El Estado del Bienestar en la Comunidad de Castilla-La Mancha

El Estado del Bienestar en la Comunidad de Castilla-La Mancha
Datos del Ministerio de Sanidad nos informan que la comunidad
autónoma de Castilla-La Mancha es una de las tres comunidades, que mayor
porcentaje de no fumadores tiene, se declaran no fumadores un 67,4%; así
como una tendencia, en los últimos años, al descenso en el porcentaje de
fumadores. En la Encuesta Nacional de Salud de 1993 (37), en Castilla-La
Mancha se declaran fumadores un 47% de varones y un 18% de mujeres,
concentrándose las fumadoras en las edades de 15 a 44 años, en los varones
el consumo es más homogéneo en todas las edades. También se confirma
que un 29% de los jóvenes castellano-manchegos, de edades comprendidas
entre 14 y 18 años, declaran ser fumadores habituales. Y fuentes de la
Consejería de Sanidad de Castilla-La Mancha estiman que el tabaco fue el
responsable del 14,7% de la mortalidad en esta comunidad en el año 1990.
Respecto al consumo de drogas ilegales esta comunidad presenta, en el
año 1993, una tasa de 45,8 personas por cien mil atendidas para su
deshabituación, con una evolución en ascenso, pero que se debe
principalmente al aumento de la oferta de servicios , y según el Sistema
Estatal de Información sobre Toxicomanías (SEIT/94) la tasa de inicios de
tratamiento de consumidores de drogas ilegales es del 43,5%, una de las
tasas más bajas de España. También se observa el aumento en el número de
casos atendidos de urgencia por consumo de opiáceos y cocaína.
Consecuencia de este consumo son las infecciones por el VIH, aunque
Castilla-La Mancha es la segunda comunidad, según el Plan regional de
salud, con tasas acumuladas más bajas de casos de sida relacionados con el
consumo de drogas.
Es necesario detenernos en el consumo de los más jóvenes, de los que
están en edad escolar, y reflejar los datos más sobresalientes obtenidos en
la "Encuesta sobre drogas a la población escolar: 1994" (38). De las drogas
ilegales las más consumida por este colectivo es el hachís, aunque su
consumo es menor en Castilla-La Mancha que en el resto de las regiones, se
da a una edad más prematura y es esporádico. Las demás drogas ilegales
son también consumidas por los jóvenes, pero en un porcentaje menor que
en el resto de España.
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