18.05.2013 Views

Nen, la inútil - Alfaguara

Nen, la inútil - Alfaguara

Nen, la inútil - Alfaguara

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

39<br />

—Sólo te voy a acariciar. Las caricias qué tienen.<br />

Sólo si te hiciera algo peor sería peligroso.<br />

Un día en que sus besos <strong>la</strong> envolvieron más<br />

—una mano de él en uno de sus pechos, como si atrapara<br />

un puño de arena, y con <strong>la</strong> otra buscando con mayor<br />

minuciosidad dentro de su tepilli, a<strong>la</strong>rgando a lo más<br />

hondo un dedo reptante— el<strong>la</strong> tuvo <strong>la</strong> sensación de que<br />

todo estal<strong>la</strong>ba a su alrededor, como si de pronto se hubieran<br />

hecho añicos los cristales interiores a través de los<br />

cuales miraba el mundo. Su hermano le contó que, en<br />

efecto, los ojos se le pusieron b<strong>la</strong>ncos y empezó a convulsionar<br />

y a elevarse ligeramente del suelo. Seguro: a<br />

elevarse ligeramente del suelo.<br />

A él le entró tanto miedo que no volvió a acariciar<strong>la</strong><br />

y hasta le nació un cierto rechazo a tocar<strong>la</strong> y a<br />

tener<strong>la</strong> demasiado cerca. El<strong>la</strong> le rec<strong>la</strong>mó —<strong>la</strong> verdad es<br />

que guardaba una enorme curiosidad de volver a experimentar<br />

<strong>la</strong> sensación— y él se soltó llorando, <strong>la</strong> abrazó ya<br />

sólo con ternura, y le dijo <strong>la</strong> verdad:<br />

—Perdóname, hermana. Tenías razón de que<br />

nunca debimos haber hecho lo que hicimos. Si pusiste<br />

aquel<strong>la</strong> cara horrible fue porque deveras era algo malo.<br />

Perdóname.<br />

Lloraba en tal forma, y parecía tan desconso<strong>la</strong>do<br />

y sin fuerzas, que se le deshizo en los brazos, se le fue<br />

resba<strong>la</strong>ndo por el cuerpo, rozándo<strong>la</strong> apenas con <strong>la</strong>s puntas<br />

de los dedos, hasta quedar hincado, con sus manos<br />

tímidas abrazándo<strong>la</strong> por <strong>la</strong>s rodil<strong>la</strong>s. El<strong>la</strong> también se puso<br />

de rodil<strong>la</strong>s y lo obligó a levantar <strong>la</strong> cara, pero al irle a dar<br />

un beso en los <strong>la</strong>bios él se volvió con brusquedad.<br />

—No.<br />

—Bésame.<br />

—No puedo —contestó ya sin siquiera mirar<strong>la</strong>,<br />

metiendo los ojos dentro de su propio pecho.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!