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mundo pude encontrar tantos románticos como usted, que<br />

ven a Cuba desde la idolatría, que Fidel Castro es un<br />

paradigma, pero nunca, desgraciadamente, piensan en el<br />

sacrificio del pueblo de Cuba, en el precio que pagan sus<br />

utopías.<br />

Esos defensores de Cuba, algunos profesores de<br />

universidades importantes, catedráticos brillantes de clase<br />

media, después de defender a ultranza al régimen de Cuba,<br />

me comentaban amargamente que al día siguiente iría a<br />

huelga para exigir aumento de salario. Y no podía impedir<br />

hacer un paneo por la residencia donde vivía junto a su<br />

familia, hijos en escuelas particulares, su piscina sin usar,<br />

sus autos costosos. Nunca pude evitar preguntarme cuántas<br />

horas o minutos durarían apoyando al régimen de Fidel<br />

Castro, cuando tuvieran que salir a la calle para subirse en<br />

un ómnibus atestado de personas, y llegar a la casa sin saber<br />

qué podrá cocinarle a sus hijos. Y mirarles los zapatos<br />

gastados, recordar que el suyo tiene un hueco en la suela<br />

que constantemente tiene que ocultar de sus compañeros de<br />

trabajo. Pero ese ejercicio mental se desgastó. Nadie quiere<br />

ver más allá de lo que no le perjudica.<br />

Me quedo en Cuba<br />

Por último, decirle que posiblemente algún Presidente<br />

europeo, como usted menciona, por amabilidad, me brinde<br />

asilo, pero sepa usted que no todos los presos de conciencia<br />

salen de la cárcel y deciden irse, algunos se mantienen en<br />

prisión porque se niegan a dejar el país. De todas formas de<br />

antemano, les estoy agradeciendo y rechazando. Me quedo.<br />

Aquí recibí la luz y aquí la veré por última vez.<br />

Pero sin ser Presidente, salvo de mi blog, le pido que<br />

venga a vivir a Cuba. Luego usted me dirá cuanto disfraz<br />

hay en sus palabras, cuan errónea es su mirada. Lo triste que<br />

es ser ciego cuando se piensa que desde una atalaya divisa<br />

el horizonte.<br />

Es mi deseo que se instruya, lea los libros de los escritores<br />

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