11.05.2013 Views

Globalización y sociedad - Universidad Iberoamericana

Globalización y sociedad - Universidad Iberoamericana

Globalización y sociedad - Universidad Iberoamericana

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

9<br />

REVISTA DE LA UNIVERSIDAD IBEROAMERICANA ›<strong>Globalización</strong> y <strong>sociedad</strong> AñO II AGOSTO-SEPTIEMBRE DE 2010<br />

Año II Número 9 Agosto-septiembre de 2010<br />

sergio cárdenas<br />

Música<br />

Pablo cotler<br />

Economía<br />

alicia Gironella<br />

de’angeli<br />

Cultura gastronómica<br />

Gilberto Guevara<br />

niebla y Jorge<br />

Medina Viedas<br />

Educación<br />

david Mena<br />

alemán<br />

Política<br />

REVISTA DE LA UNIVERSIDAD IBEROAMERICANA<br />

Fernando solana<br />

olivares<br />

Cultura<br />

›<strong>Globalización</strong><br />

y <strong>sociedad</strong><br />

Gustavo Sainz en sus 70 años: una entrevista<br />

Líder Ibero: Víctor Gavito y Marco<br />

9 imágenes y 6 notas globales: Claudio Isaac<br />

Carlos Bonfil La pantalla sublevada: cine histórico<br />

mexicano Héctor E. Cejudo Gómez ¿Qué es la<br />

ingeniería de alimentos? Roberto Sánchez de la Vara<br />

Galápagos: de sorpresa en sorpresa Tío Corne<br />

Maravillas de los mezcales tradicionales de México


Índice<br />

<strong>Globalización</strong> y <strong>sociedad</strong><br />

03 Dr. José Morales Orozco, S. J. Carta del Rector<br />

04 Pablo Cotler. La economía mexicana en la globalización<br />

06 David Mena Alemán. Política mexicana y globalización<br />

08 Gilberto Guevara Niebla. <strong>Globalización</strong> y educación en México<br />

12 Jorge Medina Viedas. La educación superior ante la globalización<br />

16 Fernando Solana Olivares. Notas sobre el comienzo o apuntes desde el final:<br />

Cultura nacional y globalización<br />

20 Alicia Gironella De’Angeli. La cocina tradicional mexicana ante la globalización<br />

24 Víctor Gavito y Marco. Líder Ibero. Es fundamental que en México los empresarios<br />

tengan un sentido de solidaridad social. Entrevista de Carlos Deveaux Homs<br />

30 Claudio Isaac. Mirador. 9 imágenes y 6 notas globales<br />

34 Sergio Cárdenas. Quadrivium / música. Mostrar la propia manera de oír el mundo<br />

04 18<br />

36<br />

38<br />

42<br />

ciencia y tecnología,<br />

cultura y entretenimiento<br />

36 Gustavo Sainz en sus 70 años. Trivium / literatura. México es<br />

sólo una palabra en los periódicos en inglés, pero cómo duele.<br />

Entrevista de Juan Domingo Argüelles.<br />

38 Héctor E. Cejudo Gómez. Divulgación científica. ¿Qué<br />

es la ingeniería de alimentos?<br />

42 Tío Corne. Saberes / sabores. Maravillas de los mezcales<br />

tradicionales de México<br />

46 Roberto Sánchez de la Vara. El viajero ilustrado.<br />

Galápagos: de sorpresa en sorpresa<br />

50 Carlos Bonfil. Cine. La pantalla sublevada.<br />

Cine histórico mexicano<br />

53 Beatriz Palacios. Itinerario del ocio. Adónde ir y por qué<br />

54 Juan Domingo Argüelles. La voz del libro / el eco de la<br />

lectura. Qué leer y por qué<br />

56 Innovación tecnológica. Dispositivos e instrumentos que<br />

facilitan la vida<br />

DIRECTORIO<br />

UNIVERSIDAD IBEROAMERICANA<br />

CIUDAD DE MÉXICO<br />

Dr. José Morales Orozco, S. J. Rector<br />

Dr. Javier Prado Galán, S. J. Vicerrector<br />

Académico<br />

IBERO, REVISTA DE LA UNIVERSIDAD<br />

IBEROAMERICANA<br />

Consejo editorial Pedro Cabrero Nassar, Víctor<br />

Gavito, Miguel Ángel Granados Chapa,<br />

Vicente Leñero, José Morales Orozco, S. J.,<br />

María Nieves Noriega de Autrey,<br />

Gonzalo Olivares Velázquez, Eugenio Páramo<br />

Ortega, S. J., Javier Prado Galán, S. J.<br />

Comité de asesores Carlos Alvarado Santoyo,<br />

José Carreño Carlón, Carlos Lugo Galera,<br />

Ignacio Padilla, Carlota Peón, Gilberto Prado<br />

Galán, Alberto Ruiz Treviño, Ilán Semo,<br />

Helena Varela, Gabriela Warkentin<br />

Director Carlos Deveaux Homs<br />

Director editorial Juan Domingo Argüelles<br />

Asistente de edición Beatriz Palacios<br />

Administración Áurea Maristany<br />

Información Angélica Cortés, Francelia Vargas<br />

Redacción Pedro Rendón<br />

revistaibero@uia.mx<br />

(55) 5950-4197<br />

GRUPO MEXICANO DE MEDIOS, S. A. DE C. V.<br />

Socios directores Elías González Rogel,<br />

Ricardo Rubio Martínez<br />

Editora Gráfica Albelia Gamboa y Vázquez<br />

Ventas Silvia Carranza Nieto y Jorge Torres<br />

Velázquez<br />

Atención a clientes Lupita Espínola Medina<br />

VENTAS PUBLICIDAD (55) 5291-5577<br />

CORREO ELECTRÓNICO<br />

ventas@gmmedios.com.mx<br />

, Revista de la <strong>Universidad</strong> <strong>Iberoamericana</strong> es una publicación bimestral de la <strong>Universidad</strong> <strong>Iberoamericana</strong> Ciudad de México y de Grupo Mexicano de Medios, S. A.<br />

de C. V., bajo la responsabilidad de la Dirección de Comunicación Institucional de la UIA. Editor responsable: Carlos Deveaux Homs, carlos.deveaux@uia.mx. Número de<br />

Certificado de Reserva otorgado por el Instituto Nacional de Derechos de Autor: 04-2009-082412294600-102. Número de Certificado de Licitud de Título:14722; número<br />

de Certificado de Licitud de Contenido: 12295, otorgados por la Comisión Calificadora de Publicaciones y Revistas Ilustradas de la Secretaría de Gobernación. Domicilio<br />

de la publicación: Prolongación Paseo de la Reforma 880, Lomas de Santa Fe, México, D.F., C.P. 01219. Teléfono 5950-4197 y 5950-4198. Fax: 5950-4316. Imprenta:<br />

Compañía Impresora El Universal, S.A. de C.V. Allende No. 176, Col. Guerrero, México 06300, D.F. Teléfono 5117-0190. Distribución: Prestadora de Servicios Cipro, S. A.<br />

de C.V. Fresas 9 Col. del Valle. Deleg. Benito Juárez. C. P. 03100 México, D.F. La responsabilidad de los artículos publicados refleja, de manera exclusiva, la opinión de<br />

sus autores y no necesariamente el criterio de la institución. No se devuelven originales no solicitados ni se entablará correspondencia al respecto. Prohibida la reproducción<br />

parcial o total, por cualquier medio o procedimiento, del contenido de la revista, sin autorización previa y expresa, por escrito, de la <strong>Universidad</strong> <strong>Iberoamericana</strong>. Año II,<br />

número 9, agosto-septiembre de 2010. Fotografía de portada: Corbis. ISSN en trámite.


El concepto “aldea global” fue acuñado<br />

por el sociólogo canadiense Marshall<br />

McLuhan a fines de la década de<br />

los sesenta del siglo pasado. Con<br />

este término, McLuhan se refiere a la inter–<br />

comunicación humana a escala global que nos<br />

lleva, irremediablemente, a un cierto grado de<br />

homogeneización en los modelos de vida y<br />

los gustos en todo el mundo. el paradigma de<br />

aldea global para McLuhan es la televisión.<br />

Ha transcurrido ya casi medio siglo desde<br />

que el autor de La galaxia Gutenberg y Guerra<br />

y paz en la Aldea Gobal utilizara, por primera<br />

vez, este concepto, y la globalización, entendida<br />

como esa intercomunicación inmediata<br />

a nivel mundial, se ha acentuado de modo<br />

notorio, para bien y para mal. A pesar de la<br />

globalidad, los problemas locales no dejan de<br />

existir con sus particularidades, y muchos de<br />

estos problemas no serían conocidos de no ser<br />

por el carácter global de la comunicación.<br />

en su famoso Homo videns, Giovanni Sartori<br />

advierte que “esta homogeneización es innegable,<br />

pero no modifica el problema planteado<br />

por el localismo y la aldeización. Podemos ser<br />

iguales en gustos, estilos de vida, ambiciones,<br />

criterios de éxito y otras cosas, y, a la vez, estar<br />

fragmentados”. Por ello, concluye Sartori,<br />

“cuando nos enfrentamos a un problema concreto,<br />

la aldea triunfa, y se desvanece la idea<br />

de ser de cualquier lugar del mundo”. Hoy es<br />

importante revisar las ventajas y los riesgos de<br />

una <strong>sociedad</strong> globalizada y, a la vez fragmentada,<br />

para decirlo con los términos de Sartori.<br />

carta del rector<br />

A la luz de la desigualdad y de las demandas<br />

sociales en México y en el mundo, es evidente<br />

que no todo lo global ha sido benéfico y, sin<br />

embargo, el hecho de estar vitalmente ligados<br />

a una <strong>sociedad</strong> mundial ha generado enormes<br />

posibilidades. Ante la crisis del modelo económico<br />

mundial y frente a las grandes desigualdades<br />

derivadas del dinamismo global que<br />

amenazan el futuro de muchas naciones, el<br />

mayor servicio que una universidad de inspiración<br />

cristiana puede prestar a la <strong>sociedad</strong> es,<br />

precisamente, el de contribuir a humanizar la<br />

globalización: frenar los peligros que conlleva<br />

en su forma actual y convertir en oportunidades<br />

para todos las posibilidades que ofrece.<br />

LA verdAd nos HArá Libres<br />

Dr. José Morales Orozco, S. J.<br />

Rector<br />

Ibero 3


GLOBALIZACIÓN Y SOCIEDAD/examen<br />

La globalización que vivimos en la<br />

actualidad es mucho más compleja<br />

que la experimentada entre finales<br />

del siglo XIX y principios del XX. No<br />

solamente involucra a un número mayor<br />

de individuos sino que además, gracias a<br />

los cambios tecnológicos, la integración<br />

comercial y financiera es mucho mayor.<br />

La crisis financiera de los últimos dos<br />

años es una pequeña muestra de ello. Su<br />

epicentro se localizó en los Estados Unidos,<br />

contagió rápidamente a las principales economías europeas y<br />

terminó golpeando la actividad económica de América Latina.<br />

La globalización no sólo implica el traslado de personas, bienes<br />

y dinero; no sólo son culturas e idiomas que tiñen <strong>sociedad</strong>es<br />

y moldean los conceptos de nación y nacionalismo; es también<br />

un proceso que acarrea oportunidades e impone restricciones<br />

económicas. Desde un punto de vista económico, la globalización<br />

enriquece a las <strong>sociedad</strong>es en la medida que sepamos<br />

aprovechar las oportunidades sin descuidar las restricciones. Y en<br />

esto no hemos sido exitosos.<br />

México es uno de los países con mayores tratados comerciales<br />

firmados. Sin embargo, durante los últimos 18 años, la economía<br />

mexicana solamente creció en 79% de manera acumulativa. Para<br />

el mismo período, Chile creció al 171%, Perú al 121% y los colosos<br />

asiáticos al 511% en el caso de China y 220% en el caso de<br />

la India. Y si sólo nos concentramos en el período 2001-2008,<br />

veremos que no vamos por buen camino: si seguimos al actual<br />

ritmo de 2.4% de crecimiento promedio anual, en las dos primeras<br />

décadas del siglo XXI habremos crecido en 60%. Mientras<br />

tanto, en el mismo período, Brasil alcanzará un crecimiento acumulado<br />

del 104%, Chile del 130% y Colombia del 143%. Todas<br />

estas economías están abiertas al comercio internacional. Nuestro<br />

problema no está necesariamente en los tratados comerciales,<br />

está en nuestra estructura económica, social y política.<br />

Son muchos los factores económicos que inciden en este bajo<br />

4 IBERO<br />

Pablo Cotler<br />

Doctor en Economía. Director del<br />

Departamento de Economía de<br />

la <strong>Universidad</strong> <strong>Iberoamericana</strong><br />

Ciudad de México<br />

›La economía<br />

mexicana en la<br />

globalización<br />

Desde un punto de vista económico,<br />

la globalización enriquece a las<br />

<strong>sociedad</strong>es en la medida que sepamos<br />

aprovechar las oportunidades sin<br />

descuidar las restricciones. Y en esto no<br />

hemos sido exitosos.<br />

dinamismo. Ciertamente nuestra globalización es sui generis: más<br />

del 85% de nuestras exportaciones e importaciones las hacemos<br />

con un solo país. La cercanía con los Estados Unidos hace menos<br />

costoso nuestro flujo comercial con ellos y nos da una ventaja<br />

competitiva respecto al resto del mundo. Pero si bien dicho país<br />

sigue siendo la economía más grande del mundo, su bajo dinamismo<br />

relativo al de China (2.9% y 9.4% a tasa anual en los últimos<br />

18 años, respectivamente) lleva a que el Fondo Monetario<br />

Internacional estime que en cinco años, ambas economías sean<br />

de similar tamaño. Ante ello, es imperativo que el sector privado<br />

empiece a reorientar sus exportaciones.<br />

Pero al acercarnos, la globalización conlleva la aparición de<br />

nuevos competidores que intentarán quitarnos mercados. Ante<br />

ello, es indispensable fomentar la innovación para producir bienes<br />

a menores costos y de mejor calidad, y también para introducir<br />

nuevos productos. La innovación es una de esas piezas que<br />

distingue a un país desarrollado o en vías de serlo, pues requiere<br />

de personal con cierto grado de educación y de un marco legal<br />

que garantice los derechos de la propiedad intelectual. Lamentablemente,<br />

en ambos aspectos, nuestra situación es deficiente.<br />

Por un lado, tenemos un sistema educativo de muy baja calidad<br />

y que no tiene visos de mejorar. Por el otro, vivimos en un país<br />

cuyos usos y costumbres son la informalidad y la corrupción. El<br />

pisoteo diario al marco legal son elementos que no fomentan<br />

prácticas innovadoras ni premian el esfuerzo. Ciertamente con


Foto: Corbis.<br />

estas características no nos distinguiremos como una economía<br />

innovadora, pieza cada vez más importante para preservar nuestro<br />

espacio en la economía internacional.<br />

La crisis internacional puso en entredicho algunas presunciones<br />

respecto a las instituciones financieras. Hoy emerge un<br />

consenso de que tanto mercados como gobiernos pueden ser<br />

falibles. El capitalismo no se quebró como algunos proclamaban;<br />

más bien sufre una nueva mutación. Lejos de las ideas que<br />

empezaron a popularizar Thatcher y Reagan en la década de los<br />

ochenta, empieza a conceptualizarse a la iniciativa privada y a<br />

los gobiernos como actores que se complementan. De acuerdo<br />

a esta nueva sabiduría, las autoridades públicas deben ser eficientes<br />

y eficaces (en sus costos y en sus logros), pero también<br />

pragmáticas, pues es necesario que consideren las restricciones<br />

políticas que pudieran enfrentar y busquen los mecanismos para<br />

ir alterándolas; sin prejuicios para actuar y dejar actuar conforme<br />

más convenga al crecimiento y desarrollo del país.<br />

Pero nuestro Estado es débil. Le exigimos que provea un sinfín<br />

de servicios, destacando entre ellos los de salud, educación y<br />

energía. Al mismo tiempo esperamos que invierta en infraestructura<br />

y ayude a resolver las grandes inequidades y los problemas<br />

que acarrea la pobreza. Sin embargo, gracias a una política generalizada<br />

que no castiga la evasión tributaria ni los “diablitos”,<br />

y a las múltiples exenciones tributarias, sus recursos son bajos y<br />

difícilmente pueden cubrir todas estas erogaciones. Ante las crecientes<br />

demandas por recursos y la baja recaudación, la solución<br />

que han tomado nuestros gobiernos —en aras de no generar<br />

importantes desequilibrios fiscales— ha sido reducir la inversión<br />

pública. Tal práctica ha traído como consecuencia<br />

que la infraestructura orientada al comercio no<br />

sea la idónea y que los ingresos derivados de<br />

la venta de petróleo —principal fuente de<br />

ingresos del Estado— bajen de manera<br />

paulatina. Tales hechos no abonan a favor<br />

del bienestar. Seguir así no nos<br />

conduce a buen puerto. Pero<br />

todo sugiere que las demandas<br />

de gasto público no cesarán y<br />

ante ello hay dos caminos a<br />

seguir. El primero pasa por un<br />

mayor endeudamiento externo<br />

y el segundo pasa por permitir<br />

—como lo hicieron China y Brasil—<br />

la entrada de inversión extranjera<br />

directa en áreas reservadas al<br />

Estado. Ambos tienen sus bemoles,<br />

pero nuestra clase política<br />

se ha paralizado y con<br />

ello el progreso del país.<br />

Además, el gasto público es de baja calidad. La previsible pobreza<br />

y desigualdad de capacidades institucionales al interior de<br />

los distintos órdenes de gobierno, dependencias y programas<br />

públicos que existe a lo largo y ancho del país, la informalidad<br />

que moldea todos los arreglos institucionales y la búsqueda<br />

de rentas por parte de los distintos actores que interactúan en<br />

el proceso de elaboración y ejecución del gasto son factores<br />

que influyen en dicha calidad. Corregir esto no es fácil ni será<br />

rápido, pero debe hacerse. Crear nuevas reglas o instituciones<br />

puede servir, pero primero deben atacarse las causas de tan baja<br />

calidad. Hacer más eficiente y equitativa la impartición de la<br />

justicia, discutir las bondades y costos del servicio profesional de<br />

carrera, y evaluar la idoneidad de haber descentralizado buena<br />

parte del gasto federal son algunos de los temas a discutir.<br />

Los cambios tecnológicos que se vienen gestando auguran<br />

que la competencia por mercados y empleos será cada vez<br />

mayor y ante ello debemos prepararnos. Requerimos generar<br />

incentivos para ser competitivos e innovadores. Necesitamos<br />

abrirnos a la inversión extranjera pues los recursos internos no<br />

nos alcanzan. Precisamos de un sector público que, haciendo<br />

buen uso de los recursos, ofrezca bienes y servicios de calidad.<br />

Urge una cruzada cívica que aliente el cumplimiento de la ley.<br />

Sólo así podremos empezar a construir un mercado interno que<br />

pueda convertirse en un segundo motor de la economía y con<br />

ello empezaremos a visualizar un sistema financiero que promueva<br />

su crecimiento. Sólo así podremos generar expectativas<br />

de un bienestar cada vez mayor.<br />

IBERO 5


GLOBALIZACIÓN Y SOCIEDAD/examen<br />

›Política<br />

mexicana y<br />

globalización<br />

Hay varias formas en las que la política de cualquier nación<br />

puede relacionarse en un entorno internacional globalizado:<br />

puede aislarse y protegerse, puede influir y moldear<br />

aspectos de dicho entorno o puede abrirse a influencias<br />

y presiones del exterior. Por mucho tiempo<br />

la política mexicana fue un conjunto de<br />

asuntos exclusivamente domésticos<br />

decididos internamente. Es decir,<br />

por muchos años escogió aislarse<br />

y protegerse del entorno internacional.<br />

Estimo que esta condición<br />

de autarquía política<br />

fue perturbada por el exterior<br />

cuando la deuda externa<br />

del país se disparó a niveles<br />

inmanejables en la primera<br />

mitad de los ochentas.<br />

La institución internacional a<br />

cargo de la primera perturbación<br />

de nuestra paz autárquica fue el Fondo<br />

Monetario Internacional: exigiendo<br />

una restructuración a fondo del sector público.<br />

Curiosamente en ese entonces, no se oía hablar<br />

de la globalización, eran todavía los tiempos de la<br />

guerra fría y el comercio internacional era una actividad<br />

de importancia secundaria para los países<br />

más desarrollados. Por ejemplo, Estados Unidos,<br />

una de las economías líderes, en 1990 exportaba<br />

una proporción de su Producto Interno<br />

Bruto (PIB) menor a la exportada en 1879. 1<br />

Por su parte México comenzó a promover<br />

las exportaciones no petroleras apenas en<br />

1986. Y apenas en ese año comenzaron a hacerse<br />

atractivas las exportaciones, pues aunque<br />

el tipo de cambio todavía era fijado por las<br />

autoridades, éstas comenzaban a fijarlo a un<br />

nivel marcadamente subvaluado, a un precio<br />

deliberadamente menor al que correspondía<br />

a la demanda nacional e internacional de<br />

nuestra moneda. Algo que raramente ocurrió<br />

6 IBERO<br />

David Mena Alemán<br />

Doctor en Gobierno por la <strong>Universidad</strong><br />

de Essex. Director del Departamento de<br />

Estudios Internacionales de la <strong>Universidad</strong><br />

<strong>Iberoamericana</strong> Ciudad de México<br />

entre 1929 y 1982. México había sostenido su autarquía política<br />

vendiendo pocas cosas al exterior e importando casi sólo bienes<br />

de capital, bienes que servían para producir manufacturas. Esto<br />

minimizaba sus necesidades de contactos con el exterior, su<br />

dependencia del exterior e incluso su dependencia<br />

de Estados Unidos. Pero la crisis<br />

de la deuda externa desde 1982 comenzó<br />

a poner fin al aislamiento<br />

de la política mexicana. Los<br />

asuntos de la política mexicana<br />

comenzaron a dejar de<br />

ser exclusivamente asuntos<br />

domésticos decididos internamente.<br />

La economía<br />

mexicana y, consecuentemente,<br />

la política mexicana,<br />

comenzaron a convertirse en<br />

un conjunto de asuntos globales.<br />

¿Fue esto algo esencialmente<br />

negativo? Realmente, no.<br />

Ahora la política mexicana es un<br />

asunto completamente global. Si alguien tiene<br />

algo que decir sobre México, lo dice y puede<br />

mover el fiel de la balanza a su favor. Por ejemplo, la<br />

Suprema Corte emitió su fallo en contra de los insurrectos<br />

de Atenco en febrero 2009. Sin embargo,<br />

a juicio de Jody Williams, Premio Nobel 1997, los<br />

activistas de Atenco habían sido injustamente sentenciados,<br />

y las autoridades que les reprimieron,<br />

arbitrariamente exculpadas. Después de una larga<br />

campaña a favor de los activistas de Atenco, el Comité<br />

Libertad y Justicia para Atenco, con el apoyo<br />

de la Premio Nobel 1997, en junio de 2010 logró<br />

la libertad de todos ellos. Esta es una historia<br />

reciente de presión interna y externa sobre una<br />

decisión de un sector específico del gobierno<br />

mexicano. Esta historia muestra que el gobierno<br />

mexicano ya no sólo debe procesar demandas de<br />

actores políticos nacionales (a los que se puede<br />

olímpicamente ignorar) sino también de actores<br />

Foto: Corbis.


