09.05.2013 Views

Descargar PREVIO - Libros en Casa Eolo

Descargar PREVIO - Libros en Casa Eolo

Descargar PREVIO - Libros en Casa Eolo

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Ya... ¿Y de apellido?<br />

San Martín. Miguel San Martín —el jov<strong>en</strong> puso labios de<br />

pitiminí al pronunciarlo.<br />

Vale ¿y tú qué estudias? —mi<strong>en</strong>tras le preguntaba, p<strong>en</strong>só<br />

que sus pres<strong>en</strong>timi<strong>en</strong>tos acerca de la nula cooperación por parte<br />

del jov<strong>en</strong> se confirmaban.<br />

Mi época de estudiante ya pasó. Hice una lic<strong>en</strong>ciatura de<br />

Educación Física <strong>en</strong> el INEF. Ahora trabajo <strong>en</strong> el gimnasio “Top<br />

Definition”, <strong>en</strong> la calle Costa —se hinchó como un pavo y con<br />

marcado ac<strong>en</strong>to americano, dijo—: Soy “body trainer”.<br />

¿Eres qué? —se extrañó el inspector.<br />

¡Preparador físico! —rió el otro con ganas.<br />

De acuerdo —el inspector no quiso <strong>en</strong>trar al trapo y decidió<br />

sosegarse un instante, antes de ir al grano—. T<strong>en</strong>go <strong>en</strong>t<strong>en</strong>dido<br />

que el domingo que se produjo el asesinato, estuvisteis los tres <strong>en</strong><br />

“El Corte Inglés” del Paseo Sagasta comprando unas raquetas de<br />

t<strong>en</strong>is. ¿Te importaría contarme lo que recuerdes de ese incid<strong>en</strong>te?<br />

Supongo que será mera rutina —contestó el jov<strong>en</strong> con<br />

presunción—. Porque, como compr<strong>en</strong>derá, yo no t<strong>en</strong>go ni la más<br />

mínima idea al respecto. Ni pres<strong>en</strong>cié el hecho, ni conocía a la<br />

víctima, ni, con todos los respetos, me importa un bledo el tema.<br />

En ese mom<strong>en</strong>to, el inspector Lázaro estuvo a punto de no<br />

aguantar más. Con mucho gusto, le hubiera hecho tragar un par de<br />

mancuernas que asomaban <strong>en</strong>tre una pila de ropa sucia, la cual<br />

por cierto, no era sino la punta del iceberg de una marabunta de<br />

bártulos, cajas y demás <strong>en</strong>seres. En lugar de eso, contó l<strong>en</strong>tam<strong>en</strong>te<br />

hasta tres, lo que le sirvió también para hacer una rápida inspección<br />

visual de la habitación. Era absolutam<strong>en</strong>te antagónica a la<br />

90

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!