br />

Forrest Gump<br />

PREPARA TUS PROPIAS TRUFAS<br />

Tiempo: 45 min. Porciones: 20<br />

Hay millones de bombones de chocolate<br />

que puedes poner en una caja, pero unos<br />

de los más sencillos y de felicidad<br />

inmediata son las trufas.<br />

½ taza de harina de trigo<br />

¼ de cocoa en polvo<br />

½ cucharadita de polvo para hornear<br />

½ taza de azúcar glass<br />

2 cucharadas de mantequilla<br />

1 huevo batido con un ½ cucharadita<br />

de crema para batir<br />

Cocoa o azúcar glass al gusto para<br />

cubrir<br />

1. En un bowl grande mezcla la harina, la<br />

cocoa, el polvo para hornear y el azúcar.<br />

2. Incorpora la mantequilla con tus dedos.<br />

Se verán como grumos de arena.<br />

3. Incorpora el huevo batido con una pala<br />

de silicón, hasta que esté bien integrado.<br />

Deja reposar por 15 minutos en<br />

el refrigerador.<br />

PARA ACOMPAÑARLOS<br />

1. Vinos tintos:<br />

pruébalos con chocolates<br />

amargos o con frutos<br />

rojos, como la cereza.<br />

2. Vinos espumosos:<br />

resaltan las notas frutales<br />

y la textura untuosa<br />

de un chocolate.<br />

3. Vinos dulces:<br />

pruébalos para resaltar<br />

el dulzor del chocolate.<br />

4. Retira del refrigerador y<br />

dale forma en pequeñas<br />

bolitas uniformes.<br />

5. Cubre las bolitas con la cocoa y<br />

hornea por 10 minutos en una charola<br />

con papel encerado en un<br />

horno precalentado a 180 °C.<br />

6. En un bowl coloca la cocoa para<br />

poner un extra.<br />

7. Deja enfriar y sirve en una caja<br />

de metal con papel de china.<br />

MAYO <strong>2020</strong> 13


OBSESIONES<br />

LA REINA<br />

HA VUELTO<br />

UN TROZO DE MANTEQUILLA PUEDE MOVER<br />

PASIONES Y LLEVAR AL ANTOJO A LA<br />

MÁS FÉRREA DE LAS VOLUNTADES.<br />

¿QUÉ ES LA<br />

MANTEQUILLA?<br />

Básicamente es el producto<br />

que se obtiene al batir nata<br />

de leche de cabra, vaca<br />

u oveja. En este proceso<br />

sucede una emulsión de<br />

agua en materia grasa, esta<br />

última es la que aporta el<br />

sabor la textura untuosa<br />

y el aroma. Su contenido<br />

vitamínico depende de la<br />

alimentación del animal.<br />

Se necesitan de 22 a 27<br />

litros de leche para producir<br />

1 kg de mantequilla.<br />

PANEL DE EXPERTOS: EL DEBER<br />

SER DE LA MANTEQUILLA.<br />

“Mientras más pasto se le dé a los<br />

rumiantes, habrá más contenido<br />

de ácidos grasos en la leche que<br />

se convertirá en mantequilla.”<br />

–Bonfilio Domínguez, de rancho Cuatro Encinos.<br />

“Para identificar una mantequilla<br />

de calidad, debes observar el<br />

contenido del empaque: cuanto<br />

menos ingredientes, el producto<br />

será más natural.” –Emilio Arizpe Navarro,<br />

fundador de Villa de Patos.<br />

14<br />

MAYO <strong>2020</strong>


TODO SABE MEJOR con mantequilla. Este cubo<br />

dorado es más que un básico, es el responsable de<br />

la textura y sabor de muchas preparaciones. No sólo<br />

agrega un sabor increíble, tiene propiedades que<br />

ayudan a integrar platillos dulces y salados. ¿Qué<br />

sería de unas galletas con chispas de chocolate y sal<br />

de mar sin mantequilla? Va bien con proteínas, es<br />

indispensable en repostería, insustituible en la<br />

panadería. ¿No están convencidos? Toma lo primero<br />

que encuentres en tu cocina. ¿Es un durazno? ¿Un<br />

brócoli? Llévalo a una sartén y agrega un pedacito de<br />

mantequilla, deja que ambos ingredientes se fusionen<br />

con el calor, que se vuelvan uno mismo. Huele bien,<br />

¿cierto? Ahora llévalo a la boca. El ingrediente elegido<br />

viajará en tu paladar y el brillo de la mantequilla<br />

reposará en tus labios e incitará a comer otro bocado.<br />

VIAJE EN EL TIEMPO<br />

Su aparición se dio poco después de la domesticación<br />

de los animales. De acuerdo a la escritora<br />

gastronómica Elaine Khosrova, un pastor hizo el<br />

primer lote por accidente: ató una bolsa de leche de<br />

oveja a su caballo y después de un día de mucho<br />

caminar, descubrió que se había solidificado. Esta<br />

persona hizo historia sin saberlo.<br />

La primera civilización documentada que elaboró<br />

mantequilla fue la mongol. Ellos batían la nata<br />

dentro de pieles de animal hasta obtener esta mezcla<br />

amarilla que hoy conocemos como mantequilla.<br />

A lo largo de la historia, este producto lácteo ha<br />

ocupado un lugar privilegiado en distintas culturas.<br />

En Roma era considerada medicinal. En la India<br />

ofrecían grandes cantidades al Señor Krishna a<br />

manera de sacrificio. Y en la Biblia la mantequilla se<br />

consideraba un alimento de celebración.<br />

Pero la Gran Depresión y la Segunda Guerra<br />

Mundial desafiaron nuestra historia de amor con la<br />

mantequilla. La información falsa hacía creer que<br />

era un producto dañino para la salud. La margarina<br />

hecha con aceite vegetal y colorante se convirtió en<br />

una opción más barata y el consumo de mantequilla<br />

cayó en picada. Ahora, la mantequilla está de<br />

regreso, lista para el siguiente volumen de<br />

una emocionante historia.<br />

HAY MANTEQUILLAS<br />

PARA TODOS<br />

IRLANDESA:<br />

su porcentaje de grasa<br />

es mayor, por lo tanto su<br />

textura es más cremosa.<br />

CLARIFICADA (GHEE):<br />

se obtiene al calentar<br />

la mantequilla, dejando<br />

que los componentes se<br />

separen por densidad.<br />

Por ello es considerada<br />

más pura.<br />

CULTIVADA:<br />

contiene más ácidos<br />

grasos y nutrientes.<br />

Puede ser adicionada<br />

con otros ingredientes<br />

o aditivos<br />

DE LIBRE PASTOREO:<br />

significa que las vacas<br />

únicamente consumieron<br />

pasto. El amarillo se<br />

obtiene del caroteno<br />

de las plantas.<br />

SUS MEJORES AMIGOS<br />

Julia Child tenía razón: nunca se<br />

puede tener demasiada mantequilla.<br />

Aquí los ingredientes<br />

con los que mejor se lleva.<br />

Huevos: más allá<br />

del antojo, hablemos<br />

de ciencia. La<br />

lecitina emulsiona<br />

el huevo, que al<br />

estar en contacto<br />

con la mantequilla,<br />

se torna más<br />

aterciopelado.<br />

Vegetales:<br />

porque todo<br />

en la vida es<br />

balance.<br />

CON SAL:<br />

mantequilla de vaca adicionada<br />

con sal.<br />

Suele usarse en pastas,<br />

verduras y proteínas.<br />

SIN SAL:<br />

mantequilla de vaca<br />

hecha con leche fresca<br />

utilizada para repostería.<br />

Pastas: ¿para<br />

qué complicarnos<br />

la vida con<br />

más de tres<br />

ingredientes?<br />

Pasta fresca,<br />

mantequilla<br />

y sal. Uno no<br />

necesita más.<br />

LIBROS PARA<br />

ENAMORARSE DE<br />

LA MANTEQUILLA<br />

+<br />

Carne: recién salida de<br />

la plancha, bien caliente,<br />

con un cubo de mantequilla<br />

que se derrite<br />

lentamente. ¿Ya están<br />

salivando?<br />

Galletas: saladas o<br />

dulces, sin mantequilla,<br />

estas delicias son<br />

difíciles de imaginar.<br />

Pan: brioche,<br />

croissants, bisquets,<br />

pan de<br />

masa madre. Los<br />

carbohidratos y la<br />

mantequilla son un<br />

match made<br />

in heaven.<br />

Butter: A Rich History, de<br />

Elaine Khosrova.<br />

Baking bible, de Rose<br />

Levy Beranbaum.<br />

Julia’s Kitchen Wisdom,<br />

de Julia Child.<br />

MAYO <strong>2020</strong> 15


OBSESIONES<br />

Una sartén especial: forma y función se<br />

unen en esta sofisticada sartén<br />

de alma filantrópica.<br />

suelo comparar las ollas y sartenes que pelean<br />

por un lugar en mi pequeña cocina en Nueva<br />

York, con los personajes de El señor de las<br />

moscas: como en el libro, casi siempre alguien<br />

sale lastimado (dígase: relegado a la pila de<br />

donaciones). La sartén Always Pan (USD<br />

$145, fromourplace.com) se gana su sitio<br />

gracias a la facilidad con que se transforma<br />

de wok para saltear, a una vaporera para<br />

dumplings, a sartén para carnes. El mango<br />

con espacio para reposar la espátula me<br />

evita ensuciar la cocina y la boquilla<br />

en la orilla permite servir el curry<br />

cuando no tengo un cucharón a la<br />

mano. Lo mejor de todo es que Our<br />

Place, creada por la cofundadora<br />

de la Fundación Malala, Shiza<br />

Shahid, celebra las tradiciones<br />

gastronómicas culturales a través<br />

de lanzamientos de edición<br />

especial en distintos colores de<br />

temporada, tanto de la Always<br />

Pan como de otras piezas. Para<br />

el Ramadán, la sartén es verde, y<br />

para el Año Nuevo chino, es de color<br />

rojo vibrante, al igual que un cuchillo<br />

de carnicero, platón de servicio y<br />

vaporera de bambú de edición limitada.<br />

No quiero decir que los otros utensilios<br />

de mi cocina deberían preocuparse, pero<br />

definitivamente se enfrentarán a una<br />

dura competencia. –oset babur<br />

food styling: Emily Nabors Hall; prop styling: Claire Spollen.<br />

16<br />

MAYO <strong>2020</strong><br />

foto VICTOR PROTASIO.


¿QUÉ ESTÁ IN?<br />

EN<br />

BOGA<br />

A T U<br />

E L B A R<br />

S E M U D A<br />

S A L A<br />

DISFRUTA DE UN COCTEL DE TU<br />

BAR FAVORITO… SIN TENER QUE<br />

QUITARTE LA PIJAMA.<br />

DICEN POR AHÍ QUE ‘NO hay mal que por<br />

bien no venga’. Así, de la cuarentena por la<br />

crisis sanitaria que nos tiene en casa,<br />

sacamos algunas notas positivas, prácticas<br />

que surgieron como una solución temporal<br />

para los negocios y que nos encantaría<br />

adoptarlas como algo más permanente.<br />

Imaginen un mundo post COVID-19, en<br />

el que nos podemos reunir con amigos, y<br />

un servicio a domicilio instaurado por<br />

bares que entregan tragos perfectos a la<br />

puerta de tu casa.<br />

La esperanza es que esto sobreviva a<br />

la cuarentena. Porque si pensamos en<br />

grande, este formato resuelve un tema<br />

fundamental cuando la fiesta se pone<br />

buena y hay más de dos invitados. Tu<br />

armas un fiestón, abres el refri y cuentas<br />

con un gran stock de cocteles listos para<br />

que los sirvas sobre un vaso con hielos,<br />

les pongas una garnitura y sorprendas a<br />

tus invitados.<br />

Esta tendencia comenzó en Japón,<br />

luego migró a Estados Unidos —en Nueva<br />

York causó un gran impacto— y finalmente<br />

llegó a la Ciudad de México. Bares<br />

especializados en coctelería ahora<br />

empacan sus mezclas al alto vacío.<br />

Basta con un mensaje directo en sus<br />

redes sociales, o una simple llamada,<br />

para que sus elixires lleguen a ti.<br />

¿DÓNDE PEDIRLOS?<br />

Maison Artemisia (@maisonartemisiamx)<br />

Sazerac. Un clásico para los amantes del whisky<br />

que buscan un extra kick: un poco de absynth.<br />

Limantour (@limantourmx)<br />

La margarita al pastor: es un trago fresco, pegador<br />

y con un final dulce. Lo que cualquier psicólogo<br />

recomienda en días como estos.<br />

Wikiki Tiki Room (@waikikitikiroom)<br />

Maitai. La combinación de ron con cítricos, orgeat<br />

y licor de naranja te hará sentir en la playa.<br />

Hanky Panky (@hankypankydf)<br />

Negroni. Porque aquí no te puedes equivocar con<br />

los clásicos: gin, vermouth con spirulina y bitters.<br />

Fairchild 1869 (@fairchild.mx)<br />

La propuesta de este lugar es del mixólogo<br />

Richard Sandoval. En la foto está su trago: The<br />

Kampong Kombucha con Maker’s Mark, St.<br />

Germain, miel, limón y kombucha.<br />

HAZLO TÚ MISMO<br />

Además de los cocteles listos para<br />

servir, varios de estos bares están<br />

dando clases de mixología en línea.<br />

Te recomendamos seguirlos en sus<br />

redes sociales, para no perderles la<br />

pista y refinar tus habilidades de<br />

mixólogo durante estos días.<br />

18<br />

MAYO <strong>2020</strong>


ADVERTORIAL<br />

AMOR A PRIMER<br />

BOCADO<br />

La marca Savant Oils llega a México para cuidar tu salud<br />

y consentir a tu paladar con aceite de salvado de arroz.<br />

E<br />

l aceite de arroz es reconocido por tener propiedades que resaltan el sabor y<br />

textura de los alimentos. Durante años ha sido el favorito en países asiáticos<br />

como Bangladesh, Japón, India y China. Sus nutrientes lo hacen ideal para el<br />

uso en el hogar y en la industria.<br />

El aceite de arroz Savant Oils se produce en Estados Unidos con el arroz que se<br />

cosecha en la cuenca del río Mississippi. Viene en presentaciones de 250 y 500 ml.<br />

Es ideal para hacer frituras, coberturas, alimentos a la parrilla, horneados. salsas,<br />

tempuras, salteados, para aliñar ensaladas o hasta en postres.<br />

SUS BENEFICIOS<br />

• Resalta los sabores: es neutro y<br />

no compite con los sabores de los<br />

alimentos.<br />

• Capacidad de calentamiento:<br />

el punto de humo es de 254°C,<br />

ideal para saltear y freír alimentos<br />

sin que absorban demasiada<br />

grasa, dejándoles una sensación<br />

crocante y fresca. Gracias a esta<br />

resistencia térmica, no pierde sus<br />

propiedades nutritivas.<br />

• Es ‘non GMO’: proviene de granos<br />

de arroz que no han sido modificados<br />

genéticamente.<br />

• No contiene conservadores ni<br />

aditivos sintéticos: Su contenido<br />

natural de Oryzanol, antioxidante<br />

natural, mantiene la estabilidad<br />

del aceite.<br />

• Es libre de grasas trans: y rico<br />

en grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas,<br />

en Omega 3 y 6.<br />

• Es duradero: su alto contenido<br />

de antioxidantes naturales, contribuye<br />

a una vida más larga en el<br />

anaquel y a una vida útil prolongada<br />

del producto.<br />

• Está certificado: es apto para<br />

la alimentación kosher y no es<br />

alérgeno.<br />

• Sus propiedades: el aceite<br />

también es rico en vitamina E<br />

—amiga del sistema inmune—;<br />

antioxidantes de fácil absorción<br />

como el escualeno y altos índices<br />

de fitosteroles y tocotrienol, que<br />

ayudan a reducir el nivel de absorción<br />

del colesterol en el torrente<br />

sanguíneo.<br />

No te quedes sin probar y descubrir<br />

todos los beneficios de Savant Oils para tu cocina.<br />

ENCUÉNTRALO, AQUÍ


RESTAURANTES<br />

PARA LLEVAR (Y USAR)<br />

HOY MÁS QUE NUNCA TENEMOS<br />

GANAS DE TENER UN PEDACITO<br />

DE NUESTROS RESTAURANTES<br />

MÁS QUERIDOS EN CASA.<br />

EL CARIÑO QUE UNO LE PUEDE tomar a un<br />

restaurante no termina en una bolsa de papel<br />

de estraza y empaques biodegradables. Trasciende<br />

e igual puede tomar la forma de tote<br />

bags y t-shirts, que de termos, pines, tazas,<br />

stickers o loncheras. Todo para llevar… y usar.<br />

La merch restaurantera es la forma más sabrosa<br />

de llevar contigo una parte de tu lugar favorito.<br />

El merchandising sirve<br />

para conectar con el<br />

comensal en un nivel más<br />

profundo. El objetivo es<br />

convertir a los clientes<br />

habituales en fanáticos<br />

no sólo de la comida,<br />

sino también del<br />

ADN de la marca.<br />

HARD ROCK<br />

CAFÉ<br />

Peter Morton e<br />

Isaac Tigrett establecieron<br />

el primer<br />

Hard Rock Café,<br />

en 1971, y fueron<br />

los pioneros en el<br />

merchandising<br />

con el logo de<br />

su marca.<br />

CDMX<br />

Tote bag,<br />

de Salón Cero<br />

También llamado<br />

miscelánea gráfica, este<br />

lugar pone a disposición<br />

sus kits ‘pan-demia’ con<br />

productos como pósters,<br />

cuadernillos y bolsas<br />

brandeadas con el<br />

logotipo del lugar.<br />

El envío es gratuito.<br />

Instagram: @saloncero<br />

Pines decorativos,<br />

de Loup Bar<br />

¿Vinos naturales y pines<br />

decorativos? ¡Claro que sí!<br />

Ponlos en tu chamarra,<br />

bolsa, blusa o pantalones.<br />

Escríbeles directo a su<br />

Instagram para más<br />

información de pagos<br />

y envíos. Instagram:<br />

@loupwinebar<br />

Jabón y crema de<br />

manos Niddo<br />

Sus productos para baño<br />

tienen notas a mandarina,<br />

naranja, nuez moscada,<br />

cardamomo y jazmín.<br />

Puedes recogerlos en<br />

la tienda o elegir el<br />

envío a domicilio.<br />

niddocontigo.com<br />

Posavasos,<br />

de Pinto Bar<br />

El lugar se encuentra<br />

cerrado debido a la<br />

contingencia sanitaria,<br />

pero una manera de<br />

ayudarlos es comprando<br />

la mercancía disponible en<br />

su cuenta de Instagram.<br />

Los envíos se hacen a toda<br />

la República Mexicana.<br />

Instagram: @pinto.bar<br />

NUEVA YORK<br />

T-shirt, de Four<br />

Horsemen<br />

James Murphy, de LCD<br />

Soundsystem, abrió su<br />

wine bar especializado<br />

en vinos naturales y sus<br />

playeras son más bonitas<br />

que cualquier band t-shirt.<br />

Ordena la que más te<br />

guste para estrenarla al<br />

día siguiente. (El costo<br />

de envío es de $30 USD)<br />

fourhorsemenbk.com<br />

LOS ÁNGELES<br />

Gorra, de<br />

Uncle Paulie’s<br />

El lugar especializado en<br />

sándwiches italoamericanos<br />

tiene su tienda en<br />

línea con gorras, hoodies y<br />

playeras. Ordena alguno<br />

de sus items y en cinco<br />

días llegará a la puerta<br />

de tu casa.<br />

unclepauliesdeli.com<br />

20<br />

MAYO <strong>2020</strong>


CLUB PRIVADO DE EXPERIENCIAS<br />

GASTRONÓMICAS<br />

PARA MÁS INFORMACIÓN LLAMA A<br />

PLATINUM LIFESTYLE SERVICES<br />

01 800 716 11 03 OPCIÓN 2<br />

Esta invitación es exclusiva para los Tarjetahabientes Titulares de la Tarjeta The Platinum Card®<br />

foodandwinetable.mx


EL ANFITRIÓN<br />

José N.<br />

Iturriaga<br />

de la<br />

Fuente<br />

UN HISTORIADOR DEL<br />

BUEN COMER.<br />

LA VIDA ACADÉMICA DE ESTE PERSONAJE está<br />

ligada a la economía y la historia, un camino<br />

que tras estudios de posgrado, decantó en el<br />

estudio antropológico de la cocina y,<br />

específicamente, de la gastronomía mexicana.<br />

José N. Iturriaga es considerado uno de los<br />

máximos investigadores en nuestro país. Su<br />

pasión y experiencia –junto con la de muchos<br />

otros– ha impulsado a que la cocina tradicional<br />

mexicana sea considerada hoy Patrimonio<br />

Cultural de la Humanidad.<br />

EN NÚMEROS<br />

HA RECIBIDO:<br />

3<br />

premios importantes a<br />

lo largo de su carrera.<br />

1988<br />

Premio Internacional Malcolm Lowry.<br />

2003<br />

Premio Internacional Slow <strong>Food</strong>.<br />

2008<br />

Premio José C. Valadés.<br />

HA ESCRITO<br />

UN TOTAL DE:<br />

68<br />

libros de historia e<br />

investigación. Entre<br />

ellos, 14 libros<br />

de gastronomía.<br />

Colaboración en:<br />

38<br />

libros de diversos<br />

autores.<br />

150<br />

artículos en México<br />

desconocido.<br />

ES PARTE DEL SALÓN DE LA FAMA GASTRONÓMICA<br />

DEL MUSEO AMPARO, EN PUEBLA.<br />

ÉL RECOMIENDA<br />

LEER:<br />

• Historia gastronómica<br />

de la Ciudad de México,<br />

de Salvador Novo.<br />

• Memorias de cocina<br />

y bodega, de<br />

Alfonso Reyes.<br />

ANTOJO DE<br />

MADRUGADA:<br />

Me preparo una sopa de<br />

fideos o luego me pongo<br />

a hacer un sashimi y un<br />

arroz al vapor. Pero<br />

según lo que haya, me<br />

pongo ingenioso a<br />

hacer algo rico.<br />

EN EL REFRIGERA-<br />

DOR NUNCA FALTAN:<br />

- Jitomates.<br />

- Cebolla.<br />

- Chile serrano.<br />

- Tortillas.<br />

SU OBRA CONSENTIDA:<br />

Confieso que he comido: de fondas, zaguanes, mercados<br />

y banquetas, publicado en 2011.<br />

LOS TAMALES DE LA URSS<br />

“Vivíamos en Moscú, mi padre era el embajador de<br />

México en la Unión Soviética. Aunque yo vivía en<br />

México, por la universidad, estuve un año allá. Los<br />

diplomáticos en general tiene un acceso fácil a<br />

diversos platillos y a cosas que mandaban de México<br />

para allá. Habían unos catálogos y en ellos una buena<br />

cantidad de productos. Así descubrí unos tamales en<br />

lata de Clemente Jack’s. Pedimos una caja de 24 latas<br />

de litro, que traía unos 5 tamalitos delgados, verdes<br />

(que eran los únicos que había). Para mi sorpresa,<br />

francamente, estaban muy buenos. Sacaba de apuros<br />

y de antojos.”<br />

22<br />

MAYO <strong>2020</strong>


“MI MAMÁ ERA UNA GRAN<br />

COCINERA. ERA UNA COCI-<br />

NERA A LA ANTIGUA, DE<br />

AQUELLAS EXTRAORDINA-<br />

RIAS MUJERES DE LA COCI-<br />

NA MEXICANA; Y YO AHÍ<br />

FUE DONDE ME CRIÉ Y DES-<br />

DE MUY PEQUEÑO APRECIÉ<br />

LA COMIDA.”<br />

foto: antonio cruz<br />

TIMELINE DE ACONTECIMIENTOS Y CARGOS<br />

Jurado del Premio Nacional<br />

de Investigación<br />

de Alimentos.<br />

Presidente de la sección de<br />

Alimentación de la Sociedad<br />

Mexicana de Geografía<br />

y Estadística.<br />

Jurado del Premio Nacional<br />

de Ciencias y Artes<br />

(2003 y 2009).<br />

1990 2000 2010<br />

Presidente de la Sociedad Mexicana<br />

de Gastronomía y Enología,<br />

durante dos períodos.<br />

Es vicepresidente del Conservatorio<br />

de la Cultura Gastronómica<br />

Mexicana, desde su fundación en<br />

2001, hasta la fecha.<br />

MAYO <strong>2020</strong> 23


ODA AL<br />

Oda al caldo<br />

de pollo<br />

24<br />

MAYO <strong>2020</strong>


¿EXISTE UNA RECETA MÁS ELEMENTAL? ¿MÁS RELACIONADA<br />

CON EL HOGAR, EL ABRAZO Y EL BIENESTAR? ¿UN TÓNICO DE<br />

BENEFICIOS RESTAURATIVOS? NO, NO LO CREO (Y LA<br />

CIENCIA ME RESPALDA).<br />

por mariana camacho | fotos juan pablo tavera<br />

TITA RECUPERA EL HABLA después de probar un par de<br />

cucharadas del caldo de ‘Chencha’, su cómplice en la<br />

cocina de casa y una mujer más afectuosa que su propia<br />

madre. Nada había resultado efectivo hasta entonces.<br />

Con una sopa, ‘Tita’ había recuperado la voz y la<br />

cordura perdidas por seis largos meses.<br />

Pienso de inmediato en esta escena de Cómo agua<br />

para chocolate, cuando me toca escribir una oda al<br />

caldo de pollo. Aunque, en honor a la transparencia, la<br />

receta mágica del libro es con colita de res, la uso de<br />

referencia porque resume una idea que llevamos<br />

anclada desde nuestra infancia, esa que atribuye<br />

poderes curativos —más efectivos que la medicina, en<br />

este caso hiperbólico y ficticio— a un caldo de pollo.<br />

En el imaginario colectivo, nutrido por escenas de<br />

películas y libros que recetan caldo de pollo para el<br />

alma, ha quedado dicho que esta sopa es el arma blanca<br />

de las madres para derretir corazones, para aliviar<br />

resfriados y a la que recurrimos con constancia no<br />

para aliviar el hambre sino los malos ánimos.<br />

Esta idea es tan popular en occidente como en oriente.<br />

Lo que tal vez varía son las recetas: unas van con fideos,<br />

otras con vermicelli o bolas de matzá, otra con un toque<br />

de limón o verduras como el bok choy. Pero el principio<br />

es el mismo: el caldo de pollo es, en muchos idiomas,<br />

sinónimo de bienestar, apapacho y satisfacción.<br />

La ciencia, que se dedica a observar y estudiar esos<br />

comportamientos curiosos que solemos tener los<br />

bípedos, ha proporcionado los fundamentos de esta<br />

creencia que opera, en primera, como un efecto<br />

placebo. Una dosis, bien recetada, de sabiduría popular<br />

que el cuerpo interpreta como señal de bienestar<br />

—porque un resfriado quién es como para meterse con<br />

los remedios caseros de las abuelas—.<br />

Lo que dicen también algunos estudios es que el<br />

caldo de pollo —y muchas sopas, de hecho— es un alivio<br />

para el cuerpo deshidratado a causa de los síntomas del<br />

resfriado común y otros malestares —yo recurro a él a<br />

menudo para traer a mi cuerpo a tierra después de un<br />

largo viaje—. Los ingredientes que componen a un caldo<br />

de pollo —digamos los más básicos, como cebollas y<br />

ajos— también juegan un rol en su manifestación de<br />

tónico restaurativo. En su conjunto, son ricos en<br />

fitonutrientes, que tienen un rol en un sistema<br />

inmunológico sano.<br />

Cuando era niña me aterrorizaba un poco la imagen<br />

de una olla de caldo con las patitas de pollo con piel. Y<br />

la sensación solo crecía cuando alguna —en ese juego<br />

eterno de ruleta rusa que es la vida— aterrizaba en mi<br />

plato, junto con la condición<br />

—bajo la que crecimos<br />

muchos niños en los años<br />

tardíos de la década de los<br />

80— de acabar con todo<br />

para poder levantarme de<br />

la mesa. Y ni hablar, el<br />

sacrificio se hacía.<br />

Casi como un oxímoron,<br />

encontraba en aquel<br />

entonces —y, que les digo,<br />

hasta la fecha— más apetito<br />

en las vísceras, podía comer<br />

higaditos y estar en paz con<br />

la textura chiclosa de los<br />

corazones. En mi cabeza,<br />

comer caldo con<br />

menudencias era un acto de<br />

madurez y de niña grande, el<br />

pase ritual para sentarse en<br />

la mesa de los adultos.<br />

Además del casero<br />

—acompañado siempre con<br />

tortillas y aguacate— soy poseedora de una lista<br />

En mi cabeza,<br />

comer caldo con<br />

menudencias<br />

era un acto<br />

de madurez y de<br />

niña grande, el<br />

pase ritual para<br />

sentarse en<br />

la mesa de<br />

los adultos.<br />

sustancial de caldos de pollo memorables, pero hay dos,<br />

en particular, que rondan mi cabeza con más<br />

persistencia. Uno es el caldo del Merendero Biarritz, un<br />

MAYO <strong>2020</strong> 25


negocio en la colonia Doctores que abrió sus puertas en<br />

1956. Una joya del barrio que recuerdo por sus platos<br />

copiosos y las mesas blancas en las que alguna vez tuve<br />

una cita con un amor del pasado, aunque ya no sé<br />

si el corazón del hombre era mejor que el del<br />

pollo desmenuzado.<br />

El segundo es más reciente. Un serendipity. El plato<br />

de un restaurante griego que se cruzó en mi camino en<br />

medio de un aguacero —inserten aquí la escena de<br />

mujer sin paraguas en el verano de la Ciudad de México,<br />

un clásico—. El restaurante era Mythos y el caldo un<br />

avgolemono: una sopa con pollo desmenuzado, huevo y<br />

limón, una receta que, de acuerdo a los historiadores, es<br />

una herencia del siglo ii a. C., no de los griegos, sino<br />

de los judíos sefardíes.<br />

No apreciaba la historia en el momento de<br />

conocernos, sino los delgados hilos de huevo en mi<br />

plato y el punto perfecto de acidez. Una, dos, tres<br />

cucharadas y estaba de vuelta en el cliché: la sopa<br />

de pollo es para el alma.<br />

AVGOLEMONO<br />

TIEMPO TOTAL: 30 min. PORCIONES: 4<br />

4 tazas de caldo de pollo<br />

Sal<br />

Pimienta<br />

2 tazas de arroz cocido, caliente<br />

2 yemas de huevo<br />

¼ de taza, más dos cucharadas de jugo de limón<br />

1 pollo de rosticería desmenuzado y sin huesos<br />

¼ de taza de eneldo fresco, picado<br />

En una olla grande a fuego lento vierte el caldo de pollo y<br />

sazona con sal y pimienta al gusto. Transfiere 1 taza del caldo<br />

caliente a una licuadora. Agrega 1 /2 taza de arroz, las yemas<br />

de huevo y el jugo de limón y licúa hasta tener puré suave.<br />

Revuelve el puré en el caldo hirviendo junto con el pollo y las 1<br />

1<br />

/2 tazas de arroz restantes y cocina a fuego lento hasta que<br />

espese un poco, por 10 minutos.<br />

26<br />

MAYO <strong>2020</strong>


¡BOLETOS YA<br />

A LA VENTA!<br />

7 y 8 de noviembre<br />

Centro Ecuestre Sedena. CDMX


EL SECRETO<br />

DE LA<br />

PANADERÍA<br />

ADVERTORIAL


Guy Santoro<br />

César Prado<br />

E<br />

Las levaduras aromáticas de<br />

Florapan le otorgan atributos<br />

únicos a las creaciones<br />

de un panadero.<br />

n estas últimas décadas los<br />

panaderos han acentuado el refinamiento<br />

de los productos que<br />

salen de sus hornos a partir de cada<br />

componente: costra, miga y aromas<br />

exhiben el carácter especial que les<br />

dan los procedimientos concebidos<br />

para cada caso. Los consumidores son<br />

los guardianes de estas mejoras, pues<br />

cada día son más exigentes y vigilantes.<br />

Valoran la novedad, la variedad, la<br />

naturalidad y el sabor. La búsqueda<br />

de calidad y precios competitivos es<br />

constante.<br />

Las levaduras aromáticas Florapan<br />

son las herramientas imprescindibles<br />

para hacer frente a estos desafíos,<br />

que forman parte de la labor cotidiana<br />

de los panaderos. Su objetivo es<br />

obtener panes con atributos únicos.<br />

Para lograrlo Florapan utiliza cepas<br />

de levaduras con diferentes orígenes,<br />

incluidas aquellas que provienen de<br />

la elaboración del vino y la cerveza y<br />

que, por tanto, proveen cualidades<br />

organolépticas originadas en estas<br />

bebidas.<br />

Una vez seleccionadas por sus<br />

características sensoriales, estas levaduras<br />

pasan por el proceso que las<br />

convertirá en levaduras secas activas.<br />

El maestro panadero las somete<br />

a una fase de pre fermentación o de<br />

fermentación prolongada, con el fin<br />

de potenciar los aromas del pan a la<br />

salida de los hornos.<br />

Las levaduras aromáticas Florapan<br />

suelen fermentar más lentamente<br />

que las levaduras convencionales<br />

de panificación y agregan así más<br />

complejidad en los sabores. También<br />

esa complejidad se acentúa al combinarlas<br />

con cultivos de las demás<br />

bacterias y levaduras del catálogo<br />

de Florapan.<br />

Para más información<br />

VISITA ESTE LINK


UNA HISTORIA HECHA EN CASA<br />

¿CÓMO ES POSIBLE QUE SIN IMPORTAR LA ÉPOCA O EL LUGAR DONDE PROVENGA, LA COCINA<br />

DE MAMÁ SIEMPRE NOS HACE SENTIR BIEN? NO IMPORTA SI ES UN GUISO DE 48 HORAS DE<br />

COCCIÓN O UNA SOPA DE LATA ‘CON SU PROPIO TOQUE’, LO QUE LAS MAMÁS LLEVAN<br />

A LA MESA ALIMENTA MÁS QUE NUESTRO ESTÓMAGO.


