Buenos Dias Espiritu Santo - Cristianos
Buenos Dias Espiritu Santo - Cristianos
Buenos Dias Espiritu Santo - Cristianos
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
Espíritu <strong>Santo</strong>?" ¡Absolutamente no!<br />
Yo sí creo, sin embargo, que una persona que ha<br />
hecho una confesión de fe en Cristo, pero no vive para el<br />
Señor —que vive sin perdonar— puede ser influenciada por<br />
demonios. Tales pueden ser hostigados y aun oprimidos por<br />
los poderes de las tinieblas, pero no poseídos.<br />
Pedro, por ejemplo, dijo: "Señor, tú no vas a morir".<br />
Y Jesús le dijo, "Quítate de delante de mí, Satanás". Pedro<br />
no estaba poseído por Satanás. El sólo estaba influenciado.<br />
Hay una gran diferencia.<br />
Jesús dijo, mediante el Espíritu, "Nunca os dejaré ni<br />
os desampararé" Y eso, mi amigo, son buenas noticias. Y<br />
como El permanece con nosotros, es más importante saber<br />
qué hará El por nosotros que lo que Satanás hará contra<br />
nosotros.<br />
Tú no puedes hacerlo por ti mismo<br />
Estoy seguro de que es tu mayor deseo amar a Dios con tu<br />
espíritu, alma, y cuerpo. Pero no importa cuan fuerte sea tu<br />
deseo, es absolutamente imposible lograr tu meta por ti<br />
mismo. Es imperativo que digas: "Espíritu <strong>Santo</strong>, te pido<br />
que me ayudes".<br />
Pablo le escribió a la iglesia en Roma: "La esperanza<br />
no avergüenza; porque el amor de Dios ha sido derramado<br />
en nuestros corazones por el Espíritu <strong>Santo</strong> que nos fue<br />
dado" (Romanos 5:5).<br />
Ciertamente, deseamos amar a Cristo, pero eso es<br />
imposible a menos que el Espíritu nos dé amor sobrenatural.<br />
¿Y cómo lo recibes? Simplemente dices: "Espíritu<br />
de Dios, yo me rindo a ti". Por ese solo hecho El inundará<br />
tu alma de amor por el Señor.<br />
Mientras más profundamente conozcas al Espíritu<br />
<strong>Santo</strong>, más profundamente conocerás a Jesús. Es algo<br />
automático. ¿Por qué? Porque cuando el Espíritu está<br />
presente, Cristo es enaltecido. Jesús dijo: "¡El me<br />
glorificará!" El Señor nunca es echado a un lado, sino más<br />
bien es traído mucho más cerca.<br />
Pablo escribió: "Ahora, pues, ninguna condenación<br />
hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan<br />
conforme a la carne, sino conforme al Espíritu" (Romanos<br />
¿Entiendes tú lo que verdaderamente significa andar<br />
en el Espíritu? Cuando El dice: "Ora", eso es lo que tú<br />
haces. Cuando El dice: "Testifica", eso es lo que tú haces.<br />
De repente, estás andando en el Espíritu.<br />
EL GOZO DE LA LIBERTAD EN EL ESPÍRITU<br />
Cuando se desobedece se siente condenación y luego culpa.<br />
Pero al obedecer Su llamado, conoces el gozo de la libertad<br />
en el Espíritu: "Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo<br />
Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte"<br />
(Romanos 5:2). El dador de la ley en el Antiguo Pacto fue<br />
el Padre, pero el dador de la ley en el Nuevo Pacto es el<br />
Espíritu <strong>Santo</strong>. Jesús dio los mandamientos mediante el<br />
Espíritu (Hechos 1:2), igual que Dios una vez dio la ley<br />
mediante Moisés.<br />
Siete revelaciones<br />
¡Qué gozo da disertar sobre las victorias descritas por Pablo<br />
en Romanos 8! En efecto Pablo comparte siete revelaciones<br />
específicas en los primeros dieciséis versículos de esta<br />
carta.<br />
Quizás en ninguna otra parte en la Escritura está la<br />
obra del Espíritu tan claramente definida.<br />
1. Hay poder sobre el pecado. La primera revelación dice<br />
que la ley del Espíritu de vida le da a uno libertad del<br />
pecado y de la muerte (vv. 1-2). Tú tendrás dominio sobre<br />
el pecado.<br />
2. El cumplirá la ley. "Porque lo que era imposible para la<br />
ley, por cuanto era débil por la carne, Dios, enviando a su<br />
Hijo en semejanza de carne de pecado y a causa del pecado,<br />
condenó al pecado en la carne; para que la justicia de la ley<br />
se cumpliese en nosotros, que no andamos conforme a la<br />
carne, sino conforme al Espíritu (w. 3-4).<br />
155