MOTO y BICI 46ava WEB
Revista especializada del mundo del motociclismo, ciclismo y running
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EL CICLISMO: SALUD Y VIDA, VICIO Y RELIGIÓN<br />
Juan Carlos Ortiz F.-Foto Ciclista<br />
Ranchofoto<br />
@rancho.jcof<br />
Después de luchar ardúamente y no siempre lograr<br />
terminar los moto enduros decidí empezar a hacer un poco<br />
más de ejercicio, me metí al gimnasio, necesitaba tener más<br />
resistencia y empecé a hacer spinning. Fueron años muy<br />
alegres, de madrugar para estar a las 5:00 AM en las clases de<br />
Piccolo. Eran duras, llenas de música, consejos y de amigos.<br />
Un día platicando con un compañero endurista el cual tenía<br />
problemas muy similares a los míos, decidimos probar hacer<br />
cicle de montaña para mejorar en el enduro sin imaginar que<br />
un día iba a dejar por completo la moto para aprovechar mis<br />
tiempos libres en este nuevo deporte.<br />
Era el año 2003 y con sobrepeso pero con mucha<br />
determinación inicié esta nueva aventura, aventura de la cual<br />
no me gustaría salir nunca.<br />
De pequeño mi abuelo me contaba como a caballo<br />
él hacia una travesía desde Tamahú, en Alta Verapaz hasta<br />
Antigua Guatemala en donde estudiaba, me contaba como<br />
pasaban por una serie de montañas y paraban en los ríos a<br />
refrescarse y a sus bestias. Fue así que cuando me enteré de<br />
una travesía de Guatemala a Cobán decidí probar suerte.<br />
Esa fue mi primer gran aventura, me inscribí sin<br />
imaginarme a lo que me estaba metiendo, después de 2 días,<br />
más de 100 km de extenuante placer y de lugares realmente<br />
bellos quedaron atrás la subida del Chol, la cumbre, Salamá,<br />
Tactic y el Trapiche. Quedaron atrás únicamente para querer<br />
regresar algún día.<br />
VICIO Lo más increíble era que además de la emoción de<br />
la velocidad en las bajadas, como en la moto y las pequeñas<br />
competencias que uno va haciendo con los compañeros y<br />
consigo mismo, también había momentos de mucho dolor,<br />
cansancio y sufrimiento.<br />
En las bajadas nuestro cuerpo nos hace estar atentos<br />
ante el peligro y nos provee de adrenalina… En lo plano y en<br />
las subidas, se sufre pero un dolor rico y placentero. Después<br />
aprendí que nuestro cuerpo lo que hace es protegerse ante el<br />
dolor y libera dopamina al alcanzar metas y endorfinas como<br />
analgésico, sustancias relacionadas con el placer y la felicidad.<br />
Y las libera para que pares de sufrir, puedas seguir en la lucha,<br />
en la aventura, en el colazo y ¡seguir feliz!<br />
Los ciclistas siempre estamos buscando como<br />
mejorar y al final he llegado a la conclusión que en este deporte<br />
para mejorar se necesita siempre bajar de peso y pedalear con<br />
constancia, es un deporte también mal agradecido, si dejamos<br />
de entrenar en un par de semanas cuando nos volvemos a<br />
subir a la cicle no esperemos estar igual. El no pedalear se<br />
paga…. pero como ya es vicio, lo que más cuesta es dejar de<br />
pedalear.<br />
VIDA EL Ciclismo así como nos puede dar grandes alegrías<br />
no siempre es felicidad, a veces es tristeza y dolor. Golpes,<br />
raspones, moretes, esguinces, luxaciones, quebraduras y<br />
muerte pueden estar allí con nosotros acompañándonos y<br />
recordándonos lo frágil que somos y lo frágil que es la vida.<br />
Esa vulnerabilidad, ese exponerse a los elementos y pagar<br />
con sangre, sudor y lágrimas las consecuencias de nuestras<br />
decisiones hace que al montar bicicleta nos sintamos vivos.<br />
El ciclismo ya me quitó a dos amigos, a Cristián<br />
y a JP, ambos en Carretera a El Salvador, ambos tipazos,<br />
deportistas enamorados de la vida. Sí, es duro vivir esos<br />
momentos y después de compartir la tristeza de los deudos,<br />
cuesta ponerse los zapatos de ciclista y salir a pedalear, de<br />
hecho ya no hago ruta, ya no me la gozaba tanto y en mi casa<br />
me esperaban sin tranquilidad, así que mejor montaña.<br />
Al menos en montaña no vamos tan rápido, promedio<br />
10 km/h contra 30 km/h en ruta, además en montaña<br />
podemos caer en algo no tan duro como lodo, grama, arena,<br />
si nos va mal caemos en piedras, también si nos caemos en<br />
montaña fue culpa nuestra, en ruta puede ser culpa nuestra,<br />
de algún cuate en el pelotón o de un automovilista.<br />
Para la misa de Cristián, nunca se me va a olvidar lo<br />
que dijo el padre, “Murió haciendo lo que le gustaba, viendo<br />
el amanecer con el viento en la cara y brillo en sus ojos….”.<br />
Y es por eso que seguimos, porque a pesar del riesgo que<br />
conlleva, si no saliéramos sería morir, mejor salgo y pedaleo<br />
con buenos recuerdos.<br />
RELIGIÓN Ya que mencioné una misa y a un padre<br />
aprovecho para contarles que los momentos más espirituales<br />
y donde yo me siento más integrado al Cosmos han sido<br />
montando bici, en los amaneceres en bosques, donde escucho<br />
guardabarrancos y el agua en los ríos, cuando escucho el<br />
viendo en los árboles y lo siento en mi cara, donde veo tonos<br />
de violeta-azul-naranja y neblina en todos lados, donde gotas<br />
de rocío me enfrían los pies cuando el pedal coincide con<br />
alguna hoja mojada.<br />
Cada salida la acompaño con un agradecimiento por<br />
poder practicarlo y suplica de regresar sano y salvo. Lo digo o<br />
lo pienso, a veces hasta un rosario en la oscuridad, creo que<br />
parte importante es agradecer un día más y pedir un día más…<br />
SALUD En el ciclismo logramos dos tipos de salud. La<br />
primera la física y mental consiste en beneficios como mejora<br />
en el sistema inmunológico, fortalecimiento y mejora de las<br />
articulaciones, mejoras en nuestro sistema cardiovascular<br />
y respiratorio, aceleración del metabolismo y sensación de<br />
bienestar generalizada. El otro tipo de salud la decimos con los<br />
amigos después de haber concluido un buen colazo, cansados,<br />
sucios, con historias que contar. ¡Salud! Decimos, levantamos<br />
la chelita viéndonos las caras con una sonrisa alegre.