CONSTRUIMOS UNA LÍNEA DEL TIEMPO,<br />

ENTRE 1920 A <strong>2020</strong>. CIEN AÑOS QUE<br />

CUENTAN CÓMO HA CAMBIADO LA<br />

COCINA CASERA (UN REFLEJO DEL<br />

ESPÍRITU DE CADA ÉPOCA Y DE CAMBIOS<br />

SOCIALES, POLÍTICOS Y CULTURALES).<br />

CIEN AÑOS DE COSTUMBRES QUE<br />

CAMBIAN, AUNQUE VOLVAMOS SIEMPRE<br />

A BUSCAR EN CASA, EN LA ‘COCINA DE<br />

MAMÁ’, LA COMIDA DE CONFORT.<br />

1920<br />

-<br />

1940<br />

DEL HUERTO<br />

A LA MESA<br />

¿QUÉ ESTABA SUCEDIENDO?<br />

Las frutas, verduras y animales de granja no modificados<br />

eran parte de la dieta de 1920. Aunque la revolución<br />

industrial trajo a la mesa alimentos enlatados y<br />

empaquetados que entonces empezaban a asomarse en<br />

los anaqueles de los recién nacidos supermercados.<br />

Los frutos más palpables fueron productos creados<br />

para el consumo a nivel masivo y de precios bajos como<br />

el Wonder Bread (1921), el Kool Aid (1927), la popularización<br />

de los cereales Kellogs (1922) y la Coca Cola (1915).<br />

Todos estos productos, que eran sinónimo de<br />

modernidad, eran accesibles para la mujeres norteamericanas<br />

de la época. Pero en México la situación era<br />

distinta, estaba enmarcada por el fase final de la<br />

Revolución Mexicana —y la presencia de conflictos<br />

armados y políticos–, así que los panes rebanados y<br />

refrigerios fríos no llegaban con facilidad a nuestro país.<br />

Para el mexicano promedio, la alimentación era una<br />

cuestión anclada a la supervivencia. El menú se<br />

planeaba con lo que había al día.<br />

DE VIVA VOZ<br />

Concepción Ríos vivía en Reynosa,<br />

Tamaulipas, en 1930. Ella estaba a<br />

cargo de toda su familia que, como<br />

muchas otras, tenía recursos económicos<br />

muy limitados. Ella cocinaba en<br />

estufa de leña lo que había en el<br />

mercado: un poco de carne y tortillas<br />

de harina; le echaba más agua a los<br />

frijoles para que rindieran. A pesar de<br />

estar muy cerca de Estados Unidos, y<br />

sus verduras o frutas sólo aparecían<br />

como regalo por parte de los familiares<br />

que vivían en La Huasteca.“De<br />

chiquilla me cruzaba el Río Bravo<br />

nadando y me robaba las sandías de<br />

los huertos americanos, eran muy<br />

grandes y frescas,” relata Rosa Martha,<br />

su hija. Con esa fruta y la que les<br />

regalaban hacían conservas de<br />

durazno, manzana y ciruela. Además,<br />

Concepción hacía carne seca, chorizo<br />

y panes de sal. Todos los animales se<br />

aprovechaban y absolutamente nada<br />

se podía desperdiciar.<br />

Ya para los años 40, Guadalupe —el<br />

hermano de Concepción— inspirado en<br />

los primeros refrigeradores que llegaban<br />

a México, ponía una caja de madera con<br />

lámina y un bloque de hielo para<br />

conservar los básicos: leche y carne.<br />

Los que tenían los recursos viajaban a<br />

McAllen a comprar pan rebanado, Coca<br />

Cola y jamón Virginia. Pero para la<br />

población general la milpa y la<br />

ganadería eran el sustento de su<br />

alimentación. Las clases sociales<br />

estaban muy marcadas. En el libro<br />

Historia Gastronómica de la Ciudad de<br />

México, Salvador Novo cuenta que, en<br />

1940, a pesar de que se mantenía el<br />

consumo de huertas y chinampas para<br />

la comida de diario, los cafés y centros<br />

de diversión ya servían otro tipo de<br />

platillos y bebidas alcohólicas.<br />

Mientras tanto, en el Reynosa de la<br />

década de los 40, ‘El Market’ era una<br />

tienda de abarrotes, donde las mujeres<br />

conseguían frutas, verduras y algunos<br />

empaquetados.<br />

Concepción, como muchas mamás<br />

de la época, cocinaba lo que estaba<br />

disponible con productos frescos y<br />

orgánicos. Si acaso se colaba una Coca<br />

Cola en la mezcla. El fin era alimentar<br />

a las familias con guisos ricos y que<br />

rindieran para todos.


1941<br />

-<br />

1960<br />

A COMER EN CASA<br />

¿QUÉ ESTABA SUCEDIENDO?<br />

Estaba terminando la Segunda Guerra<br />

Mundial. A principios de los 40 lo que<br />

había en casa eran enlatados y mucha<br />

incertidumbre. La recesión económica<br />

a nivel global era brutal, muchas rutas<br />

de transporte estaban fracturadas y<br />

obtener ingredientes en el supermercado<br />

era cosa complicada —independientemente<br />

de la clase social o el<br />

poder adquisitivo—. En esta poca<br />

disponibilidad se tradujo en gestos<br />

creativos que trajeron a la mesa<br />

platillos innovadores como las<br />

ensaladas en gelatina o preparaciones<br />

sustanciosas con salsas cremosas.<br />

Aunque la abundancia se recuperó<br />

con el tiempo, la intención de nutrir a<br />

los hijos y no desperdiciar la comida<br />

prevaleció en el espíritu de las amas de<br />

casa. Y así, conforme se acercaban los<br />

años 50, reinó la era de las comidas<br />

familiares, donde mandatos como: “no<br />

me importa si no te gusta, te lo<br />

comes”, o “no te paras de la mesa hasta<br />

que te termines tu plato”, se escuchaban<br />

con frecuencia. La función de la<br />

comida casera era alimentar y nutrir.<br />

Si a los niños no les apetecía un<br />

higadito de pollo en la sopa, a las<br />

mamás les tenía sin cuidado.<br />

DE VIVA VOZ<br />

Este fue el momento de los estofados,<br />

las cacerolas y guisados, de las salsas<br />

pesadas. Todo hecho en casa. Bertha<br />

María Díaz de Vega nació en 1941 en el<br />

puerto de Veracruz y recuerda con<br />

claridad: “antes, ver una salsa de frasco<br />

era impensable. Si querías hacer unos<br />

chilaquiles, había que hacer los<br />

totopos y la salsa. No salían de una caja<br />

y un frasco. No estoy segura de que<br />

antes comiéramos más sano, tal vez no<br />

cuidábamos tanto las calorías, pero<br />

cuando yo era niña sin duda todo<br />

era más natural”.<br />

Por ejemplo, un guisado era un gran obsequio de<br />

agradecimiento, porque implicaba una cantidad<br />

importante de tiempo y esfuerzo el confeccionarlo: “a<br />

mi esposo —era doctor— por ejemplo, le traían a regalar<br />

chilorio de Sinaloa, pero hecho en casa. No como ahora<br />

que vas al súper y lo compras en bolsa de La Chata: ¿te<br />

imaginas que alguien regalara eso?”<br />

El manejo de lácteos implicaba un esfuerzo por parte<br />

de quienes querían consumirlos. Esto iba mucho más<br />

allá de tomar un empaque del refrigerador y ponerlo en<br />

el carrito de súper: “el yogurt mucha gente lo hacía<br />

en casa con unas pastillas de cuajo que comprabas en la<br />

droguería y luego lo colabas en una manta de cielo. La<br />

leche bronca te la vendían en botellas de un litro,<br />

directito del rancho. Tenías que hervirla y salía muy<br />

buena nata. Hacías panqués, mantecadas, galletas”.<br />

En la era de lo hecho en casa, el rol de la mujer estaba<br />

muy apegado al espacio doméstico y la cocina era una<br />

forma de complacer a sus cónyuges —en esa época un<br />

hombre que guisaba para su familia era una rareza—.<br />

Tampoco había tantos restaurantes, así que el aspecto<br />

social de la mesa se cubría desde los hogares. La visita a<br />

un restaurante era reservada para ocasiones especiales.<br />

1961<br />

-<br />

1980<br />

PROCESOS<br />

MÁS SIMPLES<br />

¿QUÉ ESTABA SUCEDIENDO?<br />

Apertura, revolución y cambio fueron las notas que<br />

marcaron el ritmo de México entre 1961 y 1980. En el<br />

mundo, los 60 marcaron la revolución de la juventud y<br />

el inicio del feminismo, movimiento cuya cadencia<br />

traería cambios importantes en los hogares mexicanos<br />

durante los 70, cuando las mujeres comenzaron a<br />

integrarse a universidades y sitios laborales.<br />

La nouvelle cuisine, de Paul Bocuse, afianzaba a la<br />

gastronomía francesa en las mesas del mundo y figuras<br />

femeninas como Jackie Kennedy —con su elección del<br />

francés René Verdon como chef oficial de la Casa<br />

Blanca— y Julia Child con sus crepes Suzette y salsa<br />

madre, elevaron esta concepción.<br />

La economía florecía y con ella el consumo de carne,<br />

aunque en México venían acompañadas de los clásicos<br />

frijoles de la olla y arroz; los vegetales no eran tomados<br />

en cuenta. Las mamás preparaban comida sustanciosa,<br />

casi siempre, al gusto de su marido.


ALACENAS DE<br />

DISTINTAS LATITUDES<br />

CDMX<br />

Mónica Uriarte, 54 años.<br />

Siempre en la alacena:<br />

Lo que nunca falta en la alacena<br />

es pasta seca, especias (pimienta,<br />

orégano y sal con ajo) y a mí me<br />

encantan los frutos secos como las<br />

pepitas, ajonjolí y arándanos, para<br />

sazonar con un puñito mis platillos.<br />

En el carrito de súper:<br />

Puré de jitomate para mis pastas<br />

y picadillos.<br />

Platillo más popular:<br />

La cochinita pibil, es algo que le<br />

gusta a mi familia y también mis<br />

tortitas de carne en salsa verde.<br />

Las devoran.<br />

NUEVO LEÓN<br />

Berenice, 37 años.<br />

Siempre en la alacena:<br />

Arroz, frijol y avena.<br />

En el carrito de súper:<br />

Frutas, verduras, específicamente<br />

manzanas, papaya, espinaca, brócoli<br />

y jitomate.<br />

Platillo más popular:<br />

Panqué de avena, plátano y cocoa.<br />

LA BAJA<br />

Mónica de la Fuente, 49 años.<br />

Siempre en la alacena:<br />

Tortillas de harina, yogurt y queso.<br />

En el carrito de súper:<br />

Fruta, frijoles, queso, huevo,<br />

tortillas, yogurt, té, pescado.<br />

Platillo más popular:<br />

Burritos de frijol con queso.<br />

DE VIVA VOZ<br />

Rosy Andrade vivió su juventud<br />

durante los 60 en la Ciudad de México.<br />

Recuerda que a pesar de que Rosita, su<br />

mamá, trabajaba en la clínica de su<br />

padre, siempre supervisaba el menú y<br />

decidía lo que se cocinaría en la<br />

semana. La comida que hacían en casa<br />

de Rosy tenía mucho que ver con lo<br />

que su papá quisiera comer. Esto<br />

incluía sopa aguada, a veces de<br />

municiones o a veces coditos, un<br />

guisado, como el cuete de res con<br />

papas y zanahorias, todo hervido en<br />

una olla exprés. “Las meriendas eran<br />

muy sencillas en la mayoría de las<br />

casas.” Rosy recuerda que las otras<br />

familias casi siempre comían algún<br />

pan y café con leche, aunque en su<br />

casa eran más comunes los antojitos<br />

mexicanos como los sopecitos y<br />

las enchiladas.<br />

Regina Vázquez, que tenía 26 años<br />

en aquel entonces, recuerda que a<br />

inicios de los 70 hacía la papilla para<br />

sus hijos con lo que se ocurriera:<br />

papas, espinacas, chícharo y a veces<br />

hasta una puntita de chile verde.<br />

Cuando crecieron, ella les cocinaba<br />

con gusto, pero no les daba a escoger.<br />

“Aquí no es restaurante”, sentenciaba<br />

al que pedía algo que no estaba en<br />

su menú.<br />

Ella no dedicaba largas horas a<br />

preparaciones complejas. Sus guisos se<br />

volvieron platillos más sencillos como<br />

picadillo, tortitas de carne o entomatadas.<br />

De su madre, María, heredó una<br />

máxima: la de nunca comprar salsas o<br />

sopas de lata —a la fecha sigue sin<br />

utilizarlas—, eso había que prepararlo<br />

desde cero.<br />

La comida para llevar o preparada<br />

no era muy común, “ni mi mamá ni yo<br />

compramos comida preparada a<br />

nuestro hijos, todo lo preparábamos<br />

en casa”. Los ingredientes aún se<br />

conseguían en los mercados, “aunque<br />

ya existían los supermercados, sólo<br />

habían unos cuantos, estaban lejos y<br />

en el mercado tenía marchantes”.


1981<br />

-<br />

2000<br />

LA DIETA<br />

GLOBAL<br />

¿QUÉ ESTABA PASANDO?<br />

Las dos décadas entre los años 80 y los<br />

dosmiles fueron de agitación, con<br />

movimientos que marcaron la entrada<br />

al cambio de milenio. En los albores<br />

de los 80 surgía un sentimiento<br />

nacionalista en la cocina al tiempo que<br />

se abría la primera sucursal de<br />

McDonald’s, en la Ciudad de México<br />

—era 1985 y el barrio era el Pedregal—.<br />

A pesar de que quedaba la memoria,<br />

y fotos en los diarios, de gestos<br />

patrióticos —como el de Margarita de<br />

Echeverría sirviendo pambacitos y<br />

agua de jamaica en Palacio Nacional en<br />

1977— en el aire reinaba todavía un<br />

aroma afrancesado, aunque ya se<br />

registraban giros —como la pasta<br />

primavera de Le Cirque, en Nueva<br />

York, que terminaría por convertirse<br />

en un plato casero— que apuntaban<br />

hacia la dieta mediterránea, y la<br />

estacionalidad, vía Italia.<br />

La cocina casera era una postal de<br />

estas contradicciones: el lugar donde<br />

cabía la olla exprés con los frijoles y las<br />

tortillas estaban en la mesa al lado<br />

de un refresco de cola. Donde había<br />

espacio para el microondas —un<br />

electrodoméstico que en México se<br />

democratizó en estas décadas— y<br />

recetas, de nuevo afrancesadas, que<br />

se reservaban para los días de fiesta<br />

—digan hola a los mousses, las cremas<br />

y a los soufflés—. Por aquel entonces,<br />

en 1980, Knorr lanzó una serie de<br />

recetas en cartones con platos como la<br />

ternera Belle Époque y la sopa de<br />

cebolla París, que son un buen espejo<br />

y reflejo del espíritu de época.<br />

DE VIVA VOZ<br />

En casa de Rossana González, nacida<br />

en 1985, el espagueti era una receta<br />

reservada para los días de fiesta como<br />

la Navidad, “con mucho queso<br />

amarillo y mantequilla”, recuerda.<br />

Aunque en el recetario de su mamá también había<br />

“tamales norteños, chiquitos y rellenos de carne de<br />

puerco enchilada, sopa caldosa y huevos con frijoles<br />

que eran básicos para el desayuno y bocoles”, añade.<br />

En 1994, con la firma del Tratado de Libre Comercio,<br />

la dieta de los mexicanos cambió drásticamente: “las<br />

exportaciones de frutas y verduras mexicanas aumentaron,<br />

mientras que cantidades cada vez mayores de los<br />

ingredientes de los alimentos procesados fluían en<br />

dirección contraria”, apunta una investigación del New<br />

York Times sobre el impacto de esta relación comercial<br />

sobre la alimentación en México —dominada por<br />

productos como la carne, el maíz y la soya— y sobre el<br />

incremento de los índices de obesidad.<br />

“A mi mamá le importaba que tuviéramos comida en<br />

la panza”, apunta González, quien aprendió el concepto<br />

‘comida balanceada’ mucho más tarde, ya entrada en la<br />

segunda década de los dosmiles, “me lo enseñó la<br />

nutrióloga de mis bebés, el platito del buen comer, que<br />

una comida tiene que tener verduras, carne y algo de<br />

cereal”. Un principio que permearía en adelante.<br />

2000<br />

-<br />

<strong>2020</strong><br />

ALIMENTACIÓN DE CONTRASTES<br />

¿QUÉ ESTABA Y QUÉ ESTÁ PASANDO?<br />

Los inicios del nuevo milenio estuvieron llenos de<br />

contrastes, de grandes avances tecnológicos y graves<br />

tensiones políticas. Un año estábamos hablando del<br />

atentado a las Torres Gemelas, en Nueva York, y luego<br />

de la primera generación del iPhone. En Estados Unidos<br />

eligieron al primer presidente afroamericano y en<br />

México el PRI perdió unas elecciones.<br />

En los primeros años del 2000 hubo conflictos<br />

provocados por el hombre aunque los problemas más<br />

graves fueron consecuencia de desastres naturales:<br />

temblores, huracanes, incendios y una pandemia que<br />

nos tiene distanciados socialemente.<br />

Los avances tecnológicos trajeron como consecuencia<br />

acceso inmediato a la información. Y con ello apertura<br />

ideológica y cuestionamientos. Las conversaciones<br />

sobre el impacto de nuestras acciones en el planeta<br />

o sobre la sobreexplotación del campo cobraron<br />

relevancia y con ellas vinieron cambios en la alimentación.<br />

Una época de mirar con recelo lo ultra procesado<br />

y con buenos ojos a los alimentos orgánicos y los<br />

superfoods. Una época incluso de crear polémicas<br />

con carnes hechas en laboratorio.


Los contrastes persisten en la<br />

fotografía de la década más reciente.<br />

Las dietas keto, paleo y atkins se<br />

disputan la cima de la popularidad.<br />

Mientras en el otro lado de la balanza<br />

hay malteadas híper calóricas,<br />

cupcakes, torres de waffles y hamburguesas<br />

XXL. Los avo toast y los acai<br />

bowls se adueñaron de las cafeterías<br />

hipsters y los omakases de tacos de<br />

los restaurantes fine dining.<br />

DE VIVA VOZ<br />

Paloma, de 29 años, vive en la Ciudad<br />

de México con su esposo y sus dos<br />

hijos. Ella se preocupa por mantener el<br />

balance en los alimentos de su familia:<br />

siempre verdura, proteína y carbohidrato.<br />

Pero recuerda que cuando vivía<br />

con sus papás —a principios del<br />

2000— las cosas eran distintas. “En<br />

casa de mis papás era otra historia, nos<br />

daban sopa de pasta y luego milanesa<br />

con arroz; pero eso sí, de postre mi<br />

mamá sacaba las barritas light.”<br />

Conforme los dosmiles avanzaron,<br />

la presencia de los empaques y<br />

alimentos procesados disminuyó en<br />

las alacenas del hogar. Su lugar lo<br />

ocuparon los frutos secos, las nueces,<br />

la quinoa y el aceite de coco.<br />

Las frutas y verduras, perfectamente<br />

brillosas e idénticas de los supermercados,<br />

pasaron de ser atractivas a<br />

provocar miedo en las mamás. “Yo sé<br />

que puede ser más caro y más tardado<br />

comprar cosas a pequeños productores<br />

o escoger las verduras orgánicas en vez<br />

de las del súper. Pero la verdad es que<br />

me da pavor la cantidad de cosas que<br />

le meten a la comida ahora. Por eso<br />

prefiero invertir y más si se trata de<br />

mis hijos.”<br />

35% DEL GASTO COTIDIANO DE LOS<br />

MEXICANOS ESTÁ DESTINADO A<br />

ALIMENTOS Y BEBIDAS. LOS PRODUCTOS<br />

QUE MÁS SE CONSUMEN EN EL HOGAR<br />

SON CARNE, CEREALES Y VERDURAS.<br />

ALACENAS DE<br />

DISTINTAS LATITUDES<br />

YUCATÁN<br />

Nelli Silveira, 82 años.<br />

Siempre en la alacena:<br />

Frijoles, carne y fruta.<br />

En el carrito de súper:<br />

Verduras y mucha fruta (todos los<br />

martes compro en el mercado).<br />

Platillo más popular:<br />

Chilmole, souffle de chayote<br />

y dulce de papaya.<br />

VERACRUZ<br />

Margarita Rodríguez, 58 años.<br />

Siempre en la alacena:<br />

Aceite de oliva, especias y<br />

chiles secos<br />

En el carrito de súper:<br />

Pasta para hacer mole y<br />

queso panela.<br />

Platillo más popular:<br />

Pescado al cilantro.<br />

OAXACA<br />

Rossana, 35 años.<br />

Siempre en la alacena:<br />

Leche, pastas, arroz y quesillo<br />

(muero si no hay quesillo).<br />

En el carrito de súper:<br />

Frijoles, carnes frías (jamón y<br />

salchicha), huevos. Las verduras<br />

y frutas las compro en el mercado<br />

(tomate, cebolla, calabacitas,<br />

mango, papaya, melón, sandía<br />

o manzanas).<br />

Platillo más popular:<br />

Enfrijoladas con tasajo y burritos<br />

de frijol con queso.


