SALUD ACTIVIDADES LABORALES QUE PONEN EN RIESGO LA SALUD DE LOS OJOS 36
Los ojos son muy delicados e irremplazables y los daños producidos son -en muchos casos- irreversibles. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), las principales causas de discapacidad visual en el mundo son los errores refractivos (43%) y las cataratas (33%), y aproximadamente un 90% de las personas con discapacidad visual, viven en países en desarrollo. En nuestro país, el Estudio Poblacional de Evaluación Rápida de la Ceguera en el Perú - ERCE, evidenció que las principales causas de ceguera en personas de 50 años a más, se deben a catarata (58%), seguida de glaucoma (14%), errores refractivos no corregidos (5%), retinopatía diabética, entre otros. Asimismo, en el 2016 se registraron en el Perú más de 20 mil accidentes de trabajo, según los reportes del Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo, de los cuales un porcentaje superior al 2% está relacionado a enfermedades laborales. En el caso de la salud visual, los sectores que están relacionados con el uso de maquinaria, productos químicos, eléctricos, térmicos, o al aire libre; requieren un extremo cuidado debido a la constante aparición de riesgos que pueden afectar a zona ocular de manera grave, temporal o permanente. Para el Dr. Carlos Siverio Llosa, especialista de Oftálmica, las personas que se desempeñan en estas profesiones, aun no asumen el hecho que podrían afectar su salud, si es que no se protegen o se evalúan la vista cada cierto tiempo. El especialista señala que la metalmecánica es uno de los trabajos que con frecuencia afecta a los ojos, debido a las actividades de corte y soldadura que desprenden chispas, que son trozos muy pequeños de metal incandescente; los cuales pueden incrustarse en la córnea (membrana trasparente de la parte anterior del ojo) y generar quemaduras. “Estas producen una cicatriz de color blanco, que en el caso de estar en el centro de la córnea se convertirá en una “nube” que disminuye la visión de forma permanente”, indica. La construcción es otra de las actividades que pone en riesgo los ojos si no se usan los lentes protectores necesarios. Según el Doctor Siverio, esto debido al contacto con el cemento, ya que por su gran toxicidad produce quemaduras severas en la córnea y la conjuntiva (membrana mucosa que cubre la parte anterior del ojo). “El cemento, al estar mezclado con arena y otros elementos expuestos a la humedad, puede también contener hongos que producen úlceras en la córnea. En el caso de que haya ingresado cemento en el ojo del paciente, este debe en primer lugar lavarse con abundante agua por varios minutos para deshacer y expulsar las partículas y asistir al oftalmólogo para que termine la limpieza del ojo y evalúe los daños”. La jardinería y la agricultura son actividades que tienen en común el contacto constante con plantas, lo cual representa el riesgo al ojo; dado que muchas veces las hojas o ramas pueden rozar el ojo produciendo leves cortes, y depositando hongos. “Días después de que el hongo ha sido depositado, el paciente puede sentir dolor, sensación de un cuerpo extraño, intolerancia a la luz y enrojecimiento, todos ellos son síntomas de una úlcera corneal, por lo que se debe ir al oftalmólogo de forma inmediata para iniciar lo más pronto posible el tratamiento adecuado con antibióticos, ya que si la úlcera avanza por mucho tiempo puede llegar a perforar el ojo, generando daños irreversibles”, afirma el oftalmólogo. Asimismo, actividades de gran exposición al sol como la pesca, minería, entre otras generan un riesgo para la salud visual debido a la radiación solar, la cual es la principal causa de carnosidad y también acelera la aparición de cataratas. En el caso de actividades en el mar (pesca y comercio marítimo) y en zonas altas con presencia de nieve, se puede producir queratitis que son pequeñas heridas en la córnea (parte frontal del ojo). En el caso de las personas que trabajan en oficinas y tienen que usar necesariamente dispositivos digitales, el doctor indica que “la distancia correcta entre la pantalla de la computadora o laptop y nuestros ojos debe de ser entre 50 a 70 centímetros. También es importante que el monitor este situado en una posición baja con respecto de nuestros ojos formando con los ojos un ángulo de aproximadamente 30 grados. El teléfono debe situarse a la distancia normal de lectura de un libro, a unos 30 centímetros, si bien las personas que han desarrollado presbicia o vista cansada necesitan aumentar dicha distancia alargando el brazo para ver mejor la pantalla del móvil o las letras de un libro”. Finalmente, sea cual sea la profesión que desarrollemos, la prevención es la mejor manera de cuidar la salud. Realizarse chequeos periódicos o asistir al médico de manera periódica, son acciones necesarias para evitar daños irreversibles. 37