EDICION YD JUL-AGO 23

R E P O R T A J E D E M A R C A | P Á G I N A 3 5
mejor versión de nuestra persona,
cultivando principios y valores que guíen
nuestro comportamiento y toma de
decisiones.
Dice una frase popular “o te aclimatas o
te aclimueres”, refiriéndose a esta
capacidad para adaptarse y aprender que
toda empresa y personalidad que
prosperan suelen tener, es decir, pueden
adaptarse a los cambios del entorno y
aprender de sus experiencias. Las
empresas deben adaptarse a las
tendencias del mercado ya las nuevas
tecnologías para mantenerse relevantes,
mientras que las personalidades deben
aprender y crecer a través de los desafíos
y adversidades.
Si quieres llegar rápido puedes ir sola,
pero si quieres llegar lejos es mejor estar
acompañada. Para una empresa como
para la personalidad las relaciones son
fundamentales para el éxito. Las
empresas dependen de relaciones sólidas
con los clientes, proveedores y
empleados, mientras que la personalidad
puede influir en la calidad de sus
relaciones interpersonales y conexiones
sociales.
“Si no sabes a dónde vas, cualquier
camino es bueno” decía el gato de Alicia
en el país de las maravillas. De nada sirve
un liderazgo sin rumbo, y en la
construcción de ambas esferas, el
liderazgo juega un papel importante. En
una empresa, un líder efectivo puede
guiar y motivar a su equipo hacia el éxito.
En el desarrollo de la personalidad, el
liderazgo se traduce en la capacidad de
autogestión y autoconocimiento para
tomar decisiones coherentes con los
valores y metas personales.