COMFORT<br />

ATRÁS QUEDARON LOS<br />

DÍAS DE LOS<br />

MACARRONES CON<br />

QUESO COMO SINÓNIMO<br />

ÚLTIMO DE COMFORT<br />

FOOD. LOS CHEFS DEL<br />

RESTAURANTE MEROMA,<br />

MERCEDES BERNAL Y<br />

RODNEY CUSIC, PONEN EN<br />

LA MESA LOS NUEVOS<br />

PUNTOS SOBRE LAS ÍES Y<br />

RECETAS —CON MÁS<br />

COLORES, TEXTURAS Y<br />

VEGETALES—, PARA UNA<br />

COMIDA QUE NOS<br />

HAGA SENTIR BIEN.<br />

fotos JUAN PABLO TAVERA<br />

COME FOR


FOOD,<br />

ME


El término<br />

comfort food —<br />

que tomamos<br />

prestado del inglés—<br />

ha estado rumiando por las páginas de revistas y<br />

diarios desde 1966. Un concepto que el Post<br />

Beach Daily usó para describir la asociación<br />

entre las emociones y la comida, un vínculo<br />

considerado, en aquel entonces, como un puente<br />

perfecto para la obesidad. Los adultos en<br />

situaciones de estrés, explicaba el Post, recurren<br />

“a lo que podría llamarse comfort food, la<br />

comida asociada con la seguridad de la infancia”.<br />

En menos de una década, el término ingresó<br />

al diccionario de Oxford y a la curiosidad<br />

científica, dispuesta a explicar con más<br />

precisión por qué la comida —no<br />

necesariamente calórica— nos hace sentir bien<br />

o, en el otro extremo, cuestionar y descartar<br />

por completo la validez del término.<br />

Abundan estudios al respecto.<br />

Shira Gabriel, profesora asociada de<br />

psicología en la Universidad de Buffalo,<br />

publicó en Appetite un estudio que asocia el<br />

término comfort con nuestra capacidad de<br />

formar vínculos sociales —sólidos, duraderos,<br />

que generen sentido de pertenencia— más<br />

que con las calorías de un plato. “Si eres un<br />

niño pequeño y tus cuidadores primarios te<br />

dan ciertos alimentos, estos alimentos<br />

comienzan a asociarse con la sensación de<br />

ser atendidos. Y luego, cuando creces, los<br />

alimentos en sí son suficientes para revivir<br />

esa sensación de pertenencia”, explica.<br />

Cuando hicimos este artículo, planteamos esta<br />

relación entre comida y bienestar a los chefs del<br />

restaurante Meroma, Mercedes Bernal y Rodney<br />

Cusic, una pareja joven y emprendedora que,<br />

como muchos restauranteros en el mundo,<br />

hacen frente a una crisis que dejó vacías las<br />

mesas de sus locales.<br />

Mercedes y Rodney son además una pareja<br />

sentimental y binacional —ella mexicana, él<br />

estadounidense—, un factor que distingue las<br />

referencias de cada uno para definir los platos<br />

y las recetas que entran en el cajón del comfort<br />

food, de lo que les genera alivio, consuelo o<br />

refuerza su sentido de pertenencia. Para ella<br />

“no tienen que ser [recetas] muy llenadoras, ni<br />

carbohidratos, ni lácteos, sino lo que te hace<br />

sentir bien o te sientes cómodo comiendo”,<br />

como cosas picantes o platos de cocina<br />

libanesa, en su caso.<br />

Para Rodney, el concepto oscila entre esos<br />

platos “que comía de chiquitito” —inserten aquí<br />

la pasta con queso o el meatloaf— y las que lo<br />

arropan en su vida adulta, platos “con mucha<br />

acidez, soya, comida asiática como el ramen”,<br />

esa sopa que se ha colado por las fronteras para<br />

convertirse en una suerte de caldo de pollo<br />

para el alma de la generación millenial, nutrida<br />

también por referencias de la cultura pop y la<br />

eficiencia de los sistemas de entrega de comida<br />

a domicilio o para llevar.<br />

Mercedes y Rodney hicieron un menú con<br />

recetas “fáciles, que puedes hacer en 10<br />

minutos”, dice él, “cosas que aunque sean<br />

pesadas o estén fritas, se sienten ligeras porque<br />

se acompañan con mucha verdura, hierbas,<br />

cítricos y encurtidos”, agrega ella. Son recetas<br />

que son también fáciles de compartir, para<br />

reforzar ese sentido de pertenencia anclado a la<br />

mesa y recetas para construir buenos recuerdos<br />

alrededor de ella. - MARIANA CAMACHO<br />

38<br />

MAYO <strong>2020</strong>


Receta página 44.<br />

40<br />

MAYO <strong>2020</strong>


MAYO <strong>2020</strong> 41


42<br />

MAYO <strong>2020</strong>


ENSALADA DE HINOJO CON<br />

VINAGRETA DE ANCHOA<br />

Y PARMESANO<br />

Tiempo activo: 5 min. Tiempo total: 15 min<br />

Porciones: 2<br />

1 lata chica de anchoas<br />

1 limón amarillo grande, el jugo<br />

100 g de queso parmesano, 3 cucharadas<br />

y un poco más para servir<br />

Pimienta negra<br />

Sal de mar<br />

1 pieza de bulbo de hinojo<br />

1 pieza de apio con hojas, solo el centro<br />

(1 taza aprox)<br />

1 taza de lechugas amargas limpias<br />

como: frisée, endivia o radicchio.<br />

½ taza de aceite de oliva extra virgen<br />

½ taza de aceite neutro (de semilla<br />

de girasol o pepita de uva)<br />

Migas de pan tostado, para servir<br />

Alcaparras, picadas (opcional)<br />

1. Prepara la vinagreta. En un mortero o un<br />

tazón hondo y cerrado, agrega 3 filetes de<br />

anchoa y machaca muy bien. Agrega el jugo<br />

de limón y mezcla hasta formar una consistencia<br />

pastosa. Agrega 3 cucharadas de<br />

queso parmesano rallado muy fino, una<br />

cucharadita de pimienta negra y una pizca<br />

de sal. Mezcla muy bien para que los ingredientes<br />

se incorporen.<br />

2. En un recipiente mezcla las dos medias<br />

tazas de los diferentes tipos de aceite.<br />

Agrega, en hilo, poco a poco, a la mezcla de<br />

anchoa y sigue mezclando con un globo o con<br />

el pistilo del mortero. La idea es hacer una<br />

emulsión con el aceite para que la vinagreta<br />

quede cremosa. Prueba el resultado y<br />

agrega sal si es necesario.<br />

3. Prepara la ensalada. Corta el hinojo en<br />

cuatro partes sin dejar que las capas se<br />

suelten. Con una mandolina rebana el hinojo<br />

en ‘plumas’ de 1 cm aproximadamente, de<br />

grosor. Cuando esté rebanado pásalo a un<br />

tazón con agua muy fría (o con hielo) y<br />

déjalo remojar mientras cortas el resto de<br />

los ingredientes.<br />

4. Corta todas las hojas del apio (entre más<br />

amarillas, mejor: son más ricas y más<br />

suaves). Pásalas al tazón de agua con el<br />

hinojo y, aparte, sobre una tabla para picar,<br />

corta los tallos del apio muy fino, en forma de<br />

arcos. Si lo prefieres, usa la mandolina para<br />

hacer los cortes. Agrega los trozos de apio<br />

al tazón de agua fría.<br />

5. Limpia las lechugas amargas y córtalas del<br />

tamaño del hinojo. Pásalas al tazón de agua<br />

fría y deja que todo se remoje durante 5<br />

minutos. Retira el agua y el hielo. Seca todo<br />

en un centrifugador de lechuga o sobre<br />

servilletas de tela. Los ingredientes deben<br />

quedar muy secos para que el exceso de<br />

agua no disuelva la vinagreta.<br />

6. Justo antes de servir, coloca toda la<br />

verdura en un tazón, agrega dos cucharadas<br />

de vinagreta y mezcla bien. Prueba y rectifica<br />

la cantidad de sal y pimienta si es necesario.<br />

En un plato extendido, pon una cucharadita<br />

de vinagreta y encima un puño de la ensalada,<br />

trata de hacer volumen para que no esté<br />

plana. Agrega migas de pan tostado y un<br />

poco de queso parmesano. Añade encima un<br />

puño de ensalada para crear más volumen y<br />

un poco más de migas y parmesano. Agrega<br />

las alcaparras y sirve de inmediato.<br />

RIGATONI AMATRICIANA<br />

Tiempo activo: 10 min. Tiempo total: 15<br />

min. Porciones: 2<br />

1 cucharada de aceite de oliva<br />

extra virgen<br />

170 g de guanciale, cortado en tiras<br />

de 3 cm por 5 cm*<br />

½ cebolla morada cortada en plumas<br />

de 3 cm aprox.<br />

1 pizca de chile seco<br />

1<br />

/4 taza (60 ml) de vino blanco seco<br />

1 lata (794 g) de tomates enteros<br />

pelados, triturados a mano<br />

Sal de mar<br />

Pimienta negra recién molida<br />

450 g de rigatoni<br />

30 g de queso pecorino romano rallado,<br />

y un poco más para servir<br />

1. En una sartén grande, calienta el aceite<br />

de oliva a fuego medio-alto. Agrega el guanciale<br />

y cocina, revolviendo, hasta que las<br />

tiras estén ligeramente doradas, aproximadamente<br />

5 minutos. Retira el guanciale y<br />

en el mismo aceite agrega el chile seco y la<br />

cebolla. Cocina por unos dos minutos a<br />

fuego bajo. Agrega el vino y cocínalo<br />

raspando los pedazos dorados en el fondo<br />

de la sartén, hasta que se evapore, aproximadamente<br />

3 minutos. Agrega los tomates<br />

y cocina a fuego lento. Condimenta con<br />

sal y pimienta.<br />

MAYO <strong>2020</strong> 43


2. Mientras tanto, hierve la pasta en agua con<br />

sal hasta que esté casi al dente, aproximadamente<br />

1 minuto menos que lo que indican las<br />

instrucciones en el paquete. Usando pinzas,<br />

transfiere la pasta a la salsa, junto con 1 /4 taza<br />

del agua en la que se cocinó la pasta. Cocina a<br />

fuego alto revolviendo rápidamente, hasta<br />

que la pasta esté al dente y la salsa se haya<br />

espesado y comience a cubrir el rigatoni.<br />

Retira del fuego, agrega el queso y revuelve<br />

rápidamente para incorporar. Sazona al gusto<br />

con más sal y pimienta. Sirve de inmediato<br />

y agregar más queso en la mesa.<br />

* De venta en Cornershop o City Market.<br />

COLIFLOR ROSTIZADA CON SALSA<br />

MACHA Y JOCOQUE<br />

Tiempo activo: 10 min. Tiempo total: 20 min<br />

Porciones: 3<br />

4 cucharadas de jocoque<br />

½ taza se aceite de oliva, 1 cucharadita<br />

para el jocoque y el resto para<br />

la coliflor<br />

2 limones verdes, el jugo<br />

1 cabeza de coliflor pequeña<br />

2 cucharadas de aceite neutro (de<br />

semilla de girasol o pepita de uva)<br />

3 dientes de ajo, sin pelar<br />

2 ramitas de romero fresco<br />

3 cucharadas de salsa macha<br />

Sal<br />

Pimienta<br />

1 puño de cilantro (puedes usar perejil<br />

o albahaca o una combinación de<br />

los tres)<br />

1. Prepara el jocoque. En un tazón bate y<br />

sazona el jocoque con una cucharadita de<br />

aceite, unas gotas de limón y una pizca<br />

de sal y pimienta. Reserva.<br />

2. Precalienta el horno a 200 o C.<br />

3. Rostiza la coliflor. Corta la coliflor en gajos<br />

(si es pequeña, córtala en seis partes).<br />

Procura no desprender los gajos del centro<br />

para que no se deshagan en la sartén.<br />

Sazona por ambos lados con sal y pimienta.<br />

4. Calienta una sartén, con mango de metal,<br />

a fuego medio alto y agrega el aceite neutro y<br />

los dientes de ajo. Agrega la coliflor y sella<br />

muy bien por ambos lados. Rostiza a fuego<br />

medio. No dejes que el aceite se queme, si se<br />

calienta demasiado apágalo un minuto y<br />

agrega un poquito de aceite frío.<br />

5. Cuando los gajos de coliflor estén dorados<br />

por ambos lados, agrega la salsa macha.<br />

Cubre por completo con la salsa, puedes usar<br />

una brocha para pintarlas bien. Transfiere al<br />

horno. Si no tienes una sartén con mango de<br />

metal, transfiere todo a un recipiente para<br />

hornear. Hornea por 8 minutos. Usa un cuchillo<br />

pequeño para revisar que el centro tenga<br />

resistencia pero esté suave. Retira las coliflores<br />

del horno y deja enfriar por unos minutos.<br />

6. Para servir, coloca dos cucharadas de<br />

jocoque sobre un plato trinche y distribúyelo<br />

para formar una base. Agrega 3 piezas de<br />

coliflor y un poco del aceite sobrante en la<br />

sartén. Rocía ¼ de jugo de limón y un poco<br />

de ralladura. Termina con hojas de cilantro.<br />

SCHNITZEL DE CERDO Y ENSALADA<br />

DE MOSTAZA<br />

Tiempo activo: 15 min. Tiempo total: 45 min<br />

Porciones: 2<br />

2 chuletas de cerdo aplanadas (a 1 cm<br />

de grosor)<br />

1 litro de agua fría<br />

2 cucharadas de sal<br />

1 taza de panko<br />

½ taza de pan rallado bimbo<br />

3 huevos batidos<br />

½ taza harina blanca<br />

1 taza aceite vegetal para freír<br />

1 cucharada mostaza antigua<br />

1 cucharada echalote picado y lavado<br />

1 taza pepinillos picados<br />

½ taza aceite de oliva<br />

1 cucharada de limón amarillo, el jugo<br />

1 cucharada de vinagre de vino blanco<br />

1 taza de arúgula<br />

½ taza de hojas de perejil<br />

1. Prepara la salmuera. En un recipiente,<br />

mezcla el agua fría y la sal hasta que se<br />

disuelva por completo. En un contenedor pon<br />

las chuletas y cubre con la mezcla de agua y<br />

sal. Refrigera por 30 minutos. Cuando transcurra<br />

el tiempo saca las chuletas de la salmuera<br />

y seca con una servitoalla.<br />

2. Usa tres platos trinche para repartir los<br />

ingredientes del empanizado. En uno coloca<br />

una mezcla de ambos panes, en otro el<br />

huevo y la harina en el tercero. Primero baña<br />

las chuletas con harina, procurando que<br />

estén cubiertas por completo pero sin<br />

exceso. Pásalas por el huevo batido y luego<br />

por el pan. No deben quedar partes de<br />

la carne sin cubrir. Procura no aplicar presión<br />

sobre la carne para que el resultado<br />

tenga una textura ligera.<br />

3. Calienta a fuego medio alto un coludo con<br />

aceite vegetal a 200 o C. El aceite debe cubrir<br />

4 cm de profundidad. Si no tienes un termómetro,<br />

calienta el aceite hasta se que formen<br />

pequeñas ondas, echa un trocito de pan y<br />

espera a que suba a la superficie. Sabrás que<br />

el aceite está en su punto cuando se formen<br />

pequeñas burbujas alrededor del pan.<br />

4. Coloca lentamente una chuleta en el aceite<br />

y fríe por un minuto o hasta que tenga un<br />

tono dorado y la consistencia sea crujiente.<br />

Voltea lentamente y fríe por un minuto más<br />

hasta que el otro lado también esté dorado y<br />

la temperatura interna de la chuleta sea de<br />

60 o C. Agrega un poco de sal, retira del aceite<br />

y deja enfriar unos minutos antes de servir.<br />

5. Prepara la ensalada. En un tazón mezcla<br />

todos los ingredientes y sazona con sal y<br />

pimienta. La vinagreta debe estar cortada y<br />

no es necesario emulsionar. En otro recipiente<br />

mezcla la arúgula con el perejil y vierte la vinagreta<br />

justo antes de servir con la milanesa.<br />

PANNA COTTA DE MIEL CON<br />

COMPOTA DE UCHUVA<br />

Tiempo activo: 35 min. Tiempo total : 1 h<br />

Porciones: 2<br />

1 taza de crema para batir<br />

¼ taza de yogurt griego<br />

2 cucharadas de miel de abeja<br />

1 cucharada de azúcar blanca<br />

1 paquete de grenetina en polvo (7 g<br />

aprox.) disuelta en un taza de agua fría.<br />

2 tazones para moldear<br />

2 tazas de uchuva (puedes reemplazar<br />

por moras azules, zarzamoras<br />

o frambuesas)<br />

¼ taza de azúcar<br />

¼ taza de miel<br />

1 pizca de sal<br />

2 cucharadas de vinagre balsámico<br />

(entre más añejo mejor)<br />

1. Prepara la panna cotta. En una olla<br />

mediana mezcla a fuego lento el yogurt, la<br />

miel, el azúcar y la crema. Deja que la mezcla<br />

hierva por un minuto y agrega la grenetina<br />

hidratada y revuelve hasta incorporar,<br />

puedes utilizar una batidora de mano<br />

para este paso.<br />

2. Retira la mezcla del fuego y pásala por una<br />

coladera fina en los moldes para servir la<br />

panna cotta. Refrigera por lo menos cuatro<br />

horas o, de preferencia, la noche anterior.<br />

3. Prepara la compota. En un coludo chico a<br />

fuego lento hierve la fruta, el azúcar, la miel y<br />

una pizca de sal hasta obtener una consistencia<br />

parecida a la mermelada, aproximadamente<br />

20 minutos. Retira del fuego y deja<br />

reposar durante 15 minutos. Agrega el aceite<br />

balsámico y guarda en el refrigerador.<br />

4. Para servir, vierte un poco de la compota<br />

sobre la panna cota.<br />

Prepara con antelación. Puedes adelantar<br />

el paso de la compota y tenerla refrigerada<br />

al menos dos días antes.<br />

44<br />

MAYO <strong>2020</strong>


MAYO <strong>2020</strong> 45


Receta página 44.<br />

46<br />

MAYO <strong>2020</strong>


arriba: Los primos Josh Russ Tupper (izquierda) y Niki Russ<br />

Federman de Russ & Daughters en la ciudad de Nueva York<br />

abajo, desde la izquierda: Los hermanos Bricia, Fernando<br />

Jr. y Paulina Lopez de Guelaguetza en Los Ángeles<br />

48<br />

MAYO <strong>2020</strong>


COMIDAS<br />

FAMILIARES<br />

arriba: Los hermanos Van (izquierda) y Vanvisa Nolintha<br />

de Bida Manda en Raleigh, Carolina del Norte<br />

p o r NINA FRIEND<br />

f oto THE INGALLS<br />

Para las familias que poseen y<br />

operan restaurantes, el enfoque<br />

está siempre en nutrir a los<br />

demás. Así es como tres de estas<br />

familias se nutren entre ellos<br />

y ponen alegría a las comidas<br />

diarias en casa.<br />

MAYO <strong>2020</strong> 49


LAS REALIDADES DE<br />

DIRIGIR UN RESTAURANTE<br />

DIFUMINABAN LAS<br />

LÍNEAS ENTRE EL<br />

TRABAJO Y LA VIDA<br />

FUERA DEL TRABAJO.<br />

PADRES que querían una mejor vida para sus hijos y de familias<br />

que se mudaron al otro lado del mundo buscando una<br />

oportunidad. En Estados Unidos, estas familias se ganaron<br />

la vida cocinando para otros. Para los Russ de Polonia, eso<br />

se traducía en bagels y salmón encurtido. Para los López de<br />

México, en tlayudas y tamales. Para los Nolintha de Laos, en<br />

ensalada de papayas y congee. Aunque sus negocios –Russ<br />

& Daughters en Nueva York, Guelaguetza en Los Ángeles y<br />

Vida Manda en Raleigh, Carolina del Norte– estaban ligados<br />

a la necesidad financiera, eran importantes también de otra<br />

manera: para que cada familia llevara el sabor de casa a su<br />

hogar adoptivo.<br />

Conforme las familias iban ganando reconocimiento<br />

por su comida y sus negocios se expandían, la demanda de<br />

su tiempo crecía. Las realidades de dirigir un restaurante<br />

difuminaban las líneas entre el trabajo y la vida fuera del<br />

trabajo. Hoy, cada familia se enfrenta a la negociación entre<br />

trabajo y casa de una forma distinta, pero se aseguran de<br />

pasar tiempo juntos lejos del restaurante, cocinando y<br />

comiendo los alimentos que más les gustan.<br />

Para los actuales propietarios de Russ & Daughters, los<br />

primos Niki Russ Federman y Josh Russ Tupper, las fiestas y<br />

las reuniones familiares son la oportunidad para alejarse del<br />

trabajo. Niki y Josh son la cuarta generación de propietarios<br />

de Russ & Daughters. En 1907, Joel Russ emigró a los Estados<br />

Unidos y vendió arenque schmaltz a los judíos en el Lower<br />

East Side. Hizo suficiente dinero para comprar una carretilla,<br />

después un caballo y una carreta, después una tienda. En<br />

1920, Joel cambió su tienda a Houston Street y más tarde le<br />

cambió el nombre por sus hijas, Hattie, Ida y Anne. Las hijas<br />

se encargaron de la tienda hasta que el hijo de Anne, Mark,<br />

quedó a cargo. Niki, la hija de Mark y Josh, el sobrino de<br />

Mark, lo sucedieron en 2009.<br />

Los primos han expandido el negocio familiar a tres otras<br />

locaciones en Nueva York, y han aprendido que la clave del<br />

éxito es respetar el tiempo libre del otro. “Si es el día libre de<br />

Josh, me encargo yo”, asegura Niki. “Y viceversa”.<br />

Para los hermanos López, de Guelaguetza, en Los Ángeles,<br />

la disposición de separar casa y trabajo ha crecido conforme<br />

se han acomodado en la dirección del restaurante.<br />

Su padre, Fernando, llegó a Los Ángeles con visa<br />

de turista en 1993. Iba de puerta en puerta vendiendo<br />

productos oaxaqueños que no estaban disponibles<br />

en Estados Unidos, como pasta de mole.<br />

Un año después, Fernando abrió Guelaguetza<br />

en Koreatown, y el resto de la familia emigró al<br />

país. El negocio se mantuvo estable hasta la crisis<br />

financiera de 2008, cuando Fernando y su esposa,<br />

María, perdieron su casa, sus coches y sus otros<br />

restaurantes. Iban a vender Guelaguetza cuando<br />

sus tres hijos mayores, Bricia, Fernando hijo y<br />

Paulina, pidieron comprárselos. Como los hermanos<br />

no tenían el dinero en ese momento, pagaron<br />

con un pagaré a cinco años.<br />

“Me acuerdo que, cuando acabábamos de tomar<br />

el negocio, pasaron tres días en los que no se paró<br />

ni un cliente”, cuenta Fernando hijo. Eso cambió<br />

con el tiempo, en parte gracias a una reseña de<br />

Jonathan Gold en 2010, donde llamó a Guelaguetza<br />

uno de los mejores restaurantes oaxaqueños<br />

de Estados Unidos. Una base constante de clientes trajo<br />

oportunidades de crecimiento, como la publicación de un<br />

libro y el inicio de un negocio de venta directa de mole marca<br />

Guelaguetza y mix para micheladas. Y con la expansión<br />

vino un deseo más urgente de pasar tiempo juntos, no como<br />

socios, sino como familia.<br />

“Podíamos tener algún desencuentro en el trabajo y más<br />

tarde ir a cenar juntos”, relata Paulina. “Intentamos alejarnos<br />

del trabajo para conectar y simplemente ser nosotros”. Ya sea<br />

que esto signifique comer juntos en alguna casa o viajar en<br />

grupo, la comida siempre está involucrada. “Estar juntos alrededor<br />

de los alimentos nos es natural”, dice Fernando hijo:<br />

“La comida es nuestro lenguaje de amor”.<br />

Los hermanos Van y Vanvisa Nolintha, dueños de Bida<br />

Manda en Raleigh, no sólo trabajan juntos, también viven<br />

juntos. La casa que comparten es el primer lugar al que han<br />

llamado hogar desde que se mudaron de Laos de niños. Sus<br />

padres los mandaron a Greensboro, Carolina del Norte. A Van<br />

en 1998, cuando tenía 12 años. Vanvisa, dos años menor, en<br />

1999. Los hermanos fueron recibidos por la misma familia<br />

anfitriona. Compartían un cuarto y llenaban su refrigerador<br />

con ingredientes que extrañaban de su país: salsa de pescado<br />

y chiles tailandeses.<br />

Después de casi dos décadas viviendo lejos de su familia,<br />

los hermanos viajaron de vuelta a Laos. Fue entonces que<br />

decidieron abrir un restaurante en honor a sus padres. Lo<br />

llamaron Bida Manda, que significa ‘padre madre’, en sánscrito<br />

ceremonial.<br />

Sus horarios en el restaurante son opuestos, así que pocas<br />

veces se sientan a cenar juntos. En cambio, uno cocina y deja<br />

un poco de lo que preparó en la estufa, como una forma de<br />

cuidar del otro. “Van me cuidó desde el primer día aquí”,<br />

cuenta Vanvisa, “ahora siento que puedo devolverle el<br />

favor cocinando para él”.<br />

A continuación, las tres familias comparten recetas que<br />

hablan de sus culturas y su cocina, cada plato es una representación<br />

de lo que cada familia ama comer cuando pasan<br />

tiempo juntos lejos del restaurante: una celebración de<br />

su hogar.<br />

50<br />

MAYO <strong>2020</strong>


Josh Russ Tupper y su esposa,<br />

Denise Porcaro (centro), la<br />

anfitriona Niki Russ Federman y<br />

su esposo, Christopher Meehan,<br />

durante un brunch de bagels en<br />

su departamento en Queens,<br />

Nueva York<br />

FLORES DE: DENISE PORCARO, FLOWER GIRL.<br />

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52<br />

MAYO <strong>2020</strong>


El huevo en centro de bagel (receta<br />

en pág. 56) va muy bien con los<br />

cocteles shrub de betabel (p.57).<br />

DERECHA, DESDE LA IZQUIERDA:<br />

Christopher Meehan, Niki Russ<br />

Federman, Denise Porcaro y Josh<br />

Russ Tupper.<br />

LA FAMILIA RUSS<br />

RUSS & DAUGHTERS<br />

Nueva York<br />

SON LAS TRES DE LA TARDE y a Niki Russ Federman se le<br />

olvidó comer el lunch. Come un bocado de latke y toma<br />

un trago de limonada. Mientras come algunos bagel chips<br />

con queso que su primo y socio, Josh Russ Tupper, trajo de<br />

Holanda, Niki platica: “Esa es la ironía de trabajar en restuarantes:<br />

estás rodeado de comida todo el tiempo, pero se<br />

te olvida sentarte a comer”.<br />

Niki se llama a sí misma una ‘niña de tienda’. Aunque<br />

no comía salmón ahumado y caviar en cada comida,<br />

creció ayudando a sus papás en Russ & Daughters. Sin<br />

embargo para Josh, quien creció en un áshram al norte del<br />

estado de Nueva York y no estuvo tan expuesto a la tienda,<br />

los arenques encurtidos y el Gaspé Nova eran comida para<br />

ocasiones especiales. Cuando era niño, a Josh le emocionaban<br />

tanto las reuniones familiares que armaba su bagel<br />

con todos los tipos de pescado y con cada sabor de queso<br />

crema posibles.<br />

Ahora Niki y Josh usan el tiempo libre de las fiestas para<br />

soñar con nuevos platillos, como pan francés de babka o<br />

huevo en centro de bagel, que implica freír un huevo en<br />

medio de medio bagel a la plancha. Se ha vuelto tan popular<br />

en su familia que Niki y Josh consideran agregarlo a su<br />

menú en Russ & Daughters Cafe (ver receta en pág. 56).<br />

Niki y Josh cuidan de Russ & Daughters como si se tratara<br />

de un miembro de su familia. “Te sacrificas por él”,<br />

dice Nikki, “quieres asegurar su futuro”. También consideran<br />

familia a la comunidad que rodea a Russ & Daughters<br />

y entienden el significado de su tienda. “Russ & Daughters<br />

se vuelve su casa”, comenta Niki, “cuando este bebé nació,<br />

cuando esta persona se casó. La comida es el vehículo de<br />

su recuerdo”.<br />

MAYO <strong>2020</strong> 53


La colección de mezcales de<br />

Fernando López hijo, que ha<br />

traído de sus viajes a Oaxaca.<br />

abajo, desde la izquierda:<br />

Fernando hijo, Bricia y Paulina<br />

López, con su perro Xoco.<br />

LA FAMILIA LÓPEZ<br />

GUELAGUETZA<br />

Los Ángeles<br />

HAY UN PLATO QUE LLEVA a los tres hermanos López de<br />

vuelta a su infancia en Oaxaca: las enfrijoladas. Esta simple<br />

enchilada de frijol negro hecha con chile de árbol, hojas<br />

de aguacate, epazote y queso fresco “grita Oaxaca”, dice Paulina.<br />

“Nunca he comido enfrijoladas en ningún otro lado.<br />

Ese sabor a frijoles es parte de quien soy”. (A la derecha, ver<br />

receta en pág. 57.)<br />

Paulina hace enfrijoladas todo el tiempo, y a sus tres<br />

hijas les encantan. No importa qué tan ocupada esté en<br />

Guelaguetza, Paulina siempre regresa a casa para cenar<br />

con su familia. “A veces no cocino yo”, dice, “pero al<br />

menos nos sentamos juntos y platicamos de nuestro día”.<br />

Para Bricia, cocinar en casa tiene que ser relajante.<br />

“Cuando cocino fuera de casa, aunque me encanta, siempre<br />

es trabajo”, confiesa. “Pero cuando estoy en casa, es algo<br />

hermoso”.<br />

A diferencia de sus hermanas mayores, Fernando hijo<br />

no tiene hijos, pero le encanta cocinar en casa con su<br />

esposa. Acaban de comprar una máquina de sous vide y<br />

les encanta experimentar juntos. “Escogemos una receta<br />

y la hacemos cinco veces seguidas para perfeccionarla”,<br />

cuenta. “Después encontramos otra.”.<br />

Aunque los hermanos viven separados ahora, el lazo<br />

que formaron de niños se ha quedado con ellos. Cuando<br />

los López se mudaron a Los Ángeles, ambos padres y sus<br />

cuatro hijos dormían en una sola habitación. “Mi hermano<br />

siempre dice que nos obligaron a estar juntos”, cuenta<br />

Bricia. “Ahora, como adultos, con un negocio juntos, nos<br />

damos cuenta que no hay nada más allá de la familia.”<br />

54<br />

MAYO <strong>2020</strong>


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56<br />

MAYO <strong>2020</strong>


página anterior los coloridos<br />

ingredientes del Khao Soi (receta<br />

pág. 56), el plato más solicitado<br />

de los hermanos Nolintha. a la<br />

derecha Vancisa<br />

y Van como anfitriones de<br />

una fiesta.<br />

“Amo pensar que hay ciertos<br />

platos que no se preparan en<br />

porciones pequeñas”, dice Van<br />

“y nunca haces khao soi para<br />

dos”. Ellos lo comparten con<br />

colegas y amigos.<br />

LA FAMILIA<br />

NOLINTHA<br />

BIDA MANDA<br />

Raleigh, Carolina del Norte<br />

CUANDO LOS HERMANOS NOLINTHA abrieron Bida Manda,<br />

no existía un modelo de cómo debería ser un restaurante<br />

laosiano en Estados Unidos. Van y Vanvisa sintieron la responsabilidad<br />

de asrgurarse que su versión de comida de Laos<br />

honrara su memoria de Luang Prabang, así que se preguntaron:<br />

¿qué comemos cuando extrañamos nuestra casa? Comen<br />

mok pa, robalo cocido en hojas de plátano, y khao soi, una<br />

sopa de tallarines de arroz (Receta en pág. 56).<br />

En la comunidad campesina donde Van y Vanvisa crecieron,<br />

la tierra se pasa tradicionalmente de una generación a<br />

otra. Los hermanos pidieron a sus padres, Amphone y Sompheng,<br />

que consideraran regalarles una parte de sus tierras<br />

para que fuera el capital semilla de Bida Manda. Accedieron:<br />

“De alguna forma, estamos cuidando su tierra”, dice Van.<br />

“Sólo que es desde Moore Square en Raleigh, a 13,000 kilómetros<br />

de distancia.”<br />

Les tomó 17 años a Amphone y a Sompheng obtener la visa<br />

para visitar a sus hijos en Raleigh. Y aunque no estaban presentes<br />

físicamente, siempre estuvieron en espíritu. Una fotografía<br />

en blanco y negro de Amphone y Sompheng, tomada el<br />

día de su boda, permanece en la pared de Bida Manda, dando<br />

la bienvenida a quienes entran. “Es un gesto simbólico de bienvenida<br />

a esta cocina extranjera”, señala Van, “es un momento<br />

de humanidad”.<br />

La primera vez que sus padres fueron a Bida Manda, lo<br />

más natural –después de años de esperar el momento– era<br />

sentarse a cenar juntos. “Cocinaron para nosotros, y nosotros<br />

para ellos”, comenta Van: “Eso se convirtió en una forma<br />

de conexión”.<br />

MAYO <strong>2020</strong> 57


Khao soi laosiano<br />

TIEMPO ACTIVO: 35 MIN. TIEMPO TOTAL: 55<br />

MIN. PORCIONES: 8<br />

La familia Nolintha omite la leche de coco en<br />

su versión de este cálido platillo de cerdo<br />

enchilado sobre tallarines de arroz, en un<br />

caldo aromático y lleno de sabor. Este khao<br />

soi ligero se come tradicionalmente a la hora<br />

del desayuno pero funciona también para<br />

la cena.<br />

5 chiles tailandeses secos<br />

1 taza de agua caliente<br />

3 cucharadas de aceite de canola<br />

3 dientes de ajo medianos, machacados<br />

450 g de cerdo molido<br />

2 jitomates pequeños, picados<br />

¼ taza de pasta de frijol de soya<br />

2 cucharadas de salsa de pescado,<br />

divididas<br />

1 cucharada de azúcar granulado<br />

1 cucharadita de paprika<br />

1 manojo de cilantro fresco<br />

8 tazas de caldo de pollo bajo en sodio<br />

400 g de tallarines de arroz para banh pho,<br />

sin cocer<br />

2 tazas de calabaza italiana rallada en<br />

listones, sin semillas (opcional)<br />

2 tazas de col china picada (opcional)<br />

½ taza menta fresca picada<br />

Pimienta negra, para decorar<br />

Gajos de limón, para servir<br />

1. Usando guantes, desmorona los chiles tailandeses<br />

sobre un tazón mediano resistente<br />

al calor. Agrega 1 taza de agua caliente; deja<br />

reposar por 15 minutos. Escurre los chiles y<br />

tira el líquido. Procesa los chiles, el aceite y<br />

el ajo en un procesador de alimentos pequeños<br />

hasta que los chiles estén picados finamente,<br />

por 30 segundos, deteniéndote a<br />

limpiar con una espátula los lados del tazón,<br />

si es necesario.<br />

2. Calienta una sartén grande a fuego medio.<br />

Agrega la mezcla de chiles; cocina,<br />

moviendo constantemente, hasta que suelten<br />

su aroma, por 1 minuto. Agrega el cerdo;<br />

cocina, moviendo constantemente para desmoronar<br />

el cerdo en pedazos pequeños,<br />

hasta que se dore, de 6 a 8 minutos. Agrega<br />

los jitomates, la pasta de frijol de soya, 1<br />

cucharada de salsa de pescado, el azúcar y<br />

la paprika. Cocina, moviendo ocasionalmente,<br />

hasta que los jitomates se deshagan,<br />

de 8 a 10 minutos. Reduce el fuego; cocina,<br />

moviendo ocasionalmente, hasta que el<br />

líquido se haya reducido y el cerdo esté<br />

cubierto con salsa, de 8 a 10 minutos.<br />

3. Mientras tanto, separa las hojas de los<br />

tallos de cilantro; ata los tallos con hilo de<br />

cocina. Pica las hojas hasta obtener ½ taza;<br />

reserva para decorar. Mezcla el caldo de<br />

pollo, los tallos de cilantro y la cucharada<br />

restante de salsa de pescado en una sartén<br />

mediana. Cubre y hierve a fuego lento. Destapa;<br />

retira y tira los tallos de cilantro. Cubre<br />

el caldo; manténlo caliente a fuego<br />

medio-bajo.<br />

4. Prepara los tallarines de arroz de acuerdo<br />

con las instrucciones del empaque. Escúrrelos<br />

y divídelos entre los 8 platos de servicio<br />

(aproximadamente 2 /3 taza en cada uno). Si<br />

así lo deseas, agrega los listones de calabaza<br />

y la col al caldo caliente; cocina a fuego<br />

medio-bajo hasta que estén tiernos, de 30<br />

segundos a 1 minuto. Usando pinzas, retira<br />

los vegetales del caldo, y divídelos entre los<br />

platos de servicio (aproximadamente ½ taza<br />

en cada uno). Coloca encima de cada tazón<br />

¼ taza de carne de cerdo y 1 taza de caldo<br />

caliente. Espolvorea cilantro y menta sobre<br />

los tazones. Decora con pimienta negra y<br />

sirve con gajos de limón. –VAN Y VANVISA<br />

NOLINTHA, BIDA MANDA<br />

PREPARA CON ANTELACIÓN. Los tallarines<br />

pueden hacerse hasta 4 horas antes y<br />

conservarse en agua fría. El caldo puede<br />

hacerse hasta 4 horas antes. La mezcla de<br />

cerdo puede cocinarse y guardarse en un<br />

recipiente hermético hasta 3 días antes.<br />

VINO. Un riesling australiano alimonado.<br />

NOTA. Compra los chiles tailandeses, la<br />

pasta de frijol de soya y los tallarines banh<br />

pho en tu supermercado asiático local.<br />

Huevo en centro de bagel<br />

TIEMPO TOTAL: 10 MIN. PORCIONES: 2<br />

El uso ideal para las bagels sobrantes. Esta<br />

versión de toad in the hole sube de nivel con<br />

sazonador everything spice, salmón ahumado<br />

y cucharadas de caviar o de aguacate<br />

rebanado. Agrega agua a la sartén para cocinar<br />

los huevos de forma uniforme, sin quemar<br />

las mitades de bagel, y así quedará<br />

ligeramente tostada alrededor de una yema<br />

perfectamente líquida.<br />

1 bagel (con sazonador everything<br />

spice)<br />

2 cucharadas de mantequilla sin<br />

sal, suavizada<br />

2 huevos grandes<br />

1 cucharada de agua<br />

Sal kosher, al gusto<br />

Pimienta negra, al gusto<br />

60 g de salmón ahumado en frío,<br />

para servir<br />

Caviar o aguacate rebanado, para servir<br />

1. Si lo requiere, ensancha los centros de las<br />

mitades del bagel hasta 4.5 cm, usando un<br />

cuchillo. Unta mantequilla en cada lado de<br />

las dos mitades. Calienta una sartén de 30<br />

cm a fuego medio. Coloca las mitades de<br />

bagel en la sartén, con los cortes hacia<br />

arriba. Cocina hasta que estén doradas,<br />

de 2 a 3 minutos.<br />

2. Da la vuelta a las mitades del bagel. Baja<br />

el fuego; estrella los huevos y coloca cada<br />

uno sobre cada centro del bagel. Vierte 1<br />

cucharada de agua cerca de la orilla de la<br />

sartén y de inmediato tápala. Cocina hasta<br />

que las claras de huevo estén listas y las<br />

yemas estén cocidas al gusto, de 5 a 8<br />

minutos. Transfiere las mitades del bagel<br />

a un plato, sazona con sal y pimienta.<br />

Sirve con salmón ahumado y caviar<br />

o aguacate rebanado.<br />

–NIKI RUSS FEDERMAN Y JOSH RUSS TUPPER,<br />

RUSS & DAUGHTERS<br />

58<br />

MAYO <strong>2020</strong>


Shrub de betabel y limón<br />

TIEMPO TOTAL: 20 MIN, MÁS 2 DÍAS DE<br />

REFRIGERACIÓN. PORCIONES: 14 COCTELES<br />

El shrub es un vinagre endulzado y saborizado<br />

que funciona como una refrescante<br />

base para hacer cocteles. Empieza a prepararlo<br />

días antes de servir; este tiempo es<br />

necesario para que los ingredientes se<br />

mezclen uno con otro. El jugo fresco de<br />

betabel es clave, cómpralo en un juice bar<br />

o hazlo en casa, pues el embotellado no<br />

tendrá el mismo sabor o color vibrante.<br />

Mézclalo con un poco de vodka y un poco<br />

de agua mineral, después sirve este coctel<br />

bajo en alcohol: es perfecto para el brunch.<br />

shrub<br />

5 tazas de agua, divididas<br />

½ taza de azúcar granulara<br />

2 cucharadas de vinagre blanco<br />

destilado<br />

1 taza de jugo de betabel fresco<br />

1 taza de jugo de limón fresco<br />

coctel<br />

2 cucharadas de vodka (opcional)<br />

Agua mineral fría<br />

1 rodaja de limón, para decorar<br />

1. Prepara el shrub: mezcla 1 taza de agua, el<br />

azúcar y el vinagre en un tazón grande hasta<br />

que el azúcar se disuelva. Agrega el jugo de<br />

betabel, el jugo de limón y las 4 tazas restantes<br />

de agua. Cubre y refrigera durante<br />

al menos 2 días o hasta por 1 semana.<br />

2. Haz un coctel. Combina ½ taza de<br />

shrub de de betabel y vodka, si deseas utilizarlo,<br />

en un vaso mezclador. Llena el vaso<br />

con hielo y mezcla hasta que esté helado.<br />

Cuela sobre una copa de vino. Añade un<br />

poco de agua mineral y decora con la<br />

rodaja de limón. – NIKI RUSS FEDERMAN<br />

Y JOSH RUSS TUPPER, RUSS & DAUGHTERS<br />

PREPARA CON ANTELACIÓN El shrub<br />

puede cubrirse y guardarse en<br />

refrigeración hasta por 1 semana.<br />

Enfrijoladas<br />

TIEMPO TOTAL: 2 H 10 MIN, MÁS 8 H PARA<br />

SUMERGIR, PORCIONES: 4<br />

Un puré cremoso y lleno de sabor empapa<br />

las tortillas en este sustancioso plato vegetariano.<br />

Estas instrucciones sugieren cocinar<br />

los frijoles desde cero, porque el líquido<br />

de cocción es necesario para lograr la textura<br />

adecuada de la salsa. Mezcla los frijoles<br />

restantes en sopas, o sírvelos como<br />

guarnición de las hojas rellenas de picadillo.<br />

Las hojas de aguacate tienen un propósito<br />

similar al de las hojas de laurel, brindando<br />

un sabor profundo antes de ser retiradas<br />

antes de servir, dejando un ligero sabor a<br />

hinojo. Si no<br />

puedes conseguir las hojas de aguacate,<br />

usa semillas de hinojo.<br />

frijoles negros<br />

450 g de frijoles negros<br />

5 tazas de agua, y adicional para<br />

sumergir los frijoles<br />

1 cebolla pequeña, pelada<br />

3 dientes de ajo medianos,<br />

machacados<br />

2 hojas secas de aguacate o 1 /8<br />

cucharadita de orégano seco<br />

1 cucharada de sal de mar fina<br />

enfrijoladas<br />

1 chile de árbol, desvenado y tostado<br />

½ taza más 1 cucharada de aceite<br />

vegetal, dividido<br />

12 tortillas de maíz blanco<br />

Sal de mar fina, al gusto<br />

230 g de queso Oaxaca o mozzarella de<br />

baja humedad, deshebrado<br />

60 g de queso fresco, desmoronado<br />

(aproximadamente ½ taza)<br />

Cebolla blanca finamente rebanada<br />

Perejil picado, para decorar<br />

1. Haz los frijoles negros. Coloca los frijoles<br />

en una olla grande; agrega el agua para<br />

cubrirlos por al menos 5 cm. Sumérgelos<br />

por al menos 8 horas o durante toda la<br />

noche. Escúrrelos.<br />

2. Combina los frijoles escurridos con 5<br />

tazas de agua, la cebolla, el ajo y las hojas<br />

de aguacate en una olla grande; hierve a<br />

fuego medio. Cubre y reduce el fuego a<br />

medio-bajo; cocina a fuego lento,<br />

moviendo ocasionalmente, hasta que los<br />

frijoles estén tiernos y cremosos, de 1 hora<br />

y 30 minutos a 2 horas. Retira del fuego.<br />

Retira y tira la cebolla, el ajo y las hojas<br />

de aguacate.<br />

3. Haz las enfrijoladas. Combina el chile, 2<br />

tazas de frijoles cocidos, y 2 ½ tazas del<br />

líquido de cocción de los frijoles en una<br />

licuadora. (Reserva las 4 tazas de frijoles<br />

restantes y el líquido restante de cocción<br />

para otro uso.) Procesa la mezcla hasta que<br />

esté uniforme, por 30 segundos. Reserva.<br />

4. Calienta ½ taza de aceite en una sartén<br />

grande a fuego medio. Fríe las tortillas, 1 a<br />

la vez, hasta que estén suaves y flexibles,<br />

de 10 a 20 segundos por lado; transfiere a<br />

una charola para hornear forrada con toallas<br />

de papel para absorber el aceite.<br />

Retira.<br />

5. Calienta la cucharada restante de aceite<br />

en una sartén mediana a fuego medio.<br />

Agrega la mezcla de frijoles; cocina,<br />

moviendo constantemente, hasta que<br />

hierva a fuego lento, de 4 a 5 minutos. (La<br />

consistencia debe ser similar a la de la<br />

crema para batir; agrega un poco de agua o<br />

líquido de cocción adicional, ¼ de taza a la<br />

vez, para aligerarlo). Retira del calor; sazona<br />

con sal al gusto.<br />

6. Coloca 1 tortilla en la mezcla de frijoles<br />

caliente en la sartén; deja que se suavicen,<br />

por unos 15 minutos por lado. Coloca la<br />

tortilla con un plato de servicio, y dóblala a<br />

la mitad. Repite el proceso con las 11 tortillas<br />

restantes, colocando 3 tortillas por<br />

cada uno de los 4 platos.<br />

7. Vierte la mezcla de frijoles sobre las tortillas<br />

(aproximadamente 1 /3 de taza en cada<br />

uno). Espolvorea con queso Oaxaca y<br />

queso fresco; decora con cebolla rebanada<br />

y perejil picado. –DE OAXACA: HOME COO-<br />

KING FROM THE HEART OF MEXICO POR BRICIA<br />

LÓPEZ Y LA FAMILIA LÓPEZ, CON JAVIER<br />

CABRAL, GUELAGUETZA, LOS ÁNGELES<br />

PREPARA CON ANTELACIÓN. Los frijoles<br />

negros pueden cocerse hasta 4 días antes;<br />

el puré de frijoles puede hacerse hasta 2<br />

días antes. Cubre y refrigera ambos;<br />

aligera el puré de frijoles con un poco de<br />

agua si hace falta. Las tortillas pueden<br />

freírse hasta 4 horas antes.<br />

NOTA. Las hojas de aguacate y el epazote<br />

pueden comprarse en el mercado<br />

o por Internet.<br />

CERVEZA. Una lager mexicana ligera<br />

en malta: Modelo Especial.<br />

MAYO <strong>2020</strong> 59


UN RELATO DE LA FRONTERA MÉXICO-ESTADOS UNIDOS<br />

CON LA CHEF QUE LA CONOCE MEJOR: CLAUDETTE ZEPEDA<br />

POR<br />

JORDANA ROTHMAN<br />

RETRATO DE<br />

TAWNI BANNISTER<br />

FOTO GASTRONÓMICA<br />

GREG DUPREE


SON ALTOS Y RETORCIDOS, CALIENTES AL<br />

TACTO, EMPACADOS EN PAPEL DE ESTRAZA<br />

OSCURECIDO POR EL ACEITE QUE BRILLAN<br />

CONFORME SUS CRISTALES DE AZÚCAR<br />

ATRAPAN Y REFRACTAN LA LUZ DE LA TARDE.<br />

LA CHEF CLAUDETTE ZEPEDA le pasa un billete al vendedor por la<br />

ventanilla del conductor y saca un churro, liberando una pequeña<br />

y celestial nube de canela en polvo. “Los churros de la frontera<br />

son los mejores”, dice, “hay algo en su textura”.<br />

Estamos en Tijuana, México, a pocos metros de la puerta<br />

de entrada de San Ysidro, uno de los cruces fronterizos más<br />

concurridos del mundo. Para cientos de miles de los 4.9 millones<br />

de personas que viven en la región de San Diego-Tijuana en<br />

ambos países, atravesar la frontera México-Estados Unidos –ya<br />

sea por trabajo, para visitar a la familia, para hacer un mandado–<br />

es parte del ritmo diario de la vida. Pero es julio de 2019, y la<br />

atmósfera se siente tensa al conocerse que, después de ser<br />

aprehendidos, al menos seis niños murieron bajo la custodia de<br />

la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos<br />

en los recientes 10 meses. Encrispando aún más los nervios, sólo<br />

un día antes, un ciudadano norteamericano de 18 años había<br />

sido liberado del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas<br />

en Texas después de 23 días de detención injustificada. Había<br />

perdido 13 kilos y no se había bañado en más de tres semanas.<br />

El miedo en el aire es tangible entre los vendedores callejeros<br />

que se entretejen en las largas filas de tráfico. Pero para Zepeda, el<br />

cruce es también algo familiar, una realidad cotidiana de la vida<br />

desde que tiene memoria. “En preparatoria nos íbamos de pinta<br />

y veníamos a TJ. Era un tope, no una frontera”, cuenta la chef.<br />

Zepeda nació en San Diego –su madre cruzó la frontera dos<br />

semanas antes de dar a luz para asegurarse de que su hija tenga<br />

la ciudadanía estadounidense. Días después de su nacimiento,<br />

las dos volvieron a Tijuana, donde Zepeda pasó su infancia,<br />

aprendiendo inglés con Plaza Sésamo y viendo repeticiones de<br />

The French Chef, de Julia Child. La familia se mudó a San Diego<br />

en los 90, y Zepeda aún vive ahí, pero su relación con ambas<br />

ciudades es fluida. Hace viajes semanales a Tijuana para comprar<br />

quesos mexicanos imposibles de enontrar en Estados Unidos,<br />

botellitas de chamoy de jamaica para preparar vinagretas y cajas<br />

de callo de hacha, las vieiras dulces y firmes con forma de media<br />

luna originarias del Mar de Cortés, que se esponjan tanto en el<br />

aguachile que pereciera que van a explotar, salpicando riachuelos<br />

de tomatillo y limón.<br />

La acompaño en uno de estos viajes, y nos dirigimos hacia el<br />

sur por la interestatal 5 hasta que llegamos al Mercado Hidalgo:<br />

el corazón de Tijuana, según Zepeda. Antes de ir de compras<br />

paramos en Tacos Fritos, un puesto legendario de birria en<br />

una orilla del mercado, donde vemos a un taquero sumergir<br />

tortillas en aceite de chiles color carmesí, asarlas en una parrila<br />

y doblarlas alrededor de carne deshebrada. Comemos tacos<br />

de birria y sorbemos caldo mientras Zepeda me lleva por la<br />

aventura que fue para ella entrar al mundo de la cocina. Trabajó<br />

en San Diego, para Javier Plascencia, en Bracero, y para Gavin<br />

Kaysen en El Bizcocho. Compitió en Top Chef México, lo que<br />

describe como una de las experiencias más significativas de su<br />

vida; tiene el sentimiento opuesto sobre su participación en la<br />

temporada 15 de la versión estadounidense: “Fui la mexicana<br />

enojada”, dice al respecto, aunque la exposición le ayudó a abrir<br />

su propio restaurante, El Jardín, en Liberty Station, en San Diego.<br />

(Dejó el proyecto en el verano de 2019. Se espera que su próximo<br />

restaurante abra el próximo invierno.)<br />

En el recuento, Zepeda aparece como una madre tierra,<br />

intentando curar el trauma generacional. “Como mujeres,<br />

llevamos en el vientre la carga, el dolor y el sufrimiento de<br />

nuestros ancestros”, cuenta, hablando de su experiencia como<br />

madre soltera de dos niños antes de cumplir 21 años, o recordando<br />

a su abuela, que sabía sólo dos frases en inglés: “bien” y “también<br />

te quiero”. Pero unos segundos después, cambia de velociad: “Hay<br />

ciertos puentes que me vale madres quemar”, revela, acordándose<br />

de un compañero de trabajo tóxico en particular, o de las veces<br />

en que ha sido minimizada, olvidada. Uno empieza a entender<br />

que el don de Zepeda está en habitar los dos roles: el de madre<br />

y el de militante, el de la empatía y la fortaleza, el de protectora<br />

y el de vengadora. Es parte de su encanto.<br />

En el Mercado Hidalgo nos adentramos en sus 80 puestos,<br />

pausando para probar tamarindo fresco o para comprar piñones,<br />

queso Ramonetti y chiltepines, y<br />

para ver cómo los vendedores<br />

libran y pierden su infinita batalla<br />

en contra de las abejas que se<br />

apiñan en los conos de piloncillo.<br />

Los churros de azúcar y<br />

canela de Zepeda rinden<br />

homenaje a los sabores<br />

de Tijuana.<br />

FOOD STYLING: CHELSEA ZIMMER; PROP STYLING: THOM DRIVER; PEINADO Y MAQUIILLAJE: ELIZABETH ROOT.<br />

62<br />

MAYO <strong>2020</strong>


MAYO <strong>2020</strong> 63


64<br />

MAYO <strong>2020</strong>


“LOS CHILAQUILES SON<br />

UNO DE LOS PLATOS QUE<br />

HAGO EXACTAMENTE COMO LO<br />

HACÍAMOS CUANDO ERA NIÑA.<br />

LOS TOTOPOS TIENEN QUE ESTAR<br />

EXTRA CRUJIENTES.”<br />

–CLAUDETTE ZEPEDA<br />

Picamos un poco de las pilas cristalinas de dátiles,<br />

piñas y mangos caramelizados y buscamos<br />

nopales y chayotes. Lo empacamos todo en la<br />

cajuela y nos adentramos en TJ.<br />

Que la ensalada César haya sido creada no en<br />

Italia sino en un restaurante de hotel en Tijuana,<br />

en los años 20, es un dato curioso razonablemente<br />

documentado, así que nos detuvimos en el lugar<br />

de su creación, en Avenida Revolución, a rendirle<br />

tributo. Se prepara a pie de mesa, con la yema, la<br />

salsa Worcestershire y la mostaza Grey Poupon<br />

–esto es importante, asegura Zepeda– y largas<br />

piezas de lechuga romana. Después de comer<br />

en el Hotel Caesars, vemos desde el coche un<br />

bar llamado Adelita. “Adelita es el nombre de<br />

las soldados que participaron en la Revolución<br />

Mexicana”, me cuenta. Es una historia de orgullo<br />

sobre mujeres valientes, cuyas historias viven en<br />

muchos corridos, las baladas folclóricas mexicanas. “Sin embargo,<br />

en Tijuana”, aclara, “Adelita es un burdel”.<br />

Exaltar y también reconciliar el rol espiritual y el carácter<br />

de la mujer mexicana están en el centro del trabajo de Zepeda.<br />

Antes de salir del proyecto de El Jardín, el restaurante llevaba ese<br />

mensaje en cada detalle –el menú hacía guiños a las antecesoras<br />

de Zepeda, los guardianes literales y figurados y los ministros de<br />

la cultura mexicana; los textiles tejidos por mujeres artesanas<br />

de Oaxaca; los baños abastecidos con tampones de la marca<br />

Cora, una compañía que ofrece productos gratuitos y educación<br />

reproductiva para mujeres de países en desarrollo.<br />

“Las mujeres son la magia que hace que México gire. Son la<br />

fuente de poder”, me dice Zepeda en Erizo, una cevichería en el<br />

barrio de Chapultepec. Comemos aguachile de callo de hacha<br />

–llamado así por la forma de sus conchas– y tomamos un jugoso<br />

Pet Mex de Bichi, de Tecate, el epicentro mexicano del vino<br />

natural. La compañía pertenece<br />

izquierda: los chilaquiles<br />

rojos de Zepeda. arriba:<br />

Zepeda en Tacos El Gordo,<br />

en San Diego.<br />

a Jair Téllez, uno de los chefs más<br />

notorios del Valle de Guadalupe,<br />

quien lo dirige de la mano de su<br />

madre y hermano. Pero, asegura<br />

Zepeda, también está Natalia Badan, “la Alice Waters de la región”,<br />

hija de inmigrantes europeos que han cultivado vides en el<br />

Valle de Guadalupe desde hace décadas y pionera en la mejor<br />

administración del terreno en la región. Y así sucede con Zepeda:<br />

detrás de cada narrativa, en la punta de su lengua está una mujer.<br />

Salimos de la ciudad, de vuelta a la frontera, hacia esos churros,<br />

jugándonosla con una fila corta de tráfico sólo para darnos cuenta<br />

de que nos lleva a dar una vuelta y nos deja exactamente en el<br />

centro. Volvemos a intentarlo, corriendo a lo largo de Paseo de los<br />

Héroes, pasando monumentos del general Ignacio Zaragoza, de<br />

Cuauhtémoc, el último emperador azteca, y de Abraham Lincoln.<br />

(Lincoln fue gran amigo de México y apoyó la política progresista<br />

de Benito Juárez.)<br />

Pero Zepeda no se detiene por ninguno. Su favorito está una<br />

avenida después, en Paseo del Centenario: la Diana Cazadora,<br />

diosa de la caza, protectora de madres e hijos. Es puro músculo<br />

y pelo largo, con el arco inclinado y la aljaba llena. Está lista para<br />

dejar su flecha volar.<br />

MAYO <strong>2020</strong> 65


“LOS TACOS DE BIRRIA ME RECUERDAN A<br />

MI INFANCIA. ME ACUERDO DE MI MAMÁ<br />

PREPARÁNDOLA TODO EL DÍA Y DE TENER<br />

QUE ESPERAR HASTA EL DÍA SIGUIENTE<br />

PARA PROBARLA.” – CLAUDETTE ZEPEDA<br />

Zepeda (receta a la derecha) pero también<br />

es un excelente marinado para hacer fajitas.<br />

Cuando compres los chiles secos, elige<br />

aquellos que se doblan con facilidad y no se<br />

rompen. Tostar los chiles secos antes de<br />

hervirlos revive su sabor y ayuda a infusionarlos<br />

aún más en el adobo final. Cuando los<br />

hiervas, coloca los pedazos de cebolla arriba<br />

para mantener los chiles sumergidos.<br />

TACOS DE BIRRIA<br />

TIEMPO ACTIVO: 35 MIN. TIEMPO TOTAL: 8 H<br />

55 MIN. PORCIONES: 16 TACOS<br />

Las tortillas se sumergen en un caldo lleno<br />

de sabor, se calientan a la plancha y después<br />

se doblan con un relleno de carne<br />

cocida y servida con caldo para sumergir o<br />

para probar como acompañamiento de los<br />

tacos. Usa dos tortillas por taco si son<br />

recién hechas, y sólo una si son tortillas<br />

empacadas, más resistentes. La combinación<br />

de dos cortes de carne –diezmillo y<br />

tira de costilla– crea el mejor balance de<br />

sabor y textura en el platillo. Si tienes<br />

tiempo, prepárala un día antes de servirla:<br />

el sabor de la carne cocida se vuelve más<br />

delicioso mientras más reposa.<br />

900 g de diezmillo de res sin hueso<br />

(de unos 6 cm de ancho)<br />

900 g de tira de costilla<br />

2 cucharadas más ¼ cucharadita<br />

de sal kosher, divididas, y adicional<br />

al gusto<br />

Adobo (receta a continuación)<br />

8 tazas de agua<br />

1 taza de cebolla blanca finamente<br />

picada, enjuagada<br />

1<br />

/3 taza de cilantro fresco picado<br />

Aceite de canola, para engrasar<br />

32 tortillas de maíz recién hechas o 16<br />

tortillas de maíz empacadas<br />

Gajos de limón, para servir<br />

1. Espolvorea 2 cucharadas de sal sobre el<br />

diezmillo y la costilla. Combina el diezmillo,<br />

la costilla y el adobo en un tazón de material<br />

no reactivo (acero inoxidable, cerámica,<br />

vidrio o metal esmaltado); mueve para que<br />

se cubran bien. Cubre y refrigera por al<br />

menos 4 horas o hasta por 24 horas.<br />

2. Precalienta el horno a 150 ºC. Transfiere<br />

la mezcla de adobo a una olla resistente al<br />

horno (de 9 l); agrega 8 tazas de agua.<br />

Hierve a fuego lento, sin cubrir, moviendo<br />

ocasionalmente. Tápala y colócala en el<br />

horno precalentado. Hornea hasta que<br />

la carne esté tierna y se deshebre<br />

fácilmente, por 4 horas.<br />

3. Retira el diezmillo y la costilla del caldo<br />

de cocción y transfiérelos a un tazón<br />

grande; cubre con papel alumino para<br />

mantenerlos calientes. Regresa el caldo a<br />

la estufa y calienta a fuego medio. Cocina,<br />

sin cubrir, retirando la grasa conforme se<br />

requiera, hasta que reduzca a 8 tazas, de<br />

15 a 20 minutos. Sazona el caldo con sal al<br />

gusto. Deshebra la carne y tira los huesos.<br />

Mezcla la carne con 1 ½ tazas del caldo.<br />

4. Mezcla la cebolla, el cilantro y el ¼ de<br />

cucharadita restante de sal en un tazón<br />

pequeño. Reserva.<br />

5. Calienta una plancha eléctrica antiadherente<br />

a 200 ºC o una sartén de hierro<br />

colado de 25 cm de diámetro a fuego<br />

medio-alto. Usando una toalla de papel<br />

sumergida ligeramente en aceite de<br />

canola, engrasa la plancha. Si usas tortillas<br />

recién hechas, acomoda una tortilla<br />

encima de la otra y usa pinzas para sumergirlas<br />

juntas en el caldo de adobo. (Si usas<br />

tortillas de paquete, sumerge 1 tortilla por<br />

taco.) Coloca las tortillas una sobre la otra<br />

en la plancha; coloca encima ¼ de taza de<br />

carne. Repite con todas las torres de tortillas<br />

que quepan cómodamente en la<br />

parrilla. Cocina hasta que la tortilla esté<br />

ligeramente dorada y crujiente, de 1 a 2<br />

minutos. Dobla los tacos a la mitad, presionando<br />

suavemente con una espátula.<br />

Transfiere a un platón de servicio. Repite<br />

el proceso con el aceite, el caldo de adobo,<br />

las tortillas y la carne restantes.<br />

6. Sirve los tacos junto a la mezcla de<br />

cebolla y cilantro, los gajos de limón y el<br />

caldo de adobo restante, para sumergir<br />

o sorber.<br />

prepara con antelación. El adobo puede<br />

prepararse hasta 3 días antes. La carne<br />

puede cocerse hasta 2 días antes y recalentarse<br />

en el caldo antes de deshebrarse<br />

y de reducir el caldo.<br />

vino. Un rosé espumoso y ligero: NV Iron<br />

Horse Brut Rosé.<br />

ADOBO<br />

TIEMPO ACTIVO: 20 MIN. TIEMPO TOTAL: 1 H<br />

25 MIN. PORCIONES: 5 TAZAS APORX.<br />

Este adobo da sabor a los tacos de birria de<br />

6 chiles guajillo secos, sin tallo<br />

y desvenados<br />

4 chiles ancho secos, sin tallo<br />

y desvenados<br />

4 chiles cascabel secos, sin tallo<br />

y desvenados<br />

1 cebolla blanca grande, cortada<br />

en gajos de 2.5 cm<br />

10 dientes de ajo<br />

2 cucharadas de jengibre pelado,<br />

picado<br />

8 tazas de agua, divididas<br />

2 cucharadas de vinagre blanco<br />

1 cucharada de sal kosher<br />

1 ½ cucharaditas de pimienta negra<br />

1 ½ cucharaditas de orégano<br />

deshidratado<br />

½ cucharadita de comino molido<br />

½ cucharadita de canela molida<br />

¼ cucharadita de clavo de olor molido<br />

1 ramitas de tomillo<br />

1 hojas de laurel deshidratadas<br />

1. Calienta una sartén de hierro colado<br />

grande a fuego medio. Agrega los chiles a<br />

la sartén y cocínalos, moviéndolos ocasionalmente,<br />

hasta que suelten su aroma, de<br />

4 a 5 minutos. Transfiérelos a una sartén<br />

grande; agrega la cebolla, el ajo, el jengibre<br />

y 6 tazas de agua. Hierve a fuego medioalto.<br />

Cocina, sin tapar, moviendo ocasionalmente,<br />

hasta que los chiles se suavicen,<br />

por unos 8 minutos. Escurre la mezcla de<br />

chiles y tira el líquido de cocción.<br />

2. Combina la mezcla de chiles, el vinagre,<br />

la sal, la pimienta negra, el orégano, el<br />

comino, la canela, el clavo de olor, el tomillo,<br />

las hojas de laurel y las 2 tazas restantes<br />

de agua en una licuadora. Tápala bien y<br />

retira la pieza del centro de la tapa para<br />

permitir que escape el vapor. Coloca una<br />

toalla limpia en la abertura. Procesa hasta<br />

obtener una mezcla uniforme, por unos 45<br />

segundos. Déjalo enfriar hasta que<br />

alcance la temperatura ambiente durante<br />

una hora. Cubre y refrigera hasta que<br />

estés listo para usarlo.<br />

prepara con antelación. El adobo puede<br />

refrigerarse en un contenedor hermético<br />

hasta por 3 días.


