226 COSTUMBRES EN COMÚN LA ECONOMfA «MORAL» DE LA MULTITUD 227Dos cartas dan alguna i<strong>de</strong>a <strong>de</strong>i <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong> nuevas prácticas enel oeste. Un corresponsal que escribía a lord Shelbourne en 1776acusaba a los comercíantes y molineros <strong>de</strong> Chippenham <strong>de</strong> «complot»:Él mismo rnandó comprar una arroba <strong>de</strong> trigo ai mercado, yaunque había allí muchas cargas, y era inmediatamente <strong>de</strong>spués <strong>de</strong>haber sanado <strong>la</strong> campana <strong>de</strong>l mercado, don<strong>de</strong>quiera que su agentesolicitase, <strong>la</strong> respuesta era «Está vendido», De forma que, aunque... para evitar el castigo <strong>de</strong> <strong>la</strong> ley, lo traen ai mercado, el negociose hace antes, y el mercado es s610 una farsa ... 33(Estas prácticas podían dar ocasión a un motín; en junio <strong>de</strong> 1757,se informó <strong>de</strong> que «<strong>la</strong> pob<strong>la</strong>ción se sublevó en Oxford y en pocosminutos se apropió y dividió una carga <strong>de</strong> trigo que se sospechabahabía sido vendida por muestra y traída ai mercado so<strong>la</strong>mente parasalvar <strong>la</strong>s apariencias».)" <strong>La</strong> segunda carta es <strong>de</strong> 1772, <strong>de</strong> un corresponsalen Dorchester, y <strong>de</strong>scribe una práctica diferente <strong>de</strong> tasa <strong>de</strong>mercado; sostiene que los gran<strong>de</strong>s agricultores se reunían para fijarlos precios antes <strong>de</strong> ir ai mercado,y muchos <strong>de</strong> estos hombres no ven<strong>de</strong>rán menos <strong>de</strong> cuarenta bushe/s,que los pobres no pue<strong>de</strong>n comprar. Por esto el molinero, que no esenemigo <strong>de</strong>i agricultor, da el precio que éste le pi<strong>de</strong> y el pobre tieneque aceptarlo. 3SLos paternalistas y los pobres continuaron <strong>la</strong>mentándose <strong>de</strong>i <strong>de</strong>sarrollo<strong>de</strong> estas prácticas <strong>de</strong> mercado que nosotros, en visión retrospectiva,ten<strong>de</strong>mos a aceptar como inevitables y «naturales»." Perolo que pue<strong>de</strong> parecer ahora como inevitable no era necesariamente,en el siglo XVIII, materia aprobable. Un panfleto característico (<strong>de</strong>33. Ibid., pp. 91-92.34. Gentleman 's Magazine, XXVII (1757). p. 286.35. Carta an6nima en PRO. SP 37/9.36. Pue<strong>de</strong>n encontrarse ejemplos, <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> una abundante literatura, en Gentleman'sMagazine,XXVI (1756), p. 534; anónimo [Ralph Courteville), The Cries ofthe Public, Londres, 1758, p. 25; Anon. [C. L.]. A Letter to a Member of Parl<strong>la</strong>mentproposing Amendments to the <strong>La</strong>ws agaínst Forestallers, Ingrossers, and Regraters,Londres, 1757, pp. 5-8; Museum Rusticum et Commerciale, IV (1765), p. 199;Forster, op. cit.• p. 97.1768) ciamaba indignado contra <strong>la</strong> supuesta libertad <strong>de</strong> cada agricultorpara hacer lo que quisiera con sus cosas; esto sería libertad«natural», pero no «civil»:No pue<strong>de</strong> <strong>de</strong>cirse, entonces, que sea <strong>la</strong> libertad <strong>de</strong> un ciudadanoo <strong>de</strong> uno que vive bajo <strong>la</strong> protección <strong>de</strong> alguna comunidad; es másbien <strong>la</strong> libertad <strong>de</strong> un salvaje; por consiguiente, eI que se aproveche<strong>de</strong> el<strong>la</strong>, no merece <strong>la</strong> protección que el po<strong>de</strong>r <strong>de</strong> <strong>la</strong> Sociedad proporciona.