políticos internacionales (a los que no se<br />

puede ignorar si se quiere evitar tensión<br />

internacional) tales como Daniel Giménez<br />

Cacho, mexicano-español, líder del Comité<br />

Libertad y Justicia para Atenco —que,<br />

por cierto, también es actor internacional<br />

de cine— y Jody Williams, estadounidense,<br />

coordinadora de la Campaña Internacional<br />

para prohibir las Minas Terrestres. Los<br />

que juegan el juego democrático en México ya no están solos. Ya<br />

no sólo hay partidos políticos independientes del gobierno; también<br />

hay ONG nacionales e internacionales, así como individuos<br />

mexicanos y extranjeros con alta visibilidad política global.<br />

Ahora algunos asuntos importantes a nivel global se convierten<br />

en asuntos de la agenda política nacional. Qué debe hacer el<br />

gobierno por la nación no es algo determinado exclusivamente<br />

por el peso del asunto dentro de la nación sino por el peso internacional<br />

del asunto, aunque no tenga peso significativo a nivel<br />

nacional. Uno podría pensar que el trato humanitario de animales<br />

domésticos y silvestres no es un asunto que decide quien gana una<br />

elección presidencial apretada, pero leyes tales como la Ley Federal<br />

de Sanidad Animal (1993) o la Ley General de Vida Silvestre<br />

(2000) o la NOM33 1995 de Sacrificio Humanitario de los Animales<br />

Domésticos y Silvestres, todas aprobadas por el Congreso<br />

de la Unión, contienen disposiciones de vanguardia internacional<br />

sobre el tema. 2<br />

¿Cómo sucede esto en un país que no parece esmerarse por<br />

el cuidado de animales sean éstos domésticos o silvestres? Desde<br />

luego que hay una gran cantidad de ONG nacionales procurando<br />

el bienestar de tales animales y denunciando abusos, pero la actividad<br />

de estos grupos adquiere masa crítica sólo cuando organizaciones<br />

internacionales hacen eco a sus demandas. Por ejemplo en<br />

1998, la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró en un<br />

reporte sobre la rabia que México tenía una población entre 13 y<br />

16 millones de perros, la mayoría de ellos callejeros. 3 Para ubicar<br />

la gravedad de la cifra citada por la OMS hay que considerar que,<br />

en 2010, se estima que China tiene casi 23 millones de perros con<br />

dueño, seguida por Japón con 9.5 millones. 4<br />

Con tal declaración el asunto dejó de ser un asunto de una<br />

minoría mexicana excéntrica y se convirtió en un asunto global<br />

y eso convocó en el pasado que la participación de ONG internacionales<br />

como la World Society for the Protection of Animals<br />

fungiera como instancia asesora para la propuesta de leyes sobre<br />

el tema en México. 5<br />

Otras leyes, como la Ley General de Acceso de las Mujeres a una<br />

Vida Libre de Violencia y la Ley de Sociedades de Convivencia<br />

que legaliza el matrimonio gay en el Distrito Federal, han seguido<br />

la misma lógica. Tienen una base de apoyo local, y el apoyo local<br />

por sí mismo no es suficiente para obtener la legislación deseada,<br />

pero las leyes entran en la agenda nacional porque son asuntos<br />

relevantes de la agenda global de preocupaciones y derechos.<br />

En la globalización el entorno internacional provee recursos y<br />

respaldo mediático de personalidades, instituciones y ONG in-<br />

Por mucho tiempo la política<br />

mexicana fue un conjunto de<br />

asuntos exclusivamente domésticos<br />

decididos internamente.<br />

ternacionales a agrupaciones políticas mexicanas, para avanzar sus<br />

causas, que generalmente no tienen el poder para valerse por sí<br />

mismas o que son minorías. Esto ha producido una distribución<br />

del poder en la <strong>sociedad</strong> mexicana mucho más equitativa y ha<br />

hecho más difícil a las autoridades salirse con la suya una vez que<br />

incurren en abusos.<br />

Pero hay inequidades e injusticias que escapan al enfoque de<br />

la globalización y que por tanto no contarán con personalidades,<br />

instituciones y ONG internacionales que las cuestionen. Por<br />

ejemplo, México contiene en sus diversas regiones un 70% de la<br />

biodiversidad del planeta. No hay otro país del mundo con tanta<br />

variedad de reptiles como el nuestro, y es el segundo país en el<br />

mundo con más variedad de mamíferos. 6 Por lo demás, varias<br />

de sus ciudades han sido declaradas patrimonio de la humanidad<br />

por su arquitectura y riqueza artística y varias de sus regiones son<br />

reservas de la biosfera. Todos estos son bienes públicos de la humanidad.<br />

Pero, a la fecha, la responsabilidad de su mantenimiento<br />

recae exclusivamente en los mexicanos. La política mexicana no<br />

puede gestionar con sus propios recursos el mantenimiento de tales<br />

bienes de la humanidad sin poner en riesgo la sobrevivencia de<br />

su propia población. Ciertamente, es una obligación del gobierno<br />

mexicano reclamar contribuciones de los países avanzados para<br />

proteger esta riqueza biótica y creaciones humanas como las ciudades<br />

de Oaxaca, Puebla, Taxco y Guanajuato. Pero deja mucho<br />

lugar a la sospecha que no haya habido activismo de la comunidad<br />

global para enfrentar estas responsabilidades colectivas.<br />

En vista de lo anterior podemos concluir que la política mexicana<br />

se ha abierto o expuesto a las demandas de un contexto<br />

internacional altamente globalizado, pero que la política de los<br />

países altamente desarrollados no ha sido sensible a las excesivas<br />

responsabilidades que tienen algunos países como el nuestro para<br />

mantener bienes públicos de la humanidad. Al menos no con la<br />

intensidad o solicitud que han buscado otros asuntos de la agenda<br />

global considerados en este artículo.<br />

1 Michael D. Bordo, Barry Eichengreen, Douglas A. Irwin, “Is Globalization Today<br />

Really Different from Globalization a Hundred Years Ago.” Working Paper 7195,<br />

National Bureau of Economic Research, Wasington D.C., junio 1999, p. 60, cuadro 2.<br />

2 Norman E. R. y N. Contreras Hernández. “Like Butter Scraped Over Too Much<br />

Bread’: Animal Protection Policy in Mexico” in Review of Policy Research, vol. 22, núm.<br />

1, january 2005, pp. 59-76.<br />

3 World Health Organization. “Field Application of Oral rabies Vaccinations for<br />

Dogs.” Report of WHO consultation, Ginebra, Suiza, 1998, p. 4.<br />

4 “World Top Ten Countries With Most Pet Dog Population”, disponible en:<br />

http://www.mapsofworld.com/world-top-ten/countries-with-most-pet-dogpopulation.html<br />

5 Norman y Contreras, “Like Butter Scraped Over Too Much Bread’...”, p. 70.<br />

6 Norman y Contreras, “Like Butter Scraped Over Too Much Bread’...”, p. 69.<br />

IBERO 7


GLOBALIZACIÓN Y SOCIEDAD/examen<br />

›<strong>Globalización</strong> y<br />

educación en México<br />

Gilberto Guevara Niebla<br />

Maestro en Ciencias. Fue Subsecretario de Educación Básica de la SEP. Es miembro del<br />

Consejo del Instituto de Educación para la Transición Democrática (IETD), Director<br />

General de la Revista Educación 2001 y Director del Centro de Investigación Educativa y<br />

Actualización de Profesores, A. C. Es autor, entre otros libros, de La crisis de la educación<br />

superior, El saber y el poder, La catástrofe silenciosa, Teoría de la educación,<br />

Democracia y educación y La libertad nunca se olvida<br />

I. INTRODUCCIÓN<br />

He aquí la definición de globalización formulada por un economista:<br />

“La globalización es la integración más estrecha de los<br />

países y los pueblos del mundo producida por la enorme reducción<br />

en los costos de transporte y comunicación, y el desmantelamiento<br />

de las barreras artificiales a los flujos de bienes, servicios,<br />

capitales, conocimientos y (en menor grado) personas a través de<br />

las fronteras” (Stiglitz, J. E., 2002:34).<br />

Esta definición omite, desde luego, la consideración de que<br />

la globalización es una empresa histórica y tiene —declaradamente—<br />

un fin ético y político que no es otro que la satisfacción<br />

de las necesidades humanas. No obstante su naturaleza (humana),<br />

hay razones para pensar que el proceso de globalización es irreversible<br />

(Beck, U. 1998:29) y que no siempre produce los buenos<br />

resultados que promete (Stiglitz, J. E. 2002).<br />

Las teorías sobre la globalización suelen ser de dos tipos: a) las<br />

deductivas, que suelen partir de las premisas abstractas que corresponden<br />

al pensamiento librecambista o (neo)liberal, y b) las<br />

8 IBERO<br />

inductivas que se construyen a partir de las circunstancias históricoconcretas<br />

de la naciones (o regiones) y buscan reflexionar sobre las<br />

formas de inserción específicas al fenómeno global.<br />

Las teorías de la primera categoría suelen desembocar en posturas<br />

ideológicas; las segundas ofrecen, en cambio, perspectivas realistas<br />

y una base más empírica. Preferimos la segunda vía. En el caso<br />

de México (y América Latina), la globalización surgió progresivamente<br />

en el marco de la expansión económica, con base en la industrialización<br />

por substitución de importaciones, en las tres décadas<br />

siguientes al fin de la Segunda Guerra Mundial. En México, se<br />

adoptó desde 1945 un modelo de desarrollo nacionalista, con poca<br />

apertura al exterior y amplias medidas proteccionistas. Entre 1945<br />

y 1980 el país creció a una tasa media de 6.5%. En lo político se<br />

adoptó un modelo presidencialista-populista-semicorporativo basado<br />

en un partido “oficial” y elecciones fraudulentas como sistema.<br />

El control de la <strong>sociedad</strong> para fines de estabilidad era una obsesión<br />

de los gobernantes. Este control social hizo viable un proceso de<br />

industrialización exitoso basado en bajos salarios, inhibición del<br />

Foto: Corbis.


conflicto social mediante la represión, o la<br />

corrupción, y numerosos estímulos a la inversión<br />

privada en la industria. Este modelo<br />

político hizo crisis en 1968.<br />

Diez años después se inició una reforma<br />

electoral de carácter democrático. La crisis<br />

petrolera mundial de 1973 otorgó a México (país esencialmente<br />

petrolero) una posición financiera privilegiada. El país tuvo en esos<br />

años ingresos enormes. Sin embargo, entre 1970 y 1982 México<br />

tuvo dos gobiernos (Luis Echeverría Álvarez y José López Portillo)<br />

que, en vez de preparar a México para el fenómeno globalizador<br />

que se avecinaba, desplegaron políticas crecientemente populistas<br />

que supusieron gastos enormes en esferas no siempre productivas (y<br />

a veces, totalmente irrelevantes) apoyando sus proyectos, a la postre,<br />

con endeudamientos crecientes.<br />

Mientras tanto, el mundo comenzaba a plegarse a los principios<br />

globalizadores y (neo)liberales del Consenso de Washington. No<br />

hubo tiempo para prepararse. El cambio llegó de súbito: en 1982, y<br />

se produjo por un devaluación, y una crisis que duró diez años. Desde<br />

1982 el gobierno adoptó una política de ajuste y adelgazamiento<br />

del Estado encaminada a pagar la deuda externa y retomar la ruta<br />

del desarrollo de acuerdo a los lineamientos que proponía el Fondo<br />

Monetario Internacional (FMI). El nuevo presidente (y los dos que<br />

le siguieron) se plegaron dócilmente, como obedientes discípulos, a<br />

las nuevas reglas económicas que provenían de Washington (disciplina<br />

fiscal, apertura nacional al comercio internacional, liberalización<br />

de tasas de interés, privatización, desregulación, etcétera).<br />

En 1990 México firmó el Tratado de Libre Comercio de América<br />

del Norte (TLCAN). En los años siguientes, los esfuerzos se dirigieron<br />

a globalizar a México, pero esos esfuerzos fracasaron y la economía<br />

mexicana, antes que levantarse, se derrumbó y la desigualdad se<br />

acentuó hasta extremos nunca antes conocidos (Cordera, R. 2006).<br />

La globalización de México (su integración al mercado mundial) a<br />

través de una activa política de exportaciones sobre la base de salarios<br />

bajos, altas tasas de desocupación, disminución del mercado interno<br />

e inflación controlada fue propuesta como vía privilegiada para integrar<br />

al país a los “portentosos cambios del mundo que adquirieron<br />

velocidad de crucero al desplomarse el sistema bipolar como consecuencia<br />

de la caída de la Unión Soviética” (Cordera, R. 2006:16).<br />

La reestructuración de la política económica se acompañó por otros<br />

cambios, entre los cuales sobresale el proceso de reformas políticas y<br />

electorales que condujo a México a la democracia (1978-1996).<br />

II. MARCO HISTÓRICO EDUCATIVO<br />

EL GIRO DE LOS AÑOS 40. Las líneas estructurales del desarrollo<br />

educativo de México 1 fueron formuladas en los años cuarenta durante<br />

el sexenio de Manuel Ávila Camacho (1940-1946) como medidas<br />

de ruptura con el anterior período populista radical de la Revolución<br />

Mexicana (1920-1940). Estas medidas se pueden enumerar así:<br />

A. Renuncia a la orientación socialista de la educación y adopción<br />

de un concepto de artículo tercero democrático-liberal (1945).<br />

B. Reafirmación del modelo educativo de control estatal y centralizado<br />

simbolizado por la SEP.<br />

La educación básica en México<br />

se encuentra rezagada respecto<br />

a las demandas de la revolución<br />

tecnológica y de la globalización.<br />

C. Unificación de los trabajadores en un solo sindicato, el SNTE,<br />

al que se otorgaron desde 1946 privilegios corporativos (afiliación<br />

automática, colecta de cuotas por las autoridades, control de posiciones<br />

clave en el sistema escolar).<br />

D. Uniformización de planes de estudio dictados por la SEP<br />

(1943).<br />

E. El campo dejó de ser el eje de la política educativa y ahora ese<br />

eje se trasladó a las zonas urbanas.<br />

F. Se separó a la escuela de la comunidad mediante la “profesionalización”<br />

del magisterio. La enseñanza pasó a ser una materia técnico-profesional<br />

y, por lo mismo, ajena a los profanos. Hubo una titulación<br />

masiva y acelerada de docentes a través del Instituto Federal<br />

de Capacitación Profesional del Magisterio fundado en diciembre<br />

de 1944.<br />

G. Se dio a la educación en esos años una orientación ideológica<br />

acentuadamente nacionalista compatible con el modelo de desarrollo<br />

proteccionista.<br />

MASIFICACIÓN. Sobre estos fundamentos se dio el ciclo de expansión<br />

que siguió (1960-2000). El crecimiento de la cobertura<br />

educativa de educación elemental o primaria tuvo como principal<br />

escenario a las ciudades y fue acompañado por el correspondiente<br />

declive de la escuela rural. Los centros de educación superior rurales<br />

(Normales Rurales, Escuelas de Agricultura) también decayeron<br />

aceleradamente (Guevara, N., 1990). En esos mismos años la<br />

productividad del campo declinó (para 1967 México dejó de ser<br />

autosuficiente en producción de maíz). La expansión de la oferta<br />

fue espectacular: en 1960 México tenía 3 millones de estudiantes;<br />

para el año 2000 esa cifra se elevó a aproximadamente 30 millones.<br />

Este crecimiento recibió un impulso especial en 1960 con el Plan<br />

de Once Años lanzado por el secretario Jaime Torres Bodet.<br />

Es imposible ver ese desarrollo en términos políticamente neutrales:<br />

la creación de nuevas escuelas siempre fue concebida dentro<br />

de una política populista y clientelar. Se daba educación; pero se<br />

pedía a cambio apoyo político al partido oficial y al régimen. Ciertamente,<br />

