Descargar PREVIO - Libros en Casa Eolo
Descargar PREVIO - Libros en Casa Eolo
Descargar PREVIO - Libros en Casa Eolo
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
Bajamos otra vez. No era la mejor terapia para él quedarse<br />
ahí embobado —ahora parecía hablarle al botón de su camisa—.<br />
Fuimos a la puerta principal donde habíamos quedado con<br />
Míchel. Cuando llegó, le contamos lo sucedido y regresamos al<br />
piso.<br />
Y luego, ¿fuisteis a la piscina? —se interesó Lázaro.<br />
Bu<strong>en</strong>o, <strong>en</strong> ese mom<strong>en</strong>to, no estábamos seguros de que el<br />
hombre hubiera muerto, nos <strong>en</strong>teramos al día sigui<strong>en</strong>te, <strong>en</strong> las<br />
noticias, y además era algo completam<strong>en</strong>te aj<strong>en</strong>o a nosotros —el<br />
jov<strong>en</strong> se mostró algo incómodo con la pregunta, movi<strong>en</strong>do la<br />
cabeza lateralm<strong>en</strong>te.<br />
Por supuesto, no pasa nada, es un comportami<strong>en</strong>to natural<br />
—le tranquilizó el policía—. Me refiero a si fuisteis los tres.<br />
Pablo se relajó de nuevo y replicó:<br />
No, Toño se quedó <strong>en</strong> casa, se negó rotundam<strong>en</strong>te a ir, a<br />
pesar de que Michel le insistió mucho. Parecía bastante afectado.<br />
El inspector reflexionó unos segundos y pareció dar por<br />
bu<strong>en</strong>a la explicación de la trama. Sin embargo, faltaban algunos<br />
detalles por concretar:<br />
Regresemos al mom<strong>en</strong>to <strong>en</strong> que algui<strong>en</strong> gritó <strong>en</strong> la primera<br />
planta, cuando se desplomó la víctima.<br />
De acuerdo.<br />
¿Viste a algui<strong>en</strong> sospechoso <strong>en</strong> ese instante?<br />
No —contestó el muchacho de manera casi inmediata—<br />
porque nos pilló un pelín por delante. Justo habíamos <strong>en</strong>filado las<br />
escaleras para bajar hacia la planta calle, cuando oímos el chillido<br />
y giramos las cabezas.<br />
87