MAYO <strong>2020</strong> 67


“NO LE DI GRAN<br />

IMPORTANCIA<br />

A LA ENSALADA<br />

CÉSAR HASTA QUE<br />

TRABAJÉ CON JAVIER<br />

PLASCENCIA, EN<br />

BRACERO. P A S A R<br />

POR LA ‘ACADEMIA<br />

CÉSAR’ FUE UNA<br />

GRAN LECCIÓN DE<br />

VIDA PARA MÍ: FUE<br />

UNA PRÁCTICA DE<br />

DISCIPLINA<br />

Y PERFECCIÓN.”<br />

– CLAUDETTE ZEPEDA<br />

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68<br />

MAYO <strong>2020</strong>


ENSALADA CÉSAR<br />

ESTILO BAJA<br />

TIEMPO TOTAL: 15 MIN. PORCIONES: 4<br />

Un topping de crujientes chicharrones de<br />

cerdo y queso Cotija de la mejor calidad<br />

son los secretos de Zepeda para lograr su<br />

versión de esta clásica ensalada. Si no<br />

encuentras Cotija maduro –salado y lleno<br />

de umami parecido al del parmesano–,<br />

deja secar el Cotija de mejor calidad que<br />

encuentres en una rejilla del refrigerador<br />

hasta que se endurezca, de 1 a 2 días,<br />

antes de rallarlo.<br />

2 dientes de ajo medianos, finamente<br />

picados<br />

4 filetes de anchoa en aceite (como los<br />

Ortiz), finamente picados<br />

1 yema de huevo pasteurizadao<br />

1 cucharada de mostaza de Dijon<br />

1 cucharadita de pimienta negra<br />

½ cucharadita de sal kosher<br />

2 cucharadas de jugo de limón fresco<br />

1 cucharada de salsa Worcerstershire<br />

(salsa inglesa)<br />

¾ taza de aceite de semilla de uva<br />

30 g de queso Cotija maduro de alta<br />

calidad (como Don Froylan Queso<br />

Cotija Añejo) finamente rallado<br />

(alrededor de 2 /3 taza), dividido<br />

4 corazones de lechuga romana,<br />

partidos a la mitad a lo largo<br />

30 g de chicharones fritos troceados<br />

1. Bate el ajo, las anchoas, la yema de huevo,<br />

la mostaza de Dijon, la pimienta y la sal en<br />

un tazón mediano. Agrega el jugo de limón y<br />

la salsa inglesa. Batiendo constantemente,<br />

gradualmente agrega el aceite hasta que<br />

todo el aceite se haya incorporado y el<br />

aderezo sea espeso y cremoso. Agrega<br />

dos cucharadas del Cotija rallado.<br />

2. Divide las mitades de corazón<br />

de lechuga en 4 platos y coloca encima de<br />

cada uno ¼ de taza de aderezo, ½ taza de<br />

chicharrones troceados y 2 cucharadas<br />

de Cotija rallado.<br />

prepara con antelación. El aderezo puede<br />

hacerse hasta 3 días antes y guardarse en<br />

el refrigerador. Si lo requiere, aligéralo con<br />

algunas cucharaditas de agua antes<br />

de servir.<br />

vino. Una mezcla de blancos californianos:<br />

Donkey & Goat Eliza 2017.<br />

AGUACHILE VERDE<br />

DE COCO Y VIEIRAS<br />

Foto en pág. 68<br />

TIEMPO ACTIVO: 25 MIN. TIEMPO TOTAL:<br />

35 MIN. PORCIONES: 4<br />

El coco fresco y joven tiene una pulpa tierna<br />

que se separa fácilmente de la cáscara; si<br />

no tienes acceso a ellos, sustitúyelos por<br />

agua de coco enlatada o de botella y pulpa<br />

de coco fresca o congelada. Cuando se cortan<br />

y exprimen, las limas dedo sueltan<br />

esferas cítricas que explotan como caviar;<br />

puede sustituirse con gajos de limón.<br />

1 coco fresco (de alrededor de 1 kg) o<br />

¼ taza de pulpa fresca o congelada<br />

de coco y 1 taza de agua de coco<br />

1 cebolla morada pequeña<br />

2 pepinos persas medianos<br />

1 taza de tomatillos frescos troceados<br />

½ taza de jugo de limón fresco<br />

¼ taza de cilantro fresco picado<br />

1 chile serrano mediano, sin tallo,<br />

desvenado y picado<br />

1<br />

/8 cucharadita de chiltepín, chile de<br />

árbol seco desmoronado o chile<br />

tailandés fresco picado<br />

½ cucharadita de sal de mar gruesa, y<br />

adicional al gusto<br />

540 g de vieiras ecológicas (alrededor de<br />

5 vieiras), cortadas en círculos de .5<br />

cm de diámetro<br />

540 g de camarones crudos medianos<br />

pelados, desvenados y partidos a<br />

la mitad a lo largo<br />

Limas dedo o gajos de limón, para<br />

decorar<br />

Totopos o tostadas, para servir<br />

1. Usando un cuchillo de carnicero, retira la<br />

parte puntiaguda del coco. Escúrrelo<br />

reservando 1 taza de agua de coco. Con<br />

precaución, rompe el coco en trozos<br />

grandes. Usando tu mano o una cuchara,<br />

separa la pulpa del coco de la cáscara; tira<br />

la cáscara. Corta la pulpa en tiras de 3.8 x<br />

.3 cm hasta obtener una taza. Retira.<br />

Reserva la pulpa de coco restante para<br />

otro uso.<br />

2. Pica la cebolla hasta obtener 1 cucharada.<br />

Rebana finamente la cebolla restante<br />

hasta obtener ½ taza. Reserva. Reserva la<br />

Los vinos favoritos de Claudette<br />

CALIFORNIA<br />

MÉXICO<br />

POPULIS LICORNE<br />

MECHANTE SPARKLING<br />

ROSÉ 2016 (USD $23)<br />

Los viticultores y propietarios<br />

de Populis, Diego<br />

Roig y Shaunt Oungoulian,<br />

buscan viñedos orgánicos<br />

en todo el norte de<br />

California para hacer<br />

sus exuberantes vinos<br />

de cero intervención. El<br />

nombresignifica ‘unicornio<br />

perverso’. Es un vibrante<br />

rosé espumoso hecho de<br />

la varietal carignan.<br />

MARTHA STOUMEN<br />

WINES POST<br />

FLIRTATION RED 2018<br />

(USD $26)<br />

El estilo de viticultivo<br />

orientado hacia lo natural<br />

de Stoumen, viene de su<br />

experiencia trabajando en<br />

viñedos en la Toscana. Su<br />

mezcla en partes iguales<br />

de zinfandel y carignan es<br />

California puro, lleno de<br />

flor de jamaica, granada<br />

y notas de chaparral.<br />

GONZALEZ WINE CO.<br />

CEDAR LANE VINEYARD<br />

SYRAH-GRENACHE 2016<br />

(USD $30)<br />

Cristina González, la nieta<br />

de campesinos mexicanos<br />

inmigrantes, obtiene uvas<br />

de California, Oregon y<br />

Washington para hacer<br />

sus vinos. Este tinto<br />

apimentado color granate<br />

viene del condado<br />

de Monterey.<br />

MONTE XANIC<br />

GRENACHE ROSÉ 2017<br />

(USD $19)<br />

Establecida a finales de los<br />

80, Monte Xanic es una de<br />

las bodegas más antiguas<br />

en la región del Valle de<br />

Guadalupe. Fresco y seco,<br />

este rosé de grenache<br />

sin guarda en barricas<br />

sugiere moras rojas y<br />

pimienta rosa.<br />

BICHI FLAMA ROJA 2017<br />

(USD $29)<br />

Jair Téllez, aclamado chef<br />

del restaurante Laja, y su<br />

hermano Noel, comenzaron<br />

este proyecto vinícola<br />

en el Valle de Guadalupe<br />

en 2014, enfocándose en<br />

métodos tradicionales y<br />

mínima intervención. Esta<br />

vívida mezcla de tintos<br />

de cuerpo medio viene de<br />

los viñedos de su casa en<br />

Tecate, Baja California.<br />

MAYO <strong>2020</strong> 69


cebolla sobrante para otro uso. Rebana<br />

finamente un pepino a lo ancho hasta<br />

obtener ¼ de taza. Reserva. Pica el<br />

pepino restante y el segundo pepino.<br />

3. Combina el pepino picado, la cebolla<br />

picada, la taza de agua de coco reservada,<br />

los tomatillos, el jugo de limón, el cilantro,<br />

el serrano picado, el chile chiltepín y la sal<br />

en una licuadora. Procesa hasta obtener<br />

una mezcla uniforme, por 20 segundos.<br />

Vierte la mezcla a través de un colador fino<br />

sobre un tazón; retira los sólidos.<br />

4. Combina las vieiras, los camarones, y<br />

la mezcla de los tomates en un tazón<br />

mediano. Deja que la mezcla repose a temperatura<br />

ambiente hasta que las vieiras<br />

estén casi opacas, por unos 10 minutos.<br />

Divide la mezcla de mariscos entre los platos<br />

de servicio (alrededor de 2 /3 de taza por<br />

tazón). Sazona con sal al gusto. Coloca<br />

encima de cada uno con los trozos de<br />

coco, rebanadas de cebolla y rebanadas de<br />

pepino. Decora con la pulpa de lima dedo o<br />

con los gajos de limón y sirve con totopos<br />

o tostadas.<br />

prepara con antelación. El aguachile<br />

puede prepararse hasta el paso 3 con<br />

hasta 4 horas de anticipación; cubre<br />

y refrigera los componentes<br />

individualmente.<br />

vino. Un blanco ligero y cítrico: Birichino<br />

Malvasia Bianca 2018.<br />

nota. Puedes encontrar los chiltepines<br />

en el mercado o en amazon.com.<br />

TACOS DE FIDEOS SECOS<br />

TIEMPO ACTIVO: 40 MIN. TIEMPO TOTAL: 1 H<br />

40 MIN. RINDE: 14 TACOS<br />

Estos tacos a la plancha están rellenos<br />

de fideos secos cocinados en una salsa de<br />

tomate con un poco de chiles. Si quieres<br />

Aguachile verde de coco y<br />

vieiras (receta en pág. 67).<br />

preparar una versión vegetariana, omite<br />

el chorizo y sustitúyelo por hongos o<br />

tofu firme desmoronado.<br />

base de chile<br />

2 chiles guajillo secos, sin tallo<br />

y desvenados<br />

1 chile chipotle seco, sin tallo<br />

y desvenado<br />

1 ½ taza de agua hirviendo<br />

1 ¼ taza de salsa de tomate<br />

¼ taza de hojas y tallos de<br />

cilantro fresco<br />

2 cucharadas de sal kosher<br />

relleno de fideo<br />

1 cucharada de aceite de semilla<br />

de uva<br />

225 g de chorizo, sin su revestimiento<br />

225 g de fideo sin cocer<br />

2 cucharaditas de ajo finamente<br />

picado<br />

1 hoja de laurel fresca o deshidratada<br />

2 cucharadas de cilantro fresco<br />

picado, y adicional para decorar<br />

85 g de queso Monterrey Jack rallado<br />

(alrededor de ¾ taza)<br />

14 tortillas de maíz recién hechas<br />

1 taza de crema<br />

1 aguacate grande (de alrededor<br />

de 225 g), rebanado<br />

150 g de queso fresco, desmoronado<br />

(alrededor de 1 ¼ taza)<br />

1. Haz la base de chiles. Calienta una sartén<br />

grande de hierro colado (de 30 cm de<br />

diámetro) a fuego medio. Agrega los chiles;<br />

cocínalos, dándoles vuelta ocasionalmente,<br />

hasta que suelten su aroma y estén<br />

ligeramente tostados, por 4 minutos.<br />

Transfiere los chiles a la licuadora y agrega<br />

1 ½ tazas de agua hirviendo. Deja la mezcla<br />

reposar por 30 minutos. Agrega la<br />

salsa de tomate, el cilantro y la sal. Procesa<br />

hasta que la mezcla esté uniforme,<br />

por unos 20 segundos. Reserva.<br />

2. Haz el relleno de fideos. Calienta<br />

aceite en una sartén grande de hierro<br />

colado a fuego medio-alto. Agrega el chorizo<br />

y cocina, moviendo ocasionalmente,<br />

hasta que se desmorone y se dore, por<br />

unos 6 minutos. Agrega el fideo, el ajo, la<br />

hoja de laurel y el chile de árbol. Cocina,<br />

moviendo ocasionalmente, hasta que el<br />

fideo esté ligeramente tostado y se esté<br />

volviendo opaco, de 4 a 5 minutos. Agrega<br />

la base de chiles. Reduce el fuego, cubre y<br />

cocina hasta que los fideos estén tiernos y<br />

el líquido se absorba por completo, de 15 a<br />

70<br />

MAYO <strong>2020</strong>


20 minutos, moviéndolos sólo una vez, pasados<br />

8 minutos. Retira y tira la hoja de laurel y<br />

el chile de árbol. Transfiere la mezcla a un<br />

tazón mediano y añade el cilantro. Déjalo<br />

enfriar por 20 minutos. Agrega el queso<br />

Monterrey Jack.<br />

3. Coloca encima de cada tortilla 1 /3 taza del<br />

relleno de fideos, doblando cada tortilla a la<br />

mitad, presionando suavemente. Calienta<br />

una sartén grande de hierro colado o una<br />

plancha a fuego medio-alto. Trabajando en<br />

tandas, tuesta los tacos hasta que la tortilla<br />

esté ligeramente tatemada y el relleno esté<br />

caliente, de 2 a 3 minutos por lado. Agrega a<br />

los tacos la crema, las rebanadas de<br />

aguacate y el queso fresco desmoronado.<br />

Decora con cilantro.<br />

Sirve inmediatamente.<br />

prepara con antelación. La base<br />

de chiles puede hacerse hasta 3<br />

días antes.<br />

vino. Un syrah especiado y apimentado:<br />

Ramey Sonoma Coast 2014.<br />

nota. Usa tortillas frescas, es<br />

más difícil que se rompan cuando<br />

las estás dorando.<br />

“ESTOS TACOS ME<br />

RECUERDAN A MI ABUELA<br />

Y A LA CREATIVIDAD<br />

DE LOS MEXICANOS:<br />

HACER ALGO DELICIOSO<br />

DE LAS SOBRAS.<br />

CONVERTIR UN PLATO EN<br />

OTRO COMPLETAMENTE<br />

DIFERENTE.”<br />

–CLAUDETTE ZEPEDA<br />

MAYO <strong>2020</strong> 71


AGÜITAS<br />

UN ENSAYO EN IMÁGENES SOBRE LA<br />

SABIDURÍA BOTÁNICA QUE HABITA EN<br />

NUESTRAS ALACENAS. UNA MEZCLA<br />

DE AGUA, HIERBAS Y FRUTAS QUE SON<br />

REMEDIOS CASEROS PARA ALIVIAR EL<br />

CUERPO Y EL ALMA. por ESPACIO CRUDO<br />

72<br />

MAYO <strong>2020</strong>


Abuelas y mamás son<br />

las primeras médicas a las<br />

que acudimos en días fríos<br />

o cuando algún dolor nos<br />

atormenta. Las cocinas de nuestras<br />

casas son una farmacia natural donde<br />

se almacenan años de conocimientos.<br />

Agüitas, o Botanical Wisdom, nace en<br />

honor al conocimiento ancestral de las<br />

matronas de las familias y su ritual<br />

donde agua, hierbas y frutas son<br />

meticulosamente mezcladas para<br />

curar todas nuestras dolencias, incluso<br />

un corazón roto. Los visuales trasmiten<br />

nostalgia al situar las preparaciones en<br />

un escenario atemporal donde la luz<br />

juega un papel importante. Sus rayos<br />

atraviesan una capa espesa de plantas<br />

antes de llegar a este espacio austero<br />

que gana complejidad con las sombras.<br />

izquierda: para el malestar general: agua<br />

de jengibre, naranja y hierbabuena.<br />

derecha: para eliminar toxinas: agua<br />

de flor de jamaica, carambolo y menta.<br />

MAYO <strong>2020</strong> 73


izquierda: para<br />

la gripa, agua<br />

de panela con<br />

limón y sauco.<br />

derecha: para<br />

los cólicos,<br />

agua de canela<br />

y caléndula.<br />

74<br />

MAYO <strong>2020</strong>


MAYO <strong>2020</strong> 75


izquierda: para<br />

descansar<br />

como Dios<br />

manda, agua<br />

de manzana<br />

verde y manzanilla.<br />

derecha:<br />

para perder<br />

peso, agua de<br />

piña y apio.<br />

76<br />

MAYO <strong>2020</strong>


ESPACIO CRUDO<br />

Estudio de diseño y fotografía<br />

compuesto por un fotógrafo, una<br />

directora de arte y una food stylist,<br />

enfocado en la conceptualización<br />

y el desarrollo de contenido<br />

gastronómico a través de<br />

fotos y videos.<br />

MAYO <strong>2020</strong> 77


COCINA PARA TODOS<br />

ARSENAL<br />

DE RECETAS<br />

Házte a un lado,<br />

California Roll:<br />

los wappa<br />

bowls emplean<br />

técnicas japonesas<br />

para resaltar<br />

los sabores.<br />

78<br />

MAYO <strong>2020</strong><br />

producido por MARY-FRANCES HECK<br />

foto VICTOR PROTASIO


CALIFORNIA BOWLS<br />

food styling: Chelsea Zimmer; prop styling: Audrey Davis. ilustraciones: rachel carney.<br />

AUNQUE EL CLÁSICO CALIFORNIA ROLL de<br />

sushi se mantiene como un eterno<br />

popular, a Takuya Umeda, el chef y<br />

propietario de Umeda, en Los Ángeles, le<br />

encanta un formato diferenta para<br />

presentar la clásica combinación de arroz,<br />

alga, aguacate y cangrejo: el wappa meshi,<br />

un platillo que se originó ya sea en la<br />

prefectura Niigata o Fukushima. (El arroz<br />

de mayor calidad en Japón pertenece a<br />

Fukushima.) En la versión de Umeda, el<br />

arroz de origen californiano se cocina<br />

primero en una arrocera con dashi, sake,<br />

sal de mar y agua de jengibre, después se<br />

le agrega cangrejo y aguacate, antes de<br />

cocinarlo al vapor en una cesta de cedro<br />

que infusiona al arroz con el aroma de la<br />

madera (ver abajo). Decorado con hueva,<br />

nori, pepino y semillas de ajonjolí, es un<br />

plato que celebra los ingredientes californianos<br />

a través de la lente japonesa del<br />

washoku, una forma tradicional de<br />

cocinar que enfatiza la armonía y el<br />

paso de las temporadas. Umeda pasó dos<br />

décadas aprendiendo del icónico chef<br />

Nobu Matsuhisa, y aunque su receta –al<br />

mismo tiempo un rollo de sushi deconstruido<br />

y un bowl de granos moderno– requiere<br />

porciones y técnica perfectas, es<br />

realmente reconfortante, delicioso y muy<br />

fácil de hacer en casa. –MARY-FRANCES HECK<br />

Las wappa son canastas<br />

delgadas de cedro o ciprés<br />

que se usan para la<br />

preparación de alimentos<br />

en Japón, como este platillo<br />

de arroz al vapor. También se<br />

usan trdicionalmente como<br />

cajas bento.<br />

El arroz tamanishiki, cultivado<br />

en el Valle de Sacramento, es<br />

un arroz blanco de grano<br />

corto, altamente pulido,<br />

conocido por su profundidad<br />

de sabor y su textura firme<br />

pero esponjosa. (Encuéntralo<br />

en supermercados asiáticos<br />

o en amazon.com.)<br />

Los donabe son ollas de barro<br />

japonesas que cocinan el arroz<br />

de forma uniforme, lo que da<br />

como resultado granos de<br />

textura perfecta.<br />

1 2<br />

ENJUAGA EL ARROZ<br />

Mueve el arroz con la mano en varias tandas<br />

de agua fría hasta que el agua salga limpia.<br />

Escúrrelo.<br />

3<br />

COCINA LOS GRANOS DE FORMA UNIFORME<br />

Hornea el arroz para que termine de cocerse,<br />

depués déjalo reposar para asegurarte de<br />

obtener la mejor textura.<br />

5<br />

ARMA LOS WAPPA BOWLS<br />

Divide el arroz en canastas para wappa;<br />

coloca por encima el cangrejo y el aguacate,<br />

cubre y cocina al vapor para calentarlo.<br />

SAZONA EL ARROZ<br />

Agrega líquido al arroz en un donabe u olla<br />

mediana, hierve en la estufa.<br />

4<br />

PREPARA LOS TOPPINGS<br />

Mientras el arroz reposa, corta los toppings<br />

en piezas precisas –y bonitas–.<br />

6<br />

DECORA Y SIRVE<br />

Coloca encima la hueva, los pepinos,<br />

el nori y las semillas de ajonjolí.<br />

Sirve inmediatamente.<br />

MAYO <strong>2020</strong> 79


Wappa bowl California<br />

TIEMPO ACTIVO: 20 MIN. TIEMPO TOTAL:<br />

45 MIN. PORCIONES: 2<br />

Las canastas wappa infusionan el arroz con<br />

un delicioso aroma; si preparas este platillo<br />

sin ellas, sirve el arroz en bowls tibios.<br />

Mientras que usar un donabe (ver recuadro<br />

anterior) es la forma tradicional de cocinar el<br />

arroz de estilo japonés, una olla con tapa o<br />

una arrocera pueden usarse en su lugar.<br />

2 tazas de agua fría, divididas<br />

1 pieza de kombu de 12 x 8 cm<br />

¼ taza de katsuobushi (hojuelas secas<br />

de bonito)<br />

¼ taza de jengibre pelado picado más<br />

1 cucharadita de jengibre pelado<br />

rallado, divididas<br />

2 tazas de arroz tamanishiki u otro<br />

arroz para sushi sin cocer, enjuagado<br />

½ taza de sake<br />

2 ¼ cucharaditas de sal kosher<br />

2<br />

/3 taza azúcar moreno<br />

½ taza salsa de soya<br />

1 diente de ajo rallado<br />

2 tazas de carne de pata de cangrejo<br />

de nieve al vapor<br />

1 aguacate, finamente rebanado<br />

1 pepino persa o inglés, sin semillas<br />

y en cubos<br />

Hueva de eperlano o tobiko, nori<br />

finamente rebanado y semillas de<br />

ajonjolí tostadas y machacadas,<br />

para servir<br />

1. Coloca 1 ½ tazas de agua fría y kombu en<br />

una olla pequeña; calienta a fuego alto hasta<br />

que empiece a evaporarse. Retira del fuego;<br />

espolvorea el katsuobushi sobre el caldo y<br />

déjalo remojar por 3 minutos. Cuela el dashi<br />

sobre un tazón. Retira los sólidos.<br />

2. Procesa la ½ taza de agua restante en el<br />

jengibre picado en una licuadora hasta que<br />

esté uniforme, durante 1 minuto. Vierte el<br />

agua de jengibre a través de un colador de<br />

red. Retira los sólidos.<br />

3. Precalienta el horno a 230 ºC. Combina el<br />

arroz enjuagado, 1 taza de dashi, el agua de<br />

jengibre, el sake y la sal en un donabe de 3<br />

litros o en una olla con tapa y cubre. Cocina<br />

a fuego lento durante 8 minutos, hasta que<br />

comience a hervir. Cocina, revisando el arroz<br />

frecuentemente, hasta que el líquido esté<br />

hirviendo uniformemente en toda la superficie,<br />

por unos 7 minutos. Inmediatamente<br />

coloca el donabe en el horno precalentado y<br />

hornea hasta que el arroz esté tierno, por<br />

unos 15 minutos. Retira del horno y déjalo<br />

reposar, cubierto, por 5 minutos.<br />

4. Mientras tanto, hierve en una olla pequeña<br />

el azúcar moreno, la salsa de soya, el ajo y el<br />

jengibre rallado a fuego medio-bajo. Hierve<br />

hasta que la salsa reduzca y espese con<br />

consistencia de jarabe, por 5 minutos.<br />

Déjala enfriar y reserva.<br />

5. Coloca ¼ parte del arroz cocido (alrededor<br />

de una taza) en cada una de las 4 canastas<br />

de cedro (wappa). Coloca encima<br />

el cangrejo y el aguacate. Trabajando con<br />

una canasta a la vez, colócala sobre el agua<br />

hirviendo; cúbrela y cocina hasta que el<br />

arroz y los toppings se hayan calentado, por<br />

unos 4 minutos. Retira del calor. (Alternativamente,<br />

divide el arroz entre los bowls<br />

calientes, y cubre con el cangrejo y el aguacate.)<br />

Coloca encima el pepino, la hueva, el<br />

nori y las semillas de ajonjolí, y sirve inmediatamente<br />

con el glaseado de soya dulce.<br />

–TAKUYA UMEDA, UMEDA.<br />

VINO. Un chardonnay de California cítrico y<br />

amelonado: Flowers Sonoma Coast 2016.<br />

80<br />

MAYO <strong>2020</strong>


INSPIRADO POR LOS CHEFS<br />

Cocina al estilo<br />

California: recetas<br />

sencillas de temporada<br />

de nuestros chefs<br />

favoritos del Golden State.<br />

food styling: Torie Cox; prop styling: Thom Driver.<br />

Ensalada de aguacate tatemado<br />

con mayonesa de cilantro<br />

TIEMPO ACTIVO: 30 MIN. TIEMPO TOTAL:<br />

40 MIN. PORCIONES: 4<br />

Sellar un aguacate maduro pero firme a las<br />

brasas lo hace extra cremoso con un toque<br />

carbonizado. Un platillo esencial en el menú<br />

de los chefs Christopher Kostow –ganador<br />

del premio Best New Chef de F&W, en 2009—<br />

y David Guilloty, en The Charter Oak, en St.<br />

Helena, es la sustanciosa pieza estrella de<br />

esta ensalada.<br />

1 ¼ tazas más dos cucharaditas de aceite<br />

de semilla de uva, divididas<br />

1 taza de hojas de cilantro fresco,<br />

con sus tallos<br />

2<br />

/3 taza de hojas de perejil fresco, con<br />

sus tallos<br />

1 yema de huevo pasteurizado, grande<br />

5 ½ cucharaditas de jugo de limón fresco,<br />

divididas<br />

¼ cucharadita de sal kosher, y adicional<br />

al gusto<br />

2 aguacates grandes, maduros y firmes,<br />

con cáscara, partidos a la mitad,<br />

sin hueso<br />

2 tazas de brotes verdes<br />

Sal gris, al gusto<br />

1. Procesa 1 taza de aceite de semilla de uva,<br />

cilantro y perejil en una licuadora hasta que<br />

se calienten, por 2 minutos. Forra un colador<br />

de red con una doble capa de estopilla<br />

húmeda. Vierte la mezcla de aceite a través<br />

de este colador sobre un tazón; tira los sólidos.<br />

Reserva el aceite de cilantro.<br />

2. Mezcla la yema de huevo y 1 ½ cucharaditas<br />

de jugo de limón en un tazón mediano.<br />

Batiendo constantemente, vierte con lentitud<br />

¼ taza de aceite de semilla de uva hasta<br />

que se integre por completo y la mezcla esté<br />

cremosa y ligeramente espesa. Batiendo<br />

constantemente, vierte con lentitud ¼ taza<br />

de aceite de cilantro hasta que se incorpore<br />

bien y la mezcla esté espesa y cremosa.<br />

Añade la sal kosher.<br />

3. Calienta una sartén de hierro colado<br />

grande a fuego medio-alto. Haz cortes de .6<br />

cm en un patrón cruzado en la parte interior<br />

de las mitades de aguacate; barnízalas<br />

uniformemente con las 2 cucharaditas de<br />

aceite de semilla de uva restante. Colócalas<br />

en la sartén, con la parte interior hacia abajo,<br />

y séllalas hasta que se carbonicen, por 4<br />

minutos. Retíralos de la sartén y déjalos<br />

enfriar por completo, durante 15 minutos.<br />

Corta cada aguacate a la mitad a lo largo.<br />

Con cuidado pélalos y tira la cáscara.<br />

4. Coloca ½ taza de brotes verdes en cada<br />

uno de los 4 platos de servicio. Sobre cada<br />

uno coloca 2 cuartos de aguacate. Vierte las<br />

4 cucharaditas de jugo de limón restantes y<br />

espolvoréalas con sal gris. Coloca pequeñas<br />

cucharadas (alrededor de 1 ½ por plato) de<br />

la mayonesa de cilantro en los brotes alrededor<br />

del aguacate. Vierte 2 cucharaditas<br />

de aceite de cilantro en cada plato.<br />

Sirve inmediatamente.<br />

PREPARA CON ANTELACIÓN. El aceite y la<br />

mayonesa de cilantro pueden hacerse hasta<br />

3 días antes y reservarse en contenedores<br />

herméticos dentro del refrigerador.<br />

VINO. Un rosé fresco con base de grenache:<br />

Halter Ranch Paso Robles 2018.<br />

MAYO <strong>2020</strong> 81<br />

photography by VICTOR PROTASIO.


