AMOS - MINTS español

El pasaje agrega más datos precisos de esta época cuando dice que fue
durante los reinados de Uzías rey de Judá, con este nombre hay algunas
diferencias de cómo es llamado por Amós y cómo es llamado en el libro de 2
Reyes 15:1-7, en el mismo es llamado Azarías, mientras que en libro de 2 Crónicas
26:3 es llamado Uzías al igual como lo llama Amós , y del reinado de Jeroboam,
hijo de Joás, rey de Israel, este era el rey que en la historia se conoce como
Jeroboam II, entonces estamos hablando aproximadamente de los años 760 antes
de Cristo. Amós es contemporáneo de Jonás y las profecías que este le dio a la
ciudad de Nínive. De igual manera era contemporáneo de Oseas.
1.3. CONDICIONES POLÍTICAS Y SOCIALES 3
Más de 40 años antes del ministerio de Amós, Asiria
había aplastado a Siria, la vecina de Samaria en su
frontera N. Esto permitió a Jeroboam II extender sus
fronteras (2 R. 14.25), y crear un comercio lucrativo
que dio lugar a una poderosa clase mercantil en Samaria.
Lamentablemente la riqueza de que gozó Samaria no estaba
bien distribuida entre el pueblo. Permaneció en poder de
los príncipes mercaderes, que destinaban sus nuevas
riquezas a mejorar su propio nivel de vida (3.10, 12,
15; 6.4), y descuidaron completamente la clase
campesina, que hasta entonces había constituido la
columna vertebral de la economía de Samaria. Los
síntomas inequívocos de una sociedad moralmente enferma
pronto comenzaron a evidenciarse. En la época de Amós la
opresión de los pobres por los ricos era común (2.6s),
como también una cruel indiferencia entre los pudientes
para con la aflicción de los hambrientos (6.3–6). La
justicia estaba del lado del mejor postor (2.6; 8.6). En
épocas de sequía (4.7–9) los pobres sólo podían recurrir
al prestamista (5.11s; 8.4–6), ante quien con frecuencia
tenían que hipotecar su tierra y hasta su propia
persona.
La cita que acabamos de ver y la próxima 4 nos narran una situación de
descomposición social bastante parecido a lo que están viviendo nuestros pueblos
en América Latina, de lo cual la Iglesia, como voz profética de esta época, no
puede ser indiferente. Una de las dificultades que tienen nuestras Iglesias en
Latinoamérica, radica en la concepción teológica. Esta concepción ha dividido las
necesidades del ser humano en dos, se atiende la necesidad de salvación, y eso
es correcto, pero se descuida por completo las demás necesidades de la gente.
3 E. Jenny y C. Westermann, Diccionario Teológico Manual del Antiguo Testamento,
2 Vol., Cristiandad, España, 1985.
4 J.A Motyer, Comentario Bíblico Siglo Veintiuno,(programa informatico)producido
por sword of the LORD with an Electronic edge, Meyers Rick, 2009, www.e-sword.net
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