14.01.2015 Views

286 - Diócesis de San Juan de los Lagos

286 - Diócesis de San Juan de los Lagos

286 - Diócesis de San Juan de los Lagos

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

PRE-MATRIMONIALES<br />

cer al otro como es en sí mismo, sin valorarse menos<br />

o más <strong>de</strong> lo que cada uno realmente es.<br />

Segundo paso: Después <strong>de</strong> conocerse hay que<br />

aceptarse con sinceridad, valorando lo positivo para<br />

cultivarlo y lo negativo para corregirlo, reconociéndonos<br />

ambos con dignidad <strong>de</strong> persona, respetándola,<br />

y promoviéndonos en todos nuestros <strong>de</strong>rechos.<br />

3. HOMBRE Y MUJER, DOS MODOS DE SER PERSONA:<br />

Dios nos creó hombre y mujer, con una misma<br />

naturaleza humana, pero configurada <strong>de</strong> forma diferente<br />

para complementarnos y enriquecernos a través<br />

<strong>de</strong> la sexualidad.<br />

Aunque es la educación y el medio ambiente quien<br />

más <strong>de</strong>termina las diferentes funciones que se le<br />

atribuyen como propias al hombre o a la mujer, hay<br />

unas funciones generales que aparecen a lo largo <strong>de</strong><br />

la historia más atribuidas ya sea al hombre o a la<br />

mujer. Éstas no son sólo fisiológicas sino sobre todo<br />

sensitivas, cognoscitivas-intelectuales y volitivas<br />

(morales).<br />

4.- CREADOS HOMBRE Y MUJER PARA UNA COMU-<br />

NIDAD DE VIDA Y DE AMOR:<br />

La razón principal <strong>de</strong> crear<strong>los</strong> hombre y mujer fue<br />

para que formen una comunidad <strong>de</strong> vida y <strong>de</strong> amor a<br />

través <strong>de</strong>l matrimonio y la familia. Ahí, cada uno,<br />

aporta lo propio y diferente para hacer con el otro una<br />

verda<strong>de</strong>ra comunidad.<br />

Hoy en día, la comunidad matrimonial y familiar<br />

es diferente al estilo <strong>de</strong> nuestros padres, porque, con<br />

frecuencia, la mujer trabaja fuera <strong>de</strong>l hogar, tiene más<br />

tiempo libre, entien<strong>de</strong> la autoridad y la obediencia <strong>de</strong><br />

otra manera, el fin <strong>de</strong>l matrimonio se centra más en el<br />

amor conyugal que en <strong>los</strong> hijos, hay más igualdad<br />

entre el hombre y la mujer, etc.<br />

5.- EL PROCESO PERMANENTE DE CONOCERSE Y<br />

AMARSE:<br />

El conocerse cada uno a sí mismo y conocer al otro<br />

es una tarea que inicia <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el noviazgo y nunca<br />

termina. Y es que conocerse es el paso necesario para<br />

amarse, porque a nadie se le ama si antes no se le<br />

conoce. Y el amor crece al mismo ritmo que crece el<br />

conocimiento <strong>de</strong> la persona amada.<br />

Para conocerse hay que estar siempre en actitud <strong>de</strong><br />

encuentro, manifestándose y aceptándose tal y como<br />

son cada uno y no como quisieran que fuera la otra<br />

persona. El diálogo, en el encuentro, será el mejor<br />

instrumento para que nos lleve a conocer más profundamente<br />

a quien amamos.<br />

ILUMINACIÓN<br />

1.- LA DIGNIDAD DE LA PERSONA<br />

Somos imagen <strong>de</strong> Dios<br />

Sólo el hombre y la mujer han sido creados a<br />

imagen y semejanza <strong>de</strong> Dios; por eso, el<strong>los</strong> son la<br />

obra más perfecta <strong>de</strong> este mundo. El<strong>los</strong> son <strong>los</strong> reyes<br />

<strong>de</strong> la creación.<br />

Somos “Alguien”<br />

Sólo el hombre y la mujer son capaces <strong>de</strong> conocer<br />

y <strong>de</strong> amar porque sólo el<strong>los</strong> están dotados <strong>de</strong> inteligencia<br />

y <strong>de</strong> voluntad. A diferencia <strong>de</strong> <strong>los</strong> animales y<br />

<strong>de</strong> las plantas, sólo el<strong>los</strong> piensan y quieren. Por eso,<br />

sólo el<strong>los</strong> son personas y es altísima su dignidad.<br />

El hombre y la mujer no son, pues, algo sino<br />

“alguien”. Dios a cada uno <strong>de</strong> <strong>los</strong> seres humanos nos<br />

ha conocido y amado personalmente. Jesucristo nos<br />

ha redimido y nos ha <strong>de</strong>stinado para formar con Dios<br />

una comunidad <strong>de</strong> vida y <strong>de</strong> amor por toda la eternidad.<br />

El bautismo lleva a su plenitud nuestra dignidad<br />

<strong>de</strong> personas al hacernos verda<strong>de</strong>ramente “hijos <strong>de</strong><br />

Dios” en su Hijo Jesucristo.<br />

Cuando somos conscientes <strong>de</strong> quiénes somos y <strong>de</strong><br />

lo mucho que valemos, no po<strong>de</strong>mos menos que tratar<br />

a cada ser humano como digno <strong>de</strong> respeto; y con<br />

todos <strong>los</strong> <strong>de</strong>rechos como persona.<br />

Tenemos <strong>de</strong>rechos<br />

Todos <strong>los</strong> seres humanos tenemos el <strong>de</strong>recho a la<br />

vida, don sublime <strong>de</strong> Dios que nos ha sido dado para<br />

<strong>de</strong>fen<strong>de</strong>rla, no como dueños sino como administradores<br />

<strong>de</strong> ella; tenemos el <strong>de</strong>recho a crecer y educarnos,<br />

a construir nuestra propia familia, a disponer <strong>de</strong><br />

<strong>los</strong> medios necesarios para una honesta y digna<br />

subsistencia.<br />

Todos somos originales<br />

Todos <strong>los</strong> seres humanos somos originales e<br />

irrepetibles y no po<strong>de</strong>mos exigir que el “otro” se<br />

mol<strong>de</strong>e como una copia <strong>de</strong> uno mismo.<br />

Todos <strong>los</strong> seres humanos estamos llamados a ser<br />

protagonistas <strong>de</strong> nuestra propia historia y “arquitectos<br />

<strong>de</strong> nuestro propio <strong>de</strong>stino”. Los <strong>de</strong>más nos pue<strong>de</strong>n<br />

ayudar o estorbar.<br />

Cada uno somos protagonistas<br />

Por eso, cada uno <strong>de</strong> nosotros, somos el centro y<br />

el fin <strong>de</strong> toda vida económica y social. Es <strong>de</strong>cir, la<br />

economía y la sociedad han <strong>de</strong> estar siempre al<br />

pág.<br />

4<br />

Bol-<strong>286</strong>

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!