<strong>La</strong> asistencia <strong>de</strong>i agricultor ai mercado es «una parte material <strong>de</strong> suobligación; no se le <strong>de</strong>bería permitir guardar sus mercancías o ven<strong>de</strong>riasen otro lugar»." Pero <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> 1760, los mercados tuvierontan poca función en <strong>la</strong> mayor parte <strong>de</strong> <strong>la</strong>s tierras <strong>de</strong>i sur y en<strong>la</strong>s Mid<strong>la</strong>nds que, en dichos distritos, <strong>la</strong>s quejas contra <strong>la</strong> venta pormuestreo son menos frecuentes, a pesar <strong>de</strong> que, a finales <strong>de</strong> siglo,se protestaba todavía <strong>de</strong> que los pobres no pudiesen comprar pequel<strong>la</strong>scantida<strong>de</strong>s." En algunos lugares <strong>de</strong>i norte el asunto era distinto.Una petición <strong>de</strong> los trabajadores <strong>de</strong> Leeds en 1795 se queja <strong>de</strong> «losagentes <strong>de</strong> cereales y molineros y un grupo <strong>de</strong> gente que nosotrosl<strong>la</strong>mamos regatones y los harineros que tienen el grano en sus manos<strong>de</strong> manera que pue<strong>de</strong>n retenerlo y ven<strong>de</strong>rlo ai precio que quieran,o no ven<strong>de</strong>rlo», «Los agricultores no llevan más grano ai mercadoque el que llevan en sus bolsillos como muestra '" lo cualhace quejarse mucho a los pobres.»" Tanto fue el tiempo que tardóen abrirse camíno y resolverse un proceso, que, muy a menudo, sedocumenta ya cien aãos antes.Se ha seguido este ejemplo para ilustrar <strong>la</strong> <strong>de</strong>nsidad y partícu<strong>la</strong>ridad<strong>de</strong>i <strong>de</strong>talle, <strong>la</strong> variedad <strong>de</strong> <strong>la</strong>s costumbres locales y el rumboque el resentimiento popu<strong>la</strong>r podía tomar cuando cambiaban <strong>la</strong>s37. Anônimo, An Enquiry ínto the Príce of Wheat, MaU.... Londres. 1768,pp. 119-123.38. véase. por ejemplo, Davies (infra, p. 245). Se informó <strong>de</strong>s<strong>de</strong> Cornuallesen 1795 que «mucbos agricultores rehúsan ven<strong>de</strong>r [cebada] en pequenas cantida<strong>de</strong>s alos pobres. lo cual causa gran<strong>de</strong>s murmuraciones»: PRO. HO 42134. y <strong>de</strong>s<strong>de</strong> Bssexen 1800 que «en algunos lugares no se efectúan ventas excepto en los sitios ordinarios,don<strong>de</strong> compradores y ven<strong>de</strong>dores (principalmente molineros y agentes) cenanjuntos '" el beneficio <strong>de</strong>l Mercado se ha perdido casi para el vecíndario»; tales prácticasson mencionadas «con gran indignación por <strong>la</strong>s c<strong>la</strong>ses más bajas»: PRO, HO42154.39. PRO, HO 42135.