como señala Phillip H. Coombs en su Crisis mundial de la<br />

educación (1970), en el ciclo expansivo de la posguerra, en todo el<br />

mundo, se observó una exaltación de lo cuantitativo con (relativo)<br />

sacrificio de los aspectos cualitativos. Los presidentes de México<br />

se lucían año con año en los Informes anuales ofreciendo cifras<br />

crecientes de escuelas, alumnos, maestros, etcétera. Pero el proceso<br />

de crecimiento fue una auténtica masificación, en el sentido de que<br />

no fue resultado de un proyecto previo (una planeación) sino una<br />

expansión guiada por la espontaneidad. Por lo mismo, privaron en<br />

el fenómeno deficiencias: se improvisaron maestros, no se modernizaron<br />

las escuelas normales, la relación maestro-alumno se debilitó,<br />

no hubo política alguna de evaluación; tampoco hubo esfuerzos<br />

sistemáticos en investigación educativa, y el sistema se burocratizó.<br />

IBERO 9


GLOBALIZACIÓN Y SOCIEDAD/examen<br />

Pero un fenómeno propio de México fue lo que Carlos Ornelas<br />

ha llamado “la colonización” del sistema educativo por el SNTE.<br />

A lo largo del proceso expansivo, el SNTE fue acrecentando su<br />

poder con la expansión de sus afiliados, y extendiendo su poder de<br />

control sobre los directores e inspectores (facultad que le otorgaba<br />

el Reglamento Laboral de 1946) sobre las secretarías de los estados,<br />

sobre la dirección de educación normal, sobre los consejos técnicos<br />

de educación, etcétera. Mientras tanto, la docencia se ajustaba a un<br />

patrón de enseñanza tradicional que sólo podía arrojar resultados de<br />

aprendizaje mediocres.<br />

III. LA PREOCUPACIÓN POR LA CALIDAD<br />

El giro hacia la globalización de 1982 trajo consigo una nueva<br />

reflexión sobre la política educativa. Surgió el interés por la calidad.<br />

En 1983 la <strong>Universidad</strong> Autónoma de Aguascalientes hizo<br />

una medición de aprendizajes en las escuelas primaria y secundaria<br />

obteniendo resultados preocupantes (“reprobatorios”). En 1986 el<br />

rector de la UNAM Jorge Carpizo hizo públicas las calificaciones<br />

obtenidas por los alumnos de nuevo ingreso en los niveles mediosuperior<br />

y superior en donde se registraron promedios de 2.5 y 3.8<br />

respectivamente (escala 0-10). En 1990 la revista Nexos publicó un<br />

reporte de los resultados de un examen elaborado bajo mi dirección<br />

(“México: ¿Un país de reprobados?”) que era convergente en sus<br />

resultados con los datos anteriores.<br />

Hubo otras mediciones que se hicieron públicas en esos años<br />

(Guevara N. 1992). Estos hechos coincidían con una preocupación<br />

mundial por la calidad de la educación. En 1982 el IEA hizo públicos<br />

los resultados de un examen comparado en 48 países que<br />

demostraba que las mejores calificaciones correspondían a Singapur,<br />

Corea y Japón, mientras Estados Unidos y otras potencias de<br />

occidente se vieron relegadas a posiciones mediocres. El IEA test<br />

provocó una auténtica conmoción en Estados Unidos. El presidente<br />

Reagan reaccionó con alarma e integró una Comisión de Excelencia<br />

encargada de estudiar las causas de ese “desastre educativo”.<br />

Al poco tiempo esa comisión hizo público una reporte bajo el título<br />

expresivo de “Una nación en peligro” (1983). A continuación<br />

se produjeron en Estados Unidos innumerables cambios de muy<br />

diversa naturaleza. En esos momentos organismos como OCDE,<br />

FMI, Banco Mundial, OEA, BID y UNESCO comenzaron a investigar<br />

el tema educativo y a lanzar pronunciamientos sobre la mejor<br />

forma de alcanzar la anhelada “calidad”. En la reforma educativa<br />

mexicana de 1992 desempeñaron un papel decisivo las ideas del<br />

Banco Mundial (Loyo, A.).<br />

IV. GLOBALIZACIÓN Y CALIDAD EDUCATIVA<br />

En el sexenio de Carlos Salinas de Gortari (1988-1994) se lanzó un<br />

extenso programa de privatización de empresas estatales para cubrir<br />

la deuda y, asimismo, se apoyó una estrategia —Programa Solidaridad—<br />

de asistencia social mediante la cooperación entre el Estado<br />

y las comunidades. Esta última fue muy criticada por los tecnócratas<br />

neoliberales y, al final, fracasó. No así la privatización que produjo<br />

excedentes que el gobierno utilizó, en parte, para revigorizar la<br />

educación que sufría una postración creciente desde 1982.<br />

10 IBERO<br />

Se lanzó, asimismo, una reforma educativa que cristalizó en mayo<br />

de 1992 en el Acuerdo Nacional para la Modernización de la Educación<br />

Básica (ANMEB), pacto que fue firmado por todos los órganos<br />

ejecutivos del Estado y por el SNTE. El ANMEB incluía los siguientes<br />

cambios: a) Descentralización de la operación de las escuelas<br />

federales hacia los gobiernos estatales; b) Creación de consejos<br />

de participación social para vincular la escuela con la comunidad; c)<br />

Elaboración de nuevos planes y programas de estudio y emisión de<br />

nuevos libros de texto; d) Creación de un sistema de compensación<br />

al salario docente de acuerdo al desempeño (Carrera Magisterial);<br />

e) Programa de viviendas para trabajadores de la educación.<br />

Este programa de reformas avanzó lentamente y, cuando se realizaron<br />

las primeras evaluaciones (IEA, 1995; OCDE-PISA, 2000),<br />

los resultados arrojados fueron desastrosos. La descentralización falló<br />

en lo financiero y en su implantación en los estados; la participación<br />

social quedó en el papel; la reforma de planes y programas se hizo<br />

conforme a un modelo de enseñanza-aprendizaje (el constructivismo<br />

piagetiano) que representaba un estándar muy elevado para<br />

la preparación real de los docentes; la carrera magisterial degeneró<br />

en un mecanismo credencialista; el programa de vivienda nunca<br />

trascendió y es probable (yo presumo) que los recursos fueron retenidos<br />

ilegalmente por la dirección sindical. El SNTE se dedicó<br />

activamente a sabotear la participación social, con el argumento de<br />

que al crearse los consejos, el gremio saldría debilitado. Al mismo<br />

tiempo el SNTE creció y aumentó su presencia política dentro y<br />

fuera del sistema educativo.<br />

V. CAMBIOS EDUCATIVOS EN LA ALTERNANCIA<br />

La salida del PRI del Ejecutivo y el ascenso del PAN no produjeron,<br />

como se esperaba, un cambio sustancial en la política educativa.<br />

Bajo el gobierno de Vicente Fox se lanzaron programas sin<br />

un concepto estratégico de política educativa y como resultado de<br />

presiones, sobre todo del SNTE, de la OCDE y de los empresarios.<br />

Sin embargo, hubo tres cambios sustantivos que deben mencionarse,<br />

aunque fueron resultado de presiones políticas circunstanciales y<br />

se dieron sin marco estratégico alguno: a) El establecimiento, en<br />

2002, de la obligatoriedad del nivel preescolar y la adopción en él<br />

de un nuevo programa por competencias; b) La reforma de planes<br />

de estudio de la escuela secundaria, y c) La creación en 2002 del<br />

Instituto Nacional de Evaluación de la Educación (INEE).<br />

Era obvio, sin embargo, que la nueva administración deseaba hacer<br />

públicos los estudios internacionales (sobre todo los exámenes<br />

PISA) y por primera vez se hizo patente ante todo el público la<br />

decadencia del sistema educativo mexicano. Se iniciaron asimismo<br />

otros programas, algunos de importancia como el Programa Escuelas<br />

de Calidad (PEC), consistente en conceder recursos a las escuelas<br />

dispuestas a introducir ciertos cambios básicos en su funcionamiento.<br />

Se hizo gran escándalo alrededor de un programa que introducía<br />

la tecnología (la computadora y el pizarrón electrónico) a la escuela<br />

primaria digitalizando los contenidos del libro de texto. A la larga se<br />

vio que, aunque estos instrumentos hacían más atractiva la clase, no<br />

contribuían mucho a elevar los aprendizajes (Guevara, et al.; 2006).<br />

Se lanzó asimismo un Programa Nacional de Lectura (PNE) que


Foto: Corbis.<br />

fue reforzado con la creación de las “Bibliotecas de aula”. Otro<br />

programa fue encaminado a reforzar entre los niños y los jóvenes el<br />

respeto a la legalidad, etcétera.<br />

Pero el hecho político de mayor relevancia durante ese gobierno<br />

(2000-2006) fue la relación personal estrecha que estableció el<br />

presidente con la líder (Presidenta Vitalicia) del SNTE, Elba Esther<br />

Gordillo, lo cual se reflejó en innumerables concesiones al sindicato,<br />

sobre todo políticas y pecuniarias. Hubo numerosas transferencias<br />

no legítimas de recursos de la SEP hacia el SNTE (se dice que este<br />

gremio manejó cerca de mil millones de pesos en esos años) lo cual<br />

permitió a la cúpula sindical financiar la creación de un partido<br />

político “de los maestros”, el llamado PANAL.<br />

En el sexenio siguiente, el PAN volvió a ganar la presidencia con<br />

Felipe Calderón Hinojosa y éste volvió a establecer un vínculo personal<br />

estrecho con la líder sindical, con la reproducción ampliada de<br />

los vicios antes citados. Todavía más: en la Subsecretaría de Educación<br />

Básica se colocó a un yerno de Gordillo. Por añadidura, en la<br />

SEP fue colocada una persona ajena del todo al campo educativo y<br />

que, por ello, entró rápidamente en conflicto con la líder del SNTE.<br />

Bajo una tensión permanente, se lanzó el Programa Sectorial, pero<br />

unas semanas después el SNTE presentó al presidente un proyecto de<br />

programa alternativo, mismo que fue aceptado por el Ejecutivo y fue<br />

dado a conocer como Alianza por la Calidad Educativa. Desde luego,<br />

alianza cupular entre el SNTE y la SEP. El nuevo programa imponía<br />

un co-gobierno de la ACE (SEP-SNTE) y el gremio tuvo desde<br />

ese momento un protagonismo en lo educativo sin precedente. Las<br />

empresas concretas que se han materializado bajo el marco de la ACE<br />

La salida del PRI del Ejecutivo<br />

y el ascenso del PAN no<br />

produjeron, como se esperaba,<br />

un cambio sustancial en la<br />

política educativa.<br />

son, todas, irrelevantes, porque no han modificado en grado sobresaliente<br />

la organización y funcionamiento del sistema educativo.<br />

VI. CONCLUSIÓN<br />

En este artículo se ha destacado la globalización económica dejando<br />

de lado otros aspectos asociados y esenciales. Tomando en cuenta<br />

esta limitación, podemos concluir que la educación básica en México<br />

se encuentra rezagada respecto a las demandas de la revolución<br />

tecnológica y de la globalización. Atado a su pasado corporativo,<br />

burocrático y de opacidad, el sistema educativo vive una suerte de<br />

secuestro bajo la “colonización” multifacética que sufre de parte del<br />

SNTE y no ha sido convocada a una reforma radical y profunda<br />

que la ponga a tono con la época.<br />

La inercia de mediocridad que sufre la educación se asocia a la<br />

estrategia de integración a la globalización adoptada por México<br />

y que se basa en utilizar la fuerza de trabajo barata a fin de atraer<br />

exportaciones y la ausencia de una política educativa de vanguardia<br />

dirigida a producir masivamente recursos humanos científicos y<br />

tecnológicos de mediano y alto nivel, capaces de impactar sobre la<br />

productividad y la competitividad del país.<br />

BIBLIOGRAFÍA<br />

Beck U. (1998). ¿Qué es la globalización? Paidós, Barcelona.<br />

Cordera R. coord. (2006). La globalización en México. UNAM. México.<br />

Guevara Niebla G. (1980). El saber y el poder. UAS. México.<br />

Guevara Niebla G. (1992). La catástrofe silenciosa. FCE. México.<br />

Guevara Niebla G. (2006). Evaluación del programa Enciclomedia. México.<br />

Stiglitz. J. E. (2002). El malestar de la globalización. Taurus, Madrid.<br />

1 En este ensayo se usa el término “educación” como sinónimo de “educación<br />

básica”.<br />

IBERO 11


GLOBALIZACIÓN Y SOCIEDAD/examen<br />

›La<br />

educación<br />

superior<br />

ante la<br />

globalización<br />

De acuerdo con uno de los expertos sobresalientes de la<br />

GUNI 1 , las nuevas realidades emergentes que tienen<br />

que ver con la educación superior en el entorno actual<br />

incluyen, desde la expansión exorbitante de la matrícula en los<br />

últimos años, el incremento sin precedentes de la educación privada,<br />

el auge de políticas que consideran la educación superior<br />

como una mercancía, la incidencia de las nuevas tecnologías en<br />

los procesos de enseñanza y aprendizaje, la educación a distancia<br />

y virtual, hasta la intensificación de la internacionalización, y el<br />

incremento de los procesos de globalización y de las tendencias<br />

mercantilistas, expresadas en las propuestas del Acuerdo General<br />

Sobre el Comercio de Servicios (AGCS).<br />

El fenómeno de la globalización, visto a través de algunos de<br />

sus efectos como los antes mencionados, ha sido, pues, de indiscutible<br />

relevancia. Acompañó el advenimiento de la <strong>sociedad</strong> de<br />

la información y del conocimiento. Ni más ni menos que el momento<br />

seminal de la hegemonía del mercado y del nacimiento<br />

de una nueva época.<br />

El discurso de las instituciones educativas del país considera<br />

desde hace tiempo a la globalización como parte de su entorno.<br />

Ahora ya es un tópico. Pero su significación práctica a lo largo<br />

de las últimas dos décadas, remite a la particularidad de cómo el<br />

fenómeno de la globalización se asumió en México en el contexto<br />

de una remodelación del sistema dominante.<br />

La modernización nacional iniciada a finales de los años<br />

ochenta, devino del agotamiento del modelo económico que<br />

dio muestras de haber concluido su ciclo de manera dramática,<br />

con sucesivas crisis sexenales marcadas por la devaluación, la<br />

inflación y el endeudamiento, acompañadas de graves manifestaciones<br />

de inconformidad social, que hicieron necesarias reformas<br />

estructurales profundas y la aplicación de nuevas políticas en<br />

todos los órdenes de la vida pública.<br />

Como lo recuerda Julio Rubio Oca 2 , las repercusiones de la<br />

globalización y las referencias a integración macrorregional en<br />

la educación superior, eran parte del lenguaje político oficial,<br />

12 IBERO<br />

Jorge Medina Viedas<br />

Doctor en Ciencias Políticas y Sociología por la <strong>Universidad</strong><br />

Complutense. Analista político. Ha sido rector de la <strong>Universidad</strong><br />

Autónoma de Sinaloa y director de la agencia Notimex. Actualmente<br />

es director editor del suplemento Campus del diario Milenio. Ha<br />

publicado, entre otros libros, <strong>Universidad</strong>, política y <strong>sociedad</strong>, La<br />

universidad amenazada y Élites y democracia en México<br />

escasamente permeado aun en una <strong>sociedad</strong> que no advertía la<br />

magnitud del fenómeno externo, ni comprendía la necesidad de<br />

las reformas estructurales que el sistema necesitaba para superar<br />

los efectos devastadores de las crisis, que se acentuaban en su<br />

gravedad por las nuevas exigencias del entorno internacional.<br />

En el programa de Modernización Educativa 1989-1994, sin<br />

embargo, ya se mencionaba que “la integración mundial del desarrollo<br />

impone un reto al sistema educativo y exige la formación<br />

de mexicanos que sepan aprovechar los avances científicos<br />

y tecnológicos e integrarlos a su cultura”. 3<br />

GLOBALIZACIÓN CONTRA CONSERVADURISMO<br />

ACADÉMICO<br />

En mayor o menor grado, la educación superior mexicana se<br />

constituyó en un enclave tardío de la modernización, tomando<br />

en cuenta que había que superar las singularidades del propio<br />

proceso de desarrollo del país en su conjunto, así como las especificidades<br />

de los procesos internos de las instituciones, cuyo<br />

desarrollo desigual las hizo actuar de manera diferenciada ante<br />

la nueva realidad.<br />

Esto sin considerar que el sistema educativo superior, por razones<br />

que resultan bastante evidentes, ha sido señalado hasta hoy<br />

como un “archipiélago de instituciones sin coordinación académica<br />

entre ellas”, obligando al Estado a establecer diversas y<br />

contradictorias direccionalidades de política educativa, y a las<br />

propias universidades e instituciones a realizar esfuerzos superlativos<br />

en todos los órdenes.<br />

En los años setenta del siglo XX, la gran mayoría de las universidades<br />

mexicanas eran instituciones rígidas, localistas y endogámicas,<br />

distantes en su funcionamiento (salvo excepciones<br />

notables) de la nueva <strong>sociedad</strong> del conocimiento, la cual colocaba<br />

“en el centro de la discusión y el debate la existencia de un nuevo<br />

paradigma en la producción y organización del conocimiento<br />

científico y tecnológico” 4 , abriéndose paso con sus convocatorias<br />

perentorias a las rígidas estructuras universitarias, que con reflejos


Foto: Corbis.<br />

admirativos vieron el acontecer de aquello<br />

que, como todo arranque de una nueva<br />

era de la historia humana, fue accidentado<br />

y problemático, pero sobre todo lleno de<br />

novedades y de desafíos.<br />

Hay que referir aquí que no pocas universidades<br />

del país estaban ancladas en el<br />

tradicionalismo pedagógico y en un conservadurismo<br />

académico, que, o bien era<br />

resultado del populismo dominante (una<br />

ideología amorfa, mezcla de autonomismo<br />

y radicalismo de izquierda) entre sus<br />

comunidades, o resultado de una ancestral<br />

obediencia a los gobiernos, pero que por igual estaban imposibilitadas<br />

para reaccionar con prontitud al escenario que empezaba<br />

a configurarse en el contexto de la educación superior.<br />

Las reformas estructurales del sistema de los años ochenta significaron<br />

el abandono del Estado de muchas de sus responsabilidades.<br />

Retiró de sus preferencias políticas y presupuestales a<br />

la educación universitaria pública y regó el maltrecho<br />

jardín académico de las instituciones de mecanismos<br />

regulatorios basados en la planeación, la evaluación,<br />

la calidad y la eficiencia, teniendo como<br />

trasfondo al mercado como gran demiurgo que<br />

imponía sus normas primigenias de la competencia<br />

y la rentabilidad en las casas de estudio superior del<br />

país. 5<br />

Como se ha escrito recientemente, no hay duda de que los<br />

cambios provocados por la globalización en el curso del desarrollo<br />

nacional, las transformaciones en el sistema político, los<br />

estremecimientos económicos y sociales, marcaron a lo largo de<br />

estos años las políticas educativas del Estado mexicano que afectaron<br />

tanto a la enseñanza superior, lo mismo a la pública que<br />

a la privada. La nueva realidad marcada por las exigencias de la<br />

<strong>sociedad</strong> del conocimiento, la preponderancia del mercado, los<br />

cambios en el régimen político y la incorporación de nuevos<br />

actores en el sistema educativo, completaron el entorno de la<br />

universidad pública mexicana. 6<br />

EXPECTATIVAS Y AMENAZAS<br />

Al final de la primera década del siglo XXI, la situación ha cambiado<br />

y muchos de estos elementos que han emergido en el<br />

entorno de la globalización están presentes en México. Bastaría<br />

citar el porcentaje de crecimiento de jóvenes de 19 a 23 años<br />

que ocupan un lugar en las universidades públicas y privadas,<br />

que pasó de un 25% en 2005, a 30% en 2010. Con el incremento<br />

formidable de las instituciones particulares, éstas ya atienden al<br />

35% de estos estudiantes.<br />

Pero, sin duda, uno de sus impactos resonantes pudo haber<br />

sido la de provocar un sacudimiento de las viejas estructuras<br />

En mayor o menor<br />

grado, la educación<br />

superior mexicana<br />

se constituyó en un<br />

enclave tardío de la<br />

modernización.<br />

educativas en todos los niveles,<br />

de tal modo que los diferentes<br />

sistemas y subsistemas se han tenido que<br />

adaptar a esta realidad y al entorno creado por<br />

la globalización.<br />

En esa perspectiva, muchas universidades pusieron a tiempo el<br />

reloj de su propia historia. Sus comunidades fueron capaces de<br />

oír y responder a la demanda de reformas internas que, de no<br />

llevarse a cabo, hubieran colocado en situación de inviabilidad a<br />

sus casas de estudio. Casi todas se actualizaron tecnológicamente<br />

y evitaron quedarse en la prehistoria de lo analógico. Hicieron<br />

motu proprio, sus específicas transiciones, y en una actitud de realismo,<br />

se apresuraron a desarrollar “una frenética actividad para<br />

acreditar carreras, certificar procesos, alcanzar reconocimientos,<br />

obtener ISO para la calidad de su administración, ‘doctorizar’ (a<br />

casi cualquier costo y precio) a su planta de profesores”. 7<br />

A la educación superior no sólo la cimbró la economía global<br />

IBERO 13


GLOBALIZACIÓN Y SOCIEDAD/examen<br />

para llevar a cabo reformas que fortalecieron su vida académica<br />

y a colocarla en condiciones de internacionalizarse, y a algunas<br />

hasta vivir en la ilusión de que son instituciones de excelencia<br />

o de “clase mundial”. En estos años, varios de estos centros<br />

de enseñanza han sido capaces de construir enormes complejos<br />

culturales, grandes bibliotecas y laboratorios, en un afán competitivo<br />

y de superación académica que no son más que resultado<br />

de este mismo proceso.<br />

Pero no todos los resultados han sido satisfactorios, ni han<br />

dejado de surgir nuevos problemas y nuevas amenazas. No vayamos<br />

muy lejos: los recientes acontecimientos de violencia ocurridos<br />

en Monterrey donde perdieron la vida dos estudiantes del<br />

Instituto Tecnológico de Monterrey, obligaron a las instituciones<br />

educativas a tomar medidas frente a un fenómeno hasta hace<br />

poco desconocido en los campus universitarios, el fenómeno del<br />

crimen organizado, ese cuarto sector de la mundialización del<br />

que habla Brunner 8 y que revela, entre otras cosas, las contradicciones<br />

de la misma globalización.<br />

Si el futuro no es lo que era, se debe a que trajo sorpresas y<br />

realidades que desfiguraron la <strong>sociedad</strong> imaginada por unos y<br />

otros. Las universidades, por su parte, no lograron todo lo que<br />

se habrían propuesto en el sentido de ofrecer alternativas de<br />

futuro para los jóvenes. Están lejos de lograr la cobertura y la<br />

calidad deseable, sus profesionales no encuentran alternativas laborales<br />

y las carreras tradicionales, que llevan inevitablemente al<br />

desempleo o al empleo precario, siguen atrayendo a la mayoría<br />

de los estudiantes, y las brechas con respecto a las nuevas tecnologías<br />

siguen siendo amplias. Al mismo tiempo, la fuerza de los<br />

incentivos del mercado se traduce en un debilitamiento de los<br />

valores morales. Si se recuerda, al futuro se apostaba desde una<br />

perspectiva de progreso y resultó que ese progreso, además de<br />

desigual, ha devenido en el cambio de los valores desde los que<br />

se catapultaba esa apuesta.<br />

1 Josep Ferrer Llop, Presidente de la Global University Network Innovation GUNI,<br />

rector de la <strong>Universidad</strong> Politécnica de Cataluña. En La educación superior en el<br />

mundo 2006. La Financiación de las <strong>Universidad</strong>es, Serie GUNI, Barcelona, 2006.<br />

2 Julio Rubio Oca, coordinador, La política educativa y la educación superior<br />

en México. 1995-2006: un balance, Secretaría de Educación Pública/Fondo de<br />

Cultura Económica, México, 2006, p. 262.<br />

3 Julio Rubio Oca, op.cit., p. 262.<br />

4 Adrián Acosta Silva, “Sobre la flexibilidad del mármol. Los (nuevos) límites de la<br />

universidad”. Revista de Educación Superior, ANUIES, enero-marzo de 2009, México.<br />

5 Varios de estos mecanismos regulatorios son: el Programa Nacional de Apoyo<br />

a la Educación Superior (Pronaes); el Programa Integral de Fortalecimiento<br />

Institucional (PIFI); el Programa de Mejoramiento del Profesorado (PROMEP); el<br />

14 IBERO<br />

Las universidades no lograron todo<br />

lo que se habrían propuesto en el<br />

sentido de ofrecer alternativas de<br />

futuro para los jóvenes.<br />

Sostiene Brunner 9 que la globalización como trasfondo de la<br />

educación, no debe confundirse con la causa de una variedad<br />

de circunstancias que afectan en este campo o de determinadas<br />

políticas educativas generadas por el Estado.<br />

La confusión puede provenir de la avasallante popularización<br />

del concepto y las efectivas consecuencias que ha tenido no sólo<br />

sobre el conjunto de las <strong>sociedad</strong>es, sino sobre diversas estructuras<br />

y organizaciones y la propia universidad.<br />

Pero consideremos como una ventaja tener tan cerca sus efectos<br />

espectaculares: nos ha permitido identificar sus amenazas.<br />

Advierte Adrián Acosta que, en esta hora, “con el auge de la<br />

nueva economía y de la <strong>sociedad</strong> de la información y del aprendizaje,<br />

las universidades se han visto atrapadas en una serie de<br />

tensiones y desafíos que han minado gradualmente su capacidad<br />

para responder a un entorno que ya no es desde hace tiempo<br />

lo que solía ser. Nunca como hoy el conocimiento fluye por los<br />

mares embravecidos de la tecnología en una <strong>sociedad</strong> multicéntrica,<br />

y son las empresas, los sitios de Internet, o individuos o<br />

grupos organizados para ofrecer nuevos conocimientos e información,<br />

los que tienden a desplazar a la universidad como centro<br />

privilegiado para la generación, distribución y almacenamiento<br />

de conocimiento en las <strong>sociedad</strong>es modernas.” 10<br />

Se trata de desafíos mayúsculos. Van contra la esencia de la universidad<br />

porque provienen de organismos e instrumentos que nacieron<br />

prácticamente con la globalización y al aliento del mercado.<br />

Son sus propios frutos y de ahí su peligrosidad. Tal vez, como se ha<br />

dicho, sea tiempo de repensar mucho más a fondo a la educación<br />

superior y a la universidad misma, como se hizo en su momento<br />

para responder a los retos de la globalización; pero también, y quizás<br />

aún más importante que esto último, sea tiempo ya de ejercer,<br />

colectiva y plenamente, la libertad y la autonomía ante las amenazas<br />

evidentes del mercado y de la globalización, e ir al encuentro<br />

de un nuevo modelo de <strong>sociedad</strong> y de un nuevo entorno.<br />

Programa de Fortalecimiento del Posgrado (PIFOP) y el Sistema Nacional de<br />

Investigadores (SNI).<br />

6 Raúl Arias Lovillo, Programa de Trabajo 2009-2013, Innovación académica y<br />

descentralización para la sustentabilidad, <strong>Universidad</strong> Veracruzana, 2010, México.<br />

7 Adrián Acosta Silva, op.cit., pp. 64-65.<br />

8 José Joaquín Brunner, <strong>Globalización</strong> y el futuro de la educación: tendencias,<br />

desafíos, estrategias. Seminario sobre Prospectiva de la Educación en la Región de<br />

América Latina y el Caribe, UNESCO, Santiago de Chile, 23 al 25 de agosto del 2000.<br />

9 José Joaquín Brunner, op.cit., pp. 10-11.<br />

10 Adrián Acosta Silva, “¿Adiós a la universidad?”, Revista de Educación Superior,<br />

ANUIES, número 1233, ponencia presentada en el Congreso “Retos y expectativas<br />

de la universidad”, Nuevo Vallarta, Nayarit. 18-20 de octubre de 2001.


