Nº 83 - Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz

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LA CARRERA
TENÍA UN
Javier Irazabal
PRECIO
Dos mil mujeres
participaron en
la marcha solidaria
contra el cáncer de
mama
La carrera tenía un precio, pero no se medía en
euros sino en solidaridad, apoyo, cercanía y participación.
Y Vitoria le tomó la medida. Era la primera
vez que la Carrera de la Mujer llegaba a sus calles.
En su cuarta edición había pasado ya por Málaga,
Valencia, Gijón y Madrid, a la espera de completar
el recorrido por Sevilla (5 de octubre), Barcelona
(26 de octubre) y Zaragoza (16 de noviembre). Sólo
eran cinco kilómetros; no era una prueba competitiva
como tal, sino una fiesta solidaria y de sensibilización
contra el cáncer de mama, una enfermedad que afecta
a una de cada ocho mujeres. El objetivo de la organización
era distribuir 2.000 dorsales. Y se agotaron.
Sólo podían inscribirse mujeres, aunque también podían
participar hombres; pero, con dorsal, sólo las mujeres.
Llegaron a la meta 1.462 féminas. Era sábado,
7 de junio.
Durante el recorrido se formaron los más pintorescos
grupos; abuelas, madres con carritos de niño,
jubiladas, estudiantes, amas de casa… La primera en
cruzar la meta fue la gran atleta lucense y maratoniana
olímpica (Sydney 2000 y Atenas 2004) María Abel
(16m 56s), seguida de Alba García (17m 43s) y Ana
Conde Bernal (18m 27s), a gran distancia de la última,
María Teresa Bonastre (1h 01m 15s). El esfuerzo
realizado fue, en muchos casos, enorme, y así se dejaba
ver.
Gran respuesta
La primera sorpresa se produjo escasos días antes del
evento. En poco más de 48 horas se habían duplicado
los dorsales entregados, por lo que la zona de meta, situada
en la plaza de la Provincia, se quedaba pequeña.
Se trasladó a la calle Luis Heintz, frente al colegio de los
Marianistas, donde finalmente se celebró el concierto
de la cantante Nika, y un festival de fitness. El precio
de las inscripciones era de cinco euros, uno de ellos
como donativo. “Lo dedicaremos fundamentalmente
a la investigación contra el cáncer de mama”, anunció
Jone Ojeda, de la Asociación Española contra el Cáncer.
El que se recogieran 2.083 euros significa que alguien
entregó algún euro de más, ya que los dorsales
entregados fueron 2.000.
Numerosas instituciones y personalidades habían
expresado su apoyo llamando a participar en la prueba.
Entre ellas, el propio Martín Fiz, presidente del
Circuito Carrera de la Mujer; la directora de orquesta
y madrina de la carrera, Inma Sara; el alcalde de la
ciudad, Patxi Lazcoz, quien recordó que el cáncer de
mama afecta cada año a cien alavesas; la concejala de
Deporte, Maite Berrocal; el vicerrector de la Universidad,
Joan Sallés y representantes, entre otros, de la
Caja Vital, del Colegio de Farmacéuticos de Álava de
Álava, y de El Corte Inglés, una de las empresas colaboradoras
-junto con Central Lechera Asturiana, principal
patrocinador de esta cuarta edición-, desde donde
se distribuyeron los dorsales. El Ayuntamiento suscribió
previamente, en mayo, un convenio con la Federación
Alavesa de Atletismo, entidad organizadora
del evento, en Vitoria, comprometiéndose a subvencionar
los gastos de estas actividades hasta un máximo
de 30.000 euros.
ARIZNABARRA CUENTA
SU HISTORIA
Javier Irazabal
La sensación era la de estar viviendo un pasado
en presente. Estaban allí decenas de
los primeros residentes del barrio, algunos
protagonistas de las fotografías expuestas
y otras personas vinculadas a la historia de Ariznabarra.
