08.05.2013 Views

Pensamientos indígenas en nuestra América - Educabolivia

Pensamientos indígenas en nuestra América - Educabolivia

Pensamientos indígenas en nuestra América - Educabolivia

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

<strong>P<strong>en</strong>sami<strong>en</strong>tos</strong> <strong>indíg<strong>en</strong>as</strong> <strong>en</strong> <strong>nuestra</strong> <strong>América</strong><br />

años veinte y treinta, <strong>en</strong> Perú hubo un resurgimi<strong>en</strong>to del movimi<strong>en</strong>to indíg<strong>en</strong>a<br />

–lam<strong>en</strong>tablem<strong>en</strong>te aplastado por el retorno de la oligarquía– que<br />

finalm<strong>en</strong>te no logró conquistar el espacio deseado por González Prada.<br />

En este s<strong>en</strong>tido, la pregunta al indianismo contemporáneo sería<br />

si este espacio de libertad expresado por un indig<strong>en</strong>ista aristócrata y<br />

anarquista, como González Prada, podría permitirle <strong>en</strong>trar al gran panteón<br />

de los indianistas, o por lo m<strong>en</strong>os a los de los proto-indianistas,<br />

y evitar ser catalogado como un indig<strong>en</strong>ista paternalista. En verdad,<br />

González Prada tuvo muy poco de paternalista; al contrario, se le debería<br />

acusar de antipaternalista si consideramos sus expresiones sobre<br />

el orgullo y la rebeldía. Por lo tanto, al buscar sus raíces, el indianismo<br />

debería reconstruir su discurso con mucha más apertura, buscando<br />

efectivam<strong>en</strong>te distanciarse o refigurar estos discursos que están posiblem<strong>en</strong>te<br />

preanunciando uno más acabado.<br />

Entonces surge la pregunta: ¿estos mismos <strong>en</strong>unciados no podrían<br />

estar circulando nuevam<strong>en</strong>te <strong>en</strong> los textos de Bonfil Batalla, <strong>en</strong><br />

los de Darcy Ribeiro o <strong>en</strong> los del subcomandante Marcos?<br />

Exactam<strong>en</strong>te, las aguas divisorias <strong>en</strong>tre indig<strong>en</strong>ismo e indianismo<br />

son frágiles, pues una lectura conjunta de los textos indig<strong>en</strong>istas e<br />

indianistas evid<strong>en</strong>cia una relación estrecha <strong>en</strong>tre ellos. En vez de fronteras<br />

fijas, exist<strong>en</strong> incrustaciones mutuas que p<strong>en</strong>etran ambos territorios.<br />

Sin embargo, tratándose de un proceso histórico, donde el indig<strong>en</strong>ismo<br />

antecede al indianismo (de los indios contemporáneos), creo adecuado<br />

señalar que es el indig<strong>en</strong>ismo el que se incrusta <strong>en</strong> el indianismo.<br />

No obstante, no se debe concluir con esto que todos los indig<strong>en</strong>istas,<br />

<strong>en</strong> bloque, preludiaron el indianismo. En realidad, se trata<br />

básicam<strong>en</strong>te de determinados p<strong>en</strong>sadores que tuvieron cierta s<strong>en</strong>sibilidad<br />

y circunstancias que les permitieron <strong>en</strong>unciar un discurso que<br />

puede ser recogido por el indianismo. En este s<strong>en</strong>tido, algunos escritos<br />

(principalm<strong>en</strong>te los iniciales) de Luis E. Valcárcel, así como los discursos<br />

relacionados con el mundo indíg<strong>en</strong>a de Manuel González Prada,<br />

repres<strong>en</strong>tan un proto-indianismo sui g<strong>en</strong>eris que nos debe ayudar a reflexionar<br />

sobre temática. En cierta manera, debemos volver a mirar a<br />

aquellos personajes que H<strong>en</strong>ri Favre (1998: 59-63) define como teluristas,<br />

p<strong>en</strong>sadores como Luis E. Valcárcel; escritores como Alfonso Reyes,<br />

de México; Franz Tamayo y Jaime M<strong>en</strong>doza, de Bolivia; Ricardo Rojas,<br />

de Arg<strong>en</strong>tina 27 .<br />

Además es interesante resaltar que posiblem<strong>en</strong>te González Prada<br />

pudo elaborar aquel discurso gracias a su condición de p<strong>en</strong>sador anar-<br />

27 Favre dice: “la idea c<strong>en</strong>tral del telurismo, según la cual las formaciones nacionales son<br />

el producto de su <strong>en</strong>torno físico, coincide con la noción sp<strong>en</strong>gleriana de ‘alma del paisaje’,<br />

de la que probablem<strong>en</strong>te se deriva” (1998: 62).<br />

54

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!