GLOBALIZACIÓN Y SOCIEDAD/examen<br />

›Notas sobre el comienzo<br />

o apuntes desde el final:<br />

Cultura nacional y globalización<br />

UN CONTENEDOR QUEBRADO<br />

La forma global que ha venido tomando el mundo en las últimas<br />

décadas se enfrenta, a través de un abismo tan real como imaginario<br />

cuya extensión y profundidad son crecientes, con aquella<br />

que ha conservado la psique local en sus pertenencias específicas<br />

al territorio y a la narrativa particulares, a la historia propia y a la<br />

memoria generalizada. La hiperesfera conectada a la manera de<br />

una red, ese nuevo espacio-tiempo mundial sincrónico, resulta<br />

equidistante de las topologías conocidas hasta ahora por el pensamiento<br />

habitual, cuyo vocabulario guía, un desprendimiento<br />

que va desde las <strong>sociedad</strong>es agrarias hasta llegar a la mutación<br />

tajante de las épocas industriales, semeja hoy un recipiente hecho<br />

pedazos.<br />

Peter Sloterdijk escribe que en dicho cambio trascendente “la<br />

palabra patria forma parte de una reserva de signos cuya época<br />

de validez principal ha terminado”. Si los pueblos sedentarios<br />

privilegiaron tres términos cardinales: tierra, pueblo, madre patria,<br />

y con ellos dieron respuesta al destino del sujeto, mismo que<br />

sufriría una metamorfosis relativa ante la revolución antiagraria<br />

del mundo moderno, los estados nacionales otorgaron un sentido<br />

de pertenencia e identidad a sus habitantes —“una suerte de<br />

calor de hogar”, le llama Sloterdijk—, gracias a la densa trama de<br />

contenidos simbólicos, costumbres compartidas y mediaciones<br />

sociales que integran una cultura singular.<br />

Hoy, sin embargo, como señala Roger Bartra, “la identidad<br />

es un inquietante campo minado, en el doble sentido de ser<br />

un lugar atravesado por galerías subterráneas o sembrado de<br />

artefactos explosivos”.<br />

EL NOMBRE DE LO QUE ES SISTÉMICO<br />

Tal calor de hogar, una arraigada percepción colectiva, significó<br />

aquello que fue definido como una construcción inmunológica<br />

de la identidad político-étnica en los grandes formatos mo-<br />

16 IBERO<br />

Fernando Solana Olivares<br />

Escritor y periodista. Fue director del Museo de Arte<br />

Contemporáneo de Oaxaca y subdirector del Museo de Arte<br />

Moderno de la ciudad de México. Colaborador habitual de<br />

medios impresos y electrónicos. Ha publicado, entre otros libros,<br />

Oaxaca, crónicas sonámbulas, La rueca y el paraíso, El peso<br />

de la esperanza, Parisgótica y Los libros, las palabras, las<br />

transfiguraciones<br />

dernos de los estados nacionales, identidad que Sloterdijk no<br />

vacila en definir como “cuasirreligiosa”, pues aglutinó grandes<br />

y masivas <strong>sociedad</strong>es que se definieron así a partir de una continuidad<br />

en el tiempo y en el espacio. Dicha continuidad va<br />

evaporándose con velocidad creciente en la globalización, la cual<br />

tiende a uniformar los usos y los hábitos planetarios mediante<br />

un mecanismo de hegemonía radicado, sobre todo, en los medios<br />

masivos de comunicación, en la <strong>sociedad</strong> del espectáculo<br />

que éstos han construido urbi et orbi, en la democratización del<br />

deseo propia de la <strong>sociedad</strong> de consumo —otro nombre para lo<br />

mismo—, en el culto ideológico al egoísmo y en la sustitución<br />

del ciudadano por el consumidor, reemplazo que en términos<br />

de Giovanni Sartori supone la sustitución del homo sapiens por<br />

el homo videns. O dicho en tono cultural geopolítico: en la avasallante<br />

victoria de Hollywood y MTV ahí donde el Pentágono<br />

no pudo prosperar.<br />

ESA ELUSIVA IDENTIDAD<br />

La averiguación por hacer, entonces, sería sobre la naturaleza de<br />

lo que se pierde, sobre la composición de lo que se va: eso tan<br />

vagamente designado como “cultura nacional”. Lo mexicano,<br />

entendido como una caracterología de lo típico y una genética<br />

de lo simbólico, asociado desde luego al vocabulario guía ya<br />

mencionado, no tiene más de doscientos años de estarse construyendo<br />

entre nosotros, pero fue en el siglo XX donde se gestó la<br />

propuesta canónica de un conjunto nacional tan similar, por su<br />

condición intangible y anfibia, a aquel aserto sobre el significado<br />

del tiempo atribuido a san Agustín: cuando me preguntan qué es<br />

no lo sé, cuando no me lo preguntan sí lo sé.<br />

¿Qué es lo mexicano? Ni siquiera sus anatomistas más conspicuos<br />

han ido más allá de ciertas características autóctonas que<br />

también podrían encontrarse en otros pueblos, así los énfasis entre<br />

ellas deban diferenciarse: el mestizaje, el sentido de la muer-


Foto: Corbis.<br />

La continuidad va evaporándose con<br />

velocidad creciente en la globalización, la<br />

cual tiende a uniformar los usos y los hábitos<br />

planetarios mediante un mecanismo de<br />

hegemonía radicado, sobre todo, en los<br />

medios masivos de comunicación.<br />

IBERO 17


GLOBALIZACIÓN Y SOCIEDAD/examen<br />

te, el resentimiento, los complejos y las<br />

inhibiciones, el relajiento desmadre, el<br />

amargo origen histórico, la dura matriz<br />

fundacional. Por sí mismo, el mestizaje no<br />

produce una identidad cultural que pueda<br />

convocarse como la generalización de<br />

una pertenencia, pues el supuesto en el<br />

cual se basa, la fusión de los indios y los<br />

europeos, no basta para proporcionar un<br />

territorio imaginario o una obra compartida<br />

ni abundante ni común. La frecuentación de la muerte,<br />

si bien puede aceptarse a la manera de una patología o una fatalidad<br />

compensatoria típicamente mexicanas, no acaba de caracterizar<br />

una distinción de lo propio único ante lo ajeno distinto.<br />

Lo restante: los complejos provenientes del comienzo nacional<br />

con un padre cruelmente destructivo y una madre traidora cuyos<br />

hijos son los hijos de la chingada, la deforme integración emocional<br />

producida por una colonización dirigida a la explotación<br />

máxima y no al poblamiento civilizacional, el autoritarismo y la<br />

desigualdad como horóscopos seculares de la raza, todo ello y<br />

quizá bastante más no se percibe como suficiente para establecer<br />

una taxonomía social y política, una metafísica folclórica donde<br />

quede medido “lo mexicano”, aquello tan quimérico así sea tan<br />

invocado, tan aleatorio cuanto irregular.<br />

LOS ACUERDOS DE LA MEMORIA<br />

Pero toda antropología estupefacta es una forma de la<br />

gramática de la pertenencia: el mundo que se elabora<br />

cuando nos escuchamos juntos. Surge entonces la<br />

narrativa de lo somático como una reivindicación<br />

de algo que representa una pertenencia, ese presente<br />

del pasado vigente en el presente del presente<br />

que de tal modo se convierte en un presente<br />

del futuro a compartir. Y aunque asaz lírica,<br />

acaso ésta sea la verdadera forma de nuestra nebulosa<br />

cultura nacional: un tiempo, una manera,<br />

una repetición.<br />

Dícese que en las épocas cuando la forma de<br />

lo grande cambia, entre la gente regresan los<br />

hábitos protectores de lo local. Como si entonces<br />

se anhelaran aquellas fronteras puras que<br />

envuelven a la memoria y que consisten en sabores,<br />

formas verbales, sentimientos, emociones<br />

y recuerdos: la sutileza no clasificable por una<br />

sociología dispuesta a descifrar<br />

sólo aquello indicativo de<br />

lo superficial. Ciertas búsquedas<br />

no ponderables por<br />

el positivismo científico<br />

—reprobadas mediante el<br />

oscurantismo racionalista de<br />

lo políticamente correcto—<br />

afirman que lo que<br />

18 IBERO<br />

Roger Bartra postula un término<br />

apenas adecuado para nuestra<br />

ingente circunstancia: la condición<br />

postmexicana. Y pareciera que<br />

dicho momento ya llegó.<br />

México comparte es sobre todo un destino, tan próximo como<br />

inmediato: sacrificarse a sí mismo para dar lugar a un nuevo momento<br />

histórico global. Pero como la esoteria sólo se ocupa del<br />

ámbito de aquello no manifiesto ante los sentidos, resultaría poéticamente<br />

irresponsable dar crédito a sus afirmaciones: no hay entonces<br />

Tarot que valga para especular sobre lo que aguarda al país<br />

en este tiempo de posmodernidad líquida, fluyente, veloz, cuando<br />

todo lo sólido se desvanece en el aire y lo que surgirá mañana<br />

no lo sabe nadie a cabalidad. Roger Bartra postula un término<br />

apenas adecuado para nuestra ingente circunstancia: la condición<br />

postmexicana. Y pareciera que dicho momento ya llegó.<br />

VELANDO LOS ESPEJOS DE LA REALIDAD<br />

Este era un país que no tuvo tiempo de fundar sus particularidades<br />

y al fin convertirlas en una cultura nacional, porque<br />

sobrevino una época planetaria donde la historia de las<br />

periferias y sus narrativas endógenas concluyó. Empero,<br />

pudo teñir lo nuevo emergente con ciertas formas simbólicas<br />

que le eran consustanciales, por ejemplo, los<br />

iconos femeninos de su vida colectiva subterránea:<br />

Guadalupe-Tonantzin y la Santa Muerte, misma que<br />

al final fue absorbida por la primera, porque se asume<br />

que quien dispensa la vida lo mismo contiene<br />

su terminación. Los historiadores llamaron a ese<br />

proceso “cuando la Mujer Dormida dio a luz”.<br />

Y fue extraño por inesperado que una <strong>sociedad</strong><br />

tan patriarcal y masculinizada como lo había sido<br />

aquella, aportara al mundo global la corrección de<br />

un error epistemológico a través de la representación<br />

arquetípica femenina, ausente hasta entonces<br />

como una presencia funcional.<br />

La conciencia no sabe todo de sí misma, la<br />

cultura tampoco ni su indagación. Si los tiempos<br />

son postmodernos y la aniquilación del mundo<br />

es la pulsión central de sus ideologías<br />

ocultas, la perspectiva de<br />

lo inmediato es una disolución<br />

cuyo último movimiento solamente<br />

coagula lo anterior.<br />

Cultura nacional y globalización:<br />

tanto un orden de la<br />

alternancia como un arte de la<br />

desaparición.


GLOBALIZACIÓN Y SOCIEDAD/cultura gastronómica<br />

›La cocina tradicional<br />

mexicana ante la<br />

globalización<br />

20 IBERO<br />

Alicia Gironella De’Angeli<br />

Investigadora y maestra de cocina. Miembro y Medalla de Oro<br />

de la Academia Culinaria de Francia y primera mujer miembro<br />

honorario del Club de Chefs des Chefs. Propietaria y chef del<br />

restaurante tradicional El Tajín, primer restaurante-escuela de<br />

México. Autora, junto con su esposo, el escritor y editor Giorgio<br />

De’Angeli, del volumen Larousse de la cocina mexicana<br />

(2006), Premio Gourmand y Premio al Mejor Libro de<br />

Cocina Mexicana de la Feria del Libro de Nueva York<br />

Foto: Corbis.


El consumo masivo de alimentos preelaborados, congelados<br />

o importados significa un reto para la cocina popular que,<br />

históricamente, ha demostrado sus ventajas para la buena<br />

y sana alimentación sin tener que renunciar a fórmulas heredadas<br />

del pasado. Apegadas a los principios de sustentabilidad,<br />

las comunidades indígenas y rurales siguen fieles a las cocinas<br />

tradicionales, más equilibradas por las cualidades nutricionales<br />

de sus ingredientes; por la selección de las materias primas y las<br />

técnicas de preparación, resultado de un<br />

largo proceso de observación y experi-<br />

mentación y, por lo tanto, producto de<br />

conocimientos colectivos de raíz ancestral<br />

de probada eficacia.<br />

Una cocina no es más sofisticada por<br />

la cantidad de ingredientes o por la variedad<br />

de estilos o de insumos exóticos<br />

o novedosos que ostenta. En este sentido,<br />

la complejidad de ciertas gastronomías<br />

tradicionales surge del conocimiento<br />

profundo de prácticas propias de una comunidad<br />

culinaria determinada, capaz de<br />

realizar una síntesis a partir de técnicas y elementos del pasado,<br />

incorporando ingredientes del presente que van anunciado los<br />

procesos de innovación. En ese sentido, la técnica milenaria de la<br />

nixtamalización se ha ido adaptando tecnológicamente hasta<br />

constituirse en la base de una industria que abastece el<br />

consumo de tortillas y de otros productos de maíz.<br />

La masa del cereal es deshidratada y convertida en<br />

harina, y, con tan solo agregar agua caliente, recupera<br />

su versatilidad de uso, conservando sus cualidades nutritivas<br />

y su sabor. De este modo, el maíz nixtamalizado ha<br />

podido trasponer las fronteras mexicanas y dialogar con<br />

otras culturas culinarias.<br />

No obstante, al tiempo que se reconoce la pervivencia y<br />

continuidad histórica de la cocina popular en México, también<br />

a través de la modernización de ciertos procesos, es preciso<br />

señalar factores específicos que ponen en peligro su viabilidad<br />

futura. Uno de ellos es la íntima articulación entre las prácticas<br />

culinarias originarias y los sistemas productivos, los recursos naturales<br />

y las condiciones ecológicas circundantes, que corre serio<br />

riesgo de fracturarse.<br />

Valorar una cocina tradicional implica favorecer dichos sistemas,<br />

y también los mercados locales y regionales para garantizar<br />

la diversidad de los ingredientes disponibles y la calidad que los<br />

distingue. Por otro lado, está demostrado el impacto negativo<br />

que ejercen las industrias alimentarias y las grandes cadenas de<br />

comercialización sobre ciertas expresiones culinarias propias. Si<br />

la cocina popular mexicana constituye un verdadero patrimonio<br />

cultural, es también en la medida que resiste los embates de la<br />

Una cocina popular, radicada en<br />

la vida de las comunidades y la<br />

trama cultural que la resguarda,<br />

requiere de todas las medidas e<br />

instrumentos apropiados para su<br />

salvaguarda y desarrollo.<br />

homogeneización de los ingredientes y de la engañosa multiplicidad<br />

de productos de origen exógeno, no pocas veces nocivos<br />

para la salud.<br />

Así, mientras las industrias alimentarias aceleran sus ofertas<br />

novedosas y sus métodos de comercialización, los antiguos mesones,<br />

merenderos, fondas y expendios de comida popular se<br />

van convirtiendo en expendios de comida rápida. El concepto<br />

de slow food, o comida artesanal en el caso de los restaurantes,<br />

elaborada con productos y técnicas locales, está en constante<br />

oposición con el fast food, o cocina rápida, que pugna por llevar<br />

al mundo de la gastronomía a convertirse en un supermercado<br />

de alimentos indiferenciados.<br />

Actualmente, en las <strong>sociedad</strong>es urbanizadas e industrializadas,<br />

con nuevos hábitos y concepciones alrededor de la alimentación,<br />

se ha generado una confusión sobre el alcance cultural<br />

del hecho culinario. Esto se suma a las transformaciones sociales<br />

que obligan a comer fuera del hogar, a la publicidad que<br />

favorece a las grandes redes comerciales de alimentación que<br />

inundan los mercados internacionales y a una ciencia aplicada<br />

al desarrollo de nuevas comidas que, más que aclarar, confunden<br />

IBERO 21


GLOBALIZACIÓN Y SOCIEDAD/cultura gastronómica<br />

los criterios de la gente. La desarticulación<br />

entre los productores y los consumidores de<br />

alimentos, amenaza también con las formas<br />

establecidas históricamente para el manejo<br />

del ambiente relacionado con la cultura<br />

alimentaria y, asimismo, desquicia la economía<br />

local.<br />

Más allá de ellos, las prácticas culinarias,<br />

que en el pasado estuvieron amparadas<br />

por una capacidad de producción para<br />

autoconsumo, en los últimos años se han<br />

visto mermadas por una gradual pérdida<br />

de soberanía que amenaza directamente<br />

los modos de comer tradicionales. En el<br />

caso del maíz, las variedades que se producen<br />

en el México podrían contribuir a la<br />

seguridad alimentaria de todo el país y del<br />

mundo, dada su gran capacidad de adaptación<br />

a los más diversos ecosistemas. Sin<br />

embargo, además de la creciente importación<br />

del grano, en los últimos cincuenta<br />

años, se han ido perdiendo razas entre<br />

las más productivas como la Celaya, del<br />

Bajío y llanos de Jalisco; Tuxpeño, propia<br />

del trópico de temporal de suelos roturados<br />

y en algunas áreas subtropicales de<br />

riesgo y Tuxpeño Norteño, adaptada, a<br />

las regiones subtropicales secas generalmente<br />

del norte del país, generalmente<br />

de riego.<br />

Desde la perspectiva de la cocina popular,<br />

esta merma de la diversidad es grave,<br />

ya que algunas de sus variedades son<br />

base de preparaciones fundamentales.<br />

Como sucede con los maíces pozoleros,<br />

y palomeros, así como otros que conservan<br />

su carácter ceremonial, o como el<br />

maíz morado o negro, cultivado en comunidades<br />

indígenas.<br />

En consecuencia, una cocina popular,<br />

radicada en la vida de las comunidades y<br />

la trama cultural que la resguarda, requiere<br />

de todas las medidas e instrumentos apropiados<br />

para su salvaguarda y desarrollo. Ese<br />

sistema, que da sustento a un país megapoblado,<br />

existe gracias a la supervivencia de la importante<br />

tradición culinaria, en gran medida en manos<br />

22 IBERO<br />

Es preciso<br />

emprender<br />

acciones<br />

urgentes<br />

para la<br />

preservación de<br />

procedimientos<br />

y técnicas,<br />

en contextos<br />

que no nieguen<br />

la irrupción<br />

de nuevos<br />

elementos y la<br />

evolución de las<br />

costumbres.<br />

de comunidades indígenas y campesinas, y a la<br />

dinámica que ésta genera respecto a la producción<br />

agroalimentaria.<br />

Entre otros beneficios, el reconocimiento<br />

de una cocina de tales características por parte<br />

de la UNESCO permitirá impulsar, nacional<br />

e internacionalmente, políticas y acciones<br />

adecuadas para su protección y su continuidad.<br />

Los planes de acción para salvaguarda<br />

y promoción de las cocinas comunitarias<br />

del plan piloto desarrollado en el estado<br />

de Michoacán, en el centro-occidente del<br />

país.<br />

En vista de la velocidad del deterioro<br />

de los sistemas alimentarios de las comunidades,<br />

es preciso emprender acciones<br />

urgentes para la preservación de procedimientos<br />

y técnicas, en contextos que<br />

no nieguen la irrupción de nuevos elementos<br />

y la evolución de las costumbres.<br />

Habrá también que actuar para que no<br />

desaparezca la agricultura en pequeña<br />

escala y la producción de variedades locales.<br />

Habrá que proteger y promover<br />

los mercados regionales y los hábitos de<br />

consumo de alimentos tradicionales, tanto<br />

en la vida cotidiana como en ocasiones<br />

festivas o rituales.<br />

Por su carácter eminentemente colectivo,<br />

la cocina popular mexicana tiene<br />

una dimensión histórica y una proyección<br />

social muy importante.<br />

A lo largo de varios siglos, ha constituido<br />

el espacio cultural marcado por la<br />

continuidad, en el que la innovación no<br />

ha implicado una ruptura significativa en<br />

los hábitos. La cocina popular mexicana<br />

es un excelente ejemplo de las soluciones<br />

creativas que logran los pueblos de tradición<br />

mesoamericana al no haber perdido,<br />

en buena medida, su vinculación con<br />

las prácticas culinarias y religiosas ni las<br />

formas de especificidad de organización<br />

social.<br />

Creo que para todos los mexicanos es un<br />

gran orgullo que entre las cosas buenas a globalizar<br />

esté la tortilla y, por lo tanto, el taco.<br />

Foto: Corbis.


LÍDER IBERO<br />

›Víctor<br />

Gavito y<br />

Marco:<br />

Es fundamental<br />

que en México los<br />

empresarios tengan<br />

un sentido de<br />

solidaridad social<br />

Fotografía de Sergio Albarrán.<br />

24 IBERO<br />

Carlos Deveaux Homs<br />

Director de Comunicación Institucional de la<br />

<strong>Universidad</strong> <strong>Iberoamericana</strong> Ciudad de México<br />

Creo que la gran obra<br />

social, en nuestro caso,<br />

ha sido abrir nuevas<br />

fuentes de empleo y<br />

brindar oportunidades<br />

de crecimiento personal<br />

y profesional a nuestros<br />

colaboradores.


Licenciado en Administración de Empresas por la <strong>Universidad</strong><br />

<strong>Iberoamericana</strong>, Víctor Gavito y Marco ha llevado a<br />

cabo una intensa labor docente en nuestra institución educativa,<br />

donde además fungió como coordinador de la carrera de<br />

Administración de Empresas entre 1963 y 1964, y director de la<br />

Escuela de Administración de 1972 a 1974.<br />

Miembro del Consejo Universitario de la UIA en dos periodos,<br />

del Senado Universitario y del Patronato Económico y<br />

de Desarrollo (FICSAC), Víctor Gavito y Marco también fue<br />

fundador de la Asociación de Egresados de esta universidad<br />

(ASEUIA), la cual presidió. Actualmente dirige la Fundación<br />

Ibero Meneses.<br />

Se ha desempeñado como vicepresidente de la Cámara Nacional<br />

de la Industria Panificadora, presidente de la Comisión<br />

Agropecuaria de Coparmex y vicepresidente de ese mismo organismo.<br />

Fue el primer presidente y fundador del Consejo Nacional<br />

Agropecuario y miembro de la Comisión Ejecutiva y del<br />

Consejo Nacional del Consejo Coordinador Empresarial.<br />

Por su destacada labor ha recibido, entre otras distinciones, el<br />

reconocimiento Agustín Reyes Ponce, en 1989; el premio Xavier<br />

Scheifler, S. J., y la Medalla San Ignacio de Loyola en 2009.<br />

En la siguiente conversación, el director general del Grupo de<br />

Empresas Alpura desde hace más de tres décadas, comparte su<br />

entrañable vínculo con la <strong>Universidad</strong> <strong>Iberoamericana</strong> y su<br />

compromiso con los proyectos sociales.<br />

Desde hace más de cinco décadas has mantenido<br />

un muy estrecho vínculo con la <strong>Universidad</strong><br />

<strong>Iberoamericana</strong>, con sus autoridades, alumnos y<br />

egresados. ¿Qué es lo más importante que te ha<br />

dejado esa relación?<br />

La <strong>Universidad</strong> <strong>Iberoamericana</strong> me formó e impulsó mi desarrollo<br />

individual en distintas etapas. La primera fue cuando ingresé<br />

como estudiante; ahí tuve el privilegio de contar con magníficos<br />

maestros seculares y una gran cantidad de buenos jesuitas. En ese<br />

periodo, alrededor de 1957, México vivía una transformación<br />

social en la que se requería de grupos dirigentes que pudieran<br />

orientar al país, con miras a formar una <strong>sociedad</strong> más participativa,<br />

más justa, con mayores oportunidades para una creciente<br />

población, en ese entonces de 28 millones de personas.<br />

Una de las personas que más influencia tuvo en mí cuando era<br />

estudiante fue el padre Sánchez, quien murió cuando acabé mis<br />

estudios en la universidad, en 1961. Con él solía tener pláticas<br />

muy interesantes y recuerdo que nos decía: “Muchachos, que<br />

les duela México”. Con esa frase lo que nos quería decir es que<br />

no fuéramos indiferentes al país y sus problemas, y que teníamos<br />

una responsabilidad que cumplir: servir a la <strong>sociedad</strong> para que<br />

sea más próspera, más justa.<br />

Posteriormente, cuando cursaba el último semestre de la carrera,<br />

se me invitó a dar clases en la <strong>Universidad</strong> <strong>Iberoamericana</strong>.<br />

Para mí fue un gran privilegio. Entré como adjunto en la mate-<br />

ria de Seminarios y Administración de Personal, y cuando concluí<br />

mis estudios me invitaron como profesor de medio tiempo; fui el<br />

primero de la Ibero en la carrera de Administración.<br />

En esa etapa conocí a gente extraordinaria. Éramos un grupo<br />

de personas realmente interesadas en lograr que la universidad<br />

tuviera un alto nivel académico, pero conservando la mística del<br />

servicio. Fui coordinador de la carrera de Administración de Empresas<br />

entre 1963 y 1964; formo parte del Consejo Universitario<br />

desde 1962, y en 1970 la Ibero me distinguió como miembro<br />

numerario. Por todo ello le tengo un enorme agradecimiento a<br />

mi alma máter.<br />

“La verdad nos hará libres”, es el lema de esta institución<br />

que tanto quieres. ¿De qué nos libera la verdad?<br />

La verdad nos hace libres para entender mejor a los demás, para<br />

actuar con toda la seguridad que nos puede dar el conocimiento.<br />

En lo personal, he querido que mis actos coincidan con lo que<br />

mi conciencia y mis principios me dictan; esa es la verdad que ha<br />

regido mi vida y le ha dado sentido. Lo que me satisface es que<br />

traté siempre de ser auténtico y de actuar conforme a lo que yo<br />

creía que debía ser, y he sido un hombre afortunado en muchos<br />

sentidos. La vida debe tener el objetivo de ser auténtico y, en consecuencia<br />

de ser justo y feliz, y una manera de lograrlo es a través<br />

del servicio a los demás.<br />

¿Consideras que un empresario exitoso puede regirse<br />

por una mística de servicio y de compromiso social?<br />

Creo que la gran obra social, en nuestro caso, ha sido abrir nuevas<br />

fuentes de empleo y brindar oportunidades de crecimiento<br />

personal y profesional a nuestros colaboradores. Es fundamental<br />

que en México los empresarios tengan un sentido de solidaridad<br />

social. Por ejemplo, realizamos una amplia labor de capacitación<br />

en todos los ranchos, que además hemos hecho más eficientes<br />

en diversos aspectos: inseminación artificial, ordeña, manejo de<br />

máquinas, etcétera. He tenido la suerte de contar con notables<br />

colaboradores con una enorme capacidad independientemente de<br />

su grado escolar, y estoy convencido de que, a través de la capacitación<br />

y el esfuerzo, se puede estimular a las personas para que se<br />

desarrollen cada vez más, y para que esas aspiraciones también las<br />

transmitan a su familia y a su entorno. Yo creo que esa es nuestra<br />

gran contribución.<br />

¿El hombre dignifica al trabajo o el trabajo dignifica al<br />

hombre?<br />

Creo que el trabajo es una manifestación de la calidad del hombre.<br />

El trabajo es una manifestación de las personas, una forma de realizarse.<br />

En ocasiones me he sorprendido de la transformación que<br />

algunas personas tienen cuando se les asigna un puesto de mayor<br />

responsabilidad, cuando sienten que es reconocida su capacidad.<br />

Recuerdo una experiencia extraordinaria de un muchacho que<br />

había dejado la carrera de ingeniería en los primeros semestres<br />

IBERO 25


LÍDER IBERO<br />

y emigró a Estados Unidos. Cuando regresó entró a trabajar a<br />

nuestra empresa; tenía una gran capacidad para la mecánica, pero<br />

externaba su frustración de una forma absurda, incluso llegó a<br />

introducir un arma al centro de trabajo. Hablé con él y le pregunté<br />

cuál era su problema, porque lo reconocíamos como un<br />

hombre sumamente capaz, pero su conducta rompía con el orden<br />

de la organización. Cuando me acabó de platicar su historia,<br />

le propuse que se hiciera responsable de poner en marcha una<br />

nueva empresa que acabábamos de comprar y aceptó. Le di la<br />

oportunidad y tuve unos resultados magníficos. Yo sí creo que las<br />

personas se dignifican con un buen trabajo y al mismo tiempo<br />

hacen más digno el trabajo que realizan.<br />

Fotografía de Sergio Albarrán.<br />

Nuestro objetivo es que la<br />

Fundación Ibero Meneses,<br />

que ahora surge, pueda tener<br />

una mayor capacidad para<br />

apoyar proyectos cada vez más<br />

grandes y sustentados.<br />

Ante el panorama que actualmente vive nuestro<br />

país: inseguridad, crisis económica, contracción de<br />

mercados, etcétera, ¿cuál consideras que es el mayor<br />

problema de los empresarios mexicanos?<br />

La primera responsabilidad como empresario es implementar<br />

estrategias que mantengan la empresa sana, especialmente en<br />

situaciones desfavorables, como una contracción del mercado.<br />

En estas circunstancias lo que yo he hecho es ampliar mi red<br />

de distribución, emplear a más gente, invertir en mayores unidades<br />

de distribución, y hacer más eficiente la empresa, porque<br />

una empresa que no es eficiente desaparece. En este sentido he<br />

buscado una mayor productividad y reducción de costos, además<br />

26 IBERO<br />

de oportunidades de venta en nuevos mercados. Desde el año<br />

pasado comenzamos a exportar a Estados Unidos, lo cual es muy<br />

satisfactorio porque Alpura es la única empresa mexicana autorizada<br />

por la FDA (Food and Drug Administration) de Estados<br />

Unidos para vender leche fluida en ese país.<br />

Acerca de la inseguridad, no es un tema nuevo en México. La<br />

hemos padecido y lo primero que nos ha interesado es proteger<br />

a nuestra gente. Tomamos medidas como poner un guardia<br />

en los camiones de reparto que distribuyen en zonas con altos<br />

índices de asalto, y con ello evitamos que se generen estos hechos,<br />

y es un mensaje contra la tolerancia social al robo. Pero<br />

ahora además hay otro tipo de violencia, como la extorsión y<br />

la delincuencia profesional, que genera<br />

intranquilidad y preocupación por la familia<br />

y por uno mismo. Las policías están<br />

rebasadas y creo que tenemos que hacer<br />

un gran esfuerzo para que la inseguridad<br />

pueda reducirse.<br />

¿Quién se debe hacer cargo de la<br />

recomposición del tejido social que<br />

dramáticamente se está rompiendo<br />

cada día?<br />

Ese es un trabajo de todos. Para lograr resultados<br />

tendrán que colaborar y sumar esfuerzos instituciones<br />

educativas, de gobierno, iglesias, <strong>sociedad</strong> civil. No creo que nadie<br />

pueda resolver este problema de manera individual. Aunque<br />

México es increíblemente complejo por nuestra gran diversidad<br />

cultural, en lo que todos los mexicanos coincidimos es en la<br />

aspiración de vivir en paz, una paz fundada en la verdad, el derecho<br />

y la justicia.<br />

Al inicio de la entrevista nos hablaste de tu primer<br />

acercamiento a la <strong>Universidad</strong> <strong>Iberoamericana</strong>, y<br />

ahora tienes de nueva cuenta vínculos estrechos:<br />

recientemente, a través de la presidencia de la<br />

Asociación de Egresados de la UIA y, en la actualidad,<br />

como Senador y con tu muy comprometido proyecto<br />

de la Fundación Ibero Meneses. ¿Podrías platicarnos<br />

sobre estos proyectos?<br />

Me invitaron a formar parte de la Asociación de Egresados y en<br />

esta labor encontré la oportunidad de reunir a los egresados de<br />

la universidad y desarrollar un vínculo entre ellos y con la institución,<br />

para apoyarla de diversas formas. Y a partir de este interés<br />

de colaborar con la UIA, se nos ocurrió constituir una fundación<br />

que facilitara enlazar los esfuerzos de todos de manera permanente<br />

para generar y apoyar programas sociales. Así, se sugirió retomar<br />

la Fundación Meneses, que había sido fundada por el padre<br />

Meneses con una serie de amigos de la universidad. Estas personas<br />

aceptaron la proposición y hemos echado a andar el proyecto.<br />

Actualmente somos ya 70 socios en la Fundación y pretendemos<br />

que año con año los recién egresados de la universidad se sumen<br />

a nuestra tarea. Nuestro objetivo es que la Fundación Ibero Meneses,<br />

que ahora surge, pueda tener una mayor capacidad para<br />

apoyar proyectos cada vez más grandes y sustentados.


GLOBALIZACIÓN Y SOCIEDAD /mirador<br />

9›<br />

1Me confunde el hecho de que los que aún aspiran al sueño bolivariano<br />

sean los primeros en protestar por la globalización, cuando<br />

ésta, en el fondo, tiene mucho de sueño bolivariano, grotesco si<br />

se quiere, e impetuoso, para bien y para mal.<br />

(Por cierto, Bolívar mismo dejó de creer en su sueño y nos<br />

legó una entrada postrera de su diario, donde dice: “tratar de<br />

hacer la Revolución en América es como arar en el mar”.)<br />

30 IBERO<br />

9<br />

Claudio Isaac<br />

Pintor, cineasta y escritor. Ha realizado múltiples<br />

exposiciones en México y el extranjero. Es autor<br />

de los libros Alma húmeda, Otro enero, Luis<br />

Buñuel: a mediodía y Cenizas de mi padre<br />

imágenes y<br />

notas globales


2Como cualquier acontecimiento de la<br />

historia, la globalización presenta virtudes<br />

y defectos varios. Pero digamos, por dar<br />

pie a la argumentación, que se trata de<br />

algo necesariamente nefasto. Lo que hay<br />

que tomar en cuenta, me parece, es que<br />

nefasta o no, ya está aquí y la globalización<br />

llegó para quedarse, no hay vuelta atrás<br />

por más que exclamemos o invoquemos<br />

ideales pretéritos de pureza territorial. Lo<br />

único que puede hacerse es nadar con la<br />

corriente recién establecida, para no ahogarse,<br />

claro, pero también para aprovechar<br />

la fuerza del arrastre y darle a nuestro<br />

curso natatorio un sesgo propio y acabar<br />

arribando a la orilla que anhelamos.<br />

En tal caso, sospecho que la globalización<br />

solamente desenmascara un drama que el<br />

orden mundial —los imperativos políticos<br />

y, sobre todo, económicos— ya venían predeterminando.<br />

La diferencia ahora es que<br />

se trata de una situación insoslayable, pero,<br />

de hecho, el desequilibrio, la injusticia, la<br />

desproporción, la insensatez y los aciertos<br />

aislados, ya estaban, todos ellos, reinando<br />

en el planeta. Soy de la idea de que es más<br />

sano y ventajoso conocerle la cara al enemigo:<br />

puede que, a la larga, hasta lleguemos<br />

a reconocer en él al hermano.<br />

(A final de cuentas, en términos globales,<br />

el enemigo mayor del planeta, de<br />

la especie humana, no se necesita buscar<br />

en otros rumbos: está en casa y somos<br />

nosotros mismos. Esto lo sabe cualquiera<br />

pero nunca se asume, es más fácil gritarle<br />

al prójimo porque nos recuerda nuestros<br />

propios defectos.)<br />

3Es previsible que al convertirse en habitual nuestra conciencia<br />

de los otros —aquellos que viven en Dakar o Ceilán— pueda irse<br />

fincando una especie de humanismo renovado, vibrante.<br />

IBERO 31


GLOBALIZACIÓN Y SOCIEDAD/mirador<br />

4Hasta nuestros días, acaso por una herencia de nuestra pomposa,<br />

miope y necia tradición antropocéntrica, el término universal es<br />

usualmente sinónimo de mundial. Esa costumbre idiomática nos<br />

frena y limita nuestro posible avance hacia una visión de verdad<br />

cósmica.<br />

32 IBERO


5Más allá de una posible conciencia global,<br />

que a su vez pudiera representar la<br />

noción de lo humano en extenso, me<br />

gustaría proponer un criterio universal,<br />

pero usando el término en un sentido literal:<br />

celebrar lo humano en el contexto<br />

global para luego situarlo en el universal,<br />

es decir, en el cosmos. Así como las<br />

idiosincrasias regionales y las nacionales,<br />

el patriotismo y la impermeabilidad local<br />

dan lugar a la fricción, el malentendido, el<br />

desprecio por ignorancia y el antagonismo,<br />

la fijación nuestra por lo terrestre en<br />

oposición a lo extraterrestre es mezquina<br />

y amuralla nuestras vidas. Un ejemplo de<br />

esa mentalidad sería la exposición en términos<br />

prejuiciosos de que las pirámides<br />

—las incas, mayas o egipcias, qué importa<br />

cuales— fueron construidas por extraterrestres.<br />

Aquí ya no importa la cuestión<br />

de qué pueblo o qué nación se lleva el<br />

crédito, sino cuál planeta. El jaleo es igual<br />

de idiota. Sería tan sano cantar a la vida<br />

en abstracto, a la existencia en general,<br />

ya sea de los terrícolas o los marcianos y<br />

venusinos. Ir pensando en eso nos prepararía<br />

para una mejor convivencia global,<br />

en el presente, mientras se da o no el encuentro<br />

con la otredad galáctica.<br />

(¿Qué no es factible que la vida en la<br />

tierra se haya originado por el roce con<br />

materia cósmica, venida de fuera? ¿Entonces<br />

no seríamos, nosotros mismos, los<br />

extraterrestres?)<br />

6Algo de esta liberación del yugo de la<br />

estrechez de mirada se respira en las primeras<br />

páginas de ese formidable libro de<br />

Joyce llamado Retrato del artista adolescente.<br />

Allí, el protagonista ha puesto sus datos<br />

personales en la guarda de un cuaderno<br />

de Geografía y ha escrito:<br />

Stephen Dedalus<br />

Clase de Nociones<br />

Colegio de Clongowes Wood<br />

Sallins<br />

Condado de Kildare<br />

Irlanda<br />

Europa<br />

El Mundo<br />

El Universo<br />

Sería de desearse que nuestros estudiantes,<br />

nuestros jóvenes, y los de cada lugar<br />

del mundo, practicaran, como Dedalus, el<br />

ejercicio de considerarse tan parte de una<br />

población y una región como de un continente<br />

y un planeta que a su vez corresponde<br />

a una de las galaxias del universo. Eso<br />

representaría un hábito auspicioso.<br />

IBERO 33


GLOBALIZACIÓN Y SOCIEDAD/quadrivium/música<br />

›Mostrar la propia<br />

manera de oír el mundo<br />

En julio del 2007, participé por quinto verano consecutivo<br />

como director huésped de la orquesta Collegium<br />

Musicum, de la Academia Internacional de Verano<br />

del Castillo Weissenstein, de Pommersfelden, Alemania.<br />

Como en los dos veranos anteriores, había tenido<br />

yo la oportunidad de recomendar a jóvenes talentos musicales<br />

mexicanos (eran siete en aquella ocasión) para que participaran<br />

en esa orquesta, midiendo sus conocimientos y capacidades con<br />

otros sesenta jóvenes de distintas partes del orbe.<br />

En ese año del 2007, me tocó dirigir el programa de la tercera<br />

semana. Tras mi arribo, me reuní con los jóvenes mexicanos para<br />

intercambiar experiencias acerca de las dos semanas que ellos ya<br />

llevaban en la Academia. Además de manifestarme su entusiasmo,<br />

por tener esa magnífica oportunidad, me comentaron de igual<br />

manera algo que, en mi experiencia, reflejaba una cierta constante<br />

en Europa hacia todo lo no europeo: no se explicaban por<br />

qué a uno de ellos, contrabajista, quien había tocado la mejor<br />

audición/evaluación al inicio de la Academia, lo habían mandado<br />

al último atril de su sección, siendo que no sólo era quien<br />

mejor había tocado de entre los contrabajistas, sino quien mejor<br />

había tocado de toda la sección de cuerdas de la orquesta.<br />

Procedí entonces a conversar con el director artístico de la<br />

Academia, indagando sobre ese hecho “curioso”. A mi cuestionamiento,<br />

el director se puso nervioso y dijo estar sorprendido<br />

de mi pregunta, pero accedió a revisar las actas que se levantaron<br />

en la audición/evaluación que todos los participantes habían tenido<br />

que tocar al iniciar la Academia. En efecto, la calificación<br />

que los docentes habían otorgado al joven contrabajista mexicano<br />

era la más alta de todas, por lo que él, el director, tampoco<br />

se explicaba el porqué del lugar que le asignaron. Argumentó<br />

que había sido la docente italiana, violonchelista, la que se había<br />

encargado de ese aspecto y prometió otorgarle al mexicano el<br />

34 IBERO<br />

Sergio Cárdenas<br />

Director sinfónico y compositor musical. Profesor Titular de Carrera<br />

en la Escuela Nacional de Música de la <strong>Universidad</strong> Nacional<br />

Autónoma de México. Director Artístico de SURCO, Jornadas<br />

Nacionales Candelario Huízar de la Música Mexicana de<br />

Concierto, y Presidente de Música de Concierto de México, S. C./<br />

SACM. Página web: http://www.sergiocardenas.net<br />

Blog: http://onomatopeyadeloindecible.blogspot.com/<br />

No hay nada exterior que no sea anuncio de lo interior.<br />

Paracelso<br />

puesto principal para la siguiente y última semana de la Academia,<br />

lo cual así sucedió: al menos hubo algo de justicia.<br />

Nuestro “héroe” contrabajista está hoy por titularse en la <strong>Universidad</strong><br />