228 COSTUMBRES EN COMÚN LA ECONOMIA «MORAL» DE LA MULTlTUD 229viejas prácticas <strong>de</strong> mercado. <strong>La</strong> misma <strong>de</strong>nsidad, <strong>la</strong> misma diversidad,existe en el área <strong>de</strong> comercialización, escasamente <strong>de</strong>finida. EImo<strong>de</strong>lo paternalista se <strong>de</strong>srnoronaba, por supuesto, en muchos otrospuntos. EI Assize of Bread, si bien fue efectivo para contro<strong>la</strong>r <strong>la</strong>sganancias <strong>de</strong> los pana<strong>de</strong>ros, se limitaba a reflejar el precio en curso<strong>de</strong>i trigo o <strong>la</strong> harina y no podía <strong>de</strong> ninguna manera influir sobre losprecios en si. Los molineros eran ahora, en Hertfordshire y el valle<strong>de</strong>i Támesis, empresários acauda<strong>la</strong>dos, y a veces comerciantes <strong>de</strong> granoo malta, así como gran<strong>de</strong>s fabricantes <strong>de</strong> harina." Fuera <strong>de</strong> losdistritos cerealistas principales, los mercados urbanos no podían enmodo alguno ser abastecidos sin <strong>la</strong>s operaciones <strong>de</strong> agentes cuyasactívida<strong>de</strong>s hubíeran quedado anu<strong>la</strong>das <strong>de</strong> haberse ímpuesto estríctamente<strong>la</strong> legis<strong>la</strong>ción contra los acaparadores.i,Hasta qué punto reconocieron <strong>la</strong>s autorida<strong>de</strong>s que su mo<strong>de</strong>lose alejaba <strong>de</strong> <strong>la</strong> realidad? <strong>La</strong> respuesta varía según <strong>la</strong>s autorida<strong>de</strong>simplicadas y con el correr <strong>de</strong>i siglo. Pero se pue<strong>de</strong> dar una respuestageneral: los paternalistas, en su práctica normal, aceptaban engran parte el cambio, pero volvían a este mo<strong>de</strong>lo en cuanto surgíaalguna situación <strong>de</strong> emergencia. En esta eran, en cierta medida, prisioneros<strong>de</strong>i pueblo, que adoptaba partes <strong>de</strong>i mo<strong>de</strong>lo como su <strong>de</strong>rechoy patrimonio. Existe incluso <strong>la</strong> impresión <strong>de</strong> que, en realidad,se acogía bien esta ambigüedad. En distritos levantiscos, en época<strong>de</strong> escasez, daba a los magistrados cierta capacidad <strong>de</strong> maniobra, yprestaba cierta aprobación a sus intentos <strong>de</strong> reducir los precios empleando<strong>la</strong> persuasión. Cuando el Consejo Privado autorizó (comosucedió en 1709, 1740, 1756 y 1766) <strong>la</strong> emisión <strong>de</strong> proc<strong>la</strong>mas enletra gótica ilegible amenazando con terribles castigos a acaparadores,buhoneros, trajineros, reven<strong>de</strong>dores, mercachifles, etc., ayudóa los magistrados a inculcar el temor <strong>de</strong> Dios entre los molineros ycomerciantes locales. Es cierto que <strong>la</strong> Iegis<strong>la</strong>ción contra el acaparamientofue revocada en 1772, pero el Acta <strong>de</strong> revocación no fuebien redactada, y durante <strong>la</strong> gran escasez que siguió, en 1795, lordKenyon, el justicia mayor, tomó <strong>la</strong> responsabilidad <strong>de</strong> anunciar queel acaparamiento continuaba siendo un <strong>de</strong>lito procesable según <strong>la</strong>common <strong>la</strong>w; «a pesar <strong>de</strong> que el <strong>de</strong>creto <strong>de</strong> Eduardo VI fue revocado(si lo fue acertada o <strong>de</strong>sacertadamente no soy yo quien <strong>de</strong>ba40. F, J. Fisher, «The <strong>de</strong>veloprnent of the London food market, 1540-1640»,Econ. Hist, Revíew, V (1934-1935).