Salmón real a la parrilla<br />

con salsa de limón Meyer<br />

TIEMPO ACTIVO: 20 MIN. PORCIONES: 6<br />

Una salsa fresca y salada de limón Meyer<br />

saca el sabor a mantequilla de este<br />

salmón real del Pacífico de la chef<br />

Suzanne Goin, del restaurante Caldo<br />

Verde, en Los Ángeles. Es lo suficientemente<br />

carnoso para resistir la parrilla y<br />

se vuelve más tierno mientras se cocina.<br />

1 cucharadita de ralladura de limón<br />

Meyer más ½ taza de gajos de<br />

limón Meyer picados, divididos<br />

¼ taza taza de echalote finamente<br />

picado<br />

2 ½ cucharaditas de sal kosher,<br />

divididas<br />

½ cucharadita de azúcar granulado<br />

1<br />

/3 tazas más 2 cucharadas de aceite<br />

de oliva extra virgen, divididas<br />

¼ taza de alcaparras escurridas,<br />

picadas<br />

¼ taza de aceitunas Castelvetrano<br />

sin hueso, picadas<br />

3 cucharadas de perejil fresco<br />

picado, divididas<br />

1<br />

/2 cucharadita de pimienta de Aleppo<br />

o ¼ cucharadita de peperoncino<br />

Una pizca de pimienta de Cayena<br />

6 filetes de salmón real (140 g c/u)<br />

2 cucharaditas de tomillo fresco<br />

¼ cucharadita de pimienta negra<br />

1. Combina los trozos de limón, el echalote,<br />

1 cucharada de sal y el azúcar en<br />

un tazón mediano. Con cuidado mezcla 1 /3<br />

taza de aceite de oliva; añade las alcaparras,<br />

las aceitunas, 2 cucharadas de perejil,<br />

la pimienta de Aleppo y la pimienta<br />

de cayena. Reserva.<br />

2. Precalienta la parrilla a temperatura<br />

alta (250 ºC). Barniza el salmón con las<br />

dos cucharadas restantes de aceite de<br />

oliva; sazona con tomillo, pimienta, ralladura<br />

de limón, la cucharada restante de<br />

perejil y las 1 ½ cucharaditas restantes<br />

de sal. Cocina el salmón a la parrilla con<br />

la piel hacia abajo, cubierto, hasta que la<br />

piel esté dorada y crujiente, por unos 3<br />

minutos. Dale la vuelta al pescado y cocínalo,<br />

sin cubrir, hasta el punto deseado<br />

de cocción, de 2 a 3 minutos para<br />

término medio.<br />

3. Transfiere los filetes a platones de<br />

servicio y cúbrelos con la salsa de limón.<br />

VINO. Un Carneros Chardonnay<br />

alimonado.<br />

82<br />

MAYO <strong>2020</strong>


Papas crujientes con salsa<br />

de aguacate<br />

TIEMPO ACTIVO: 25 MIN. TIEMPO TOTAL: 1 H<br />

10 MIN. PORCIONES: 4<br />

En Broken Spanish, en Los Ángeles, el chef<br />

Ray Garcia sirve papas crujientes e hirvientes<br />

con una fresca salsa de aguacate cremosa.<br />

En casa, asar las papas machacadas<br />

en un horno caliente logra un resultado<br />

dorado sin necesidad de freírlas. Esta mezcla<br />

con jalapeños encurtidos y queso Cotija es<br />

una sustanciosa guarnición que te dejará<br />

con ganas de más.<br />

700 g de papas fingerling<br />

6 cucharadas de aceite de oliva,<br />

divididas<br />

3 ½ cucharaditas de sal kosher, divididas<br />

1<br />

/1 taza de cebolla amarilla picada<br />

1<br />

/3 taza de agua fría, más la adicional<br />

que se requiera<br />

1 chile serrano mediano sin tallo,<br />

desvenado (si se desea) y picado<br />

¾ taza de hojas de cilantro fresco, y<br />

sus tallos, dividida<br />

2 cucharadas de jugo de limón fresco<br />

1 aguacate pequeño sin hueso<br />

½ taza de rebanadas de jalapeños en<br />

escabeche más 1 ½ cucharadas<br />

del escabeche<br />

60 g de queso Cotija, rallado fino<br />

(alrededor de ½ taza)<br />

1. Precalienta el horno a 175 ºC. Mezcla las<br />

papas, 2 cucharadas de aceite y 1 cucharadita<br />

de sal en una charola con bordes altos<br />

y acomoda las papas en una sola capa.<br />

Hornea en un horno precalentado hasta<br />

que estén tiernas, de 30 a 40 minutos.<br />

Retira del horno.<br />

2. Aumenta la temperatura del horno a 260<br />

ºC. Usando el fondo de una taza medidora<br />

vacía, aplasta las papas hasta que tengan<br />

una altura de 1.2 cm (asegúrate que las<br />

papas machacadas permanezcan en una<br />

sola capa). Vierte 3 cucharadas de aceite;<br />

espolvoréalas con 1 cucharadita de sal.<br />

Hornéalas a 260 ºC hasta que su parte inferior<br />

esté dorada, de 15 a 20 minutos. Dales<br />

la vuelta, vierte la cucharada de aceite restante<br />

sobre ellas y espolvoréalas con ¼<br />

cucharadita de sal. Hornea hasta que las<br />

orillas estén doradas y crujientes, de 8 a<br />

12 minutos.<br />

3. Mientras las papas se hornean, procesa<br />

la cebolla, 1 /3 taza de agua, el chile serrano,<br />

3 cucharadas de cilantro, el jugo de limón y<br />

la 1 ¼ cucharadita restante de sal en una<br />

licuadora hasta que la mezcla esté uniforme,<br />

por unos 20 segundos. Agrega el<br />

aguacate y procesa hasta que la mezcla<br />

sea uniforme, por unos 10 segundos. Si<br />

ésta lo necesita, agrega agua fría y licúa, 1<br />

cucharada a la vez, para alcanzar una consistencia<br />

espesa pero que pueda vertirse.<br />

4. Transfiere las papas calientes a un tazón<br />

grande; agrega las rebanadas de jalapeño y<br />

el escabeche, el queso Cotija y ½ taza de<br />

cilantro; mezcla para combinar bien.<br />

Coloca la salsa de aguacate en 4 tazones<br />

pequeños; sirve en cada uno la mezcla<br />

de papas y espolvorea la cucharada restante<br />

de cilantro. Sirve inmediatamente.<br />

PREPARA CON ANTELACIÓN. Las papas<br />

asadas pueden refrigerarse hasta por 3 días.<br />

MAYO <strong>2020</strong> 83


Halibut curado en aderezo<br />

de chile y limón<br />

TIEMPO ACTIVO: 25 MIN. TIEMPO TOTAL: 35<br />

MIN. PORCIONES: 4<br />

En su restaurante Nyum Bai, en Oakland, Nite<br />

Yun, ganadora del premio Best New Chef<br />

2019 de F&W, sirve comida callejera clásica de<br />

Camboya como este fresco halibut en hojas<br />

de lechuga. Los chiles rojos tailandeses, a<br />

diferencia de los verdes, dan al marinado de<br />

limón –que hace las veces de aderezo– un<br />

toque frutal sutil y un picor más directo. Si el<br />

pescado aderezado te parece demasiado<br />

ligero, un toque de aceite de oliva justo antes<br />

de servirlo le dará suntuosidad y balance.<br />

¼ taza de jugo de limón fresco<br />

1 ½ cucharadas de galangal pelado y<br />

rebanado finamente o 2 cucharadas<br />

de jengibre pelado y finamente<br />

rebanado<br />

3 dientes de ajo medianos machacados<br />

1 cucharadita de sal kosher, dividida, y<br />

adicional al gusto<br />

230 g de filetes de pescado blanco firme<br />

sin piel (como halibut o huachinango),<br />

cortados en piezas de .5 x 2.5 cm, o<br />

camarones pochados en cubos<br />

1 a 2 cucharaditas de azúcar granulado<br />

½ taza de pimiento rojo finamente<br />

rebanado, cortado en piezas de 2.5<br />

cm de largo<br />

1 echalote mediano, partido a la mitad a<br />

lo largo y finamente rebanado a lo<br />

ancho en medias lunas<br />

1 pieza de 2.5 cm de zacate limón<br />

partida a la mitad a lo largo y<br />

finamente rebanada a lo ancho<br />

en medias lunas<br />

1 chile tailandés rojo finamente picado<br />

¼ taza de cacahuates tostados picados<br />

1 cucharadas de cilantro fresco picado<br />

60 g de germinado fresco (alrededor de<br />

¾ taza) (opcional)<br />

1 a 2 cucharaditas de aceite de oliva extra<br />

virgen (opcional)<br />

Hojas de lechuga francesa, para servir<br />

1. Mezcla el jugo de limón, el galangal, el ajo<br />

y ¼ cucharadita de sal en un tazón mediano.<br />

Agrega el pescado y remuévelo con cuidado<br />

para que se cubra de la mezcla. Cubre y<br />

refrigera hasta que el pescado esté opaco,<br />

durante 20 minutos, moviéndolo una sola<br />

vez después de los 10 minutos.<br />

2. Escurre el pescado, reservando el<br />

marinado. Retira el galangal y el ajo; reserva<br />

el pescado. Transfiere el marinado a una<br />

pequeña sartén; agrega 1 cucharadita de<br />

azúcar y las ¾ cucharaditas de sal restantes.<br />

Hierve a fuego lento. Mueve constantemente<br />

hasta que se disuelva el azúcar. Retira del<br />

fuego. Prueba la mezcla y, si lo deseas,<br />

agrega hasta una cucharadita más de azúcar.<br />

(El aderezo debe ser fresco, dulce y<br />

salado. Si sabe demasiado ácido, agrega<br />

azúcar para suavizarlo.) Deja que el aderezo<br />

se enfríe por completo durante 20 minutos.<br />

3. Mientras tanto, mezcla en un tazón el<br />

pimiento rojo, el echalote, el zacate limón, el<br />

chile, los cacahuates, el cilantro y, si lo<br />

deseas, el germinado. Agrega el pescado y el<br />

aderezo al tazón y mézclalo bien para combinar.<br />

Sazona con sal al gusto. Vierte de 1 a 2<br />

cucharaditas de aceite de oliva, si lo deseas,<br />

y sirve sobre las hojas de lechuga.<br />

VINO Un sauvignon blanc ligeramente herbal<br />

y atoronjado.<br />

84<br />

MAYO <strong>2020</strong>


Omelet de Boursin<br />

TIEMPO ACTIVO: 20 MIN. PORCIONES: 1<br />

En este omelet –el silencioso hit del menú<br />

del chef Michael Tusk en Verjus, en San<br />

Francisco– el queso untable de ajo y hierbas<br />

se derrite sobre las cebollas caramelizadas<br />

y los huevos tiernos. Aunque es un<br />

delicioso y sustancioso desayuno, sabe<br />

mejor junto a una crujiente baguette, una<br />

ensalada fresca y una copa de vino espumoso<br />

californiano.<br />

2 cucharadas más 1 cucharadita de<br />

mantequilla sin sal, divididas<br />

1 taza de cebolla amarilla finamente<br />

picada<br />

1 cucharadas de agua<br />

¼ cucharadita de sal kosher, dividida,<br />

y adicional al gusto<br />

2 huevos grandes<br />

1 cucharadita de crema para batir<br />

1 cucharada de queso untable de ajo<br />

y hierbas (como el Boursin), a<br />

temperatura ambiente<br />

½ cucharadita de cebollín finamente<br />

picado<br />

1. Calienta 1 cucharada de mantequilla en<br />

una sartén antiadherente de 20 cm de<br />

diámetro a fuego medio-alto. Agrega la<br />

cebolla y acomódala en una sola capa.<br />

Déjala cocer, sin tocarla, hasta que las<br />

cebollas comiencen a dorarse, por 4<br />

minutos. Agrega 2 cucharadas de agua y<br />

1<br />

/8 cucharadita de sal; cocina, moviendo<br />

constantemente, hasta que las cebollas<br />

tengan un color dorado y estén suaves,<br />

de 8 a 10 minutos. Transfiere las cebollas<br />

a un tazón. Limpia la sartén con una<br />

toalla de papel.<br />

2. Usando un tenedor, mezcla los huevos,<br />

la crema y la 1 /8 cucharadita restante de<br />

sal en un tazón mediano hasta que se<br />

combinen bien, con cuidado de no<br />

incorporar demasiado aire.<br />

3. Calienta la misma sartén a fuego<br />

medio-alto. Agrega 1 cucharada de mantequilla<br />

(debe derretirse casi de inmediato);<br />

muévela en círculos para que el<br />

fondo de la sartén se cubra uniformemente.<br />

Apenas la mantequilla deje de burbujear<br />

pero antes de que se dore, agrega<br />

la mezcla de huevo toda a la vez. Cocina,<br />

moviendo constantemente con una espátula<br />

de plástico resistente al calor, hasta<br />

que la mezcla espese ligeramente y se<br />

convierta en huevos revueltos muy tiernos,<br />

de 10 a 20 segundos. Con cuidado,<br />

agita la sartén para formar una sola capa<br />

de huevo en el fondo de la sartén.<br />

4. Reduce el fuego. Desmorona el<br />

queso sobre el huevo. Espolvorea 1<br />

cucharada de cebollas caramelizadas<br />

en una línea recta, separando la primera<br />

parte de un tercio del omelet de las<br />

otras dos. (Reserva la cebolla sobrante<br />

para otro uso.) Cocina el omelet, sin<br />

tocarlo, hasta que el relleno se caliente<br />

y el queso se derrita, por 1 minuto.<br />

Usando una espátula y comenzando<br />

con el tercio superior, dobla el omelet<br />

cuidadosamente, solo cubriendo el<br />

relleno. Comenzando en la parte superior<br />

del lado doblado, enrolla el omelet<br />

entero. Apaga el fuego y déjalo reposar<br />

por 10 segundos. Transfiere a un plato<br />

tibio, y unta el omelet con la cucharadita<br />

restante de mantequilla. Espolvorea con<br />

el cebollín y agrega sal al gusto. Sirve<br />

inmediatamente.<br />

PREPARA CON ANTELACIÓN. La cebolla<br />

restante puede guardarse y refrigerarse<br />

hasta por 5 días.<br />

VINO. Un espumoso californiano.<br />

MAYO <strong>2020</strong> 85


INSPIRADO POR LOS CHEFS<br />

Home runs: nuevas versiones<br />

de los favoritos de la semana,<br />

inspiradas por chefs preferidos.<br />

Un upgrade al menú de la semana.<br />

por Kelsey Youngman<br />

Ensalada de lechuga y camarón<br />

con pan molido sazonado<br />

y aderezo de salsa picante<br />

TIEMPO TOTAL: 20 MIN. Porciones: 4<br />

Siguiendo el ejemplo de la chef Nina<br />

Compton, de Bywater American Bistro,<br />

en Nueva Orleans, agregamos un aderezo<br />

de salsa picante Crystal a esta mezcla<br />

de ensalada de lechuga y po’boy.<br />

Tostar el pan molido en aceite infusionado<br />

con sazonador Old Bay, resalta el<br />

sabor a camarón.<br />

1 cucharada de aceite vegetal<br />

20 camarones crudos grandes, pelados<br />

y desvenados (aprox. 500 g)<br />

½ cucharadita de sal kosher<br />

1<br />

/8 cucharadita de pimienta negra<br />

1 ¼ tazas de pan molido fresco<br />

½ cucharadita de sazonador Old Bay<br />

½ taza de mayonesa<br />

2 cucharadas de leche entera<br />

4 cucharadas de salsa picante<br />

(como Crystal)<br />

1 lechuga iceberg de 500 g, partida<br />

en cuartos<br />

Alcaparras, para decorar<br />

1. Calienta el aceite en una sartén antiadherente<br />

de 30 cm a fuego medio-alto.<br />

Agrega los camarones; cocínalos hasta<br />

que estén rosas y bien cocidos, de 1 a 2<br />

minutos por lado. Espolvorea con sal y<br />

pimienta. Retira de la sartén y reserva.<br />

2. Agrega el pan molido y el sazonador<br />

Old Bay a la sartén; cocina a fuego medio,<br />

moviendo ocasionalmente, hasta que<br />

estén dorados, por unos 4 minutos.<br />

Retira del fuego y reserva.<br />

3. Mezcla la mayonesa, la leche y la salsa<br />

picante en un tazón pequeño hasta<br />

obtener una mezcla uniforme.<br />

4. Acomoda los cuartos de lechuga en<br />

un platón. Coloca encima los camarones,<br />

el aderezo y el pan molido. Decora<br />

con alcaparras.<br />

PREPARA CON ANTELACIÓN. Prepara la<br />

receta hasta el paso 3 hasta 2 días antes.<br />

Guarda cuartos de lechuga, los<br />

camarones y el aderezo en contenedores<br />

separados en el refrigerador. Guarda el<br />

pan molido en un contenedor hermético a<br />

temperatura ambiente. Monta la ensalada<br />

completa justo antes de servir.<br />

VINO. Un sauvignon blanc californiano:<br />

Duckhorn Vineyards Napa Valley 2018.<br />

food styling: Torie Cox; prop styling: Claire Spollen.<br />

86<br />

MAYO <strong>2020</strong><br />

foto GREG DUPREE


Ensalada de calabaza asada<br />

con sumac y aderezo italiano<br />

TIEMPO ACTIVO: 10 MIN. TIEMPO TOTAL: 50<br />

MIN. PORCIONES: 4<br />

Pétalos de cebolla morada, calabaza bellota<br />

y pimientos encurtidos mezclados con un<br />

cremoso aderezo italiano conforman una<br />

guarnición sustanciosa pero ligera. Inspirada<br />

por las papas dulces crujientes del chef<br />

Scott Tacinelli en Don Angie, en Nueva York,<br />

agregamos sumac para darle a la ensalada<br />

un toque alimonado.<br />

1 calabaza bellota de 680 g, partida a la<br />

mitad longitudinalmente, sin semillas,<br />

cortada en gajos de 2.5 cm<br />

3 cebollas moradas pequeñas, cortadas<br />

en gajos de 2.5 cm<br />

7 cucharadas de aceite de oliva extravirgen,<br />

divididas<br />

1 ½ cucharaditas de sal kosher, divididas<br />

½ cucharadita de pimienta negra,<br />

dividida<br />

9 guindillas o pimientos encurtidos<br />

de frasco<br />

2 cucharadas de yogurt natural de<br />

leche entera<br />

2 cucharadas de vinagre de vino tinto<br />

1 cucharada de miel<br />

½ cucharadita de orégano seco<br />

Queso Parmigiano-Reggiano recién<br />

rallado y sumac molido, para decorar<br />

1. Precalienta el horno a 220 ºC. Combina la<br />

calabaza, las cebollas, 1 cucharada de<br />

aceite, 1 cucharadita de sal y ¼ cucharadita<br />

de pimienta negra en una charola para<br />

hornear; colócalas en una sola capa. Asa las<br />

verduras en el horno precalentado por 25<br />

minutos. Da la vuelta a la calabaza y las<br />

cebollas; agrega las guindillas. Continúa<br />

asando hasta que la calabaza y las cebollas<br />

comiencen a dorarse, por 15 minutos.<br />

2. Mientras tanto, mezcla el yogurt,<br />

el vinagre, la miel, el orégano, las 6 cucharadas<br />

restantes de aceite, la ½ cucharadita<br />

restante de sal y el ¼ de cucharadita<br />

restante de pimienta negra en un<br />

tazón pequeño.<br />

3. Transfiere la mezcla de calabaza asada a<br />

un platón de servicio y adereza. Decora con<br />

el queso rallado y el sumac.<br />

PREPARA CON ANTELACIÓN. La mezcla de<br />

las calabazas puede permanecer a temperatura<br />

ambiente hasta por 3 horas. Sirve a<br />

temperatura ambiente o recalienta en un<br />

horno a 220 ºC hasta que se calienten,<br />

por 5 minutos. La mezcla de yogurt<br />

puede prepararse hasta 2 días antes y<br />

guardarse en un contenedor hermético<br />

en el refrigerador.


Salchicha e hinojo cocidos con<br />

especias tostadas<br />

TIEMPO ACTIVO: 25 MIN. TIEMPO TOTAL: 55<br />

MIN. PORCIONES: 4<br />

Con granos enteros de pimienta rosa y<br />

semillas de hinojo, este sencillo estofado se<br />

perfuma ligeramente de los sabores frescos<br />

de primavera inspirados por el hinojo cocido<br />

de Red Hook Tavern en Brooklyn, de la chef<br />

Allison Plummer. Usa una salchicha fresca y<br />

especiada para dar juego al cremoso puré de<br />

garbanzo y al hinojo dulce.<br />

¼ taza de aceite de oliva extra-virgen,<br />

dividido<br />

6 salchichas italianas dulces,<br />

pinchadas con un tenedor<br />

2 bulbos de hinojo, cortados a la mitad<br />

longitudinalmente, cortados en gajos<br />

de 2.5 cm (reservar hojas)<br />

2 cucharadas de semillas de hinojo<br />

4 cucharaditas pimienta rosa en grano<br />

2 tazas de caldo de pollo o caldo de<br />

pollo bajo en sodio<br />

¼ cucharadita de sal kosher<br />

1 taza de hummus<br />

Ralladura de limón y gajos de limón,<br />

para decorar<br />

1. Calienta 2 cucharadas de aceite en una<br />

sartén recta de 35 cm a fuego medio-alto.<br />

Agrega las salchichas; cocínalas, dandóles<br />

vuelta ocasionalmente, hasta que estén<br />

doradas uniformemente, por unos 5 minutos.<br />

Transfiere las salchichas a un plato.<br />

Agrega los gajos de hinojo, con la parte<br />

interna hacia abajo, a la sartén; cocínalos<br />

hasta que estén dorados por ambos lados,<br />

por 2 minutos y medio por lado.<br />

Transfiérelos al plato de las salchichas.<br />

2. Agrega las semillas de hinojo, la pimienta<br />

en grano y las 2 cucharadas restantes de<br />

aceite a la sartén; cocina a fuego medioalto,<br />

moviendo constantemente, hasta que<br />

estén tostadas y fragantes, de 30 segundos<br />

a 1 minuto. Retira la mitad de la mezcla<br />

de especias de la sartén y reserva para<br />

decorar al final.<br />

3. Agrega el caldo a la sartén, moviendo y<br />

raspando con una espátula el fondo de la<br />

sartén para retirar lo quemado. Hierve a<br />

fuego medio. Devuelve las salchichas y los<br />

gajos de hinojo a la sartén; cubre y baja el<br />

fuego. Cocina hasta que las piezas de hinojo<br />

estén tiernas, por unos 30 minutos.<br />

Espolvorea con sal.<br />

4. Unta el hummus en un platón. Coloca<br />

encima las salchichas y los gajos de hinojo;<br />

Vierte la salsa de la sartén con una cuchara<br />

sobre el platillo. Decora con ralladura de<br />

limón, gajos de limón, las hojas de hinojo y<br />

la mezcla de especias apartada.<br />

VINO. Un tinto terroso mediterráneo.


Piccata de rape<br />

TIEMPO TOTAL: 30 MIN. PORCIONES: 4<br />

El rape, con su textura tierna y mullida parecida<br />

a la de la langosta, es lo suficientemente firme y<br />

dulce para enfrentarse a esta salsa de mantequilla<br />

alimonada, enriquecida con miso blanco.<br />

½ taza más 1 cucharada de mantequilla sin<br />

sal, dividida<br />

12 dientes de ajo finamente rebanados más<br />

2 dientes de ajo machacados, divididos<br />

1 taza de caldo de pollo sin sal<br />

¼ taza de miso blanco<br />

2 cucharadas de jugo de limón fresco más 1<br />

limón en rodajas delgadas<br />

½ taza de harina instantánea (como<br />

Wondra)<br />

¾ cucharadita de ajo granulado<br />

4 filetes de rape de 200 g<br />

1 cucharadita de sal kosher<br />

3 cucharadas de aceite de canola, divididas<br />

2 ramitas de tomillo, divididas<br />

14 alcaparrones completos o en mitades<br />

1 cucharada de alcaparras escurridas<br />

Hojas de perejil, para decorar<br />

1. Cocina ½ taza de mantequilla en una sartén<br />

mediana a fuego medio-alto, moviendo constantemente,<br />

hasta que se dore, por unos 5<br />

minutos. Agrega el ajo rebanado; cocina por<br />

1 minuto. Añade el caldo y el miso hasta que se<br />

combinen. Hierve; cocina hasta que reduzca a<br />

aproximadamente 1 taza, de 10 a 12 minutos.<br />

Transfiere a una licuadora; retira la pieza central<br />

de la tapa para permitir que salga el vapor.<br />

Coloca una toalla de cocina sobre la abertura.<br />

Procesa hasta obtener una mezcla uniforme,<br />

por 1 minuto. Agrega el jugo de limón y reserva.<br />

LOS MÁS DESEADOS<br />

Pescando sabor: una piccata marina<br />

de una muy querida chef bostoniana.<br />

RECETA DE<br />

ORFANO<br />

BOSTON,<br />

CHEF TIFFANI FAISON<br />

MIENTRAS PLANEABA EL MENÚ PARA ORFANO, la chef Tiffani<br />

Faison sabía que quería un platillo de rapo que pudiera<br />

ganarse su lugar en el alegre menú italoestadounidense.<br />

“Me encanta lo versátil del rape local”, cuenta Faison. Suntuoso<br />

y carnoso, este pescado de carne blanca, conocido<br />

localmente como ‘langosta de pobre’, hace frente a una<br />

ligera salsa de limón y alcaparrones que Faison enriquece<br />

con miso. “Agrega textura sin que la salsa se vuelva demasiado<br />

pesada, permitiendo que los cítricos resalten”. Para<br />

prepararlo en casa, sigue el ejemplo de Faison: primero<br />

mezcla unos martinis helados y sírvelos con una botana<br />

de aceitunas y pan de ajo tostado. La salsa se puede hacer<br />

por adelantado, así que apenas se acaben los cocteles, asa<br />

el pescado, termina la salsa, y la cena está servida. –MARY-<br />

FRANCES HECK<br />

2. Mezcla la harina y el ajo granulado en un<br />

plato. Espolvorea el pescado con sal; enharínalo<br />

en la mezcla de harina sazonada. Calienta 1<br />

cucharada de aceite en una sartén grande a<br />

fuego alto hasta que comience a humear.<br />

Agrega las rebanadas de limón y cocínalas<br />

hasta que comiencen a dorarse, durante 1<br />

minuto por lado. Limpia la sartén con una<br />

toalla de papel.<br />

3. Calienta 1 cucharada de aceite en la misma<br />

sartén a fuego medio-alto. Agrega 2 filetes;<br />

cocínalos hasta que estén dorados, de 4 a 5<br />

minutos por lado. Durante el último minuto de<br />

cocción, agrega 1 ½ cucharadas de mantequilla,<br />

1 diente de ajo y 1 ramita de tomillo a la sartén;<br />

con una cuchara baña el pescado con la mezcla.<br />

Tira el ajo y el tomillo; transfiere el pescado a un<br />

platón y manténlo caliente. Repite con el aceite,<br />

pescado, mantequilla, ajo machacado y tomillo<br />

restantes. Agrega los alcaparrones, las alcaparras<br />

y las rebanadas de limón a la sartén; mezcla<br />

hasta que se calienten, por 1 minuto. Para<br />

servir, vierte la salsa caliente en 4 platos; coloca<br />

encima el pescado. Agrega los alcaparrones,<br />

las alcaparras y el limón sobre cada filete.<br />

Decora con perejil.<br />

VINO. Un vibrante y cítrico chardonnay de<br />

Sonoma Coast: Chalk Hill 2017.