de la Música “Mozarteum”, de Salzburgo (Austria),<br />

ciudad desde la que con frecuencia se desplaza a Viena o a Munich,<br />

para tocar con la Orquesta de la Ópera Estatal de Viena o<br />

con la de la Academia de la Filarmónica de Munich.<br />

Me he referido a este caso porque uno de los obstáculos que<br />

por lo general debe vencer en Europa cualquier músico clásico<br />

de origen no europeo, es la mayor exigencia que se le impone<br />

en comparación con la que se les impone a los europeos. Y aun<br />

cuando este obstáculo es vencido, hay resistencia a reconocerlo,<br />

como en el caso referido.<br />

Ello tiene varias explicaciones: la primera es, quizá, la que tiene<br />

que ver con el hecho de que Europa Central cuenta con una<br />

historia multicentenaria del mercado musical conocido como<br />

clásico, mientras que en la mayoría de los demás países o regiones<br />

no es ese el caso. En Alemania, por ejemplo, encontramos organismos<br />

orquestales con más de medio milenio de antigüedad,<br />

mientras que en México el más antiguo se estará acercando a su<br />

primer centenario. Además, en Europa existe un mercado/sistema<br />

de música clásica que regula todo el proceso formativo, fijando<br />

parámetros claros de excelencia no sólo por lo que el arte musical<br />

en sí mismo exige, sino porque es una conditio sine qua non para el<br />

mantenimiento de ese mercado, es decir, de esa economía.<br />

En fechas recientes, conversando con académicos colegas de<br />

la Escuela Nacional de Música (UNAM), se abordó el punto de<br />

la gran cantidad de población extranjera en las orquestas profesionales<br />

de México. Justificaba uno de ellos esa cantidad con la<br />

destreza y alto nivel que demostraban en su ejecución gracias a<br />

la formación recibida en sus países de origen. Mi comentario fue<br />

que tras varias décadas de actividad musical a nivel internacional,


Foto: Corbis.<br />

en especial en Europa, podía yo asegurar que el potencial musical<br />

de México era mayor que el de varios países europeos, pero<br />

que nuestro país no contaba con los mecanismos o sistemas que<br />

brindaran a ese enorme potencial las condiciones que el desarrollo<br />

del talento musical exige, en especial por la ausencia casi<br />

total de un verdadero mercado de la música clásica.<br />

En el campo de la llamada música clásica de México, la globalización,<br />

que con no poca frecuencia ha sido entendida como<br />

“domesticación” de criterios musicales conforme a los patrones<br />

europeos o estadounidenses que se asumen “de manera natural”<br />

como superiores o de mejor calidad que los mexicanos, ha sido<br />

una constante. Pero en el contexto de la globalización, ¿cuál es,<br />

cuál puede ser considerada la signatura, la firma de lo que México<br />

ofrece en música como valor de cambio? ¿Por qué lo global<br />

o internacional de la actividad musical en<br />

México se ha reducido a la importación<br />

de ejecutantes musicales que, en proporción,<br />

opaca con claridad la exportación<br />

de ejecutantes mexicanos?<br />

Cierto es que, por fin, los nombres de<br />

Silvestre Revueltas, José Pablo Moncayo,<br />

Manuel Enríquez (en tanto que insignes<br />

representantes de la composición musical)<br />

aparecen con mayor frecuencia en las programaciones<br />

orquestales allende nuestras fronteras. De igual manera,<br />

es muy estimulante encontrar en las carteleras del mundo los<br />

nombres de Ramón Vargas, Rolando Villazón, Noé Colín y otros<br />

talentosos mexicanos que están emergiendo, todos sustentados por<br />

un inocultable talento, pero también, en cierta forma, obligados a<br />

emigrar por las muy pocas oportunidades que aquí reciben (baste<br />

con revisar las programaciones de las temporadas de concierto de<br />

las orquestas de la capital del país para corroborar este escándalo) y<br />

por el raquítico mercado de la música clásica en México.<br />

Tengo para mí que además de su sensibilidad, de su cantabilidad,<br />

de su arrojo rítmico y de su inventiva, la gran contribución<br />

que el talento musical mexicano puede aportar al mundo es su<br />

concepción espacio-temporal de la vivencia musical, pues me<br />

parece que oye y se manifiesta en y con las dimensiones cósmicas<br />

envolventes que encontramos en Teotihuacán, en Monte<br />

Albán, en Chichén Itzá y aún en el Zócalo de la ciudad de<br />

México. Quiero pensar, entender, que esta sí es una herencia<br />

que nos llega desde las deslumbrantes culturas prehispánicas, una<br />

herencia que se ha enriquecido en su intercambio con las aportaciones<br />

de otras culturas, culturas musicales que, a su vez, han<br />

sido enriquecidas por la aportación mexicana.<br />

No son estas características del interés de los propósitos globalizadores,<br />

pues su interés principal es convertirnos en consumidores<br />

de su oferta. No han sido pocas las ocasiones en las que México<br />

ha sucumbido ante esos propósitos, obnubilado por los espejitos<br />

y por la mercadotecnia, abatido por el sistema económico-social<br />

que aún impone criterios clasistas (por muchos años, la OFU-<br />

NAM ha mantenido vigente un sistema en el que aplica tabuladores<br />

diferenciados a sus solistas y/o directores: si son extranjeros,<br />

tienen asignadas tarifas en miles de dólares; si son mexicanos, en<br />

unos pocos miles de pesos) que niegan la valía de la oferta artística<br />

mexicana y que, quizá por ello mismo, brinda pocas posibilidades<br />

de desarrollo y confrontación a los talentos nacionales.<br />

Los compositores musicales mexicanos han dado prueba a lo<br />

largo de nuestra historia, de que el constituyente esencial de la<br />

música, el fenómeno del sonido (con sus armónicos), es un valor<br />

global que al ser reconocido e identificado, de inmediato lo han<br />

hecho suyo y lo han desarrollado manifestando su propia manera<br />

de oír el mundo, el interior y el exterior. Algo similar podemos<br />

Es tiempo de tomar conciencia e<br />

internarse al mercado global con<br />

la seguridad y certeza de estar<br />

ofreciéndole recursos musicales<br />

naturales de óptima calidad.<br />

decir de los artistas que tras entrar en contacto con la pintura<br />

y la arquitectura barroca europea, la hacen suya y la convierten<br />

en el arte churrigueresco mexicano. De igual manera podemos<br />

referirnos a los diferentes géneros musicales europeos que se importaron<br />

en el siglo XIX: la polka, el vals, la mazurka, el chotís<br />

(schottisch), etcétera, fueron géneros que México acogió, asimiló,<br />

transformó y les otorgó una nueva signatura, enriqueciendo el<br />

repertorio global. El vals “Sobre las olas”, del humilde guanajuatense<br />

Juventino Rosas, forma parte desde largo tiempo ha, del<br />

repertorio del mundo.<br />

En el siglo XX, géneros musicales que llegaron a México desde<br />

el Caribe, como el danzón y el bolero, fueron acogidos con sensibilidad<br />

y transformados de tal manera que pronto se manifestaron<br />

desde la esencia mexicana, como es el caso de la canción-bolero<br />

“Bésame mucho”, de Consuelo Velázquez, reconocida como la<br />

que más veces se ejecuta a nivel mundial desde hace décadas.<br />

Soy de la convicción de que la aportación musical que México<br />

ha hecho y puede seguir haciendo al mundo, es de enorme valor<br />

de cambio, tanto en la disciplina de la creación musical como en<br />

la de la ejecución. Tenemos una materia prima de extraordinario<br />

potencial; no tenemos aún las condiciones que permiten y<br />

estimulan la optimización de esa materia prima. Es tiempo de<br />

tomar conciencia de ello e internarse al mercado global con la<br />

seguridad y certeza de estar ofreciéndole recursos musicales naturales<br />

de óptima calidad.<br />

IBERO 35


TRIVIUM /literatura<br />

36 IBERO<br />

Mi biblioteca particular tiene 75,000<br />

volúmenes y pronto quedará<br />

instalada en Saltillo, en el Centro<br />

Histórico, adonde haremos un Centro<br />

Cultural Gustavo Sainz.<br />

Gustavo Sainz<br />

en sus 70 años<br />

México es<br />

sólo una<br />

palabra en los<br />

periódicos en<br />

inglés, pero<br />

cómo duele<br />

Juan Domingo<br />

Argüelles<br />

Director editorial de IBERO<br />

Fotografías de Alejandro Zenker.


Gustavo Sainz (ciudad de México, 1940) es el definidor de<br />

la picaresca mexicana del siglo XX que llega a nuestros<br />

días reescribiéndose y describiéndose en permanente palimpsesto.<br />

Inquieto, inquisidor, vivo, hechizado, heterodoxo, lujurioso y escrutador<br />

de almas (todas las denominaciones son suyas), Gustavo<br />

Sainz es uno de los escritores que mayormente habita la literatura<br />

en medio de la realidad real.<br />

Hace años dejó un país del que mira crecer su sombra irreal y<br />

surreal, entre la devastación y el desvanecimiento. Desde Indiana<br />

nos dice: “México es sólo una palabra en los periódicos en inglés,<br />

pero cómo duele”.<br />

Devorador y acumulador de libros (su biblioteca personal alcanza<br />

los 75,000 volúmenes), Sainz llega en 2010 a sus 70 años de edad<br />

con una amplísima obra novelística en la que destacan Gazapo, Obsesivos<br />

días circulares, La princesa del Palacio de Hierro, Muchacho en llamas,<br />

Compadre Lobo, Fantasmas aztecas, Paseo en trapecio, A la salud de<br />

la serpiente, La muchacha que tenía la culpa de todo, Salto de tigre blanco,<br />

A troche y moche, etcétera.<br />

Hace nueve lustros publicó su obra inaugural, Gazapo, novela innovadora<br />

en lenguaje y estructura, con la que irrumpió en las letras<br />

mexicanas e hispanoamericanas dentro de la denominada literatura<br />

de La Onda, pero en realidad, más que una moda coloquial, onda<br />

expansiva de la contracultura en México.<br />

Desde entonces, la crítica enfatizó una de las mayores aportaciones<br />

de Sainz a las letras hispanoamericanas: el desparpajo para usar<br />

la realidad y fundirla con la ficción, de tal forma que, diría Margo<br />

Glantz en 1971, en sus libros “lo imaginado y lo vivido vienen a<br />

significar lo mismo”.<br />

El monólogo, el discurrir libérrimo de la memoria, la cita literaria,<br />

la referencia culta del lector ávido, el dicho popular, el albur, el guiño,<br />

la glosa, todo es lo mismo porque escribir es crear al borde del abismo,<br />

en medio de las llamas, al filo del trapecio. Al cumplir 70 años<br />

de edad, tiene entre manos una nueva novela, aún inédita, Cadáveres<br />

exquisitos. Conversamos con él y esto es lo que nos dice.<br />

¿Cómo ves al Gustavo Sainz de hoy y cómo ves, a lo<br />

lejos, al joven autor de Gazapo y de La princesa del<br />

Palacio de Hierro?<br />

El Gustavo Sainz de ahora luce cansado. Acaba de cumplir 50 años de<br />

profesor universitario y de perder a su última novia y no se siente muy<br />

optimista para enseñar un año más antes de retirarse. Al Gustavo Sainz<br />

de Gazapo y de La Princesa del Palacio de Hierro lo ve asombrado, pues no<br />

recuerda bien cómo podía hacer tantas cosas a la vez, pues en esa época,<br />

hacía periodismo, daba clases en la UNAM, dirigía el Departamento de<br />

Periodismo y Ciencias de la Comunicación en la Facultad de Ciencias<br />

Políticas, hacía mucha vida social, tenía un programa de TV que se<br />

llamaba Temas Educativos, en Radio Mil tenía un minuto cultural que<br />

se retransmitía varias veces al día, e iba a grabarlo cada día, dirigía la editorial<br />

Grijalbo, en fin, y me daba tiempo para escribir las novelas. Claro,<br />

tenía una cocinera, Toña, que me arreglaba no sólo los alimentos, sino la<br />

limpieza del departamento, mis citas, y muchas otras cosas.<br />

¿Cómo se ve México desde los Estados Unidos?<br />

México se ve sólo en algunos incidentes sobresalientes. Los periódicos<br />

destacan la violencia urbana, los secuestros, el fraude electoral,<br />

pero por acá que hay pocos paisanos, tenemos restoranes<br />

mexicanos de primera categoría, películas mexicanas en DVDs, y<br />

literatura mexicana en las librerías. México es sólo una palabra en<br />

los periódicos en inglés, pero cómo duele.<br />

Tú fuiste un gran promotor cultural. ¿Qué pasa hoy con<br />

la cultura en México.<br />

Los grandes consorcios editoriales se han comido a las pequeñas<br />

librerías en la ciudad de México. Cubren el mercado con seudonovelas<br />

de vampiros, o lamentables y supuestamente comerciales<br />

en detrimento de una gran cantidad de libros de la literatura<br />

mexicana agotados e inéditos. En la FIL de Guadalajara puedes ver<br />

algunos productos de El Ermitaño, Sexto Piso, Almadía, Atemporia<br />

y otras editoriales independientes que están publicando por<br />

ahora lo más valioso en términos culturales.<br />

¿Juan Rulfo o Carlos Fuentes? ¿Octavio Paz o Sabines?<br />

¿Se puede optar en literatura?<br />

No se puede elegir a un escritor sobre otro, porque ningún escritor<br />

publica tanto como para cubrir una vida de lectura. Imagínate<br />

yo leo entre 18 y 25 libros cada mes, desde que tenía 20 años. Mi<br />

biblioteca particular tiene 75,000 volúmenes y pronto quedará<br />

instalada en Saltillo, en el Centro Histórico, adonde haremos un<br />

Centro Cultural Gustavo Sainz.<br />

¿Qué te parece la narrativa mexicana actual?<br />

En estos últimos años me interesan mucho los libros de Cristina<br />

Rivera Garza, Mario González Suárez, Elmer Mendoza, Juan Villoro<br />

y muchos otros.<br />

¿Qué escribes actualmente?<br />

Actualmente estoy escribiendo una novela provisionalmente titulada<br />

Cadáveres exquisitos. La estoy escribiendo con mi ahora amiga<br />

Laura Rojas, quien desarrolla los personajes femeninos y yo me<br />

hago cargo de los masculinos, que son solamente dos. Queremos<br />

terminar este proyecto antes de la última FIL Guadalajara. La editorial<br />

RBA nos ha pedido este libro y ojalá y podamos entregárselo<br />

al final del próximo noviembre.<br />

¿Setenta años no es nada?<br />

Setenta años es mucho. He perdido a casi todos mis grandes amigos<br />

y amigas. Lo peor es que no me aqueja ningún malestar y<br />

que el médico que me atiende me anima diciendo que parece<br />

que tengo sólo 50, pero ya me canso con más frecuencia, se me<br />

olvidan cosas, ya no tengo novias, leo un poco menos que antes,<br />

como menos, miro menos películas que nunca. Afortunadamente<br />

quedan muchos libros más que leer y muchas buenas películas que<br />

gozar.<br />

Indiana, 4 de junio de 2010.<br />

IBERO 37


divulgación científica<br />

Héctor E. Cejudo Gómez<br />

Coordinador de la Licenciatura en Ingeniera<br />

de Alimentos en el Departamento de Ingeniería<br />

y Ciencias Químicas de la <strong>Universidad</strong><br />

<strong>Iberoamericana</strong> Ciudad de México<br />

Podemos definir a la ingeniería de alimentos como<br />

el conjunto de acciones para seleccionar e implementar<br />

procesos de ingeniería, usados en la conservación<br />

o transformación de los alimentos que<br />

fueron producidos en el campo, en la granja u obtenidos<br />

en los sistemas de pesca y que aseguren la inocuidad,<br />

la calidad nutricia y el mantenimiento de sus propiedades sensoriales.<br />

Estas acciones están basadas en el conocimiento de<br />

los fenómenos físicos, químicos y biológicos que ocurren en<br />

los alimentos a lo largo de la cadena productiva y tienen por<br />

propósito alargar su vida útil.<br />

A pesar de que los alimentos son necesarios para mantener<br />

las funciones básicas del hombre, la ingeniería de alimentos,<br />

como actividad específica es un desarrollo relativamente reciente.<br />

La investigación en el campo de la ciencia y la tecnología<br />

de los alimentos tiene sus raíces en el estudio de los<br />

38 IBERO<br />

›¿Qué es<br />

la ingeniería<br />

de alimentos?<br />

procesos artesanales de elaboración del vino, cerveza, pan, quesos<br />

y conservas de distintos vegetales.<br />

Fue a mediados del siglo pasado que los institutos y universidades<br />

cambiaron su enfoque al estudio de la ciencia y la tecnología<br />

de los alimentos en un sentido amplio, la razón de esto fue el<br />

surgimiento de conocimientos y principios básicos aplicables a<br />

la mayoría de los productos alimenticios, surgiendo un concepto<br />

más claro de lo que es un alimento.<br />

Todos los alimentos son más o menos perecederos y muchos<br />

son poco apetitosos en su estado natural, por lo tanto hay que<br />

procesarlos para prolongar su vida o para mejorar su sabor y<br />

presentación. En ambos casos el proceso depende del alimento y<br />

de su papel en la dieta, muchos de estos procesos se han desarrollado<br />

empíricamente y sus productos finales son ya tradicionales,<br />

así tenemos harinas de cereales, productos cárnicos embutidos o<br />

ahumados, quesos, bebidas fermentadas y mermeladas. Se trata<br />

Foto: Corbis.