Era una oportunidad singular para el
reencuentro y para la nostalgia. Un regreso a
un pasado ya lejano, plagado de dificultades y
de ilusiones; los tiempos de la inmigración y del
nacimiento apresurado de un barrio -como el
de otros muchos de la capital alavesa- generado
por el importante incremento demográfico
de Vitoria de mediados del pasado siglo; momentos
que sellaron convivencias imborrables
y profundas solidaridades, junto a sentimientos
de pertenencia y vinculación a un lugar y a un
colectivo social.
Era lunes, 26 de mayo. Al encuentro asistía
también el teniente de alcalde, Juan Carlos
Alonso. Faltaba una semana para la clausura de
la exposición fotográfica Ariznabarra. Barrios de
Vitoria-Gastez, que desde el 23 de mazo se exhibía
en Espacio Ciudad, Centro de Arquitectura
y Urbanismo para la Ciudad contemporánea,
de la calle San Prudencio, con una selección
de 24 imágenes que recordaban el aspecto que
presentaba el barrio y sus zonas adyacentes desde
1917 hasta la finalización de la primera etapa
constructiva en 1968.
Aunque estaba organizada conjuntamente
por este centro y por el Archivo Municipal Pilar
Arostegui, la muestra se había gestado tiempo
atrás en el Centro Sociocultural de Mayores
Ariznabarra, lugar de reunión de algunos de los
primeros pobladores del barrio. Querían contar
su historia a través de fotografías a sus propios
convecinos. En colaboración con el Archivo
Municipal, una comisión del Centro Sociocultural
de Mayores realizó la selección de fotografías
y documentación. La exposición se exhibió
en 2007 en el propio centro y, posteriormente,
en 2008, en Espacio Ciudad, donde estuvo
abierta hasta el día 1 de junio, tras haber
ampliado su plazo ante el éxito obtenido. Las
instantáneas de esta muestra han quedado recogidas
en una sencilla publicación, editada por
el Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz.
QUINTAS
Javier Otaola *
El uso no clínico del término fobia
se viene aplicando para señalar y
denunciar actitudes de temor, disgusto,
desaprobación, prejuicio, odio,
discriminación u hostilidad contra el
objeto de la fobia cuando esas actitudes
se basan en prejuicios, presupuestos
irracionales que no admiten argumentos
en contrario o adoptan perfiles
desproporcionados. Dado el carácter
prejuicioso e irracional de las fobias,
se pueden producir prácticamente
contra cualquier persona o grupo de
personas, así: judeofobia, cristianofobia,
homofobia, islamofobia, xenofobia.
Naturalmente no todo juicio crítico
es síntoma de un comportamiento
fóbico, pero sí todas aquellas declaraciones
o conductas que menosprecian
derechos humanos, hacen apelación a
factores irracionales o se limitan a alimentar
el odio entre las personas.
Odio y criminalización
En 1936, el SS Reichsfuhrer Heinrich
Himmler creó la Oficina Central para
Combatir la Homosexualidad y el Aborto,
que en su celo perseguidor llegó a
detener a unas 100.000 personas, de
HOMOFOBIA
ALREDEDOR DE 80 PAÍSES CRIMINALIZAN, TODAVÍA
HOY, LA HOMOSEXUALIDAD Y 9 MANTIENEN
LA PENA DE MUERTE PARA ESTOS CASOS
Las conductas homófobas alimentan
una cultura del odio
y lesionan los derechos humanos
fundamentales
las cuales 50.000 fueron condenadas
por el supuesto delito de homosexualidad.
Algunas de esas personas fueron
condenadas a penas de cárcel, otras
fueron castradas y algunos millares fueron
enviadas a los campos de concentración
donde fueron exterminadas
junto con judíos, gitanos y otras minorías
perseguidas.
Es proverbial el odio que han demostrado
también contra las personas
homosexuales el régimen soviético, el
castrismo cubano o el comunismo chino.