DESCORCHE<br />

90<br />

MAYO <strong>2020</strong>


EL<br />

NUEVO<br />

ARTE DEL<br />

SAKE<br />

Entre los productores<br />

de sake en Japón, una<br />

deliciosa revolución<br />

se avecina.<br />

p o r Betsy Andrews<br />

MAYO <strong>2020</strong> 91


ACABABA DE<br />

LLOVER EN<br />

LOS CAMPOS<br />

DE ARROZ,<br />

DORADOS<br />

POR EL<br />

INVIERNO,<br />

de la llanura de Kanto, en Japón, 160 kilómetros al<br />

norte de Tokio. Era justo después del Año Nuevo<br />

Lunar, un tiempo propicio para las ceremonias. Nos<br />

amontonamos bajo algunos paraguas mientras un<br />

sacerdote sintoísta recitaba frente a un santuario<br />

repleto de ofrendas: zanahorias, naranjas, galletas<br />

de arroz, un pescado entero. Pedía éxito en el futuro<br />

proyecto de Tentaka Brewery, que era sobre la producción<br />

de sake.<br />

De las 1 200 productoras de sake que hay en Japón,<br />

aproximadamente, Tentaka es una de las menos de<br />

cinco que produce sake certificado orgánico por la<br />

USDA, la Unión Europea y Japón. Munenori Ozaki,<br />

su presidente de tercera generación, pone gran atención<br />

al arroz, que se muele ahí mismo. Me enseñó la<br />

máquina, dentro de la cual una piedra que zumba<br />

limpia la proteína y la grasa de los granos de arroz,<br />

dejando perlas traslúcidas de almidón que luego<br />

serán lavadas, vaporizadas y fermentadas para hacer<br />

la pulpa que se prensa, se filtra y se mezcla para<br />

convertirse en sake.<br />

Recientemente, Ozaki había ayudado a introducir<br />

un nuevo arroz, el Yumesasara, creado para el<br />

clima y la tierra de la prefectura de Tochigi, donde<br />

su productora se encuentra en el delta de un río alimentado<br />

por un manantial del vecino Monte Nasu.<br />

Veintisiete de los productores de la región hicieron<br />

cada uno un sake con el arroz. Ozaki sirvió el suyo.<br />

Tenía un final exuberante y agridulce que recordaba<br />

a fresas con crema.<br />

arriba: el sake<br />

se clasifica en<br />

parte por qué<br />

tan pulido es el<br />

arroz. Para los<br />

sakes junmai,<br />

70% del grano<br />

permanece<br />

(abajo, a la<br />

izquierda); para<br />

los sakes<br />

daiginjo, sólo el<br />

50% (abajo, a la<br />

derecha). página<br />

anterior: un<br />

tempo en Ono,<br />

la ciudad donde<br />

se ubica<br />

Manaturu<br />

Brewery.<br />

FOTO: PRODUCTORA DE TENTAKA, PREFECTURA DE TOCHIGI;<br />

(PÁGINA ANTERIOR) PRODUCTORA MANATURU, PREFECTURA DE FUKUI.<br />

92<br />

MAYO <strong>2020</strong>


FOTO: PRODUCTORA MIOYA, PREFECTURA DE ISHIKAWA<br />

Era completamente diferente al sake Tentaka que<br />

había probado en Nueva York. Esa botella sencilla,<br />

llamada Hawk in the Heavens, sabía a hongos shiitake<br />

y a nueces de castilla. La diferencia entre los dos<br />

me recordó a la variedad de cervezas que una<br />

cervecería artesanal podría producir para sus fanáticos<br />

aventureros.<br />

En efecto, me cuenta Ozaki, aunque la tendencia<br />

va hacia los sakes más ligeros y secos, los bebedores<br />

jóvenes en Japón se muestran receptivos hacia nuevos<br />

estilos. “Hay más diversidad en sakes que nunca”,<br />

asegura, “creo que seguirá expandiéndose”.<br />

Esas eran buenas noticias, pues venía a Japón a<br />

explorar el lado más salvaje del sake. Mi aventura<br />

había comenzado meses antes en un festival en<br />

Manhattan llamado The Joy of Sake. Ahí, entre<br />

mesas repletas de botellas premium permanecí<br />

indiferente. La mayoría de los sakes disponibles eran<br />

daiginjo: hechos de arroz pulido al menos al 50%<br />

de su tamaño original (casi siempre de la variedad<br />

yamada nishiki, de sabor delicado) y con un toque<br />

de alcohol destilado en su mezcla, el daiginjo es considerado<br />

el sake en su máxima expresión. A mí me<br />

parecía aburrido. Había poco en su carácter suave<br />

que atraparía la atención del paladar de esta amante<br />

del vino. El ácido de un vino blanco de clima frío, el<br />

sabor a tierra de un Borgoña… ¿dónde podría encontrar<br />

tanto estilo en un sake?<br />

Alguien me dirigió a una mesa casi al frente. Ahí<br />

descubrí a los ‘bichos raros’: sakes junmai más<br />

Para comenzar<br />

el proceso de<br />

producción, los<br />

trabajadores de<br />

Mioya Brewery,<br />

en Hakui,<br />

mezclan agua,<br />

arroz koji al<br />

vapor, y cultivo<br />

de levadura.<br />

ricos, más suntuosos, hechos sin alcohol añadido<br />

y con el arroz molido al 70%; que resultan de técnicas<br />

antiguas que acentúan las notas de umami;<br />

añejados, parecidos al jerez; hechos con diferentes<br />

tipos de arroz y levadura para lograr texturas más<br />

ricas y sabores más atrevidos. Disfrutando de este<br />

interesante abanico de posibilidades, me enganché.<br />

Cuando la temporada de producción de invierno<br />

llegó, me dirigí a visitar a los productores de las<br />

botellas de las que me había enamorado.<br />

Pronto descubrí que muchos de ellos son<br />

aficionados al vino. “Amo el Auslese Riesling y el<br />

Chablis”, me contó Shunichi Sato. “Me gusta añejar el<br />

sake como el vino”.<br />

Sato es propietario de quinta generación de Kaetsu<br />

Brewery, que dirige con su esposa, Yoshiko, en la prefectura<br />

arrocera de Niigata, entre montañas de picos<br />

blancos y el Mar de Japón. La nieve se apila sobre los<br />

techos. Dentro de la productora, podía ver mi aliento.<br />

“Esta región es buena para el sake porque los inviernos<br />

fríos hacen más lenta la fermentación”, asegura<br />

Sato. A la levadura le da tiempo para desarrollar aromas<br />

complejos. El área también es conocida por su<br />

agua suave, ideal para las sutilezas de la producción<br />

de sake. “El sake de Niigata es famoso por ser limpio,<br />

ligero y seco”, señala, “pero para quien prefiere más<br />

umami o fragancia, hacemos Kanbara”.<br />

Kanbara es el sake junmai que Sato añeja a temperatura<br />

ambiente en la productora. Puede hacerlo<br />

porque es inusualmente alto en ácido y cargado de<br />

MAYO <strong>2020</strong> 93


un ingrediente clave: el koji. Aspergillus oryzae, el<br />

hongo llamado koji, contiene las enzimas para convertir<br />

el almidón de arroz en el azúcar que la levadura<br />

come para hacer alcohol.<br />

Sato me dirigió a una habitación recubierta en<br />

cedro donde el arroz espolvoreado con koji se volvía<br />

opaco de fermentación. Tibia y húmeda, la habitación<br />

estaba bañada en un aroma a castañas que señalaba<br />

la presencia de aminoácidos, los elementos proteicos<br />

que imparten el umami. Envuelto en tela, el arroz<br />

reposa por 55 horas. Su temperatura sube hasta a 42<br />

o<br />

C gracias a la fermentación con koji.<br />

En la mayoría de los sakes, el koji representa 20%<br />

de todo el arroz en la producción. Pero como es más<br />

acídico que el arroz al vapor convencional, la pulpa<br />

de Sato requiere 99% arroz koji. Y hay más: para<br />

comenzar la fermentación principal, los productores<br />

mezclan agua, arroz koji, arroz al vapor y cultivo de<br />

levadura para crear un poco de masa madre. Para<br />

protegerla de las bacterias mientras la levadura se<br />

reproduce, los productores modernos agregan ácido<br />

láctico. Pero Sato usa un método antiguo llamado<br />

yamahai: calentar el agua de la masa madre para<br />

que el ácido láctico aparezca naturalmente. Esto<br />

tiene como resultado una fermentación más lenta<br />

con un ácido láctico generado naturalmente,<br />

además de las bacterial que le dan notas<br />

silvestres antes de desaparecer.<br />

Sato sacó varios vintages para probarlos: el 2018<br />

tenía un olor a caramelo, como un cheddar casero.<br />

Una mezcla de 12 años llamada Ancient Treasure<br />

había adquirido un aroma a hongos caramelizados y<br />

una riqueza similar a la de un Madeira. Con 18 años,<br />

el sake daba un golpe de chocolate oscuro, fresas y<br />

nueces. Envejecía como un vino fortificado.<br />

“Aminoácidos…”, dijo Sato: “Soya, carne, miso,<br />

dashi, salmón: los sabores de la cocina japonesa son<br />

excelentes para este sake”.<br />

Vaya que sí. Cenamos esa noche en mi ryokan, un<br />

hotel tradicional japonés. El mesero trajo un salmón<br />

cereza a la sal en brochetas de hierro. En Nueva York<br />

probé el Ancient Treasure con postres. Pero junto<br />

al pescado rústico, el sake mostró su lado salino, de<br />

umami, un maridaje revelador.<br />

AL DÍA SIGUIENTE, ESTABA recorriendo con nuevos<br />

amigos la península de Noto, a lo largo del Mar de<br />

Japón, mientras oíamos a Nina Simonie en el coche.<br />

Toshiaki Yokomich manejaba. Es el maestro elaborador<br />

de sake en Mioya Brewery, propiedad de Miho<br />

Fujita, que iba en el asiento de atrás. Acabábamos de<br />

visitar su casa de sake e íbamos a un izakaya<br />

para deleitarnos con cangrejos araña, lecha, una<br />

variedad de pepinillos… comida exótica que hacía<br />

juego con los potentes sakes de Mioya.<br />

La ubicación de la productora, Hakui, es famosa<br />

Los arrozales en<br />

terraza de<br />

Shiroyone<br />

Senmaida, uno<br />

de los campos<br />

de arroz más<br />

grandes de<br />

Japón, ubicados<br />

en la prefectura<br />

de Ishikawa.<br />

por sus avistamientos de ovnis, y como su pueblo, la<br />

visión de Fujita es fuera de lo común. Solía ser ejecutiva<br />

en Mattel y heredó la productora de su padre,<br />

quien la había comprado años atrás. Nunca esperó<br />

a convertirse en productora de sake, y es una mujer<br />

en una industria de hombres. No se siente atada por<br />

las normas: “La gente de Tokio aprecia el sake limpio,<br />

afrutado, frío”, señala, “pero me gustan mis sakes<br />

servidos a la temperatura del vino tinto para que<br />

resalte su umami, y esto va mejor con la comida”.<br />

Para maximizar su sabor, Yokomichi deja al koji<br />

trabajar cerca de 60 horas, y los varietales de arroz<br />

que utiliza también brindan umami. Fujita usa un<br />

método de masa madre más antiguo aun que el<br />

yamahai. Su nombre es kimoto: requiere batir la<br />

masa madre con una vara para motivar la formación<br />

de ácido láctico. Históricamente, los productores<br />

cantaban para mantener un ritmo, pero Fujita lo bate<br />

con música pop, y a veces optimiza el proceso con<br />

un mezclador de cemento de mano. Hierbas, miso<br />

blanco, un final de estilo tánico: su junmai añejado<br />

Yuho Rhythm of the Centuries, es complejo.<br />

Otros de sus sakes son igual de exuberantes, saben<br />

a melón encurtido o a chícharos recién cosechados.<br />

Yuho Eternal Emberse tiene el umami de los hongos<br />

enoki. Aún el daiginjo de Yuho muestra una enérgica<br />

frescura.<br />

Yokomichi me dio a probar la pulpa del tanque,<br />

donde había reposado por 22 días. “Para los concursos,<br />

esta cantidad de acidez no es buena”, dijo, “pero para<br />

94<br />

MAYO <strong>2020</strong>


Mar de Japón<br />

AGA-MACHI<br />

LOS SAKES A PROBAR<br />

A menos de que se mencione lo<br />

contrario, los precios corresponden<br />

a botellas de 720 mililitros.<br />

HAKUI<br />

ONO<br />

Kioto<br />

NASUSHIOBARA<br />

Tokio<br />

FOTOS: SHUTTERSTOCK..<br />

MAPA: WINSLOW TAFT.<br />

añejar sí lo es, y los concursos no nos importan”.<br />

Es un sentimiento que comparte con Keisuke<br />

Izumi, el propietario de quinta generación de la<br />

pequeña Manaturu Brewery en Ono, en el interior<br />

de la costa oeste central. Izumi produce un tanque<br />

a la semana y lo embotella sin mezclarlo, filtrarlo o<br />

diluirlo. Es el equivalente en sake a un whisky de<br />

un solo barril, del cual Izumi es fan.<br />

“Parte del encanto es la variedad de un tanque a<br />

otro”, señala. Como bebedor de whisky, Izumi ha<br />

construido una biblioteca de sakes añejos. Un sake<br />

de 22 años era de color de ajonjolí tostado y sabía a<br />

deliciosas castañas caramelizadas y humo.<br />

Con sus nuevos lanzamientos, Izumi es un experimentador<br />

inquieto. Hace sake en barricas de jerez;<br />

ácido como fresas con koji blanco, en lugar del típico<br />

amarillo; uno aduraznado y gomoso hecho con<br />

ácido málico; otro fermentado con levadura local<br />

con aroma a rosas. Y muchas de sus masas madre<br />

son yamahai, para estimular el umami. Lleno de<br />

aminoácidos, su Mana 1751 True Vision tiene sabor<br />

a yogurt y carne, con un carisma apimentado. Tiene<br />

poco en común con esos suaves daiginjos que probé<br />

en The Joy of Sake. Para Izume, ese era justo el punto:<br />

“Cuando comencé a producir, a todos les gustaba el<br />

sake fresco y elegante que sabía a agua. Esos me aburren”,<br />

declara: “No quiero ser el mejor en hacer sake,<br />

como el resto de ellos. Quiero hacer el sake que nadie<br />

más hace”.<br />

CHORYO YOSHINOSUGI<br />

NO TARU SAKE<br />

Esta belleza añejada en cedro<br />

ofrece pimienta negra en nariz y<br />

un sabor amaderado y a almizcle.<br />

TENGUMAI YAMAHAI JUNMAI<br />

Una fermentación que se vale del<br />

método tradicional yamahai y dos<br />

años de añejamiento, que dan como<br />

resultado notas a caramelo salado<br />

y queso cheddar tradicional. Fuerte<br />

pero con suficiente ácido, va muy<br />

bien con pescado a al parrilla.<br />

YUHO ETERNAL EMBERS<br />

Notas sutiles de hongos enoki y una<br />

textura suntuosa caracterizan a<br />

este junmai de Mioya Brewery. Es<br />

lo suficientemente versátil para<br />

acompañar cualquier tiempo.<br />

MENTENSEI STAR-FILLED SKY<br />

Cuando la tarjeta de presentación<br />

del director de la empresa dice “disfruta<br />

investigar hongos”, sabes que<br />

el sake será rico en umami. Este de<br />

Suwa Brewery balancea lo exótico<br />

con un final limpio y seco.<br />

TENTAKA HAWK IN<br />

THE HEAVENS<br />

Desde su aroma a hongos encurtidos<br />

a sus sabores a hierba y a<br />

nueces de castilla, este junmai<br />

de Tentaka Brewery ofrece un<br />

carisma enraizado.<br />

YUHO RHYTHM OF<br />

THECENTURIES<br />

Bien batido y de largo añejamiento,<br />

el junmai de kimoto ofrece sabores<br />

a levadura y vainilla con un<br />

final cautivador.<br />

MANA 1751 TRUE VISION<br />

Fermentado con una cantidad<br />

inusual de levadura, el sake súper<br />

láctico de Manaturu Brewery pisa<br />

fuerte con sabores a yogurt<br />

agridulce y a pimienta negra.<br />

KANBARA ANCIENT TREASURE<br />

Hecho con 99% arroz koji y añejado<br />

por 12 años, el sake color melocotón<br />

de Kaetsu Brewery, tiene una<br />

nariz de allium caramelizada, sabor<br />

a hongos negros cocidos y un final<br />

similar al del jerez.<br />

JAPÓN, SAKE<br />

POR SAKE<br />

JAPÓN<br />

Toma el tren Narita Express<br />

de JR-East, del aeropuerto<br />

Narita a Tokyo Station, de<br />

donde salen trenes a todos los<br />

puntos de Japón. Planea tu<br />

ruta en hyperdia.com/en/sp.<br />

Antes de dejar Tokio prueba<br />

sakes en Ginza Kimijimaya,<br />

una caja de cristal que es bar<br />

y tienda de licores, cerca de<br />

la estación. (facebook.com/<br />

ginza.kimijimaya)<br />

Kioto tiene más de un bar de<br />

sake que sirve curiosidades<br />

añejas. Asakura (sakebarasakura.shopinfo.jp)<br />

está escondido<br />

en un callejón. Yoramu<br />

(sakebar-yoramu.com) abre<br />

por las noches en el espacio<br />

que, de día, es Teuchi<br />

Toru Soba.<br />

Agenda un tour en Tentaka<br />

Brewery, en Otawara, enviando<br />

un email a shiga@tentaka.<br />

co.jp. Reserva una estancia de<br />

lujo en el ryokan cercano, Nasu<br />

Onsen Sanraku. (sanraku.premierhotel-group.com/nasu/en).<br />

Para visitar Mioya Brewery, en<br />

Ishikawa, contacta a mioya@<br />

sky.plala.or.jp, y mientras estás<br />

en la zona, come en Kabuna<br />

(miraicorp.co.jp/kabuna),<br />

un izakaya cuya especialidad<br />

son los mariscos, en el<br />

cercano Kanazawa.<br />

Para conocer Manaturu Brewery,<br />

en Ono, y Kaetsu Brewery<br />

en el pueblo de Niigata de<br />

Aga-Machi, hogar también del<br />

maravilloso Fukusen Ryokan<br />

(kanose-biyori.com/en),<br />

reserva un tour privado con<br />

Sake Tours (saketours.com).<br />

MAYO <strong>2020</strong> 95


EL DESPERTAR<br />

DE SANTA<br />

BÁRBARA<br />

LA JOVEN Y EXPERIMENTAL<br />

TIERRA DEL VINO EN<br />

CALIFORNIA, YA CRECIÓ.<br />

p o r GEORGIA FREEDMAN<br />

f o t o g r a f í a AUBRIE PICK<br />

96<br />

MAYO <strong>2020</strong>


MAYO <strong>2020</strong> 97


en sentido de las manecillas del reloj, desde abajo, izq: paisajes del<br />

condado de Santa Bárbara; horno de leña; los propietarios<br />

Janet y Jeff Olson; chardonnay servido por garrafa en<br />

Industrial Eats en Buellton. páginas anteriores: las colinas del<br />

condado de Santa Bárbara; Felicia Medina, sous chef en<br />

el restaurante Loquita, en Santa Bárbara.<br />

E<br />

N UN PEQUEÑO LOCAL<br />

que parece bodega, sobre<br />

una calle cualquiera en<br />

Buellton, California, cerca<br />

de dos decenas de personas<br />

están formadas frente a un<br />

restaurante llamado Industrial Eats. La concurrencia está<br />

compuesta por una mezcla de rancheros en polvosas botas<br />

baqueras y chamarras Carhartt, familias locales y turistas<br />

en tenis caros y gorras de franela de estilo hipster que han<br />

manejado aquí desde Los Ángeles.<br />

El interior de Eats (como los locales lo llaman) es casual, el<br />

servicio es en mostrador y los comensales se sientan en mesas<br />

altas compartidas. El menú, escrito en rollos de papel kraft,<br />

parece encapsular los mejores elementos de la escena culinaria<br />

de la costa central californiana: hay mejillones locales al vapor<br />

con curry tailandés, ostiones repletos de erizo fresco o aguacate<br />

rebanado, conejo braseado en vino blanco con aceitunas y<br />

una variedad de novedosas ensaladas y sándwiches. Mi plato<br />

–una ensalada César picante y camarones en salsa de ajo y<br />

mantequilla– es uno de los mejores que he comido en todo<br />

California. Si viviera relativamente cerca de este lugar, vendría<br />

cada fin de semana para probar estos platillos.<br />

Este no es el tipo de comida –o el tipo de gente– que esperé<br />

encontrar en Buellton. Pasé mi infancia y adolescencia en la<br />

cercana ciudad de Santa Bárbara, y para mí, Buellton era el<br />

lugar a donde ibas a comprar equipo de cultivo o alimentación<br />

animal. El gran hit culinario del pueblo solía ser Pea Soup<br />

Andersen’s, un restaurante de aspecto kitsch en un local<br />

de falso estilo danés que ha servido su sopa homónima<br />

desde 1924.<br />

Ahora, Buellton es el corazón de la tierra del vino del<br />

condado de Santa Bárbara. Y aunque el pueblo en sí todavía<br />

se siente rural y de clase trabajadora, el área que lo rodea<br />

está cambiando rápidamente. Es emblema de una evolución<br />

amplia en la región. Durante los pasados 16 años, desde que<br />

la película Entre copas pusiera a esta joven región vinícola en<br />

el mapa, el área ha crecido tremendamente: ahora es hogar<br />

de casi 100 bodegas. En los años recientes, la afluencia de<br />

restaurantes de gran calidad y hoteles de lujo la han llevado<br />

de ser un lugar donde aficionados del vino venían a probar<br />

botellas únicas a un merecedor destino de fin de semana. La<br />

tierra del vino de Santa Bárbara ha madurado.<br />

Doug Margerum ha sido parte de esta industria vinícola<br />

desde hace décadas, en un principio como propietario de<br />

<strong>Wine</strong> Cask, un restaurante y tienda de vinos en el centro<br />

98<br />

MAYO <strong>2020</strong>


en sentido de las manecillas del reloj, desde abajo, izq: un brindis y pan<br />

Bagnat (receta en pág. 105) en Industrial Eats. S.Y. Kitchen, en Santa<br />

Ynez; Pico, un restaurante y bar de vinos en Los Alamos General Store;<br />

spaghetti de azafrán con gambas de Santa Bárbara, en S.Y. Kitchen<br />

(receta en pág. 105).<br />

de Santa Bárbara –el primero en apoyar a las bodegas de<br />

la región cuando apenas comenzaban–, y ahora como<br />

viticultor. Su bodega, Margerum <strong>Wine</strong> Company, está a<br />

sólo unos pasos de Eats. El enoturismo ha transformado la<br />

economía aquí, me cuenta Margerum, principalmente<br />

en la ciudad de Santa Bárbara, donde las bodegas han abierto<br />

docenas de salas de catas en el área del centro, a pocas<br />

cuadras de las redes de volleyball, las palmeras y las arenas<br />

doradas en algunas de las playas más populares de Estados<br />

Unidos. Pero esa energía y el tráfico de turistas también han<br />

alcanzado a las partes rurales del condado. “Hubo un punto<br />

de inflexión donde de pronto la gente entendió que el área es<br />

uno de los lugares perfectos en California para hacer vino”,<br />

explica Margerum.<br />

Los valles del condado de Santa Bárbara, pegados a la<br />

costa, llevan aire fresco del Pacífico al interior, formando<br />

los distintivos climas de sus seis Áreas Viticulturales<br />

Americanas (AVAs). El área de viticultivo más al norte, el<br />

AVA del Valle de Santa María, es uno de los más fríos y secos<br />

de California, con condiciones de las que se obtienen vinos<br />

acídios y menos alcohólicos. Al sureste, a pocos kilómetros de<br />

distancia, Valle de Santa Ynez tiene cuatro sub-AVAs, que son<br />

progresivamente más cálidas conforme te adentras en ellas:<br />

Colinas de Santa Rita, Ballard Canyon, Distrito de Los Olivos y<br />

Happy Canyon, en Santa Bárbara.<br />

Colinas de Santa Rita es la región más conocida del condado<br />

de Santa Bárbara. Este fresco lugar a 16 kilómetros de la<br />

costa es famoso por sus pinot noir y chardonnay elegantes<br />

y estructurados. Al manejar hacia allá a través de montañas<br />

doradas, veo laderas punteadas con flores silvestres y robles<br />

retorcidos en pastizales donde se alimentan animales. Es<br />

un recordatorio visual de que el condado de Santa Bárbara<br />

es un condado ganadero. Así ha sido desde principios del siglo<br />

xviii, cuando los españoles establecieron aquí los primeros<br />

ranchos. La industria del vino actual es relativamente nueva:<br />

los primeros viñedos modernos comerciales se establecieron<br />

en los años 60, y aunque ahora el condado cuente con más de 8<br />

mil hectáreas de uvas de vino, los pequeños ranchos familiares<br />

todavía dominan el panorama.<br />

“Hay una masa crítica de grandes vinos que provienen<br />

de Santa Rita Hills”, me cuenta Bryan Babcock, de Babcock<br />

<strong>Wine</strong>ry, en su enorme sala de cata, decorada con mobiliario<br />

vintage y portadas de discos enmarcadas. Babcock ha hecho<br />

vino en Colinas de Santa Rita desde los 80 y ha visto de primera<br />

mano el crecimiento y el cambio. Aunque el AVA ha emergido<br />

como una de las regiones líderes en pinot noir y chardonnay<br />

MAYO <strong>2020</strong> 99


desde la izquierda: Un pan de larga fermentación en Bob’s Well<br />

Bread Bakery. Bryan Babcock y Lisa Boisset Babcock con su<br />

perro, Dakota, en Babcock <strong>Wine</strong>ry. página opuesta: La paella de<br />

vegetales mixtos en Loquita (receta en pág. 104).<br />

(atrayendo a nombres importantes como al sommelier Rajat<br />

Parr, quien se mudó aquí para abrir Domaine de la Côte junto<br />

a Sashi Moorman), los viticultores locales siguen abordándolo<br />

de forma experimental, señala Babcock. “Todavía tiene esa<br />

sensación del Viejo Oeste; Santa Bárbara es disidente. Aquí<br />

pareciera que ‘todo vale’.”<br />

Dado que el área es aún rural, es difícil para las bodegas<br />

abrir salas de cata grandes en sus viñedos. Muchas carreteras<br />

aún no están hechas para sostener un aumento en el tráfico,<br />

y los habitantes frecuentemente bloquean el desarrollo. Para<br />

los productores más pequeños, una sala de cata en el centro<br />

de alguno de los pueblos es una opción más fácil y rentable.<br />

Para tener la oportunidad de probar una amplia variedad de los<br />

vinos que se producen en el condado me dirijo a Los Olivos, un<br />

pequeño poblado lleno de edificios al estilo del Viejo Oeste que<br />

ha sido transformado por completo gracias al turismo vinícola:<br />

el centro, con tres cuadras de largo por dos de ancho, es hogar<br />

de alrededor de 30 salas de cata.<br />

Me quedé en el pequeño Fess Parker <strong>Wine</strong> Country Inn. El<br />

hotel es parte del Fess Parker <strong>Wine</strong>ry & Vineyard, un negocio<br />

familiar que ha hecho vinos aquí desde 1988. “Existen estos<br />

pequeños pueblos en el condado de Santa Bárbara que le dan<br />

al área un carácter especial”, asegura Tim Snider, el presidente<br />

de la bodega. Snider compara a la región –un lugar rural<br />

con diferentes áreas de cultivo y un tráfico de turistas en<br />

aumento– con Sonoma hace 20 años.<br />

Los vinos Fess Parker ofrecen un buen vistazo general a<br />

lo que el condado produce, de granche blanc a ligeros pinot<br />

noir o a brut rosé espumoso. Las otras bodegas en el pueblo<br />

cierran la pinza: sobre la misma calle se encuentra la sala de<br />

cata de Stolpman, donde encuentro grenache, sangiovese<br />

y una mezcla llamada La Cuadrilla, hecha por y para los<br />

trabajadores de los viñedos y fue diseñada, según me dicen,<br />

para maridarse con carne asada. Entre las salas de cata hay<br />

boutiques y galerías de arte, evidencia de que la influencia<br />

de turistas con poder económico está logrando un boom no<br />

sólo en la parte vinícola. (Me da gusto ver, sin embargo, que<br />

no todos los negocios locales han sido desplazados; Jedlicka’s,<br />

el lugar preferido en todo el condado para comprar botas<br />

vaqueras y Wranglers, sigue ofreciendo sus servicios<br />

a rancheros y granjeros.)<br />

Esta actividad económica también está ayudando a la<br />

escena gastronómica. A pocos kilómetros de ahí, en el<br />

pequeño poblado de Los Alamos, comí muy bien en Bob’s<br />

Well Bread Bakery. El restaurante, ubicado en una antigua<br />

estación de gasolina, ofrece desayunos como Egg-in-a-Jar,<br />

el cual combina puré de papa morada, queso Gruyère y<br />

un huevo pochado, acompañado por deliciosos panecillos<br />

100<br />

MAYO <strong>2020</strong>


MAYO <strong>2020</strong> 101


desde la izquierda: la propiedad de 80 hectáreas de Presqu’ile<br />

<strong>Wine</strong>ry, incluye un gran patio exterior, el lugar perfecto para una<br />

cata de vinos; en Jonata <strong>Wine</strong>ry, el viticultor Matt Dees camina<br />

entre las viñas.<br />

“ÉSTA ES UNA REGIÓN JOVEN Y LAS<br />

REGLAS AÚN NO SE ESCRIBEN”, CUENTA<br />

MATT DEES, DE JONATA WINERY: “Y ESO<br />

ES LO QUE NOS EMOCIONA”.<br />

hojaldrados. Estos panes de lenta fermentación también forman<br />

parte del menú en Bell’s, un bistro francés en la misma calle<br />

abierto por Daisy y Grag Ryan, antiguos cocineros en Per Se.<br />

En Solvang –un pueblo conocido por sus casas de estilo danés<br />

y tiendas de chucherías–, el ganador de James Beard Award,<br />

David Cecchini, sirve pizzas a la leña en Cecco Ristorante. Un<br />

pueblo después, en Santa Ynez, el chef Luca Crestanelli, de S.Y.<br />

Kitchen, prepara platillos italianos modernos como gigli (pasta<br />

con forma de cono y orillas onduladas), hecho a mano con<br />

salchicha, pancetta, tomate y suficientes pimientos asados para<br />

elevar el sabor del plato y hacerlo sentir fresco y veraniego.<br />

Conforme entra más dinero a la región, el modelo de<br />

enoturismo cambia, y algunos de los nuevos integrantes se las<br />

arreglan para construir salas de cata más elaboradas en sus<br />

viñedos. Presqu’ile <strong>Wine</strong>ry, cerca de la ciudad de Santa María,<br />

es una estructura de piedra y vidrio moderna y espectacular.<br />

Una tarde de sábado cualquiera suele estar<br />

repleta de docenas de personas disfrutando<br />

copas de pinot noir, syrah y chardonnay<br />

de pequeños lotes. La atmósfera es más<br />

parecida a la de un bar exclusivo que a la de<br />

una sala de cata tradicional, y todos parecen<br />

disfrutar el día en el enorme patio con vista<br />

al campo. Media hora más al sur, Jonata <strong>Wine</strong>ry abrirá una sala<br />

de cata igual de impresionante para mostrar sus codiciados<br />

vinos y los de sus otras marcas: The Hilt y The Paring. Ubicado<br />

en los límites de Colinas de Santa Rita, el espacio está diseñado<br />

para parecerse a un granero antiguo, aunque actulizado<br />

con paredes de cristal: una estética elegante pero campestre.<br />

Jonata es de los mismos propietarios de Screaming Eagle, en<br />

el Valle de Napa, y en un principio había mucha especulación<br />

con respecto a que planeaban producir otro vino de culto<br />

aquí. Pero el vinicultor Matt Dees está respetando el espíritu<br />

emergente de Santa Bárbara. “Esta es una región joven, el<br />

concreto aún no se seca y las reglas aún no se escriben”,<br />

asegura, “y eso es lo que nos emociona: formar parte de esta<br />

primera ola con estas increíbles bodegas jóvenes, ayudando<br />

a construir el comienzo de la definición de una región”.<br />

102<br />

MAYO <strong>2020</strong>


Santa Barbara (y un poco más)<br />

Para una rápida y fácil introducción a la escena gastronómica y enológica de la región,<br />

comienza en la ciudad de Santa Bárbara, donde docenas de salas de cata y restaurantes<br />

han transformado el área del centro en un paraíso epicúreo. Explora la Funk Zone, un<br />

área industrial a pocas cuadras de la playa, donde bodegas y restaurantes comparten<br />

espacio con tiendas de surf y galerías de arte, o descubre los lugares favoritos de la<br />

antigua residente, Julia Child, incluyendo puestos de tacos, cafés y mercados.<br />

