HISTORIAS COMUNITARIAS - conafe.edu.mx

PRESENTACION
Escribir historias de las comunidades donde el Conafe tiene instalados servicios educativos
es una acción de relevancia que permite adentrarnos al origen de estos centros de población,
a la vida de sus habitantes, a las historias y leyendas que nos cuentan hasta donde su
memoria les permite recordar. Los Instructores como narradores de estas historias, han
rescatado la vida cotidiana de estas localidades, destacando los olores y los sabores, las
fiestas y tradiciones; la escuela del Conafe en su comunidad es un orgullo y así lo cuentan y
lo sienten. En alguna de las historias se relata que la instalación de una escuela y el
esfuerzo de los habitantes para lograr este propósito, les hizo ser ahora una comunidad
independiente.
Hay por parte de los escritores un gran entusiasmo al querer enamorar al lector de sus
comunidades, todos describen a detalle sus paisajes, la cordialidad con que fueron recibidos;
han sido muy generosos al convidarnos a conocerles de cerca y apreciar la sencillez de las
personas de las comunidades rurales para explicar su propia historia. Se siente que los
Instructores son acogidos y disfrutan realizando su trabajo.
Desde el altiplano potosino, la zona media y la husteca potosina se tejen estas cinco
historias comunitarias que presentamos en esta publicación, escritas por jóvenes potosinos
que hicieron un esfuerzo por participar en talleres impartidos por el Licenciado Alejandro
Cea Olivares, asesor del Conafe en las oficinas centrales para este proyecto. Las historias
comunitarias que participaron en esta convocatoria fueron trece, de las cuales se eligieron
cinco que reunieron a criterio del Jurado Calificador los requisitos de contenido, claridad y
estilo, originalidad, creatividad y sensibilidad estética así como la redacción de los trabajos.
Se declaró un empate en tercer lugar, por esta razón como finalistas quedaron cinco trabajos
y no cuatro como se había previsto por parte de la Delegación.
Felicitamos a todos los jóvenes que emprendieron la aventura de escribir, parte de su vida
que formará ciertamente parte de la historia comunitaria, María Lucila Ponce Hernández,
que escribió sobre la localidad “Labor de San Diego”, perteneciente al municipio de Cerritos,
Ma. de la Luz Nolazco Aguilar, que escribió sobre la localidad “Vaqueros”, municipio de
Rayón; Claudia Guadalupe Alfaro Ramírez y Alejandro Morales Soriano que escribieron
sobre la localidad “San Juan sin Agua”, municipio de Salinas; Mercedes Espinoza Barrientos
que escribió sobre la localidad “Nuevo Tambolón”, municipio de Ciudad Valles; José Juan
Pérez Vázquez, que escribió sobre la localidad “El Amparo”, municipio de Moctezuma; José
Fernando Díaz Salazar, que escribió sobre la localidad “El Palmarito”, del municipio de Santa
María del Río; Maria Concepción Gallegos Hernández, que escribió sobre la localidad
“Carrizal Grande”, municipio de Ciudad del Maíz; Claudia Aguilar Rocha, que escribió sobre
la localidad “El Tepeyac”, municipio de Ciudad del Maíz; Karla Zulema Quevedo Partida que
escribió sobre la localidad “San Pablo”, municipio de Cedral; José Carlos Morales Otero, que
escribió sobre la localidad “Miguel Hidalgo” y “Laguna Seca”, del municipio de Charcas;
Marisol Bueno Hernández, que escribió sobre la localidad “Emiliano Zapata”, del municipio
de Tamazunchale; Celedonia Santiago Espinosa, que escribió sobre la localidad “El Chamal”,
municipio de Aquismón; Araceli Agustín Díaz, que escribió sobre la localidad “La Puerta de la
Esperanza”, municipio de Xilitla y Abel Turrubiartes Reyes, que escribió sobre la localidad
“Refugio del Amparito”, municipio de Guadalcázar, los que sin duda dejaron su huella en
cada lugar donde han brindado un servicio educativo a los niños y jóvenes de las localidades
haciendo realidad la educación comunitaria: