REVISTA PESCA NOVIEMBRE 2014
La indiferencia ciudadana nos hace aceptar lo que la prensa y los medios de comunicación reportan como si fuese verdad, o la última palabra en la materia. No analizamos si la noticia es completa, correcta o imperfecta. Hasta hoy, la ciudadanía peruana ha elegido vivir de espaldas al mar y a su pesca. Leyendo y accediendo a medios de información alternativos como la revista Pesca podemos empezar a formarnos un criterio propio y acceder a información que puede incrementar nuestro bagaje de conocimientos sobre la pesca peruana. Podemos dejar de vivir de espaldas al mar y dejar de ser sujetos pasivos de la información que invade nuestras vidas pretendiendo relegar nuestro derecho y obligación de pensar y formarnos criterio propio. Leamos y opinemos.
La indiferencia ciudadana nos hace aceptar lo que la prensa y los medios de comunicación reportan como si fuese verdad, o la última palabra en la materia. No analizamos si la noticia es completa, correcta o imperfecta. Hasta hoy, la ciudadanía peruana ha elegido vivir de espaldas al mar y a su pesca. Leyendo y accediendo a medios de información alternativos como la revista Pesca podemos empezar a formarnos un criterio propio y acceder a información que puede incrementar nuestro bagaje de conocimientos sobre la pesca peruana. Podemos dejar de vivir de espaldas al mar y dejar de ser sujetos pasivos de la información que invade nuestras vidas pretendiendo relegar nuestro derecho y obligación de pensar y formarnos criterio propio. Leamos y opinemos.
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ción como arpones y anzuelos de metal o madera y después<br />
una especie de flotadores con redes a base de algodón<br />
y cuatro palos. Los antiguos peruanos eran grandes<br />
nadadores y buceadores‖, asegura Casas.<br />
La inteligencia y el ingenio de nuestros antepasados se<br />
manifestó posteriormente con la creación de las balsas<br />
de totoras, conocidas como caballitos, en cuyos extremos<br />
se aprecian rostros mezclados de humanos y felinos,<br />
los que hasta ahora se utilizan tanto en el norte peruano<br />
como en la zona del Altiplano.<br />
―En los mitos aparecen héroes legendarios transportados<br />
en balsas, como Naylamp, acompañado de su séquito.<br />
En Wari se observan personajes armados navegando<br />
sobre balsas‖, refiere Rebaza.<br />
ABONOS DE ANCHOVETA<br />
Entre los utensilios que se exhiben al público en la exposición<br />
figuran un plato de madera Chimú donde se aprecia<br />
una ola humanizada, un vaso de plata que representa<br />
pescadores en balsas de totora. También se aprecian en<br />
los ceramios tiburones, pulpos, muy muy, bagres, matarrayas,<br />
pingüinos, machas, choros, lobos marinos y diversas<br />
aves.<br />
La anchoveta fue uno de los peces más consumidos por<br />
los antiguos peruanos que llegaron a utilizar sus cabezas<br />
como abonos, ―dentro de los cráneos de estos peces colocaban<br />
algunas semillas como las de maíz y las enterraban<br />
para después cosechar‖.<br />
―De los lobos usaban su carne como alimento y su piel<br />
para vestimentas y los flotadores, los huesos de los tiburones<br />
eran usados para sus viviendas y sus dientes para<br />
agujas y anzuelos. Con los caracoles fabricaban instrumentos<br />
musicales aerófanos‖.<br />
En gran parte de los objetos se observan los famosos<br />
moluscos Spondylus que eran considerados como verdaderos<br />
tesoros y usados en ceremonias religiosas y como<br />
adornos de joyas para gobernantes o altos jefes. Los<br />
había morados, amarillos y anaranjados.<br />
―Para ellos este molusco era comida de dioses y como<br />
una forma de reverenciar al mar, los molían y las arrojaban<br />
tanto al mar como a personajes importantes, podemos<br />
observar su utilización en diversas culturas‖, explica<br />
Pérez.<br />
DESCANSO AL MAR<br />
Los de la cultura Paracas, al igual que<br />
otras culturas preíncas usaban el Spondylus,<br />
los que eran traídos desde lo que<br />
hoy es Ecuador, se le aprecia en collares<br />
y figuras diminutas que eran símbolos<br />
sagrados. ―Fueron los Chincha,<br />
grandes comerciantes, los que hicieron<br />
conocer a los Incas este molusco‖, refiere la estudiosa.<br />
Como parte de los cuidados que brindaban al mar, los antiguos peruanos se imponían épocas de veda con la intención<br />
que el mar descanse para tiempo después volver con más entusiasmo a las faenas.<br />
―Todo eso debemos aprender para no observar esos espectáculos deprimentes de las basuras en las playas, de la contaminación<br />
del mar. Nuestros antepasados son un ejemplo a seguir‖, afirman las arqueólogas.<br />
Revista Pesca Noviembre <strong>2014</strong> 43