SHGB en reposo después de 4 meses de entrenamientode lucha libre. Varias hipótesis podríanexplicar estos resultados conflictivos. Primero,podría ser que debido al proceso de maduraciónde la pubertad este no haya sido completadoen nuestros sujetos. En el presente estudio, laconcentración plasmática de SHGB en reposoantes del entrenamiento en todos los grupos fuemayor que aquellos observados normalmenteen niños adolescentes de la misma etapa Tanner(Elmlinger et al., 2002). Debido a la disminuciónen los niveles de SHGB ocurrida durante lapubertad, parece probable que el proceso demaduración de la pubertad ha limitado el posibleincremento en la concentración plasmática deSHBG causada por el entrenamiento. Segundo,una disminución en reposo de la concentraciónplasmática de testosterona y la masa corporaldespués del entrenamiento ha sido observadapor Roemmich y Sinning (1997). Ha sido demostradoque la disminución de estos dos parámetroscontribuyen a elevar la concentraciónplasmática de SHGB (Von Schoultz y Carlstrom,1998). Estos resultados no han sido reportadosen el presente estudio lo cual puede explicar,en parte, la falta de cambios en la concentraciónplasmática de SHBG.No se encontraron diferencias en la concentraciónplasmática de SHBG entre el grupo entrenadoy no entrenado. Además, la respuesta deSHBG al entrenamiento parece no haber sidoalterada por el entrenamiento anaeróbico. Basadoen nuestro conocimiento, ningún estudio hainvestigado las respuestas de SHBG al ejercicioen niños adolescentes. Sin embargo, nuestrosresultados están de acuerdo con los encontradospor Kraermer et al. (1998) y Slowinska-Losowska y Majda (2002), quienes han reportadoque en hombres adultos no hay cambios enla concentración plasmática de SHBG comorespuesta a ejercicios de resistencia y carrerade 400 metros. En contraste, algunos estudiosreportaron concentraciones de SHGB significativamentemayores en respuesta al ejercicio enhombres adultos (Gray et al., 1993; Bonifazy yLupo 1996) pero sus protocolos difieren de losusados por nosotros. En estos estudios, la concentraciónplasmática de SHBG no fue corregidapor ΔPV (Gray et al., 1993) o las muestras desangre fueron recogidas por la tarde (Bonifazy yLupo 1996) mientras que las de nuestro estudiofueron recogidas por la mañana.La concentración plasmática en reposo de TESen P1 fue significativamente alta en el grupoentrenado que en el grupo control, que sugirióuna pequeña diferencia inicial con relacióna la maduración sexual entre los dos grupos.Es más, Elminger et al., (2002) han reportadoque la concentración plasmática en reposo deTES en la etapa 4 de Tanner está entre 15 y16 nmol.l-1. Los valores del grupo entrenadose encuentran dentro de este rango, pero losvalores del grupo control son menores. Esteresultado sugiere que la etapa de madurez delos dos grupos fue ligeramente diferente. Sinembargo, no hubo más diferencias significativasentre los grupos con relación a la concentraciónplasmática en reposo en P2, lo que sugiere quela diferencia inicial reportada en P1 (al inicio delexperimento) debería ser considerada insignificante.Además, en P2 no se encontraron cambiossignificativos en la concentración plasmática enreposo de TES. Este último resultado sugiereque el entrenamiento anaeróbico no influye enla concentración plasmática en reposo de TES.Muchas hipótesis podrían explicar la ausenciade cambios en la concentración plasmática enreposo de TES en el grupo entrenado después deP2. Primera, que el reducido número de sujetosno permitiría observar diferencias. Segundo, eltipo de entrenamiento podría ser determinante,el cual es sólo basado en ligeros ejercicios dedesarrollo muscular y repeticiones anaeróbicasde corta distancias (4-10 segundos). Por tanto,se puede asumir que la intensidad del ejercicio yel volumen podría no ser suficiente para lograrun incremento en la concentración plasmáticaen reposo de testosterona. De hecho, Tsolakiset al., (2000) han reportado un incremento delos niveles basales de testosterona en jóvenesadolescentes en respuesta a programas cortosde entrenamiento físico (2 y 3 meses) que incluyeronintensas sesiones de entrenamientode resistencia.12
