Biblioteca - Gredos
Biblioteca - Gredos
Biblioteca - Gredos
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
Siglo XX<br />
Siglo XXpretende rescatar textos que nos parecen valiosos y que pertenecen<br />
a un pusudo no tan lejano.<br />
Porque muchas cosas ya han sido dichas y volver la mirada ellas es una<br />
munera de reconocer su actualidad y homenajear u sus creadores,<br />
intelectuales inconformistus con su tiempo. que supieron mirar más allá de<br />
las caducas ideas del momento.<br />
El arte de contar cuentos a los niños<br />
Conferencia leida en el Instituto Libre de Segunda Enseñanza<br />
(Buenos Aires), el martes 27 de agosto de 1946<br />
El cuento infantil, transmitido oralmente desde<br />
hace miles de años, nos reune aquí esta tarde, igual<br />
que en los días de nuestra niñez, en torno de nuestra<br />
madre o de alguna vieja sirviente.<br />
Hace ya muchos años que el cuento oral se ha<br />
refugiado en los seres humildes, y sólo conservan el<br />
secreto de los cuentos universales, las criadas viejas<br />
y las mujemcas campesinas.<br />
Esta ignorancia y este olvido se deben remediar en<br />
lo posible. No a causa de nosotros pero sí por los<br />
niños, para quienes el cuento es la primera manifes-<br />
tación inteligente de la vida. Porque despierta en<br />
ellos la atención y la imaginación, y porque de estos<br />
primeros destellos, que deben alumbrar su cabecita,<br />
depende todo su porvenir intelectual y tal vez moral.<br />
Durante muchos siglos, el arte de contar cuentos<br />
tuvo una fundamental importancia dentro de los<br />
hogares. A oír el relato familiar se reunían alrededor<br />
de la madre, no sólo los niños, sino los vecinos y los<br />
criados. Y se publicaban libros con reglas, teorías e<br />
indicaciones sobre los temas principales del cuento y<br />
manera de contarlo.<br />
Desterrada esta costumbre patriarcal, y disminui-<br />
da la importancia del relato oral, debemos pensar en<br />
los niños que no sabiendo leer, o sabiendo imperfec-<br />
tamente, aún no pueden extraer en la palabra escrita<br />
toda la claridad, la gracia, la realidad y la vida, que<br />
ponen de manifiesto el gesto y la voz.<br />
Es para ellos una revelación, un despertar tan cate-<br />
górico a la existencia, que no es posible encogerse de<br />
hombros ante la importancia que en realidad tiene el<br />
cuento infantil.<br />
Lo que antaño hacía la madre en el hogar no<br />
puede dejar perderse y en algunos países lo han com-<br />
prendido así. En Estados Unidos, la narración de<br />
LIBROS INFANTILES Y JUMNILES<br />
Luis de Horna. "La reina de las nieves". Cuentos de Andersen.<br />
Anaya, 1999<br />
cuentos es una profesión. Seííoritas narradoras acu-<br />
den a los hospitales, asilos, escuelas, bibliotecas y<br />
parques públicos, donde La hora del cuento, sema-<br />
nal, es ya una institución.<br />
Una sociedad estadounidense ha fundado en París<br />
vanas bibliotecas infantiles. Y, en todas, una vez por<br />
semana, dishtan los niños de La hora del cuento.<br />
Yo visité una de esas bibliotecas, en París, años<br />
antes de la guerra.