Excodra XXV: La estética

Además del carácter humorístico, impactante o sentimental de estos
programas, cabe resaltar otra función que tienen algunos de ellos y, sobre
todo, en el que nos vamos a centrar: APM (Alguna pregunta més). APM es el
ejemplo de programa subversivo, que va más allá del eclecticimos televisivo,
porque es un programa, que además de ser emitido en una televisión
autonómica, es catalán y mantiene el idioma desde sus comienzos.
Una de las claves del éxito de APM es precisamente que se sirve de la
espontaneidad que en ningún caso puede ser prevista en la escaleta de un
programa en directo y, por otro, de la difusión y repetición de los clichés que
lo hacen inconfundible, lo que aquí nombraremos como “tótems”. Un tótem no
es más que un símbolo que comparte un grupo social que se identifica con él y
con el que un miembro de ese grupo puede comunicarse con otros de manera
directa, ya que ambos comparten su significado y su origen.
Lo curioso de este caso es que, aunque sigue siendo un programa autonómico
y predominantemente en catalán, a través del canal de Youtube se ha hecho
famoso en toda España. El éxito ha sido tal que otras cadenas nacionales han
acabado copiando su mismo formato, por ejemplo, Trending Tele o, de un
modo más sofisticado, Zapeando, aunque sin el mismo resultado. APM se
nutre tanto de programas nacionales como autonómicos, sobre todo
informativos, debates políticos, programas matinales, concursos, etcétera.
Además, ha desarrollado varias secciones fácilmente reconocibles por el
espectador como la sección Homo APM o la entrevista a un invitado que
comenta uno de los vídeos tótems a lo largo del programa.
APM no esconde su ideología: Es un programa nacionalista catalán, de
izquierdas y que se ríe, sobre todo, del absurdo de la burocracia y
encorsetamiento tanto político como periodístico y ensalza a personajes