Antes del periodo de entrenamiento (P1), nose encontraron diferencias entre los dos gruposrespecto a la concentración plasmática de testosteronacomo respuesta a una prueba anaeróbicade 6 segundos. Después de seis meses deentrenamiento (P2), se encontró una diferenciasignificativa en la concentración plasmática detestosterona en respuesta a un ejercicio anaeróbicode 6 segundos, a los 5 y 20 minutos derecuperación solamente reportada en el grupoentrenado. Agudas inducciones por el ejercicioen el incremento de la concentración plasmáticade testosterona ha sido sugerido según la intensidady duración del ejercicio (Kindermann et al.,1982; Tremblay et al., 2005).En nuestro estudio, el pico de potencia absolutaal finalizar el experimento se incrementó sóloen el grupo entrenado. Se encontró una correlaciónsignificativa entre el pico de potenciay la concentración plasmática de testosteronaal finalizar el ejercicio anaeróbico y a los 5minutos de recuperación. Esto sugiere queuna determinada intensidad del ejercicio esrequerida para producir un incremento de laconcentración plasmática de testosterona enrespuesta a un ejercicio anaeróbico en niñosadolescentes. Estos incrementos en la concentraciónplasmática de testosterona después delejercicio pueden estar atribuidos a la hemoconcentración(Kindermann et al., 1982), a unareducción metabólica de la tasa de aclaramientode la testosterona, resultando desde el descensodel flujo hepático sanguíneo (Cadoux-Hudson etal., 1985) y/o un incremento de la secreción delas gónadas (Cumming et al., 1986).En el presente estudio, la hemo-concentraciónno puede estar involucrada debido a que todaslas concentraciones fueron corregidas por ΔPV.Además, la duración de la prueba anaeróbica de6 segundos parece ser demasiado corta paramodificar de manera significativa el flujo hepáticosanguíneo y consecuentemente, la tasa deaclaramiento de la testosterona. Sin embargo,no podemos excluir la influencia del calentamientoen este factor, incluso si la disminuciónde la tasa de aclaración de la testosterona ha sidodemostrada sólo después de una hora de ejerciciomoderado (Cadouz-Hudson et al., 1985).Finalmente, el incremento de la concentraciónplasmática de testosterona puede ser el resultadocausado por una mejora de la secrecióngonadal. Tanto la hormona luteinizante comola hormona folículo estimular podrían jugar unpapel importante en la elevación de la secrecióngonadal. De hecho, Slowinska-Lisowska yMajda (2002) han mostrado un incremento dela concentración plasmática de testosterona enhombres adultos después de un ejercicio anaeróbicoque estuvo acompañado por una elevaciónde los niveles de gonadotropinas. De otromodo, ha sido demostrado en hombres adultosque 15 minutos de ejercicio al 50 % V O 2max,consumo que corresponde en nuestro estudiocon el calentamiento, contribuye a incrementarde manera significativa la concentración plasmáticade testosterona sin ningún efecto sobre losniveles de gonadotropinas (Vogel et al., 1985).Por tanto, la influencia de las gonadotropinas enel incremento de la concentración plasmáticade testosterona es probablemente menos importantedurante el calentamiento que durantela prueba anaeróbica. Sin embargo, a pesarque las gonadotropinas (luteinizante y folículoestimulante) no fueron medidas, es difícil asegurarsi influyen en la respuesta de testosteronaplasmática en nuestro estudio.En resumen, los resultados presentados en elpresente estudio demuestran que el entrenamientoanaeróbico incrementa la testosteronaplasmática en respuesta al ejercicio anaeróbicoen niños adolescentes, en parte por el incrementode la intensidad del ejercicio. Además,mediante el incremento repetido de testosteronaplasmática, el entrenamiento anaeróbicopodría constituir un elemento de soporte enla remodelación del músculo esquelético y suadaptación a largo plazo. Sin embargo, futurostrabajos relacionados con respuestas anabólicasy catabólicas al ejercicio físico son necesariospara entender el efecto del entrenamientoanaeróbico en el sistema endocrino de niñosadolescentes.13
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