guía para profesionales mujeres con discapacidad y violencia sexual
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casados, tener pareja y una familia estable; a veces aparentan firmes valores morales y religiosos, y pueden<br />
estar vinculados a las víctimas por relaciones de afectividad o familiaridad. El modus operandi del<br />
agresor será diferente en cada caso.<br />
Según la edad de la víctima distinguimos entre Violencia Sexual a Menores, que entrañaría cualquier<br />
<strong>con</strong>tacto <strong>sexual</strong> <strong>con</strong> un/a menor desde una posición de poder o autoridad, y Violencia Sexual a Adultas,<br />
<strong>con</strong>siderando este caso el límite de la mayoría de edad: 18 años. Basándonos en los estudios realizados<br />
por la Asociación AMUVI de Asistencia a Víctimas de Agresiones Sexuales de Andalucía (Sepúlveda, Millán,<br />
1998, 1999), las agresiones esporádicas o puntuales tienen mayor frecuencia en edades comprendidas<br />
entre los 18 y los 25 años, así como en los intervalos de edad anterior y posterior. Las agresiones reiteradas<br />
a lo largo de más o menos tiempo las sufren más frecuentemente las niñas menores de 12 años.<br />
Las <strong>mujeres</strong> mayores de 40 años proporcionalmente reciben menos agresiones <strong>sexual</strong>es.<br />
Otro elemento determinante es la relación entre la víctima y el agresor; pueden ser agresiones o abusos<br />
<strong>sexual</strong>es realizadas por personas des<strong>con</strong>ocidas, recientemente <strong>con</strong>ocidas, o <strong>con</strong>ocidas. La Violencia<br />
Sexual perpetrada por <strong>con</strong>ocidos es la más frecuente, pero la que menos se denuncia, el agresor puede<br />
ser amigo, compañero de trabajo, cónyuge, pareja, excónyuge o familiar, y en el caso de las <strong>mujeres</strong> <strong>con</strong><br />
<strong>discapacidad</strong> de gran dependencia, frecuentemente su propio cuidador. Dentro de la relación familiar<br />
podemos hablar de la figura del INCESTO, <strong>con</strong>siderado como «el <strong>con</strong>tacto físico <strong>sexual</strong> entre personas<br />
que tengan relación de <strong>con</strong>sanguinidad». La relación de <strong>con</strong>sanguinidad de la víctima <strong>con</strong> el agresor<br />
puede ser lineal (padre, abuelo...) o colateral (tío, sobrino..). También se incluye el caso en el que el adulto<br />
está cubriendo de manera estable el rol parental (padres adoptivos, padrastros...).<br />
La falta de <strong>con</strong>sentimiento o la existencia de un <strong>con</strong>sentimiento no válido, por parte de la víctima, es el<br />
elemento esencial en la <strong>violencia</strong> <strong>sexual</strong>, <strong>con</strong> base en ello existen una serie de <strong>con</strong>ductas y/o circunstancias<br />
en las agresiones <strong>sexual</strong>es, que dan lugar a distintas manifestaciones:<br />
– Según el tipo <strong>con</strong>ducta <strong>sexual</strong>: (1) Con penetración: vaginal, anal, bucal; (2) Sin penetración: <strong>con</strong>ductas<br />
como caricias, tocamientos, masturbación.....);<br />
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