conocimiento de Dios - The Philadelphia Church of God
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E L M I S T E R I o D E L L o S S I g L o S<br />
Cristo y bajo Él durante los mil años. Los <strong>de</strong>más que hayan<br />
muerto no vivirán <strong>de</strong> nuevo sino hasta finalizado el milenio<br />
(Apocalipsis 20:5).<br />
El capítulo 37 <strong>de</strong> Ezequiel también muestra la resurrección<br />
en el tiempo <strong>de</strong>l juicio. Este capítulo 37 es la pr<strong>of</strong>ecía <strong>de</strong> los<br />
“huesos secos”. La Biblia misma interpreta estos huesos secos en<br />
el versículo 11, don<strong>de</strong> dice que estos huesos secos son la Casa <strong>de</strong><br />
Israel: “He aquí, ellos dicen: Nuestros huesos se secaron, pereció<br />
nuestra esperanza…” La pr<strong>of</strong>ecía dice: “Me dijo entonces:<br />
Pr<strong>of</strong>etiza sobre estos huesos, y diles: Huesos secos, oíd palabra<br />
<strong>de</strong> [el Eterno]. Así ha dicho [el Eterno] el Señor a estos huesos:<br />
He aquí, yo hago entrar espíritu en vosotros, y viviréis. Y pondré<br />
tendones sobre vosotros, y haré subir sobre vosotros carne, y<br />
os cubriré <strong>de</strong> piel, y pondré en vosotros espíritu, y viviréis; y<br />
sabréis que yo soy [el Eterno]” (versículos 4-6).<br />
Luego esta pr<strong>of</strong>ecía habla <strong>de</strong>l Juicio <strong>de</strong>l gran Trono Blanco<br />
cuando resucitará toda esta casa <strong>de</strong> Israel que tanto pecó contra<br />
<strong>Dios</strong>.<br />
La pr<strong>of</strong>ecía continúa: “Pr<strong>of</strong>eticé, pues, como me fue<br />
mandado; y hubo un ruido mientras yo pr<strong>of</strong>etizaba, y he aquí<br />
un temblor; y los huesos se juntaron cada hueso con su hueso.<br />
Y miré, y he aquí tendones sobre ellos, y la carne subió, y la piel<br />
cubrió por encima <strong>de</strong> ellos; pero no había en ellos espíritu. Y<br />
me dijo: Pr<strong>of</strong>etiza al espíritu, pr<strong>of</strong>etiza, hijo <strong>de</strong> hombre, y dí al<br />
espíritu: Así ha dicho [el Eterno] el Señor: Espíritu, ven <strong>de</strong> los<br />
cuatro vientos, y sopla sobre estos muertos, y vivirán”.<br />
“Y pr<strong>of</strong>eticé como me había mandado, y entró espíritu en<br />
ellos, y vivieron, y estuvieron sobre sus pies; un ejército gran<strong>de</strong><br />
en extremo” (versículos 7-10). Esto muestra un regreso a la vida<br />
mortal, que se sostiene por la respiración <strong>de</strong>l aire, tal como en su<br />
primera vida. Eso es, vida mortal, todavía sin haberse convertido.<br />
Luego <strong>Dios</strong> dice: “He aquí yo abro vuestros sepulcros,<br />
pueblo mío, y os haré subir <strong>de</strong> vuestras sepulturas, y os traeré a<br />
la tierra <strong>de</strong> Israel”. Esta es la resurrección en el Juicio <strong>de</strong>l gran<br />
Trono Blanco. Todos los antiguos israelitas resucitarán como<br />
seres mortales, tal como fueron en la primera vida. ¿Y <strong>de</strong>spués<br />
qué? “Y sabréis que yo soy [el Eterno], cuando abra vuestros<br />
sepulcros, y os saque <strong>de</strong> vuestras sepulturas, pueblo mío. Y<br />
pondré mi Espíritu en vosotros, y viviréis, y os haré reposar<br />
sobre vuestra tierra; y sabréis que yo [el Eterno] hablé, y lo hice,<br />
dice [el Eterno]” (versículos 13-14).