María - Dirección de Nuevas Tecnologías y Educación Virtual ...

tales condiciones, la ubicaci6n del pasaje evidencia la habilidad con que Isaacs
estructura la obra, ya que esta localizaci6n del episodio hace evidente que busca
establecer una fina red de mutuas referencias entre los elementos de la novela,
justamente, en este caso, en el momento en que la trama central está a punto de entrar en
un momento crucial de su desarrollo. Todo lo anterior aclara la función que dentro de la
estructura de María desempeña este romance y nos muestra que —no sólo por
encontrarse el mismo desarrollo hacia la felicidad que en la historia de Tránsito y
Braulio, sino también por tratarse de sectores del mundo narrado de características
semejantes— es posible agrupar los dos romances en un solo bloque que contraste con
el tema de la frustración amorosa plasmado en la historia de María.
b) El capítulo XIX se ocupa en su totalidad de la historia de Emigdio. Creemos que,
aunque breve en su tratamiento, este desarrollo es de gran importancia ya que su manejo
está cargado de elementos ideológicos que descubren la perspectiva desde la cual se
narra la novela; pero nos interesa resaltar ahora, a nivel estructural, cómo esta historia
viene también a reforzar el patrón establecido por la de Tránsito y Braulio en el sentido
de que aquellos sectores económicos distintos del gran latifundio-esclavista producen
romances afortunados. Y el caso de Emigdio, en este sentido, es realmente importante
dada su condición económica intermedia.
A nivel anecdótico, Emigdio se enamora “locamente de una preciosa ñapanguita” (y
nótese la distancia social que introduce el término usado por el narrador). Este romance
sólo es posible después de que Emigdio ha tenido un fracaso tan dramático en su breve
coqueteo con Micaelina, y una vez que ha asimilado la lección. De esta manera,
Emigdio completaría una trayectoria que va en la dirección opuesta a las de Efraín,
Feliciana y Carlos, puesto que en el futuro del muchacho parece haber un matrimonio
feliz, a pesar de las diferencias sociales que puedan existir entre ambos amantes.
Aparte del capítulo XIX, sólo es posible encontrar sobre este personaje menciones
laterales, y su desaparición llega a tal punto que, como lo ha notado ya un crítico, antes
de su viaje a Londres, Efraín se olvida de hacerle la visita que le ha anunciado de
despedida. Esta constatación evidencia el carácter secundario del personaje, y basta una
mirada al lugar y momento en que su historia aparece intercalada para comprobar que
su función es primordialmente secundaria, y consiste en aclarar algunos aspectos de la
personalidad de Carlos, arrojar luces sobre las diferencias entre los dos señoritos y