de procesos muy complejos que hasta hace poco tiempo pasaron<br />

de ser artesanales a explicarse en términos científicos.<br />

Como resultado del conocimiento más completo de los cambios<br />

que ocurren en los alimentos sometidos a almacenamiento<br />

o procesamiento, es posible definir el producto final en términos<br />

físico-químicos explícitos, al contar con una mayor información<br />

de las propiedades físicas de los alimentos ahora se pueden diseñar<br />

y controlar con mayor precisión las operaciones de ingeniería<br />

en el procesamiento de alimentos, por ejemplo los tiempos<br />

de pasteurización de la leche para eliminar los microorganismos<br />

patógenos sin alterar sus características sensoriales de leche fresca<br />

o enlatar vegetales con una mínima pérdida de vitaminas termosensibles.<br />

Así los procesos de enlatado, congelación y deshidratación<br />

se ajustan al análisis científico y el equipo que se requiere se<br />

diseña con base en principios de ingeniería rigurosos.<br />

Considerando que la alimentación es una necesidad fundamental<br />

del ser humano, la cual que debe ser equilibrada, variada<br />

y atractiva a los sentidos, y que actualmente el consumidor demanda<br />

una amplia disponibilidad de alimentos frescos y procesados,<br />

a precios accesibles que cubran y satisfagan sus necesidades,<br />

podemos asegurar que la ingeniería de<br />

alimentos es la responsable de proporcio-<br />

nar estos servicios, aplicando la ingeniería<br />

de procesos, el desarrollo de productos y el<br />

control de calidad en su fabricación, participando<br />

también en forma interdisciplinaria<br />

en la solución de los problemas de pérdidas<br />

y deterioro de los alimentos por daños físicos<br />

o microbiológicos y garantizando así<br />

un aprovechamiento adecuado y cuidando<br />

el desarrollo sustentable.<br />

El actual ritmo de vida ha propiciado el<br />

desarrollo de diversos tipos de alimentos, desde ingredientes para<br />

ser incorporados en la preparación de comida en casa, como<br />

moles, salsas, aderezos y concentrados para preparar bebidas, hasta<br />

alimentos de conveniencia, en donde el consumidor adquiere<br />

platillos listos para consumir sin importar en dónde se encuentre.<br />

Asimismo, otra parte de la población demanda alimentos orgánicos,<br />

fortalecidos con algunos nutrimentos o específicos para<br />

enfermos, deportistas, etcétera.<br />

La ingeniería de alimentos participa en estos desarrollos, considerando<br />

las propiedades funcionales de los diferentes ingredientes<br />

que intervienen en la formulación del alimento particular,<br />

así como las interacciones que pudieran presentarse con<br />

el tipo de material de empaque utilizado y con la atmósfera<br />

interior, diseñada para obtener la adecuada conservación<br />

del alimento ya preparado.<br />

Podemos decir que la característica de<br />

la ingeniería en general es la concepción,<br />

creación y cuidado de los medios por<br />

los cuales se suministra un producto, la<br />

característica de la ingeniería de proceso es<br />

la ingeniería de plantas de proceso que transforman física y químicamente<br />

materias primas en productos útiles y la característica de<br />

la ingeniería de alimentos es el diseño, la construcción y el cuidado<br />

de los medios para convertir, preservar y distribuir alimentos.<br />

En el campo industrial, los avances más notables en la ingeniería<br />

de alimentos han sido en áreas como: congelación y concentración<br />

de jugos, el congelamiento de vegetales fluidizados, el<br />

tratamiento de ultra-calor, así como la aplicación de los procesos<br />

de ósmosis inversa, ultrafiltración, liofilización y cocinado por<br />

extrusión.<br />

Históricamente, la industria de los alimentos se ha dividido en<br />

segmentos especializados cada uno en la preparación, el manejo<br />

y la distribución de grupos de alimentos particulares, surgiendo<br />

mercados y organizaciones de venta al mayoreo para cada uno<br />

de estos grupos, así encontramos agrupaciones de industriales<br />

dedicadas al procesamiento y comercialización de productos<br />

cárnicos, lácteos, elaborados a base de cereales, productos de<br />

confitería, bebidas fermentadas, frutas y hortalizas. Los nuevos<br />

desarrollos de la ciencia y la tecnología de alimentos se han<br />

adaptado a este patrón ya establecido, aportando mejoras para<br />

Todos los alimentos son más o menos<br />

perecederos y muchos son poco<br />

apetitosos en su estado natural,<br />

por lo tanto hay que procesarlos<br />

para prolongar su vida o para<br />

mejorar su sabor y presentación.<br />

cada grupo, con un solo propósito: el de mantener la calidad y<br />

dar un mejor servicio al consumidor.<br />

La industria de alimentos es un sistema complejo relacionado<br />

con las actividades de producción de insumos, de procesamiento<br />

o transformación y de sistema de conservación, almacenamiento,<br />

distribución y mercadeo de los productos generados, cuyo principal<br />

objetivo es satisfacer los requerimientos de una creciente<br />

población que demanda alimentos de calidad. El ingeniero de<br />

alimentos participa en este sistema aportando los conocimientos<br />

que interactúan entre los fenómenos físicos, químicos y biológicos<br />

con el aspecto tecnológico de conservación, transportación<br />

y comercialización y con la ingeniería de<br />

procesos, ingeniería sanitaria y de diseño de<br />

planta.<br />

Estamos ante un nuevo sistema integral<br />

de mejora continua en donde la<br />

participación interdisciplinar y multidisciplinar<br />

es fundamental para satisfacer<br />

las necesidades de alimentos de<br />

una <strong>sociedad</strong> globalizada.<br />

IBERO 39


SABERES/sabores<br />

Tío Corne<br />

Cornelio I. Pérez Ricárdez. Especialista<br />

divulgador del tema en múltiples publicaciones<br />

impresas y electrónicas. Titular de la marca de<br />

mezcal La Venencia del distrito de Ejutla,<br />

Oaxaca. Miembro de la agrupación Mezcales<br />

Tradicionales de los Pueblos de México y<br />

coordinador de la Logia de los Mezcólatras.<br />

Un día sin mezcal es como un día sin sol.<br />

Tío Jaime Brena, Ejutla, Oaxaca.<br />

Mezcal es un vocablo náhuatl que proviene de metl (maguey)<br />

e ixcalli (cocido en horno de tierra), de donde<br />

surge mexcalli, que podría traducirse como maguey cocido<br />

en horno de tierra. Esta acepción del vocablo aún es vigente<br />

para el maguey cocido, dulcísimo y exquisito, que se vende en<br />

los mercados de México y al que también se le llama mezontle,<br />

de color café como el del piloncillo. Mezcal, además, sirve para<br />

referirse (como en Jalisco) al maguey mezcalero vivo en el campo,<br />

sea silvestre o cultivado.<br />

También se usa la palabra mezcal para nombrar a la bebida<br />

destilada de maguey cocido en horno de tierra, que se elabora<br />

de manera tradicional en, al menos, 21 estados de México, y que<br />

resume miles de años de civilización y de desarrollo de exquisitos<br />

sabores y aromas, con reglas precisas construidas colectivamente<br />

para evaluar sus calidades.<br />

42 IBERO<br />

›Maravillas<br />

de los<br />

mezcales<br />

tradicionales<br />

de México<br />

Perleado de mezcal de maguey Ixtero Amarillo. Zapotitlán, Jalisco.<br />

Fotografía de Orlando Estrada.<br />

Cada pueblo mezcalero, en su lengua y conforme a su espiritualidad<br />

y carácter, nombró a los magueyes y a los mezcales<br />

destilados con diferentes palabras. Mezcal fue la que, al paso del<br />

tiempo, se adoptó para todos esos maravillosos destilados, que<br />

conforman un riquísimo filón de la identidad y el patrimonio<br />

cultural de México.<br />

Los mezcales son parte esencial de las gastronomías de México,<br />

por lo que están sujetos a reglas de calidad estrictas que cada<br />

región y cada población productora ha construido colectivamente<br />

durante siglos. Estos son los Mezcales Tradicionales que, al<br />

serlo, cumplen los siguientes requisitos:<br />

1. Se hacen exclusivamente de maguey mezcalero, ya sea silvestre<br />

o cultivado.<br />

2. Se usan en su elaboración sólo magueyes maduros.<br />

3. Sus procesos de elaboración son estrictamente naturales; es


Piñas o cabezas de maguey Mexicano (redonda) y<br />

de maguey San Martinero (alargadas). Ejutla, Oaxaca.<br />

Fotografía de Cornelio I. Pérez Ricárdez.<br />

decir, sin hacer uso de ningún producto químico que acelere su<br />

proceso normal, particularmente durante la fermentación, pues<br />

esto altera sus sabores y aromas.<br />

4. Su elaboración se apega estrictamente al proceso cultural,<br />

tecnológico y al gusto histórico que cada región, comunidad y<br />

población han construido a través de su historia.<br />

5. Se destila exclusivamente en aparatos de destilación discontinua,<br />

que pueden estar fabricados, o incluir componentes, de<br />

los siguientes materiales: barro, cobre, maguey, carrizo, madera e<br />

incluso piedra, entre otros.<br />

6. Se consume en graduaciones, como mínimo, de 45 grados<br />

o más, según el gusto histórico de cada región y población; son<br />

ellas quienes han establecido los rangos de graduación en los<br />

que es aceptable consumir su mezcal, pero nunca menor a los<br />

45 grados.<br />

Los mezcales son parte esencial<br />

de las gastronomías de México,<br />

por lo que están sujetos a<br />

reglas de calidad estrictas que<br />

cada región y cada población<br />

productora ha construido<br />

colectivamente durante siglos.<br />

7. Existe un control social sobre su producción, pues son las<br />

propias poblaciones mezcaleras y sus maestros mezcalilleros quienes<br />

evalúan y controlan la calidad de sus mezcales de acuerdo a gustos<br />

históricamente conformados que se verifican con pruebas de calidad<br />

socialmente construidas y aceptadas por todos; quien no las<br />

cumple, no puede vender el mezcal en su población de origen.<br />

8. Una forma de evaluar su calidad es la perla, concha o burbuja,<br />

que se genera al vaciar el destilado en un recipiente que<br />

puede ser una jícara, un carrizo o un cuerno, entre otros de<br />

gran tradición. Esta prueba indica el grado alcohólico, los tipos<br />

de maguey empleados y su procedencia, así como el proceso de<br />

elaboración por el que pasó el mezcal. Por tanto, el perleado es<br />

la huella digital del mezcal que un maestro mezcalillero o experto<br />

regional sabe interpretar. Otra prueba de calidad es frotar el<br />

mezcal entre las manos hasta que se seque para percibir el aroma,<br />

su consistencia, grado alcohólico y proceso de elaboración.<br />

9. Detrás de cada mezcal hay un maestro mezcalillero con nombre<br />

y apellido, pues son producciones limitadas, únicas e irrepetibles<br />

que representan la sensibilidad exquisita de las distintas<br />

culturas y poblaciones de México.<br />

10. Tiene una función social en sus comunidades de origen,<br />

pues es parte esencial de sus fiestas familiares, patronales, cívicas<br />

y funerarias y de sus gastronomías, por lo que una parte sustancial<br />

de su producción es consumida necesariamente en dichas<br />

comunidades o regiones de influencia cultural.<br />

IBERO 43


SABERES/sabores<br />

El mezcal es una prueba<br />

extraordinaria del<br />

refinamiento que puede<br />

tener la experiencia<br />

humana en su vertiente<br />

gastronómica.<br />

11. Detrás del Mezcal Tradicional existe una compleja y variadísima<br />

biodiversidad (magueyes —más de cien—, árboles,<br />

microorganismos, bacterias, aves, insectos, murciélagos,<br />

etcétera) que ha sido preservada, recreada y modificada<br />

por las comunidades mezcaleras.<br />

12. Para su elaboración existen innumerables<br />

y riquísimas tecnologías y procedimientos,<br />

desarrollados localmente y transmitidos<br />

de generación en generación por vía oral,<br />

constituyentes esenciales de las características<br />

y personalidad de cada uno de los mezcales.<br />

13. Huele y sabe intensamente a maguey;<br />

además, posee gran carácter y una sutil, profunda<br />

y elegante delicadeza en sus complejos y múltiples<br />

sabores y aromas, que están determinados por tres aspectos:<br />

a) el tipo y procedencia del maguey usado y el entorno ecológico<br />

donde creció;<br />

b) las prácticas culturales y tecnológicas empleadas<br />

en la elaboración del mezcal, y<br />

c) el gusto histórico de la región donde se elaboró<br />

y del maestro mezcalillero que lo procesó.<br />

14. Es una prueba extraordinaria del refinamiento<br />

que puede tener la experiencia<br />

humana en su vertiente gastronómica, la cual<br />

puede ofrecerse en su verdadera autenticidad,<br />

tanto a mexicanos como a extranjeros, siempre<br />

y cuando conserve su originalidad y tradición.<br />

15. Estos criterios son válidos para todos los<br />

Mezcales Tradicionales sin excepción, llámense bacanora,<br />

tuxca, raicilla, quitupan, tequila o, simplemente, mezcal.<br />

Ahora bien, el gusto histórico puede definirse como la construc-<br />

44 IBERO<br />

Tomando mezcal en cuerno de res. Taberna de Don Macario Partida. Zapotitlán, Jalisco. Fotografía de Orlando Estrada.<br />

ción colectiva de los gustos gastronómicos regionales a través del tiempo,<br />

que genera reglas de cómo deben saber y oler los mezcales, cómo deben<br />

elaborarse y cuáles son las pruebas de calidad a que deben someterse<br />

para que, en su lugar de origen, sean considerados legítimos,<br />

buenos y sabrosos.<br />

De aquí que haya tantos gustos históricos y<br />

Mezcales Tradicionales como regiones y pueblos<br />

mezcaleros existen. Mezcales con aromas y sabores<br />

únicos y específicos reconocidos por las comunidades<br />

donde se elaboran; los que no sean<br />

reconocidos como propios, serán considerados<br />

falsos y no serán consumidos.<br />

Según la región, habrá elementos específicos de<br />

cada gusto histórico. Por ejemplo los magueyes usados:<br />

en Nombre de Dios, Durango, el Maguey Cenizo;<br />

en la parte occidental de Ejutla, Oaxaca, el San Martinero y el<br />

Barril; en la Mixteca de Puebla el Papalomé y el Pitzometl. Otro<br />

ejemplo es el destilador: en Santa Catarina Minas, Oaxaca,<br />

usan ollas de barro; en Zapotitlán, Jalisco, alambique de<br />

cobre con tronco de higuera ahuecado.<br />

Como conclusión podemos decir que los Mezcales<br />

Tradicionales y sus gustos históricos conforman<br />

un patrimonio cultural invaluable que<br />

debemos preservar. Para hacerlo es necesario<br />

conocer la tradición mezcalera y respetar a quienes<br />

la encarnan: los maestros mezcalilleros y las poblaciones<br />

mezcaleras de las que ellos son parte, así<br />

como las reglas tradicionales que han construido<br />

colectivamente a través de su historia.<br />

Para mayor información sobre esta maravillosa bebida de la gastronomía mexicana<br />

consultar la página electrónica www.mezcalestradicionales.org; correo electrónico:<br />

info@mezcalestradicionales.com.mx


EL VIAJERO ILUSTRADO<br />

›Galápagos:<br />

de sorpresa en sorpresa<br />

Roberto Sánchez de la Vara<br />

Coordinador de la Maestría en Administración<br />

del Departamento de Estudios Empresariales de la<br />

<strong>Universidad</strong> <strong>Iberoamericana</strong> Ciudad de México<br />

Aprincipios de marzo de 2009 le llamé a Ricardo Ambriz de<br />

la agencia de viajes con la que suelo contratar esos servicios<br />

para ver qué novedades tenía en destinos para las vacaciones<br />

de verano. Me envió una serie de recomendaciones: desde el tren<br />

GHAN que cruza Australia de norte a sur, expediciones en elefante<br />

por la selva en Tailandia, el tren Rovos en África, hasta un aburrido<br />

crucero por Alaska con viaje previo o posterior tierra adentro y<br />

una expedición a las islas Galápagos con crucero posterior por el<br />

río Amazonas del Ecuador. No lo pensé dos veces: esta última fue<br />

mi elección... y no me arrepentí. Además se conmemoraban los<br />

doscientos años del nacimiento de Darwin, aspecto que lo hacía<br />

aún más interesante.<br />

El archipiélago de las Galápagos se encuentra en el océano Pacífico,<br />

situado en la misma línea del ecuador; está conformado por<br />

trece islas y diecisiete islotes todos pertenecientes a la República<br />

del Ecuador. La mayor parte de las islas son de origen típicamente<br />

volcánico con cerca de dos mil cráteres; el clima es subecuatorial. Su<br />

fauna tiene gran interés ecológico por lo que el archipiélago ha sido<br />

declarado Parque Nacional. En ocasiones se le llama también archipiélago<br />

Colón, pero comúnmente se le conoce como Galápagos.<br />

Las islas pertenecen a la provincia del mismo nombre, cuya capital<br />

46 IBERO<br />

es Puerto Baquerizo Moreno con una población que no llega a los<br />

1,500 habitantes.<br />

El nombre se deriva de la montura de caballo andaluza a la que se<br />

asemeja el caparazón del quelonio que caracteriza a la tortuga de la<br />

zona perteneciente a la familia de los emídidos: suelen tenerlo bastante<br />

plano, además de poseer largas extremidades y dedos unidos<br />

por una membrana.<br />

El recorrido comenzó en Quito, ciudad capital de la República<br />

del Ecuador (desde 1830), que actualmente habitan poco más de<br />

millón y medio de personas. Aterrizar en su aeropuerto actual (están<br />

construyendo otro en los suburbios) según los conocedores es toda<br />

una proeza ya que está situado en un estrecho valle rodeado de altas<br />

montañas (la avenida de Humboldt, como le llaman, a la que se forma<br />

con catorce volcanes en línea) y casi ha quedado en el centro de<br />

la ciudad. Es la segunda ciudad más importante del país después del<br />

puerto de Guayaquil. Muchas maravillas arquitectónicas esperan al<br />

visitante de Quito, desde la Catedral iniciada en el siglo XVI hasta<br />

la Capilla del Hombre, construida con fondos del pintor, muralista<br />

y escultor Oswaldo Guayasamín (1919-1999), incluyendo una de las<br />

iglesias de la Compañía de Jesús más espectaculares que he visto, en<br />

estilo barroco construida de 1605 a 1765. Después de varias visitas a<br />

los alrededores (al volcán Cotopaxi, el Centro del Mundo, el volcán<br />

Pichincha, por teleférico, Chiclayo y muchos lugares más), llegó el<br />

día de iniciar la expedición a las Islas.<br />

En un avión de la Aerolínea Galápagos se sale de Quito temprano<br />

a Puerto Ayora que se encuentra en la Isla Santa Cruz, la segunda<br />

más grande del archipiélago de origen volcánico; de ahí trasladan<br />

Foto: Corbis.


Foto: Corbis.<br />

El archipiélago de las Galápagos se encuentra en el<br />

océano Pacífico, situado en la misma línea del ecuador;<br />

está conformado por trece islas y diecisiete islotes todos<br />

pertenecientes a la República del Ecuador.<br />

al viajero en un pintoresco autobús hasta el embarcadero donde se<br />

sube a una lancha para abordar el M/V Santa Cruz, un barco de lujo<br />

con todas las comodidades para iniciar uno de los más bellos<br />

recorridos por este lugar. La sola entrada a la Reserva<br />

Biológica Marina de Galápagos (su nombre oficial)<br />

para extranjeros es de 150 dólares estadounidense<br />

(aquí el dólar estadounidense es la moneda corriente<br />

desde 2001). Los pocos ecuatorianos que<br />

visitan el Parque están exentos de esta tarifa.<br />

Ese mismo día, después del almuerzo a bordo,<br />

se zarpa rumbo a Isla Santa Fe, como para comenzar<br />

a ver parte de las maravillas que le esperan<br />

a uno en las demás islas; de ahí en adelante todo<br />

es descubrimiento, en las siguientes islas, Floreana I,<br />

Española, Isabela (la más grande), Floreana II, Isla Bartolomé,<br />

Isla Santa Cruz, Isla Baltra (la más pequeña) e Isla Plazas.<br />

En todas ellas se ven rocas, volcanes, zonas áridas, zonas de lagos<br />

pletóricas de aves extrañas que se comportan con entera libertad<br />

y que ven en el ser humano a un animal más; asimismo, iguanas<br />

terrestres y marinas, lobos marinos, tortugas de todo tipo, piqueros<br />

patas azules (donde el macho al seducir a la hembra incrementa<br />

el azul de sus patas), leones y lobos marinos, cormoranes,<br />

culebras, lagartijas, gaviotas de lava, pingüinos, todos<br />

en un concierto de convivencia y respeto entre sí.<br />

Al voltear al cielo de azul indescriptible ve uno<br />

todo un espectáculo de aves: gavilanes, gaviotas de<br />

cola bifurcada, pájaros brujos, pelícanos, pinzones<br />

de Darwin, piqueros enmascarados, tucanes, flamencos<br />

rosados y esbeltos (en los lagos tienen su<br />

hábitat propio), las características fragatas que dejan<br />

ver sus juegos de seducción al inflar su rojo pecho,<br />

lechuzas negras y demás especies endémicas que viven<br />

en el Archipiélago.<br />

La vida diaria en el barco comienza a las 6:30 cuando se sirve<br />

un magnífico desayuno buffet para luego salir a las 7:30 en botes<br />

muy bien acondicionados, por grupos, según el idioma, con un<br />

Foto: Corbis.<br />

IBERO 47


EL VIAJERO ILUSTRADO<br />

Foto: Corbis.<br />

guía local (por ley, sólo los nacidos en el<br />

Archipiélago pueden ser guías). Fernando<br />

Carreón, un preparado joven de 23 años,<br />

fue el conductor de nuestro grupo, con estudios<br />

en cuatro lenguas y con varias especialidades<br />

en fauna local, nombró a nuestro<br />

grupo de habla española e italiana como el<br />

de los cormoranes (nombre común de diversas<br />

aves pelecaniformes: su tamaño varía<br />

de los 48 a los 95 centímetros, de plumaje<br />

oscuro, cuello y pico largos, patas fuertes y dedos unidos por una<br />

membrana, grandes nadadoras y alas cortas).<br />

De origen volcánico, el Archipiélago fue refugio de piratas y bucaneros<br />

que buscaban agua, alimento y hasta protección; lugar sede<br />

de una de las escalas más importantes de la expedición que por<br />

más de seis años (1831 a 1836) realizó el británico Charles Robert<br />

Darwin (1809 a 1882), quien llegó a bordo de la embarcación llamada<br />

Beagle dentro de su viaje alrededor del mundo y publicado<br />

bajo el título El diario de viaje de un naturista alrededor del mundo,<br />

Iglesia de la Compañía de Jesús, en Quito.<br />

48 IBERO<br />

Los recorridos pueden ser de cuatro<br />

a veintidós días, según el interés y<br />

presupuesto del viajante. Los ocho<br />

días que estuve en la expedición han<br />

sido de los más ilustrativos que he<br />

tenido como viajero.<br />

mismo que ya de regreso y varios años después dio por resultado<br />

la edición en 1859 de su polémico Origen de las especies por medio de<br />

la selección natural para que en 1871 culminaran sus valiosos escritos<br />

con El origen del hombre. (Actualmente, en Puerto Baquerizo Moreno<br />

en la Isla San Cristóbal, la última que se visita, se encuentra desde<br />

1959 la estación científica Charles Darwin.)<br />

El Archipiélago fue también la sede de las aventuras amorosas<br />

de la baronesa alemana Wagner de Bosquet, quien llegó en 1932<br />

y construyó un hotel para millonarios (que aun existe, ahora remodelado)<br />

llamado Hacienda Paraíso. Se ubica también una base<br />

aérea estadounidense en San Cristóbal (que aún funciona como<br />

Aeropuerto Internacional de salida y que iba a ser remodelado por<br />

la quebrada empresa Enron, obra que quedó inconclusa). En 1998,<br />

tras permanecer alrededor de veinte años inactivo, erupcionó el volcán<br />

Cerro Azul en la Isla Isabela, llegando a desplazar parte de la<br />

misma y dejando una serie de grutas donde se adentran las lanchas<br />

expedicionarias para observar todo tipo de murciélagos y aves de<br />

la oscuridad.<br />

Los recorridos pueden ser de cuatro a veintidós días, según el<br />

interés y presupuesto del viajante. Los ocho días que estuve en la<br />

expedición han sido de los más ilustrativos que he tenido como<br />

viajero: muy distinto a otros, con un contacto sobrio hacia la naturaleza.<br />

Al regresar, tiene uno la sensación de que algo está dejándose<br />

atrás: la incógnita y el cuestionamiento que plantea Darwin sobre el<br />

origen de las especies y del hombre.


cine<br />

›La pantalla sublevada<br />

Cine histórico mexicano<br />

Carlos Bonfil<br />

Escritor y crítico de cine. Colabora en<br />

diversos medios impresos y electrónicos,<br />

entre ellos el diario La Jornada y el<br />

suplemento Letra S<br />

María Félix en Río Escondido, 1947.<br />

El cine histórico mexicano duerme hoy el sueño de los<br />

justos en las bóvedas inexpugnables de la Cineteca Nacional.<br />

Saben de su existencia críticos e historiadores de<br />

cine; también un puñado de académicos universitarios.<br />

Es un cine poco visto por el público general y rara vez difundido,<br />

un cine que la indolencia institucional ha convertido en una<br />

auténtica pieza de museo. Actualmente se le rescata como parte<br />

de una onerosa parafernalia conmemorativa (las deslucidas fiestas<br />

del bicentenario de la Independencia y el centenario de la Revolución),<br />

y posiblemente después sea de nueva cuenta arrumbado<br />

en el desván de los objetos inservibles de la nación.<br />

La operación no es nueva. Luego de ofrecer en los años treinta<br />

la formidable recreación crítica de los sucesos revolucionarios<br />

(la trilogía de Fernando de Fuentes: El prisionero trece, 1933;<br />

El compadre Mendoza, 1934; Vámonos con Pancho Villa, 1935), el<br />

cine nacional se dedicó pacientemente a vaciar a la sublevación<br />

campesina de todo contenido contestatario. No debía haber ya<br />

complejidad dramática en los personajes, ni molestas insinua-<br />

50 IBERO<br />

ciones de perfidia y traición moral a los ideales revolucionarios;<br />

ningún cuestionamiento de fondo al régimen emanado de la<br />

Revolución triunfante, ni tampoco a la corrupción o al talante<br />

autoritario de algunos de sus caudillos. No era posible presentar<br />

ya la farsa oportunista de un hacendado empeñado en quedar<br />

bien con las fuerzas federales y también con los zapatistas, sumiéndose<br />

en una espiral de degradación moral y sacrificando de<br />

paso, por interés económico, a un amigo generoso.


