el salmo 88 y el enigma del sufrimiento humano - Revista Biblica
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d) Acciones y atributos de Dios con las raíces dsj (86,2.5.13.15 // <strong>88</strong>,12); [vy<br />
(86,2.16 // <strong>88</strong>,2); alp (86,10 // <strong>88</strong>,11.13); @ma (86,11.15 // <strong>88</strong>,12); hc[<br />
(86,8.9.10 con t/al;p]nI.17 // <strong>88</strong>,11 con al,P,).<br />
e) Nombres de Dios: hwhy (86,1.6.11 // <strong>88</strong>,2.10.14.15); !yhil¿a> (86,2.8.10.12.14<br />
// <strong>88</strong>,2).<br />
f) Verbos: de invocación, arq (86,3.5.7 // <strong>88</strong>,10); de alabanza, hdy (Hi. 86,12<br />
// <strong>88</strong>,11); pedido de escucha con la expresión *nÒzÒa; hwhy hFeh'<br />
(86,1.≈6 hn:yzIa}h' // <strong>88</strong>,3).<br />
En ambos casos <strong>el</strong> orante se define a sí mismo como (ánî (b), con toda la carga que<br />
tiene esta expresión. Utiliza asimismo la expresión nap$î para referirse a su vida (c); en<br />
Sl <strong>88</strong> es <strong>el</strong> “tema” fundamental, y en <strong>el</strong> 86 es también importante, aunque ocupa un segundo<br />
lugar. Este “pobre” en ambos casos es un orante asiduo, reza “todo <strong>el</strong> día” / “todos<br />
los días”. Los dos orantes están involucrados en una experiencia de <strong>sufrimiento</strong> que<br />
para <strong>el</strong>los es como bajar a las profundidades d<strong>el</strong> Šeol, y desde esa experiencia <strong>el</strong>evan a<br />
Dios su tºpilláh (a), su lamento.<br />
Otro <strong>el</strong>emento en <strong>el</strong> que se encuentran ambos <strong>salmo</strong>s es <strong>el</strong> referente principal de su<br />
oración: Dios mismo. La situación de <strong>sufrimiento</strong> pone en juego los atributos fundamentales<br />
d<strong>el</strong> Dios de Isra<strong>el</strong>: su amor de alianza, su fid<strong>el</strong>idad, su capacidad de obrar maravillas<br />
(d); en definitiva, pone en cuestión la identidad de este Dios en <strong>el</strong> que se cree,<br />
expresada con los “nombres” que se le aplican (e). A este Dios, tal como lo ha experimentado<br />
Isra<strong>el</strong>, se dirigen la invocaciones d<strong>el</strong> orante pidiendo ser escuchado (f).<br />
Este esquema básico así d<strong>el</strong>ineado no tiene mucho de particular. Responde al dinamismo<br />
fundamental de la oración de lamentación. Lo importante aquí es que se parte<br />
de una base común que permite la comparación. No se pueden comparar dos realidades<br />
absolutamente diversas. Este “substrato común” permite que la comparación ponga de<br />
manifiesto los <strong>el</strong>ementos divergentes, que entonces resultan especialmente significativos.<br />
5.1.2. Expresiones divergentes<br />
El <strong>el</strong>enco de las expresiones propias d<strong>el</strong> Sl 86 que no se encuentran en <strong>el</strong> Sl <strong>88</strong> se<br />
puede presentar sintéticamente como sigue: