STEIGNYR - THE LEGACY OF WYRD (SPANISH)
Primer libro de la banda Catalana Steignyr el cual relata 3 historias, un principio, un pasado y un futuro. Libro que acompaña a su nuevo album The Legacy of Wyrd, una obra llena de Fantasia, Epica y sobretodo aventuras que nunca olvidarás.
Primer libro de la banda Catalana Steignyr el cual relata 3 historias, un principio, un pasado y un futuro. Libro que acompaña a su nuevo album The Legacy of Wyrd, una obra llena de Fantasia, Epica y sobretodo aventuras que nunca olvidarás.
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Si Mendo ganaba la partida su deseo más profundo se convertiría en realidad, si no..
bueno.. se iría por donde había venido. No era un mal trato ¿cierto?
Las horas pasaban, las fichas caían, y tras un arduo juego, Mendo se proclamó
vencedor frente al viejo dios, quien, lejos de reflejarse irascible, sonrió y sacudió la
mano al ganador. Con ese apretón de manos selló el pacto.
Grakal se llevó una parte del alma de Mendo al inframundo para cumplir su acuerdo
con “la diosa blanca”, pero dejó que conservara una ínfima parte para seguir viviendo
en el mundo mortal, y así su deber con la muerte estaba sellado, ella nunca acudiría a
buscarlo, pues casi toda su alma ya estaba en su reino. Como recuerdo de este
acuerdo, Mendo quedó marcado con un ojo blanco y muerto para toda la eternidad.
Así se despidió del brujo tan agradecido que le regaló su chaleco, que era lo único de
valor que había traído con él al endemoniado bosque.
Mendo regresó a su casa con su gato pardo. Los primeros días fueron felices, ya no
encontraba más vello blanco en su barba, ni arrugas en su piel. Pero su gato no parecía
convencido y lo rehuía cada vez que lo encontraba en la casa.
Con el pasar de los días nuestro protagonista empezó a decaer en su ánimo, ya no
envejecía, eso era cierto, pero tampoco sentía el sabor de la comida, ni el calor de una
hoguera, ni su corazón latía con los pequeños placeres de la vida. Al final, se había
cumplido lo que más temía, había muerto. Esa era la eternidad que le esperaba.
Así pues, un día decidió volver al bosque, resuelto a deshacer aquel entuerto. Una vez
más se descubrió trazando muescas en los árboles para poder volver a salir. Una vez
más el espesor oscuro del bosque. Una vez más aquellos árboles susurrantes que ahora
parecían llorar con él su desgracia. “¿Por qué no escuche?” se repetía una y otra vez
en el tortuoso camino de penitencia en busca de la cabaña.
Una vez más allí estaba el viejo roble, que parecía burlarse de sus desgracias. Mendo
abrió la puerta de la cabaña, pero esta vez no encontró a nadie allí dentro y,
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