La obra maestra que fue El compadre Mendoza sería irrepetible<br />

en el cine nacional. Tampoco era imaginable seguir derrumbando<br />

figuras mitológicas como la de Pancho Villa presentándolo<br />

como un ser polifacético, capaz de generosidad y bonhomía,<br />

pero animado también de un insaciable apetito de revancha.<br />

En El prisionero trece, un militar autoritario que por ironías del<br />

destino termina fusilando al hijo más amado, era no sólo una<br />

triste anécdota de la Revolución, sino también un sombrío planteamiento<br />

de tragedia. Revisar hoy la trilogía de Fernando de<br />

Fuentes es calibrar hasta qué punto el cine de la Revolución que<br />

producen las generaciones siguientes de cineastas es tan inocuo,<br />

acartonado y oficialista como la conmemoración onomástica<br />

que, con el mismo espíritu de aquel hacendado Mendoza, tri-<br />

Revisar hoy la trilogía de Fernando de Fuentes es<br />

calibrar hasta qué punto el cine de la Revolución<br />

que producen las generaciones siguientes de<br />

cineastas es tan inocuo, acartonado y oficialista.<br />

buta hoy el poder conservador a la vieja gesta<br />

histórica.<br />

En los años cuarenta, el cine de Miguel<br />

Contreras Torres (El rayo del sur, El padre<br />

Morelos, cintas de 1943) había ofrecido<br />

una visión idílica de la Independencia<br />

nacional. Los bandos contendientes<br />

lograban reconciliarse al advertir un<br />

objetivo común: encomiar la labor<br />

civilizadora de la Madre Patria y denunciar<br />

la corrupción de sus hijos<br />

peninsulares indignos. Películas como<br />

La virgen que forjó una patria (Julio Bracho,<br />

1942) o El insurgente (Raphael Sevilla,<br />

1940), destacaron a su vez la importancia de<br />

la religión en el proceso liberador, todo en perfecta<br />

armonía con la ideología conservadora del gobierno<br />

en turno. La recuperación de una historia de sublevaciones<br />

nacionales por parte de los gobiernos conservadores tiene<br />

como punto de partida el advenimiento del régimen de Ávila<br />

Camacho, y poco después la consolidación del presidencialismo<br />

de Miguel Alemán, Ruiz Cortines y Adolfo López Mateos. Durante<br />

esos gobiernos, la imagen de la Revolución se petrificó en<br />

el cine, se institucionalizó como espejo fidedigno de la retórica<br />

oficial, y se volvió soporte indispensable en ceremonias onomásticas<br />

y manuales escolares.<br />

Dolores del Río y Pedro<br />

armendáriz, en Flor<br />

silvestre, 1943.<br />

Una cinta emblemática resume la intención del momento:<br />

Flor silvestre (1943), de Emilio Fernández, con Dolores del Río<br />

y Pedro Armendáriz en los papeles estelares: ofrece la combinación<br />

perfecta del glamour y la reciedumbre en una gesta heroica<br />

vuelta folclor instantáneo. La retórica oficial alcanza alturas vertiginosas<br />

en la escena inaugural de Río Escondido (Emilio Fernández,<br />

1947), donde la maestra rural Rosaura Salazar (María<br />

Félix) escucha emocionada en Palacio Nacional al presidente<br />

Miguel Alemán, quien le ordena llevar el alfabeto a las comunidades<br />

indígenas.<br />

La Revolución se confunde asimismo con las historias de<br />

amor contrariado que protagonizan las estrellas más populares<br />

del momento, Pedro Armendáriz y, una vez más, María Félix, en<br />

Enamorada (Emilio Fernández, 1946). Los episodios<br />

revolucionarios se diluyen en juegos<br />

galantes del amor y del azar, cuando no en<br />

melodramas exacerbados que fortalecen<br />

los arquetipos más socorridos del cine<br />

mexicano: la mujer momentáneamente<br />

embravecida, cuya temeridad se disuelve,<br />

para tranquilidad de todos, en<br />

una abnegación absoluta, y el macho<br />

pendenciero y fanfarrón que paulatinamente<br />

adquiere un perfil de héroe<br />

inmaculado y generoso.<br />

Las masas rebeldes se disuelven de<br />

modo conveniente en el inconmensurable<br />

paisaje que propone la lente de Gabriel Figueroa.<br />

Ya no importa capturar de modo puntual<br />

los ánimos de los combatientes, divididos entre<br />

el fervor al caudillo máximo y el desasosiego ante una condición<br />

miserable que nunca cambia. Tampoco centrar la atención<br />

en la tormenta moral que vive un revolucionario como Tiburcio<br />

Maya (Antonio R. Frausto) en Vámonos con Pancho Villa, quien se<br />

cuestiona derrotado y marginado por su propio ejército sobre la<br />

utilidad y provecho de la lucha, asaltado por la sospecha de que<br />

posiblemente tanta muerte no haya servido para nada.<br />

Lo que el cine de Emilio Fernández explotará hasta el cansancio<br />

es el optimismo que sobrevive a la tragedia y que rinde un<br />

IBERO 51


cine<br />

La obra maestra que<br />

fue El compadre<br />

Mendoza sería<br />

irrepetible en el cine<br />

nacional.<br />

tributo final a las instituciones. Un nacionalismo altanero y satisfecho<br />

que concentra las virtudes de la patria en los desplantes de<br />

una heroína o en el arrojo viril de su enamorado en cananas. La<br />

fotografía se encargará de colocar a la pareja idílica en un paisaje<br />

de nubarrones o en la perspectiva interminable de huizaches y<br />

magueyes. Esas serán las imágenes entrañables de la época de<br />

oro de nuestro cine, los iconos de exportación, y los emblemas<br />

oficiales. La Revolución será un edén recobrado o la tormenta<br />

que nunca acaba, la procesión nocturna de revolucionarios hacia<br />

un destino glorioso (desenlace de Enamorada), la melancolía en<br />

torno a la hoguera (Enemigos, Chano Urueta, 1933), o la turbulencia<br />

que llena de inquietud a los hogares burgueses (Vino el<br />

remolino y nos alevantó, Juan Bustillo Oro, 1949).<br />

Con el desvanecimiento del star system mexicano en los años<br />

cincuenta, el cine de la Revolución se apaga lentamente y ya<br />

sólo aparece de modo esporádico y con muy poca gracia en los<br />

remedos folcloristas de algún spaghetti western, en las cándidas<br />

bufonerías de la cinta francesa Viva María (Louis Malle, 1965),<br />

o en los espectaculares propagandísticos del cine auspiciado por<br />

Luis Echeverría (Emiliano Zapata, Cazals, 1970; El principio, Gonzalo<br />

Martínez, 1972), cuya desangelada persistencia llega hasta<br />

nuestros días con la cinta Chico grande, de un Felipe Cazals en<br />

retirada.<br />

Hay excepciones en esta decadencia incontenible: La soldadera<br />

(José Bolaños, 1966) o Reed, México insurgente (Paul Leduc,<br />

1970). El cine de la Revolución ofrece todavía otras sorpresas,<br />

y también la ocasión para revaloraciones indispensables, como<br />

52 IBERO<br />

Fotograma de El compadre Mendoza, 1934.<br />

la del trabajo de Matilde Landeta. La reciente restauración digital<br />

por parte de la Filmoteca de la UNAM de la trilogía de<br />

Fernando de Fuentes, disponible hoy en un estupendo formato<br />

DVD, y la recuperación de múltiples cintas comercializadas en<br />

ese mismo formato, permiten rescatar al cine histórico de los<br />

desvanes enmohecidos de las instituciones culturales y ofrecerlo<br />

a un público masivo para su disfrute cabal, y también para una<br />

nueva y muy postergada consideración crítica.<br />

Fotograma de La virgen que forjó una patria, 1942.


ADóNDE<br />

IR Y<br />

POR qUé<br />

Beatriz Palacios<br />

TEATRO<br />

El principito<br />

Basada en el libro El principito de<br />

Antoine de Saint-Exupéry, esta<br />

pieza teatral bajo la dirección<br />

de Sergio Cuéllar y adaptada<br />

por Ioné Cervantes, recrea<br />

de manera afortunada<br />

los personajes, mundos y<br />

momentos más entrañables<br />

de esta obra clásica de la literatura<br />

contemporánea, logrando<br />

transmitir al espectador las<br />

profundas reflexiones expuestas por cada<br />

uno de los personajes. El resultado es una<br />

experiencia conmovedora para los sentidos<br />

y las emociones.<br />

Teatro Hipódromo Condesa, hasta el 19 de<br />

septiembre<br />

MÚSICA<br />

Fernando de la Mora: Canto por la<br />

concordia<br />

Acompañado por la Orquesta de Cámara<br />

de Bellas Artes, el Mariachi Gama Mil y el<br />

grupo Romeu y su quinteto, el destacado<br />

tenor Fernando de la Mora en este concierto,<br />

que se suma a las celebraciones de<br />

la Independencia y Revolución mexicanas,<br />

interpretará un amplio repertorio que<br />

DANZA<br />

Carmina Burana con Iñaki Urlezaga<br />

Tras recorrer varios países de Europa y América, el afamado bailarín argentino<br />

Iñaki Urlezaga y su compañía Ballet Concierto se presenta en México con<br />

una versión contemporánea del coreógrafo francés Jean Pierre Aviotte,<br />

de la obra por excelencia de Carl Orff: Carmina Burana. Esta propuesta,<br />

además de poseer una sorprendente y admirable entrega a un lenguaje<br />

contemporáneo, sumará al talento de Iñaki Urlezaga —primer bailarín y artista<br />

invitado en los escenarios y festivales internacionales más importantes—, la<br />

participación de la Orquesta Sinfónica Juvenil y el coro del Instituto Superior<br />

de Música, ambos del estado de Veracruz, además de la soprano Ana Luisa<br />

Méndez, el barítono José Luis Ordoñez y el tenor Guillermo Ruiz.<br />

Auditorio Nacional, 26 de septiembre<br />

incluye piezas de la tradición popular de<br />

nuestro país. De la Mora se ha presentado<br />

en los más importantes escenarios<br />

internacionales y alternado<br />

con grandes exponentes de<br />

la ópera, entre ellos Plácido<br />

Domingo, Luciano Pavarotti,<br />

Edita Gruberova, Youngok<br />

Shin, Leo Nucci, Renata<br />

Scotto, y Piero Cappucilli.<br />

Auditorio Nacional, 15 de<br />

septiembre<br />

XIV Festival Internacional de<br />

Piano en Blanco y Negro<br />

Consolidado como un encuentro que<br />

anualmente muestra las múltiples posibilidades<br />

del piano, desde lo tradicional a lo<br />

alternativo, el Festival Internacional de<br />

Piano en Blanco y Negro reúne<br />

de nueva cuenta a músicos de<br />

diversos países como Australia,<br />

Alemania, Italia, Polonia,<br />

Estados Unidos y México.<br />

Con la participación de<br />

exponentes de distintas escuelas<br />

y estilos, este Festival,<br />

organizado desde 1997 por el<br />

Centro Nacional de las Artes, se<br />

ha convertido en un importante<br />

punto de difusión de la música de piano<br />

ARTES VISUALES<br />

Laberinto de miradas<br />

Luego de dos años de itinerancia por 18 países, llega a México esta muestra, la cual<br />

por medio de 550 fotografías, ofrece un amplio panorama sobre las diferencias, similitudes,<br />

preocupaciones y realidades que compartimos los países de Iberoamérica. El<br />

principal objetivo de Laberinto de miradas, según el curador de la exposición, Claudi<br />

Carreras, es presentar proyectos significativos y representativos que establecen nexos<br />

entre las producciones fotográficas de los distintos países que participan, mostrando<br />

propuestas creativas bajo una edición que pretende generar reflexiones sobre las coincidencias<br />

o divergencias temáticas y estructurales. Además, busca incidir en el diálogo<br />

sobre la producción artística contemporánea y valorar la fotografía documental en el<br />

panorama de vanguardia.<br />

Centro Cultural de España en México, hasta el 5 de septiembre<br />

ITINERARIO DEL OCIO<br />

tanto para los intérpretes nacionales como<br />

para los invitados internacionales que siempre<br />

han mantenido un alto nivel artístico,<br />

convirtiéndolo así en uno de los encuentros<br />

más importantes en su género en América<br />

Latina.<br />

Auditorio Blas Galindo del Centro Nacional de<br />

las Artes, del 4 de septiembre al 2 de octubre.<br />

Programación completa en www.cenart.gob.mx<br />

Compañía Nacional del Mariachi<br />

en concierto<br />

La Compañía Nacional del Mariachi, coordinada<br />

por la Cámara Nacional de Comercio,<br />

Servicios y Turismo de Guadalajara,<br />

tiene como principal objetivo promover,<br />

bajo el formato de grandes conciertos tanto<br />

a nivel nacional como internacional, la<br />

música de mariachi, y a la propia agrupación<br />

como un elemento de identidad<br />

de México, especialmente<br />

de Jalisco, en el mundo entero.<br />

El concierto que ofrecerá<br />

esta Compañía, además de<br />

incluir piezas clásicas de su<br />

repertorio, tendrá su momento<br />

mágico, justo cuando<br />

los grupos de mariachi y la<br />

Orquesta Filarmónica realicen<br />

un magnífico ensamble musical.<br />

Auditorio Nacional, 17 de septiembre<br />

IBERO 53


LA VOZ DEL LIBRO/el eco de la lectura<br />

Qué leer<br />

y por Qué<br />

Juan Domingo Argüelles<br />

54 IBero<br />

Bárbara Jacobs, intensa y lúcida: Gabriel García Márquez.<br />

ramón Gaya, un hombre de fe que funda su mundo en lo<br />

sagrado: Tomás Segovia.<br />

Gabriel Zaid dice lo que oscuramente habíamos intuido sin<br />

alcanzar a formularlo en palabras: José emilio pacheco.<br />

las imágenes circenses de José emilio pacheco y Vicente<br />

rojo en un libro excepcional.<br />

LUNAS, DE BÁRBARA JAcoBs<br />

[ER A / UNAM, Mé x i c o, 2010]<br />

Lunas es la más reciente novela de Bárbara Jacobs,<br />

autora también de Las hojas muertas, Vida<br />

con mi amigo, Florencia y Ruiseñor, Doce cuentos<br />

en contra, Escrito en el tiempo y Juego limpio, entre<br />

otros libros de narrativa y ensayo.<br />

en la cuarta de forros, Gabriel García<br />

Márquez asegura: “Algún día tendremos que<br />

estudiar con el mayor cuidado los comentarios<br />

que Bárbara Jacobs suele anticipar en las<br />

reflexiones intensas y lúcidas de los mismos<br />

libros que está escribiendo. Aún en el transcurso<br />

de sus versiones finales, mientras se escudriña<br />

a sí misma para poner a sus lectores<br />

cautivos contra la pared de sus propias incertidumbres<br />

creativas, todavía parece preguntarse<br />

cómo pudo escribir el libro suyo que estamos<br />

leyendo con tanto placer”.<br />

García Márquez reconoce en Bárbara Jacobs<br />

a “uno de los buenos escritores en estos tiempos<br />

de libros fáciles” y añade, muy enfático:<br />

“Soy uno de sus muchos lectores puntuales, y<br />

mi admiración por sus libros es apenas comparable<br />

con la que tengo por su fidelidad a sí<br />

misma”.<br />

Como todos los libros de Bárbara Jacobs,<br />

Lunas es no sólo original, sino provocador y renovador;<br />

una novela atípica, estimulante, suge-<br />

rente, pues su autora cree en la necesidad de un<br />

diálogo profundo con el lector. Lunas es compleja<br />

y, al mismo tiempo, amena. Nunca aburre<br />

y siempre propone algo más que una anécdota.<br />

Su autora ha dicho que “dedicarse a escribir<br />

es una vocación absorbente y exigente a<br />

la que hay que entregarse en cuerpo y alma<br />

día y noche, y para toda la vida, sin esperar<br />

otra recompensa que la de saber que uno está<br />

cumpliendo lo mejor que puede con la misión<br />

que reconoció y aceptó tener”.<br />

LOS DEMASIADOS LIBROS, DE GABRiEl<br />

ZAiD [DEBolsillo, Mé x i c o, 2010]<br />

Gabriel Zaid ha venido publicando, en ediciones<br />

revisadas, corregidas y aumentadas sus libros<br />

más importantes; esos que los lectores no dejan<br />

de buscar y que leen y releen con emoción e<br />

inteligencia, pues es difícil leer de otro modo a<br />

Gabriel Zaid. entre estos volúmenes renovados<br />

se han publicado ya, en la colección Debolsillo,<br />

El progreso improductivo, Cómo leer en bicicleta,<br />

Reloj de sol, Leer poesía, La poesía en la práctica<br />

y, muy recientemente, Los demasiados libros, un<br />

clásico zaidiano que cada día se lee mejor.<br />

Los demasiados libros incluye una serie de<br />

ensayos sobre los amplios temas del libro y la<br />

lectura. en la cuarta de forros, José emilio pacheco<br />

señala: “Hay en la experiencia de leer<br />

OBRA COMPLETA, DE RAMÓN GAYA [EDitoRiAl PR E-tE x t o s , VA l E N c iA-MA D R iD, 2010]<br />

prologada por Tomás Segovia, acaba de aparecer en españa, en un volumen espléndido cercano<br />

al millar de páginas, la Obra completa de ramón Gaya, pintor, poeta, crítico de arte y filósofo<br />

de quien celebramos, en 2010, su centenario natal, pues nació el 10 de octubre de 1910,<br />

en Murcia. llegó a México en 1939 y colaboró en revistas como Romance y El Hijo Pródigo.<br />

Murió en Valencia, a los 95 años, el 15 de octubre de 2005. la misma editorial pre-Textos<br />

ya había publicado algunos volúmenes de la obra de Gaya, entre ellos Naturalidad del arte (y<br />

artificialidad de la crítica) y El sentimiento de la pintura.<br />

Al prologar este volumen que recoge toda la obra de este autor diverso y extraordinario,<br />

Tomás Segovia señala que “la enseñanza más general de ramón Gaya, que brota tanto de su<br />

obra escrita como de su pintura, es que el arte no es simplemente la realidad, pero tampoco su<br />

suplantador ni mucho menos su enemigo”. Añade que: “Hablar de fe es hablar de lo sagrado.<br />

Decir que ramón Gaya es un hombre de fe es decir que su mundo se funda en lo sagrado.<br />

leyendo sus escritos tiene uno constantemente la impresión de que la obra de los grandes<br />

creadores es sagrada, pero antes que nada la realidad es sagrada, la vida es sagrada”.


una felicidad y libertad que resultan adictivas.<br />

la lectura libera. Se extiende a leer la vida,<br />

a leer a quiénes somos y en dónde estamos.<br />

Anima las conversaciones de lector a lector.<br />

Se contagia por los lectores en acción: padres,<br />

maestros, amigos, escritores, traductores, críticos,<br />

editores, tipógrafos, libreros, bibliotecarios<br />

y otros promotores del vicio de leer.<br />

Gabriel Zaid es capaz de observar el mundo<br />

de las letras desde la perspectiva otorgada por<br />

otras disciplinas. Su gran acierto es la virtud<br />

del poeta: decir lo que oscuramente habíamos<br />

intuido sin alcanzar a formularlo en palabras.<br />

Señala que el verdadero problema del libro es<br />

que el estrato privilegiado que ha hecho estudios<br />

universitarios no lee: nunca le ha dado<br />

el golpe a la lectura, nunca ha llegado a saber<br />

realmente lo que es leer. esto, que sepamos,<br />

nadie lo había dicho”.<br />

Los demasiados libros es ya una referencia<br />

fundamental para todos aquellos que deseen<br />

explicarse el fenómeno de la lectura. Zaid es<br />

un pensador de tal claridad que cualquier lector<br />

se sorprende de que la profundidad pueda<br />

ser tan diáfana.<br />

CIRCOS, DE José EMilio PAcHEco<br />

Y VicENtE RoJo [El co l E G i o NA c i oN A l /<br />

ER A, Mé x i c o, 2010]<br />

Como bien anuncian los editores, Circos reúne<br />

en la misma pista, es decir en las páginas<br />

de este libro, la obra de dos grandes creadores,<br />

José emilio pacheco, el poeta, y Vicente rojo,<br />

el artista visual.<br />

explican: “la juguetería entre sombras que<br />

ideó rojo, a partir de los doce poemas de pacheco<br />

que forman el ciclo ‘Circo de noche’,<br />

entabla su diálogo en esa pausa de oscuridad<br />

que se extiende entre función y función y<br />

función, entre los estallidos de luminosidad<br />

y estruendo. Cuando las fieras descansan y el<br />

público está ausente, escuchamos al Domador<br />

que reflexiona, visitamos a la Trapecista y<br />

a Boro, el niño bestial, oímos a los Siameses,<br />

entrevemos a los Fenómenos. Mientras nos<br />

miramos ante ellos —Ilusionistas, Hombres-<br />

Bala, Autómatas— presenciamos un juego de<br />

espejos entre las construcciones imaginarias<br />

del ‘Circo dormido’ de Vicente rojo y escuchamos<br />

al empresario del circo: ‘en la arena<br />

del mundo somos tigres y leones./ No hay<br />

nadie que no tenga agudos colmillos,/ disposición<br />

para la lucha, talento innato/ para la<br />

herida, para el desprecio y la burla’.”<br />

Circos (en plural, porque uno es el de pacheco,<br />

“Circo de noche”, y otro el de rojo,<br />

“Circo dormido”) es un libro siempre visual:<br />

ya sea por las imágenes plásticas o ya sea por<br />

las imágenes poéticas. Ambos creadores, a fin<br />

de cuentas, abren el escenario para que presenciemos<br />

la función.<br />

un libro excepcional de dos creadores excepcionales.<br />

Aclaración<br />

La verdadera Bárbara Jacobs<br />

en la página 32 del número 8 de IBERO, junto al crédito<br />

de Bárbara Jacobs, incluimos imperdonablemente una fotografía<br />

que no es la suya. (Quizá se trata de la escritora argentina<br />

luisa Valenzuela. esta es una duda también para el gran<br />

fotógrafo rogelio Cuéllar, cuyo archivo consta de miles de<br />

originales.) Mil disculpas a la autora y a los lectores. He aquí<br />

a la verdadera Bárbara Jacobs, en compañía de Vicente rojo, en una foto reciente<br />

de rogelio Cuéllar, el 26 de junio de 2010, al inaugurarse la exposición Circos, en<br />

la Galería lópez Quiroga.<br />

IBero 55


innovación tecnológica<br />

Cámara a prueba de agua,<br />

golpes y frío intenso<br />

La cámara Cyber-shot TX5 de Sony, con memoria interna de 45 MB, lente<br />

gran angular de 25 mm y pantalla LCD con panel táctil de 3 pulgadas,<br />

resiste caídas accidentales de 1.5 metros de altura, además de ser a<br />

prueba de agua, polvo y bajas temperaturas, incluso de menos 10 grados<br />

centígrados. Asimismo, toma fotografías panorámicas y video de<br />

alta definición bajo el agua (hasta 3 metros de profundidad) durante<br />

una hora.<br />

Dispositivos e instrumentos<br />

que faCilitan la viDa<br />

Proyector interactivo<br />

de ultracorta distancia<br />

epson dio a conocer el novedoso proyector<br />

interactivo epson Brightlink 450Wi,<br />

que integra un sistema de ultracorta distancia,<br />

que en espacios reducidos puede<br />

proyectar la imagen en una superficie, incluso<br />

rugosa, de hasta 96 pulgadas, la cual<br />

puede ser ajustada según las necesidades.<br />

asimismo, permite al usuario permanecer<br />

frente al área de proyección sin tener<br />

sombras en su presentación, gracias a su<br />

dispositivo antirreflejos, así como interactuar<br />

con la computadora a través de un<br />

lápiz óptico que funciona como mouse,<br />

lo que convierte la pantalla en una pizarra<br />

electrónica.<br />

56 iBero<br />

Primer smartphone con radio<br />

nextel de méxico lanzó al marcado el equipo i1, desarrollado por motorola, que<br />

combina los beneficios de la Conexión Directa y la plataforma android, la cual<br />

está basada en un ecosistema de internet que recuerda las últimas seis aplicaciones<br />

utilizadas con sólo presionar una tecla. Con pantalla touch de 3.1 pulgadas, el<br />

smartphone, además de los servicios de nextel como radio, telefonía y mensajes<br />

sms y mms, tiene disponibles múltiples funciones y aditamentos, entre ellos cámara<br />

de 5 megapixeles con etiquetado geográfico y tomas panorámicas, reproductor<br />

mp3, acceso Wifi, correo electrónico, redes sociales, navegación Gps y acceso<br />

al portal móvil android market.<br />

Cargador inalámbrico<br />

La firma Powermat desarrolló un cargador inalámbrico que permite proveer de energía<br />

hasta a cuatro dispositivos de manera simultánea al únicamente colocarlos sobre la<br />

base y con un solo cable. El cargador Powermat es compatible con iPods, iPhones y<br />

otros teléfonos celulares y dispone, también, de conectores especiales para notebooks,<br />

reproductores MP3, playstations y cámaras fotográficas. Powermat se basa en el principio<br />

de la inducción magnética, que envía energía inalámbrica a los dispositivos que<br />

se posan sobre el tapete, la cual interrumpe automáticamente cuando está completa<br />

la batería.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!