Año 7 Nº28 - Diciembre 2011 - Argentores
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texto que también Lía quiere hacer y presentó en el<br />
Centro Cultural de la Cooperación. Es un monólogo<br />
llamado Concierto en soledad y describe a una mu-<br />
jer mientras ensaya en su casa el violoncello espera<br />
a un director al que ama y que no llega. La música<br />
ha sido algo muy importante en mi vida, cuando era<br />
joven fui músico. Así que el tema está muy unido a<br />
mi afectividad y mi formación. La cuarta obra es una<br />
que estrené en Nueva York, en el off Broadway (tea-<br />
tro IATI) que se llama Restaurante El Mundo.<br />
¿De qué se trata?<br />
0<br />
Es una obra realista, que transcurre en un am-<br />
biente medio sórdido y cuyas escenas se alternan<br />
entre el restaurante propiamente dicho y un baño<br />
separado de él por una pared. Por esos lugares des-<br />
filan individuos de toda calaña, en general metidos<br />
en actividades non sanctas. No transcurre en algún<br />
geográfico específico, por lo que puede hacerse en<br />
cualquier lugar, tanto Montreal, Nueva York como<br />
Buenos Aires. En Nueva York anduvo bien. Lo que he<br />
tratado de reflejar es como la corrupción que se ejer-<br />
ce en los centros de poder y en los sectores sociales<br />
más fuertes terminan contaminando también a los<br />
sectores más bajos. Acá, uno de los mozos, como el<br />
dueño no le quiere pagar, le roba todo el tiempo,<br />
un jamón, una botella de coñac y otras cosas y las<br />
esconde en el baño. El que se ocupa del baño hace<br />
otro tanto y toma al papel higiénico como su refe-<br />
rencia con la vida, con el dinero, para catalogar a la<br />
gente. Y se enoja con quien no lo hace participar de<br />
la rapiña o con quien no le da propina.<br />
¿Hará esa obra acá?<br />
sio.<br />
Me agradaría. Me la pidió la directora Mara La-<br />
Tiempos de otro “Carlitos”<br />
Después de irse a México en 1992 y trabajar de<br />
guionista para televisión, Jorge Nuñez regresó dos<br />
años a la Argentina con la intención de quedarse: en<br />
1995 y 1996. “Cuando estaba Carlitos. No Gardel,<br />
el otro, el innombrable”, dice riéndose. Afirma que<br />
vivía aquí de los derechos de autor que le procura-<br />
ban sus guiones de televisión en México y que por<br />
eso se podía dar el lujo de esperar a que la situación<br />
laboral se regularizara para él. Eran una etapa difícil,<br />
de cambios rotundos para la televisión argentina y<br />
de neto retroceso del rol del guionista. Durante esos<br />
años, estrenó una sola obra de teatro, Qué difícil<br />
es decir adiós, un triángulo de soledades sentimen-<br />
tales dirigida por Alberto Cattan e interpretada por<br />
Marcos zucker, María Concepción Cesar y Alfonso<br />
De Grazia. Eso a pesar de tener otros títulos escritos.<br />
“Y no hice nada más. Entonces, en un momento me<br />
pregunté: ‘¿Qué estoy haciendo acá?’. Y me volví.”<br />
Ahora las cosas parecen haber cambiado.<br />
¿Qué opina?<br />
Si, el país cambió mucho. Y a mi criterio para<br />
bien. En este tiempo que estuve en Buenos Aires me<br />
reencontré con muchos viejos amigos. Mara Lasio,<br />
por ejemplo, se enteró de mi llegada en febrero y me<br />
llamó para preguntarme si no tenía alguna obra. Le<br />
acerqué Restaurante El Mundo y ahora que volví me<br />
mostró el boceto de la escenografía que tiene pensada.<br />
Piensa montarla el año que viene. También me conecté<br />
con Hugo Gregorini, un director al que conozco<br />
bien, y me pidió una obra para hacer. Y le dí La lucha<br />
es cruel y es mucha, que en 1995 o al año siguiente se<br />
estrenó como teatro semimontado. La hicieron Carlos<br />
Carella, Alicia zanca y Rubén Stella. Pero, ya se sabe,<br />
es muy difícil vivir del teatro. No lo puede hacer ni<br />
siquiera un prócer como Carlos Gorostiza, mi maestro<br />
admirado. No lo podía hacer Dragún.<br />
¿en México cómo es? ¿Usted vive del teatro?<br />
Yo vivo de mis trabajos en la televisión de Méxi-<br />
co y de los Estados Unidos. He tenido algunos éxi-<br />
tos con algunos títulos de comedia, me ha ido muy<br />
bien, pero mi sustento son los guiones para TV.<br />
¿Usted trabajó en Argentina para casi todos<br />
los canales y muchos programas, entre ellos<br />
Atreverse, Compromiso, Así son los míos y<br />
otros más. ¿Qué circunstancia de trabajo lo<br />
llevó a irse a México?<br />
Después de haber trabajado varios años bas-<br />
tante bien, 1992 apareció como un año incierto. La<br />
cosa venía mal, empezó a llegar a la televisión una<br />
gente distinta y los autores de mi época fueron poco<br />
a poco siendo desplazados o a dejar de trabajar.<br />
Comenzó la tiranía de los productores.<br />
Claro, y se empezó a no pagar derechos de au-<br />
tor. Hoy los autores son las propias productoras que<br />
hacen firmar con otro nombre. Entonces, entonces<br />
no sabía que hacer. Me acuerdo que era enero y ve-<br />
raneaba con mis hijos en una casita que desde hace<br />
30 años tenemos en Santa Clara del Mar. Y, por esas<br />
cosas providenciales de la vida, me llamó Abel San-<br />
ta Cruz. Y me preguntó: “¿Jorge, te interesaría ir a<br />
trabajar a México?” “Sí, como no”, le contesté. Y me<br />
contó que lo habían llamado de Televisa para hacer<br />
una telenovela y que no tenía ganas de aceptar ese<br />
trabajo. Tenía 78 años y había cobrado una cifra mi-<br />
llonaria en dólares por la venta de un paquete de sus<br />
telenovelas a Televisa. A Abel lo que le gustaba a esa<br />
altura era hacerse algún viaje a Las Vegas y pasarse<br />
allí una semanita jugando. Fijate cómo lo conocían<br />
que hasta tenía una suite gratis en el Caesars Palace.<br />
Una vez lo acompañé y tampoco a mí me cobra-<br />
“La versión de Lo que<br />
mata es la humedad en el<br />
Cervantes es un retorno<br />
al texto original.<br />
En 1981 cuando Carlos<br />
Gandolfo la estrenó<br />
estábamos en plena<br />
dictadura y había<br />
cosas que no se podían<br />
decir. Entonces él<br />
me sugirió algunos<br />
cambios y yo acepté<br />
porque no hacerlo<br />
hubiera sido necio.”