- Page 2 and 3: EDICIONES KIWI, 2011 www.edicionesk
- Page 4 and 5: viendo cómo la sorpresa se refleja
- Page 6 and 7: y me tiró de la cabeza hacia atrá
- Page 10 and 11: que plagaban a los mortales, supong
- Page 12 and 13: parecía una comunidad isleña norm
- Page 14 and 15: ser muy crueles. Los mestizos no po
- Page 16 and 17: alivio al ver a su única sobrina v
- Page 18 and 19: to a tu comportamiento, estoy… at
- Page 20 and 21: cientemente preparada como para ir
- Page 22 and 23: país o prenderte en llamas con só
- Page 24 and 25: —Pero… no pueden divorciarse
- Page 26 and 27: —¿Qué? —Caleb me miró fijame
- Page 29 and 30: Capítulo 4 La forma en que abrió
- Page 31 and 32: tarme mi futuro. Caleb se encogió
- Page 33 and 34: epente, se agachó frente a mí a n
- Page 35 and 36: Capítulo 5 El día siguiente fue c
- Page 37 and 38: —Sí, suenas como un padre —pus
- Page 39 and 40: Pero al final, de entre toda la mie
- Page 41 and 42: Parece ser que yo era la única vir
- Page 43 and 44: Crucé los brazos, preguntándome p
- Page 45 and 46: —Vale. Vale —levantó las manos
- Page 47 and 48: Asentí y volvimos a ponernos en po
- Page 49 and 50: dome, mientras se dirigía hacia Ai
- Page 51 and 52: Me planteé decirle que no me apete
- Page 53 and 54: Capítulo 7 Di un paso hacia atrás
- Page 55 and 56: —Oh… wow. Sus labios se curvaro
- Page 57 and 58: Él no lo encontró ni de cerca tan
- Page 59 and 60:
dejaba por el pantanal. Me miró.
- Page 61 and 62:
demonios, ¿mientras entrenabas? Gr
- Page 63 and 64:
Simplemente levantó las cejas. —
- Page 65 and 66:
A pesar de lo triste que era, me es
- Page 67 and 68:
se conoce como «el que camina entr
- Page 69 and 70:
al muro de la destrucción. —Ni l
- Page 71 and 72:
—¿Pensando en qué? —Para ti e
- Page 73 and 74:
—Oh, sí. Por favor. ¿Podemos ha
- Page 75 and 76:
sus ojos—. ¿Acaso tú estás sob
- Page 77 and 78:
más. Tenía razón. Nacer siendo m
- Page 79 and 80:
jeando y me aparté del camino. Mi
- Page 81 and 82:
la playa anoche. Por los cielos, ¿
- Page 83 and 84:
—¿En serio? Si interfiere en tu
- Page 85 and 86:
una pausa, apretando los puños—.
- Page 87 and 88:
—No eres rara. —¿Entonces…?
- Page 89 and 90:
Capítulo 10 Tirado en las esterill
- Page 91 and 92:
me había dado uno. —Voy a parece
- Page 93 and 94:
a la izquierda de los Centinelas do
- Page 95 and 96:
—Está buenísimo —Elena se gir
- Page 97 and 98:
—¿Cómo le habrías llamado tú?
- Page 99 and 100:
—¿Qué? —Estoy seguro de que A
- Page 101 and 102:
Capítulo 11 No existía nada más
- Page 103 and 104:
—Existe esa posibilidad, pero no
- Page 105 and 106:
Unas lágrimas cálidas comenzaron
- Page 107 and 108:
maniquíes unas cuantas veces, quiz
- Page 109 and 110:
eza, dejando mis labios a unos poco
- Page 111 and 112:
—Sí, ya lo sé. Todo el mundo te
- Page 113 and 114:
La repentina ráfaga de aire me hiz
- Page 115 and 116:
—La cuestión es que estoy aquí
- Page 117 and 118:
mío al ir a abrir la puerta. —No
- Page 119 and 120:
Olivia movió la cabeza. —No lo s
- Page 121 and 122:
Se sentó, con las manos sobre las
- Page 123 and 124:
detrás de él. Sola, me deslicé h
- Page 125 and 126:
preocupes siquiera. Seth rió. —T
- Page 127 and 128:
Jugué con mi pelo, enrollándolo e
- Page 129 and 130:
—¿Podrías quitarte esa cara de
- Page 131 and 132:
La pregunta me pilló por sorpresa.
- Page 133 and 134:
Rió cuando le hice una mueca. —P
- Page 135 and 136:
Capítulo 15 Justo antes del amanec
- Page 137 and 138:
ceja. —Y no la tengo— Seth se a
- Page 139 and 140:
do tan cerca, Álex. Cuatro horas n
- Page 141 and 142:
pelea y se la habían negado. Respi
- Page 143 and 144:
Seth se dio la vuelta, sus ojos est
- Page 145 and 146:
do dos de vosotros desde hace más
- Page 147 and 148:
por la palingenesis? No podía cree
- Page 149 and 150:
Capítulo 16 Mientras Aiden me llev
- Page 151 and 152:
algo tan arriesgado y estúpido, pe
- Page 153 and 154:
mientos estaban en llamas. Su nombr
- Page 155 and 156:
Evité a los Guardias que patrullab
- Page 157 and 158:
Capítulo 17 A pesar de estar anorm
- Page 159 and 160:
último elemento; sólo los dioses
- Page 161 and 162:
Cogí la toalla con fuerza. —Si a
- Page 163 and 164:
lo que pasó entre los dos? ¿Aún
- Page 165 and 166:
sidencias, haciendo planes para que
- Page 167 and 168:
Había bastantes posibilidades de q
- Page 169 and 170:
lo que signifique. Me pregunté lo
- Page 171 and 172:
chón del tamaño de un huevo. Mare
- Page 173 and 174:
parecía a los entrenamientos. Y es
- Page 175 and 176:
Me intenté apartar, pero me sujet
- Page 177 and 178:
—Ya sé que estás triste, pero y
- Page 179 and 180:
aterradora realidad. Eric no pareci
- Page 181 and 182:
de rodillas. —¡Lexie! La voz de
- Page 183 and 184:
Todo sonaba muy lejano e irreal. En
- Page 185 and 186:
—No lo sé. Marcus está muy dece
- Page 187 and 188:
—Pero no nos pillaron —entonces
- Page 189 and 190:
Dos días después volví al Covena
- Page 191 and 192:
on. Necesitaba verle. —Ya… nos
- Page 193 and 194:
—Hey. Aiden no es así. Caleb me
- Page 195 and 196:
—una de Lucian y otra de Marcus.
- Page 197 and 198:
—No —moví la cabeza—. No deb
- Page 199 and 200:
mí. Salí del edificio principal,
- Page 201 and 202:
aparte por ahora. —¿Así que sen
- Page 203 and 204:
co—. Por lo que sea. Estás desti
- Page 205 and 206:
ñarte. Mirándole, admití que hab
- Page 207 and 208:
—¿Sí? —La próxima vez que de
- Page 209:
sintiendo cómo se me humedecía la