Encuentra un mapa interactivo en sbce.events/julia-child-map.<br />

MAPA: WINSLOW TAFT<br />

DÓNDE CATAR<br />

BABCOCK WINERY<br />

En una de las bodegas más<br />

antiguas de la zona, Bryan Babcock<br />

y su esposa, Lisa Boisset<br />

Babcock, ofrecen degustaciones<br />

en un granero convertido en una<br />

ecléctica tienda y sala de cata.<br />

babcockwinery.com<br />

JAFFURS WINE CELLARS<br />

Pasa por su pequeña sala de<br />

cata en un área poco conocida,<br />

aún rodeada de vendedores<br />

de autopartes, y disfruta de<br />

sus aromáticos viogniers<br />

y exuberantes pinot noirs.<br />

jaffurswine.com<br />

JONATA WINERY<br />

Pronto estará lista la increíble<br />

sala de cata de esta reconocida<br />

bodega; se espera que abra sus<br />

puertas a principios de 2021.<br />

jonata.com<br />

MARGERUM WINE COMPANY<br />

Doug Margerum abrió recientemente<br />

esta elegante sala de cata<br />

en la planta baja del nuevo Hotel<br />

Californian, una propiedad boutique<br />

en un edificio de estilo neocolonial<br />

español a dos cuadras<br />

de la playa. margerumwines.com<br />

PRESQU’ILE WINERY<br />

Prueba los pinot noir producidos<br />

a pequeña escala del viticultor<br />

Dieter Cronje en una sala de cata<br />

moderna y fresca al sur de Santa<br />

María. presquilewinery.com<br />

SANGUIS<br />

Esta sala de cata no tiene señalización<br />

exterior; la mayoría de<br />

los locales ni siquiera saben<br />

que está ahí. Pero las mezclas<br />

de grenache y syrah y blancos<br />

estilo Ródano, del propietario<br />

Matthias Pippig, se están convir<br />

tien do en p ro duc tos de culto.<br />

sanguiswine.com<br />

SANTA BARBARA WINE<br />

COLLECTIVE<br />

Esta sala de cata en la Funk Zone<br />

presenta bodegas de todo el país<br />

y te permite diseñar tus propias<br />

degustaciones: enfócate en un<br />

varietal, conoce una bodega a<br />

profundidad o ahonda en una de<br />

las sub-AVAs del condado. santabarbarawinecollective.com<br />

DÓNDE COMER<br />

BELL’S<br />

El menú de bistro simple pero<br />

elevado de Daisy Ryan (imagina<br />

un pastel de crepas con crème<br />

fraîche, erizo y caviar) y una lista<br />

de vinos en su mayoría local son<br />

razones suficientes para visitar<br />

Los Álamos. bellsrestaurant.com<br />

BOB’S WELL BREAD BAKERY<br />

Siempre hay fila para entrar a<br />

esta panadería –uno de los lugares<br />

preferidos de los locales– en<br />

una antigua estación de gasolina<br />

reconvertida. bobswellbread.com<br />

INDUSTRIAL EATS<br />

Prueba los eternamente populares<br />

camarones salteados con<br />

mucho ajo en este favorito de<br />

Buellton. industrialeats.com<br />

THE LARK<br />

Este restaurante que solo abre<br />

durante la cena es un lugar esencial<br />

en la Funk Zone, con platillos<br />

como crujientes de piel de pollo<br />

acompañados de dip de cebolla<br />

ahumada. thelarksb.com<br />

LOQUITA<br />

La propiedad hermana de The<br />

Lark, Loquita, sirve clásicos<br />

españoles reinventados, con<br />

una lista de gin tonics a la par.<br />

loquitasb.com<br />

S.Y. KITCHEN<br />

En el restaurante italiano del chef<br />

Luca Crestanelli, en Santa Ynez,<br />

no puedes perderte el spaghetti<br />

de azafrán hecho a mano con<br />

gambas. sykitchen.com<br />

SANTA MARIA<br />

LOS ÁLAMOS<br />

DÓNDE QUEDARSE<br />

Definitivamente, el mejor lugar<br />

para quedarse en la región es<br />

Skyview Los Alamos. Este<br />

motel de carretera de la era de<br />

los 50 convertido en hotel boutique<br />

tiene áreas de fogata, bicicletas<br />

Linus que puedes llevarte<br />

al pueblo y excelentes cocteles<br />

en su restaurante, Norman –llamado<br />

así por Norman Bates de<br />

Psicosis–. Pero no te preocupes,<br />

la vibra es relajada y no creepy.<br />

(Desde USD $159, skyviewlosalamos.com).<br />

En Los Olivos,<br />

el Fess Parker <strong>Wine</strong> Country<br />

Inn está a pocos pasos de 30<br />

salas de cata (Desde USD $404,<br />

fessparkerinn.com).<br />

BUELLTON<br />

SOLVANG<br />

LOS OLIVOS<br />

SANTA YNEZ<br />

CONDADO<br />

DE SANTA<br />

BARBARA<br />

SANTA BARBARA<br />

En The Lark (arriba), el primer<br />

restaurante en abrir en la<br />

Funk Zone, un comensal<br />

(abajo) disfruta de una copa de<br />

vino en el patio.<br />

REGIONES VINÍCOLAS<br />

SANTA MARIA VALLEY<br />

SANTA YNEZ VALLEY<br />

STA. RITA HILLS<br />

BALLARD CANYON<br />

LOS OLIVOS DISTRICT<br />

HAPPY CANYON OF<br />

SANTA BARBARA<br />

MAYO <strong>2020</strong> 103


1<br />

brillar. Agrega las calabazas y los hongos;<br />

deja que se cocinen, sin tocarlos, hasta que<br />

se doren por un lado, durante unos 3 minutos.<br />

Continúa cocinando, moviéndolos constantemente,<br />

hasta que se doren por todos<br />

lados, durante 3 minutos. Transfiérelos a<br />

un tazón pequeño. Reserva.<br />

PAELLA DE VEGETALES MIXTOS<br />

TIEMPO ACTIVO: 1 H 10 MIN. TIEMPO TOTAL: 1 H<br />

30 MIN. PORCIONES: 4<br />

Para generar el socarrat –la orilla crujiente<br />

del arroz–, esencial en la paella clásica,<br />

revisa las orillas con una cuchara o espátula<br />

conforme se va cocinando. Una vez que el<br />

arroz absorba el caldo casi por completo,<br />

comienza a revisar más frecuentemente;<br />

puede ir de dorado a quemado en segundos.<br />

Haz caso al chef Peter Lee y sirve la paella<br />

con gajos de limón y un racimo de<br />

jitomates cherry.<br />

5 cucharadas de aceite de oliva extra<br />

virgen, divididas<br />

350 g de calabaza italiana o calabaza<br />

amarilla, partida en cuartos a lo largo<br />

y cortada en rebanadas de 1.2 cm<br />

1 taza de hongos Maitake sin tallo<br />

taza de cebolla amarilla picada<br />

1 ½ cucharaditas de sal kosher, dividida<br />

2 dientes de ajo medianos, finamente<br />

picados<br />

½ taza de tomates en cubos enlatados, o<br />

jitomates muy maduros picados<br />

2 cucharadas de pasta de tomate<br />

1 l de agua o caldo de verduras<br />

Una pizca de filamentos de azafrán<br />

¼ taza de acelgas rebanadas finamente<br />

1 taza de arroz Bomba sin cocer (como<br />

Santo Tomás) (ver nota)<br />

Agua caliente, la necesaria<br />

½ limón Eureka mediano<br />

¼ taza de aioli de limón (receta a<br />

continuación)<br />

1. Calienta 2 cucharadas de aceite en una<br />

paellera de acero al carbono de 40 cm de<br />

diámetro a fuego alto hasta que comience a<br />

2. Reduce el fuego a medio-bajo; agrega la<br />

cebolla, el pimiento, ½ cucharadita de sal, y<br />

las 3 cucharadas de aceite restante. Cocina,<br />

moviendo constantemente, hasta que la<br />

cebolla se oscurezca en las orillas, después<br />

de unos 15 minutos, agregando el ajo en el<br />

minuto final de esta cocción.<br />

3. Añade los jitomates en cubos y la pasta de<br />

tomate a la mezcla, removiendo las partes<br />

quemadas del fondo de la paellera con una<br />

cuchara de madera. Cocina, moviendo constantemente,<br />

hasta que el líquido se evapore<br />

y la pasta de tomate chisporrotee, de 3 a 5<br />

minutos. Agrega el caldo de vegetales, el<br />

azafrán y la cucharadita de sal restante.<br />

Sube el fuego y deja que hierva. Agrega las<br />

acelgas y la mezcla de calabazas. Espolvorea<br />

el arroz sobre la mezcla, moviendo con<br />

cuidado para dispersarlo de forma uniforme.<br />

4. Vuelve a hervir la mezcla a fuego medioalto.<br />

Hierve hasta que los granos de arroz<br />

estén apenas por encima del caldo, por 10<br />

minutos.<br />

5. Reduce el fuego a medio-bajo; hierve a<br />

fuego lento, reposicionando la paellera<br />

sobre el calor cada ciertos minutos, girándola<br />

90 grados para redistribuir el calor,<br />

hasta que el arroz esté tierno, haya absorbido<br />

todo el líquido y comience a dorarse el<br />

fondo, por unos 20 minutos. (Usa una<br />

cuchara pequeña para levantar un poco de<br />

arroz del fondo con cuidado y revisar que<br />

esté dorado.) Si el líquido se ha cocinado<br />

demasiado rápido y el arroz todavía está<br />

al dente, agrega un poco de agua caliente ( 1 /4<br />

taza a la vez) hasta que el arroz esté tierno.<br />

6. Retira la paellera del fuego; cúbrela holgadamente<br />

con papel aluminio o con una toalla<br />

de cocina limpia, y déjala reposar por 10<br />

minutos. Descubre y exprime el jugo de<br />

medio limón sobre la paella; añade algunas<br />

cucharadas de aioli de limón. –peter lee,<br />

loquita, santa bárbara.<br />

nota. El arroz bomba es un arroz de grano<br />

corto que puede absorber gran cantidad de<br />

líqudo sin romperse o hacerse pastoso.<br />

Encuéntralo en tiendas de especialidad o<br />

en amazon.com.<br />

104<br />

MAYO <strong>2020</strong>


AIOLI DE LIMÓN<br />

TIEMPO TOTAL: 5 MIN. RINDE: ½ TAZA<br />

Tiene el balance ideal de cremoso y ácido:<br />

este aioli rápido de limón y ajo es el complemento<br />

perfecto de la paella.<br />

½ taza de mayonesa<br />

½ cucharadita de ralladura de limón más<br />

½ cucharadita de jugo de limón<br />

¼ cucharadita de ajo rallado<br />

Mezcla todos los ingredientes en un tazón<br />

pequeño. Guárdalos en un recipiente hermético<br />

en el refrigerador hasta por una<br />

semana. –peter lee, loquita, santa bárbara<br />

PAN BAGNAT<br />

Foto en pág. 99<br />

TIEMPO ACTIVO: 35 MIN. TIEMPO TOTAL: 2 H 35<br />

MIN. PORCIONES: 4<br />

Prensar este sándwich de ventresca de atún<br />

curado en aceite de oliva, tomates deshidratados<br />

al sol y arúgula, permite que la vinagreta<br />

lo sazone y suavice el pan crujiente. Es<br />

mejor cuando se le deja reposar dos horas<br />

enteras antes de servirse, haciéndolo ideal<br />

para un pícnic.<br />

4 huevos grandes<br />

Sal kosher, al gusto<br />

Pimienta negra, al gusto<br />

1<br />

/3 taza de aceite de oliva extra virgen<br />

1<br />

/3 taza de aceite de salvado de arroz<br />

o cualquier aceite neutro<br />

¼ taza de vinagre de arroz sazonado<br />

¼ taza de tomillo fresco picado<br />

2 cucharadas de echalote finamente<br />

picado<br />

¾ cucharadita de azúcar granulado<br />

2 latas (de 100 g) de filetes de ventresca<br />

de atún en aceite de oliva (como los de<br />

Conservas Ortiz Ventresca),<br />

escurridos y deshebrados<br />

110 g de boquerones marinados<br />

2<br />

/3 taza de jitomates deshidratados al sol<br />

en aceite (110 g)<br />

3 tazas de arúgula<br />

1 baguette crujiente, partida a la mitad<br />

a lo largo<br />

1. Hierve una olla grande de agua. Cuidadosamente<br />

coloca los huevos en el fondo de la<br />

olla y hiérvelos por 8 minutos. Retíralos del<br />

agua y sumérgelos en un tazón lleno de agua<br />

helada; déjalos reposar por 5 minutos. Escúrrelos<br />

y pélalos. Córtalos a lo largo en tercios.<br />

Sazona con sal y pimienta al gusto.<br />

Reserva.<br />

2. Mezcla el aceite de oliva, el aceite de salvado<br />

de arroz, el vinagre de arroz, el tomillo,<br />

el echalote y el azúcar en un tazón pequeño<br />

hasta que se combinen bien. Sazona con sal<br />

y pimienta al gusto. Reserva.<br />

3. Coloca el atún, los boquerones, los jitomates,<br />

los huevos y la arúgula en la parte<br />

inferior de la baguette. Vierte un poco de<br />

vinagreta sobre el lado interno de la tapa de<br />

la baguette y cubre la parte inferior.<br />

4. Corta el sándwich a la mitad por lo ancho.<br />

Coloca las dos mitades, una junto a la otra,<br />

en una charola para hornear. Coloca otra<br />

charola para hornear sobre los sándwiches y<br />

coloca encima una sartén de hierro colado o<br />

varias latas pesadas. Déjala reposar a temperatura<br />

ambiente por 2 horas. Corta cada<br />

sándwich por la mitad y reserva. –jeff y janet<br />

olsson, industrial eats, buellton<br />

prepara con antelación. La vinagreta<br />

puede conservarse en un recipiente<br />

hermético hasta por 5 días.<br />

vino. Un espumoso vibrante y cítrico: Riverbench<br />

Blanc de Blancs Sparlinkg 2017.<br />

SPAGHETTI DE AZAFRÁN<br />

CON GAMBAS<br />

Foto en pág. 99<br />

TIEMPO TOTAL: 40 MIN. PORCIONES: DE 4 A 6<br />

Las gambas son increíblemente dulces, con<br />

colas tiernas y esponjadas que se parecen a<br />

las de la langosta. Asegúrate de retirar las<br />

gambas de la sartén antes de terminar la<br />

salsa, para que no se cuezan en exceso.<br />

1<br />

/8 cucharadita de filamentos de azafrán<br />

2 cucharadas de agua caliente<br />

Sal kosher<br />

450 g de espárragos frescos, cortados<br />

en tiras de 10 cm<br />

450 g de spaghetti sin cocoer<br />

¼ taza aceite de oliva<br />

1 cucharada de echalote finamente<br />

picado<br />

1 cucharadita de ajo finamente picado<br />

¼ cucharadita de peperoncino<br />

450 g de gambas de Santa Bárbara, con<br />

cola y cabeza (aprox. 12 gambas)<br />

1 taza de vermouth seco o vino blanco<br />

seco<br />

¼ taza de mantequilla fría sin sal,<br />

cortada en pedazos<br />

3 cucharadas de perejil fresco picado<br />

1 cucharada de estragón fresco picado<br />

1 cucharada de cebollín fresco picado<br />

1. Coloca los filamentos de azafrán en una<br />

sartén pequeña; cocínalos a fuego bajo,<br />

moviendo la sartén constantemente, hasta<br />

que los filamentos estén secos y tostados,<br />

por 1 minuto y 30 segundos. Desmorona el<br />

azafrán tostado en un tazón pequeño;<br />

agrega 2 cucharadas de agua caliente y<br />

mezcla. Déjalos en remojo por 10 minutos.<br />

2. Hierve una olla grande de agua salada.<br />

Agrega los espárragos; cocínalos, moviendo<br />

constantemente, hasta que tengan un color<br />

verde vibrante, por 1 minuto. Usando una<br />

cuchara ranurada, retira los espárragos y<br />

sumérgelos en un tazón de agua helada;<br />

déjalos ahí por 3 minutos. Escúrrelos y<br />

reserva. Agrega el spaghetti a la olla de agua<br />

hirviendo; cocina, moviendo ocasionalmente,<br />

hasta que esté apenas al dente (más<br />

o menos 2 minutos menos de lo que dice en<br />

las indicaciones del empaque). Escurre<br />

y reserva 1 taza del líquido de cocción<br />

de la pasta.<br />

3. Mientras el spaghetti se cocina, calienta<br />

aceite en una sartén grande y profunda a<br />

fuego medio hasta que comience a brillar.<br />

Agrega el echalote, el ajo y el peperoncino;<br />

cocina, moviendo constantemente, hasta<br />

que se suavicen ligeramente, de 1 a 2 minutos.<br />

Agrega los espárragos, las gambas y la<br />

mezcla se agua y azafrán; cocina, dando la<br />

vuelta a las gambas ocasionalmente con cuidado<br />

hasta que algunas partes sean de color<br />

rosa claro, por 2 minutos. Agrega el vermouth;<br />

deja que hierva. Transfiere las gambas<br />

a un plato usando una cuchara<br />

ranurada; continua hirviendo la mezcla en la<br />

sartén, sin tocarla, hasta que el líquido haya<br />

reducido ligeramente y el sabor a alcohol<br />

desaparezca, de 3 a 4 minutos.<br />

4. Agrega el spaghetti cocido a la mezcla de<br />

espárragos en la sartén; con ayuda de una<br />

pinza múevelos para que se cubran bien.<br />

Devuelve las gambas a la sartén; agrega la<br />

mantequilla, el perejil, el estragón y el<br />

cebollín. Aumenta el fuego a medio-alto;<br />

cocina, moviendo la sartén constantemente,<br />

agregando el líquido de cocción reservado<br />

conforme se requiera ( 1 /4 de taza a la vez)<br />

hasta que se forme una salsa cremosa que<br />

cubra la pasta, por 3 minutos. Sazona<br />

con sal al gusto. Sir ve inmediatamente.<br />

–luca crestanelli, s.y. kitchen, santa ynez.<br />

nota. La temporada de gambas va de<br />

febrero a octubre. Si no las consigues, sustitúyelas<br />

por camarosnes jumbo blancos de<br />

la costa del Golfo.<br />

MAYO <strong>2020</strong> 105


DESDE EL<br />

ORIGEN<br />

GRANDES CRUS<br />

DEL CAFÉ, EN<br />

ANTIGUA<br />

por SHADIA ASENCIO<br />

fotos FRANCO ASSENZA<br />

106<br />

MAYO <strong>2020</strong>


MÁS QUE BRINDARLE UN DESPERTAR AL CUERPO, EL CAFÉ GUATEMALTECO<br />

HA PUESTO DE PIE A LA ECONOMÍA Y TURISMO LOCALES A TRAVÉS DE SU<br />

PERFIL DE SABOR CON DENOMINACIÓN DE ORIGEN.<br />

TITO OTZOY, DUEÑO de la cafetería Fat Cat, en<br />

Antigua, me preparó esta infusión que bebo de<br />

a poco para que no se acabe. El método, un<br />

sifón japonés; el grano, uno de proceso lavado<br />

de Finca Pastores. El café me obliga a hacer una<br />

exploración al cuerpo, un viaje interior. Su<br />

humo me lleva en turbo a un jardín de flores<br />

blancas, al desayuno en una terraza con cerezas<br />

y miel. Freno. Todas mis conexiones son<br />

interrumpidas por la acidez: una justa medida<br />

que hace que cada cosa ocupe su lugar.<br />

Allá afuera, Antigua es una maqueta bien<br />

puesta de las inclemencias del tiempo. Lo que<br />

queda de pie son edificaciones barrocas<br />

resquebrajadas por los movimientos telúricos<br />

de sus volcanes activos y las inundaciones del<br />

río. Paralelamente a esas catástrofes, la tierra<br />

–el terroir, para darle una connotación especial<br />

al producto que crece en ella– no ha quedado<br />

impune. Los minerales volcánicos son el<br />

diamante de cada taza.<br />

A través del festival La Cosecha Guatemala, es<br />

que he podido ver de cerca el Volcán de Agua, el<br />

de Acatengano y el de Fuego, que por las noches<br />

me silba con pirotécnica que este es su territorio.<br />

Durante tres días con sus noches he disfrutado<br />

de la gastronomía local y he conocido a<br />

productores como Adrián Cabrera y Sebastián<br />

Falla de San Miguel Coffees; Luis Pedro Celaya<br />

de Bella Vista Coffee o con Hans Masch, de Finca<br />

Pastores. Por mi taza han pasado toda clase de<br />

cafés de altura: de los cultivados a 1 500 metros<br />

sobre el nivel del mar hasta los 3 000 y de<br />

variedades tradicionales como caturra o borbón,<br />

y las no tan tradicionales como geisha. Con una<br />

de esas en mano, Jorge Chanis, director de La<br />

Cosecha, me hizo entender que “una taza de<br />

café puede ser tan compleja y contrastante<br />

como una copa de vino”.<br />

El terroir<br />

Guatemala es un accidente topográfico tras<br />

otro. El regalo es una variedad de microclimas<br />

que ascienden a los 300. Cada uno, en una<br />

mezcla específica, termina en 4.5 millones de<br />

quintales de calidad que se exportan a Estados<br />

Unidos, Canadá y Japón, principalmente. Sólo<br />

de 200 000 a 400 000 sacos se quedan para el<br />

consumo local, pero ojo: algunos son dignos<br />

de una taza de excelencia como las que elabora<br />

Tito en Fat Cat, o las de Artista Café, en la<br />

ciudad de Antigua.<br />

Según me cuenta Hans Masch de Finca<br />

Pastores, un saber hacer de esta calidad no<br />

surge de la noche a la mañana. Como en el<br />

resto de América, las primeras plantas<br />

cafetaleras fueron traídas a la región por los<br />

jesuitas. Durante la segunda mitad del siglo xix,<br />

el café se fue convirtiendo en un producto<br />

agrícola de relevancia económica hasta llegar a<br />

compararse con las remesas actuales.<br />

El desarrollo primordial surgió con la migración<br />

de familas alemanas, como la de Hans,<br />

que compraron parcelas y las pusieron a<br />

trabajar. Todavía en los años 60, la gran<br />

mayoría de los productores locales sembraba<br />

en la costa. Los agricultores experimentados no<br />

tardaron en darse cuenta de que en las alturas<br />

se podría lograr un mejor café –uno de<br />

especialidad, con mejor precio a la venta– así<br />

que empacaron y se mudaron a las faldas de los<br />

volcanes. El boom sucedió en 1994 y con él la<br />

creación de organizaciones como la Asociación<br />

Nacional del Café (Anacafé) cuya labor es<br />

regular los precios del café, darle promoción<br />

al trabajo de los productores y ofrecerles<br />

asistencia técnica.<br />

Las cifras de Lulú Glaesel, de Anacafé, me<br />

impactaron: 97% de los productores de<br />

Guatemala son pequeños productores. Por ello<br />

la apuesta es por el consumo de café local y la<br />

estrategia, una regionalización inspirada en los<br />

grand crus y terroirs del mundo de los vinos.<br />

Cuando entro a Finca Pastores, realmente me<br />

vienen a la mente los grandes chateaux de<br />

Burdeos: esto es un palacio campestre.<br />

El abuelo de la familia de Hans Masch<br />

comenzó en Coatepec vendiendo y comprando<br />

café. En los empaques de la marca El Cafetalito<br />

aún puede leerse que fue fundada por su madre<br />

en 1964. De ese sueño al de hoy hay 1 500<br />

quintales al año de diferencia y una producción<br />

que termina en varias esquinas del planeta.<br />

Lo que ofrecen al consumidor final es técnica<br />

LA COSECHA<br />

El festival es un producto<br />

turístico alrededor del<br />

café creado por el<br />

comunicador gastronómico<br />

panameño Jorge<br />

Chanis. La fiesta, que<br />

dura tres días con<br />

actividades alrededor del<br />

café y otros productos<br />

locales, se ha celebrado<br />

en tres ocasiones en<br />

Panamá y una más en<br />

Guatemala. Para él, La<br />

Cosecha “enaltece todo<br />

el trabajo que hay<br />

alrededor de la cosecha<br />

de un grano para generar<br />

un impacto sustentable a<br />

lo largo de la cadena de<br />

valor del café”.<br />

MAYO <strong>2020</strong> 107


“Cuando empoderas<br />

a los indígenas y<br />

campesinos que<br />

producen café, tanto<br />

esas personas como<br />

las generaciones<br />

que le siguen van a<br />

querer hacer uno de<br />

mejor calidad. Así<br />

logramos que la<br />

cadena se vaya<br />

enriqueciendo y que<br />

beneficie a todos.”<br />

en el campo, fermentaciones tradicionales y<br />

anaeróbicas y un sistema de selección manual<br />

heredada de abuelas, a madres, a nietas, en el<br />

que se aseguran que todo el café tiene el mismo<br />

color, la misma forma y el mismo tamaño para<br />

que el proceso de tostado sea parejo. En el patio<br />

central pruebo toda clase de cafés que vienen<br />

divididos por regiones: Cobán, Antigua,<br />

Huehuetenango, Atitlán. Cada uno es un mapa<br />

sensorial de su tierra.<br />

Lulú Glaesel me cuenta que como país<br />

empezaron a trabajar hace 25 años<br />

identificando las regiones. “Lo hicimos para<br />

apreciar e identificar las características propias<br />

del territorio de donde viene ese café.<br />

Actualmente existen ocho regiones de café,<br />

cada una con perfiles de sabor únicos, pero<br />

sólo Antigua y Acatenango tiene la certificación<br />

de denominación de origen”.<br />

Los chateaux<br />

El café es la actividad económica que mayor<br />

puestos de trabajo genera y un producto de<br />

gran riqueza y bienestar para los guatemaltecos.<br />

Sin embargo, debido a las crisis del café los<br />

108<br />

MAYO <strong>2020</strong>


Como en el resto de América, las primeras plantas cafetaleras llegaron a Guatemala<br />

con las órdenes jesuitas. Durante la segunda mitad del siglo xix , el café se convirtió<br />

en un producto agrícola de relevancia económica.<br />

precios fluctúan constantemente y son<br />

afectados incluso por el precio del petróleo y<br />

las especulaciones financieras. Por su calidad,<br />

el costo de la producción promedio oscila entre<br />

$2 y $2.2 dólares, mientras que la bolsa de<br />

Nueva York ha mantenido sus precios alrededor<br />

de $1. Los compradores a nivel mundial usan<br />

dicho precio de referencia para abaratar el<br />

trabajo del campo. Al final, la ecuación tiene la<br />

sombra de la injusticia: “Diría que el productor<br />

recibe 20 centavos de dólar o menos. Muchas<br />

veces incluso hasta 10 centavos de dólar por<br />

cada taza de café negro”, confirma Lulú.<br />

En lugar de una compleja cadena de intermediarios<br />

que va mermando las ganancias, una<br />

relación directa entre el productor y el comprador,<br />

beneficia a todos. Para empresas como San<br />

Miguel Coffees, que representa a varias fincas de<br />

pequeños productores de Antigua, lo importante<br />

es la trazabilidad. De esa forma la historia de<br />

cada productor es lo que termina en la taza que<br />

compra el consumidor. En un atardecer frente al<br />

Volcán de Fuego, Adrián Cabrera, quinta<br />

generación de la finca, me cuenta que en su<br />

compañía han optado por “crecer despacio<br />

pero correctamente. Preferimos decirle ‘no’ a<br />

alguien si eso resulta perjudicial para los<br />

productores. Con el Triple Win, la filosofía de<br />

la empresa, el pequeño productor, el cliente y<br />

nosotros ganamos al mismo tiempo. Eso nos<br />

alinea en valores, eso nos beneficia a todos”. Su<br />

sistema de trabajo aporta las condiciones<br />

necesarias para que el productor pueda<br />

desarrollarse: desde una escuela técnica<br />

establecida en una parte de la propiedad, hasta<br />

orientación agrícola sobre el cuidado de la<br />

planta y el suelo y otras técnicas de producción.<br />

Para la finca Bella Vista Coffee, el foco es el<br />

origen y la forma en que cada familia se<br />

entiende con sus plantas. Doroteo Gómez y sus<br />

cinco hermanos procesan sus parcelas contiguas<br />

con técnicas que varían de hermano a hermano,<br />

de metro a metro. Cada uno ha experimentado<br />

en su parcela con distintas variedades, formas<br />

de plantación, podado y cuidados. Eso en la taza<br />

son seis historias, seis perfiles de grano y un<br />

mundo de sensaciones. Yo pude comprobarlo de<br />

viva nariz y boca de la mano de Dulce Barreda,<br />

tres veces campeona de catación a nivel<br />

nacional, cuarto lugar mundial y parte de la<br />

plana de Bella Vista Coffee.<br />

Estoy en Fat Cat, junto a Tito. Pido la segunda<br />

y última taza de café porque a mi edad ya no se<br />

juega con el insomnio y mi avión sale en dos<br />

horas. En su molino manual tritura un grano<br />

finísimo de proceso honey que infusiona en<br />

V60. Ni la he probado pero ya veo la taza<br />

medio vacía. La última taza en Antigua sólo<br />

puede verse así.<br />

MAYO <strong>2020</strong> 109


En manos<br />

de expertos<br />

ALBERTO RIVERA, DEL PROYECTO<br />

BUNA, NOS GUIÓ EN UN PASO A<br />

PASO PARA LOGRAR UNA TAZA<br />

DE CAFÉ COMO LO HACEN LOS BA-<br />

RISTAS MÁS EXPERIMENTADOS.<br />

NUESTRA RUTINA HA CAMBIADO. Las<br />

visitas que hacíamos a cafeterías,<br />

restaurantes, bares y heladerías se<br />

mudaron a nuestra sala, cocina y<br />

comedor. Lo que permanece son los<br />

antojos y en algunos casos, la imperiosa<br />

necesidad de consumir ciertos<br />

ingredientes. En este caso, el café.<br />

EL GRANO<br />

La arábica y robusta son las dos<br />

especies más utilizadas para preparar<br />

café. La arábica es más frutal y más<br />

dulce; En México los tres tipos de<br />

arábica más populares son caturras,<br />

borbones y mundo novo.<br />

La robusta puede crecer en terrenos<br />

más salvajes, aguanta más plagas y<br />

cambios de temperatura. Su sabor es<br />

más amargo y se usa mucho en<br />

mezclas italianas.<br />

EL EXPERTO DICE:<br />

“La verdad es difícil predecir cómo van<br />

a saber los granos de una cosecha a<br />

otra. Todo cambia acorde a las<br />

condiciones climatológicas, los<br />

cuidados y las prácticas de nutrición<br />

—caldos minerales y compostas— que<br />

implementan los agricultores.”<br />

TIP EN CASA:<br />

Si quieres experimentar, en Buna<br />

tienen tres blends distintos: dalia,<br />

pajaritos y alebrije. Pruébalos en ese<br />

orden —la intensidad va aumentando—.<br />

No uses azúcar ni leche y mantente<br />

alerta de los sabores y aromas que te<br />

agradan de cada uno. Probar es la<br />

única forma de descubrir el perfil<br />

de sabor que te gusta.<br />

EL TOSTADO<br />

Los tuestes medios o claros resaltan<br />

las características del grano de café,<br />

hacen más evidentes sus aromas y<br />

sabores. El tueste oscuro puede llegar<br />

a ocultar las características del grano<br />

de café.<br />

EL EXPERTO DICE:<br />

“Históricamente el café se ha tostado<br />

muy oscuro para igualar sabor. Si yo<br />

tuesto mucho un café bueno y uno<br />

malo, llega un momento en el que su<br />

sabor es similar, sin importar en gran<br />

parte la calidad del café. La idea del<br />

tueste —cuando hay un buen grano<br />

— es respetar su perfil de sabor.”<br />

110<br />

MAYO <strong>2020</strong>


“HISTÓRICAMENTE EL CAFÉ SE<br />

HA TOSTADO MUY OSCURO<br />

PARA IGUALAR SABOR. SI YO<br />

TUESTO MUCHO UN CAFÉ<br />

BUENO Y UNO MALO, LLEGA UN<br />

MOMENTO EN EL QUE SU<br />

SABOR ES SIMILAR, SIN<br />

IMPORTAR EN GRAN PARTE LA<br />

CALIDAD DEL CAFÉ. LA IDEA<br />

DEL TUESTE —CUANDO HAY UN<br />

BUEN GRANO— ES RESPETAR<br />

SU PERFIL DE SABOR.”<br />

LA PREPARACIÓN<br />

Lo que determina un buen café con<br />

cualquier método de preparación es<br />

la relación adecuada entre cantidad<br />

de café y cantidad de agua.<br />

EL EXPERTO DICE:<br />

“En los métodos que tenemos en casa,<br />

la relación debe ser 1 a 15. Por cada<br />

gramo de café, uso 15 de agua. Si voy a<br />

preparar 20 gramos de café —suficientes<br />

para dos tazas—, se necesitan 300<br />

ml de agua.”<br />

TIPS EN CASA:<br />

Prensa francesa<br />

Primero hay que echar un poco de agua,<br />

luego el café. Lo mueves un poquito y<br />

después echas el resto. Lo dejas<br />

descansar y después bajas la prensa.<br />

La cantidad de agua que usas en<br />

un principio nunca acaba en tu<br />

taza. El café absorbe el doble de su<br />

peso en agua mientras se extrae.<br />

Entonces, 20 gramos de café,<br />

absorben 40 ml de agua.<br />

EL MOLIDO<br />

El agua es lo que le extrae el sabor<br />

al café. La molienda es importante,<br />

porque determina la cantidad<br />

de tiempo que el agua va a<br />

interactuar con él.<br />

foto: juan pablo tavera.<br />

EL EXPERTO DICE:<br />

“Imaginemos dos cubetas. Una llena de<br />

piedras y una de arena. Le viertes agua<br />

a las dos. A través de la cubeta de las<br />

piedras va a pasar más rápido el agua,<br />

porque hay más espacio entre una y<br />

otra. Pero en la de arena, como los<br />

granos son más compactos, hacen más<br />

difícil que pase el agua. Eso es lo que<br />

pasa con el café y sus moliendas.<br />

Entre más grueso molemos, el<br />

agua pasa más rápido.”<br />

TIP EN CASA<br />

El café que venden molido en el súper<br />

es muy grueso —para cualquier tipo de<br />

cafetera—. Compra el café en grano que<br />

más te guste y busca un tipo de molido<br />

medio, que se lleva bien con la mayoría<br />

de las cafeteras caseras.<br />

Cafetera italiana<br />

Lo mejor es usar una molienda más<br />

fina, para que no se filtre el agua con<br />

tanta facilidad. De lo contrario, el café<br />

no se extrae de la manera correcta.<br />

Cafetera por goteo<br />

El agua de esta cafetera se calienta a<br />

través de un tubito. Cuando cae sólo<br />

moja ciertas partes del café y porciones<br />

del café se quedan secas. Una vez que<br />

caiga un poco de agua desde el tubito,<br />

hay que abrir la compuerta de arriba y<br />

darle una sacudida con una cuchara,<br />

para que todo el café se moje parejo.<br />

Las elecciones que tomemos<br />

en torno a nuestra taza de café<br />

serán determinantes para el sabor<br />

final. De principio a fin —desde la<br />

elección del grano hasta la extracción—,<br />

cada decisión cuenta.<br />

Cuando lo prepares en casa,<br />

cambia las variables, experimenta<br />

y ajusta hasta lograr la taza de café<br />

perfecta para ti.<br />

MAYO <strong>2020</strong> 111


PromoFW<br />

lo último<br />

NOTICIAS, EVENTOS Y PROMOCIONES<br />

ALTRUISMO EN<br />

TIEMPOS DIFÍCILES<br />

El brote de COVID-19 ha orillado a cientos de negocios a cerrar su operación<br />

para evitar la propagación del virus. Esta crisis afecta a millones de personas,<br />

pero también se ha convertido en una oportunidad para demostrar la solidaridad<br />

con quienes más lo necesitan. Vail Resorts, por ejemplo, donó 50,000<br />

libras de alimentos que tenían en sus restaurantes para evitar el desperdicio<br />

y ayudar a personas en situaciones vulnerables. Las escuelas, organizaciones<br />

comunitarias y bancos de acopio –que se extienden desde la Columbia Británica<br />

hasta Colorado y New Hampshire–, fueron los elegidos para recibir las<br />

donaciones de frutas, verduras, quesos, jugos y barras de granola.<br />

A esta iniciativa fue acompañada por una donación de $2.5 millones de<br />

dólares que hizo Rob KAtz, el CEO de Vail Resorts, para apoyar a sus empleados<br />

y comunidades de la montaña que ahora se ven afectados por la falta de<br />

afluencia turística en la región.<br />

EL LADO MÁS<br />

FRESCO DEL TEQUILA<br />

En la compleja discusión sobre cómo se<br />

debería tomar el tequila, están de un lado<br />

los extremistas, que afirman que se toma<br />

derecho. Sin limón, sin sal, sin nada. Del otro<br />

lado están los más flexibles y aventureros —y<br />

probablemente más sabios— que saben que<br />

la forma correcta de tomarlo, es como a cada<br />

quién le sepa más sabroso.<br />

Para los segundos tenemos una receta de<br />

mixología con Herradura Ultra: un tequila<br />

tonic, un destilado cristalino con un toque<br />

de licor de agave que lo convierte en un<br />

excelente candidato para mezclar. Es fácil de<br />

preparar en casa y es refrescante. Es todo lo<br />

que necesitamos para alegrarnos las tardes.<br />

Ingredientes:<br />

1.5 oz de Herradura Ultra<br />

Hielo<br />

Agua tónica<br />

Limón verde (el jugo y la cáscara)<br />

3 hojas de albahaca<br />

1. Enfría un vaso con hielo y vierte 1.5 oz<br />

de Herradura Ultra.<br />

2. Llénalo con agua tónica y agrega gotas<br />

de limón verde.<br />

3. Mezcla los ingredientes y coloca la albaha<br />

ca y el limón como garnitura.<br />

NUEVA IMAGEN,<br />

MISMO SABOR<br />

A 133 años de su fundación, Glenfiddich no deja<br />

de reinventarse. Su más reciente innovación está<br />

en la imagen de la marca –hecha en mancuerna<br />

con la firma HERE design– y creada para<br />

modernizar el lenguaje visual de la firma en sus<br />

ediciones de 12 y 15 años. El diseño, que lleva<br />

una V cortada en la parte frontal de la botella,<br />

es un homenaje a la cuna de este single malt:<br />

el Valle de los Ciervos en Speyside, Escocia. La<br />

nueva imagen de sus botellas viene acompañada<br />

del cambio de nombre de cada una de sus variantes.<br />

El Glenfiddich que conocíamos como ‘12<br />

años’, ahora es Our Original Twelve. Este es un<br />

whisky madurado en barricas de roble de jerez y<br />

bourbon durante 12 años. Glenfiddich 15 años<br />

ahora lleva el nombre Our Solera Fifteen, una<br />

celebracion del sistema solera que utilizaron por<br />

primera vez en 1998.<br />

112<br />

MAYO <strong>2020</strong>


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ADIÓS, MAYO<br />

LA ÚLTIMA<br />

CENA<br />

En 2019 regresó a su<br />

natal San Sebastián<br />

para abrir Gatxupa,<br />

un botanero donde<br />

mezcla su paso<br />

por México con<br />

ingredientes y<br />

preparaciones vascas.<br />

BRUNO OTEIZA<br />

“Me gustaría estar en nuestro restaurante, desde<br />

la cocina, con mis seres queridos, familiares,<br />

amigos, mis hijos, mi mujer, padres, hermanos,<br />

compañeros y socios. Con gente a la que quiero<br />

un montón y también con gente que a lo mejor no<br />

conozco. Quisiera abrirles las puertas de nuestro<br />

restaurante para que nos lo comamos y bebamos<br />

juntos. Seguro que habría un ole toro de nuestro<br />

Sibau y una lamprea a la bordelesa, que es el plato<br />

que más me gusta en todo el mundo, chiles picantes<br />

y mezcal. Me gustaría abrir las puertas para<br />

compartir esos momentos finales con todo aquel<br />

que no supiera a dónde ir.”<br />

¿QUIÉN ES?<br />

Nacido en San Sebastián, España, comenzó<br />

a cocinar desde muy joven. Su paso por<br />

grandes cocinas como Akelarre y Kokotxa<br />

marcaron su singular estilo vasco. Más<br />

tarde llegó a la CDMX, donde abrió Tezka,<br />

D. O. y Biko —que estuvo dentro de la lista<br />

World’s 50 Best Restaurants, entre 2011 y<br />

2016—. Con su experiencia en México abrió<br />

Gatxupa, una taquería en San Sebastián.<br />

Ahora divide su tiempo entre su ciudad<br />

natal y Monterrey, donde lleva el mando<br />

de la cocina de Sibau.<br />

RESTAURANTES<br />

Sibau y Gatxupa.<br />

CIUDADES<br />

Monterrey y<br />

San Sebastián.<br />

114<br />

MAYO <strong>2020</strong>

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