En el caso de Cuba tenemos el terrible
testimonio de Reinaldo Arenas y su
magnífica autobiografía, Antes de que
anochezca.
El Día Internacional contra la Homofobia
y Transfobia se celebra el 17 de
mayo coincidiendo con la eliminación
en 1990 de la listas de enfermedades
mentales por parte de la Asamblea General
de la Organización Mundial de la
Salud (OMS) de la homosexualidad y la
transexualidad.
Sin embargo, todavía hoy, alrededor
de 80 países en el mundo criminalizan
la homosexualidad y condenan
los actos sexuales entre personas adultas
del mismo sexo con penas de prisión.
Nueve de estos países (Afganistán,
Irán, Mauritania, Nigeria, Pakistán,
Arabia Saudí, Emiratos Árabes y Yemen)
mantienen para estos casos la pena de
muerte (¡¡¡)
Condenas y jurisprudencia
El Comité de Derechos Humanos de
Naciones Unidas ha condenado repetidamente
la discriminación basada en
la orientación sexual y la identidad de
género. En el mismo sentido, en el año
2006, ante el Comité de Ciudades y
Regiones del Consejo de Europa, algunos
de los principales países del Consejo
(Reino Unido, Eslovaquia, Francia,
Austria, Suecia, Turquía, Rumania y
Alemania) presentaron y suscribieron
una moción declarando el papel central
que pueden jugar las autoridades
locales en la promoción y defensa de
los derechos fundamentales de reunión
y expresión de lesbianas, gays, bisexuales
y transexuales en el conjunto de los
países miembros del Consejo de Europa.
En este sentido cabe decir que el
Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz ya fue
pionero en su día con el Registro de parejas
de hecho y con la creación del servicio
municipal de Información y asistencia
para lesbianas, gays y entorno.
La jurisprudencia del la Corte Europea
de Derechos Humanos ha sido
esencial en la lucha legal contra todo
tipo de discriminación basada en la
orientación sexual desde el caso-guía
Dudgeon (1981).
Como declaraba el Secretario General
del Consejo de Europa, Terry Davis,
en su artículo Odio, hipócritas y derechos
humanos (2007), “la Democracia,
los derechos humanos y el imperio
de la ley no pueden funcionar en
una sociedad que tolera el fanatismo
(bigotry), el prejuicio y el odio. Si continuamos
mirando hacia otro lado, una
explosion de violencia homofóbica es
sólo cuestión de tiempo. Es por eso que
debemos terminar con la hipocresía del
silencio y dejar de considerar las actitudes
homófonas como una simple excentricidad
cultural”
Prejuicios
Los prejuicios que sostienen la homofobia
son culturales y limitados en el
tiempo y en el espacio, ya que no se
han dado universalmente; de hecho, la
cultura greco-latina clásica desconocía
la homofobia.
Las teorías psicológicas y sociológicas
para explicar los prejuicios en general
son controvertidas y van desde
las teorías psicoanalíticas que señalan
que se teme conscientemente lo que
inconscientemente se desea pero se reprime,
hasta las teorías de la identidad
social o a las estrategias de reducción
de la incertidumbre.
En cualquier caso, más allá de las explicaciones
académicas en torno al prejuicio
homofóbico tenemos que plantear
la cuestión relativa al derecho a la igualdad
y a la no discriminación y la protección
de la esfera de la autonomía personal
como cuestiones de índole cívica y
política que exigen una actitud proactiva
de las instituciones frente a las conductas
homófobas, que no pueden minusvalorarse
por cuanto alimentan una
cultura del odio y son lesivas de derechos
humanos fundamentales.
* Javier Otaola es Síndico – Defensor Vecinal de Vitoria-Gasteiz.
Artículo escrito con motivo del Día Internacional de la Homofobia,
el 17 de mayo.
QUINTAS
Nº 83. Junio de 2008ko ekaina