<strong>de</strong>cidiria) aún sigue siendo un <strong>de</strong>lito <strong>de</strong> common <strong>la</strong>w, coetáneo a <strong>la</strong>constitución»." EI reguero <strong>de</strong> procesos que pue<strong>de</strong> observarse a lo<strong>la</strong>rgo <strong>de</strong>l siglo -normalmente por <strong>de</strong>litos insignificantes y sólo enafias <strong>de</strong> escasez- no se agotó; por el contrario, en 1795 y 1800-1801hubo quizá más procesos que en cualquier otro periodo <strong>de</strong> los veinticincoafias anteriores." Pera está bien c<strong>la</strong>ro que estaban <strong>de</strong>stinadosa producir un efecto simbólico, con objeto <strong>de</strong> hacer ver a lospobres que <strong>la</strong>s autorida<strong>de</strong>s actuaban en vigi<strong>la</strong>ncia <strong>de</strong> sus intereses.De aquí que el mo<strong>de</strong>lo paternalista tuviera una existencia i<strong>de</strong>al,pero también una existencia real fragmentaria. En afias <strong>de</strong> buenascosechas y precios mo<strong>de</strong>rados, <strong>la</strong>s autorida<strong>de</strong>s lo <strong>de</strong>jaban caer en elolvído. Pera si los precíos subían y los pobres se mostraban levantiscosse lo reavivaba, ai menos para crear un efecto simbólico.IIIPocas victorias intelectuales han sido más arrol<strong>la</strong>doras que <strong>la</strong>que los exponentes <strong>de</strong> <strong>la</strong> nueva <strong>economía</strong> política obtuvieron en materia<strong>de</strong> regu<strong>la</strong>ción <strong>de</strong>l comercio interno <strong>de</strong> cereales. A ciertos historiadoresesta victoria les parece, en efecto, tan absoluta, que dificilmentepue<strong>de</strong>n ocultar su malestar con respecto ai partido <strong>de</strong>rrotado."Se pue<strong>de</strong> consi<strong>de</strong>rar, por comodidad, que el mo<strong>de</strong>lo <strong>de</strong> <strong>la</strong> nueva<strong>economía</strong> política es el <strong>de</strong> Adam Smith, a pesar <strong>de</strong> que se pueda ver41. Cargo <strong>de</strong> lord Kenyon ai Grand Jury <strong>de</strong>I tribunal <strong>de</strong> Shropshire, Annals ofAgricuíture, XXV (1795), pp. 110-111. Pero no estaba proc<strong>la</strong>mando una nueva visión<strong>de</strong> <strong>la</strong> ley: <strong>la</strong> edición <strong>de</strong> Justice, <strong>de</strong> Burns, correspondiente a 1780, Il, pp. 213-214,ya había hecho hincapié en que (a pesar <strong>de</strong> <strong>la</strong>s leyes <strong>de</strong> 1663 y 1772), «en <strong>la</strong> commontow, todos los esfuerzos por subir el precio común <strong>de</strong> cualquier mercancia ... ya seapropagando falsos rumores o comprando cosas en eI mercado antes <strong>de</strong> <strong>la</strong> hora acostumbrada,o comprando y vendiendo otra vez <strong>la</strong> misma cosa en el mismo mercado»seguian siendo <strong>de</strong>litos.42. Girdler (op. cit., pp. 212-260) da una lista <strong>de</strong> varias sentencias en 1795y 1800. En varies condados se establecieroo asociaciooes privadas para juzgar a losacaparadores: Rev. J. Malham, The scarcity of grain consi<strong>de</strong>red, Salisbury, 1800,pp. 35-44. E~ acaparamiento, etc., siguieroo sieodo <strong>de</strong>litos <strong>de</strong> common <strong>la</strong>w hasta1844: W. Holdsworth, History ofEnglish <strong>la</strong>w, Londres, ed. 1938, XI, p. 472. vêasetambién más a<strong>de</strong><strong>la</strong>ote <strong>la</strong> oota 64.43. véanse, por ejemplc, Oras, op. cít., p. 241 (« ... como ha <strong>de</strong>mostrado AdamSmith ... »j: M. Olson, Bconomícs ofthe wartime shortage (Carolina <strong>de</strong>i Norte, 1963),p. S3 (