10.A MODO DE CONCLUSIÓN: EL SECUESTRODE LAS DEMANDAS QUE CAUTIVANLas agrupaciones y colectivos que participan en elDepartamento <strong>de</strong> Jóvenes reflexionan que no haymucho que hacer en el campo político; pero, si ahíven algo que pueda servirles en su accionar comoorganización, investigarán los canales y gestionaránlos recursos necesarios para conseguirlo. Lo anteriortiene un previsible efecto social, que es que la<strong>de</strong>manda <strong>de</strong> ciertas agrupaciones se estructura a partir<strong>de</strong> aquello que la política pública pue<strong>de</strong> ofrecerles.Constituyen <strong>de</strong>mandas que cautivan al po<strong>de</strong>r públicopues se a<strong>de</strong>cúan fácilmente a los objetivos que seproponen. Y, con ello, se convierten en <strong>de</strong>mandasatrapadas en la oferta.Las <strong>de</strong>mandas cautivas son <strong>de</strong>mandasconcretas y factibles, funcionales a las políticas<strong>de</strong> gestión que construyen y organizanpriorizando para cada actividad un espacio.Las agrupaciones y colectivos respon<strong>de</strong>n ala percepción que su accionar es problemáticoy, por tanto, se constituyen en prioridadpara la política local. Los jóvenes queempren<strong>de</strong>n este tipo <strong>de</strong> <strong>de</strong>mandas constituyenel correlato visible entre los discursos<strong>de</strong> i<strong>de</strong>ntidad presentes en la acción juvenil<strong>de</strong> proyecto, y el discurso prefigurado por elpo<strong>de</strong>r político <strong>de</strong>l joven <strong>de</strong> hoy.El carácter <strong>de</strong> la <strong>de</strong>manda impulsadapor el movimiento estudiantil es distinto.La <strong>de</strong>manda <strong>de</strong> los estudiantes secundariosha <strong>de</strong>jado <strong>de</strong> movilizarse haciaun problema político para retornar a sucarácter netamente educativo y sectorial.No tenemos muchas dudas al afirmarque la <strong>de</strong>manda «por una educaciónpública, gratuita y <strong>de</strong> calidad» no pertenecemás a los estudiantes secundarios,siendo cooptada por el po<strong>de</strong>r público. Lapresión política ejercida para neutralizarlas dos primeras partes y focalizar las respuestasen la <strong>de</strong>manda por mejor calida<strong>de</strong>n la educación, evi<strong>de</strong>ncia el secuestro.La neutralización <strong>de</strong>l estado <strong>de</strong> crisisgenerado por los estudiantes duranteel año 2006 ha posibilitado el accionar<strong>de</strong> políticas <strong>de</strong>stinadas a acotar aúnmás los espacios <strong>de</strong> acción juvenil: el formateo<strong>de</strong> la <strong>de</strong>manda <strong>de</strong> los nuevos centros<strong>de</strong> alumnos, la <strong>de</strong>slegitimación <strong>de</strong>sus instancias <strong>de</strong> organización, así comoel cumplimiento —en parte— <strong>de</strong> las <strong>de</strong>mandas<strong>de</strong> corto plazo, han quitado elpiso para que se generen críticas potentes.Incluso el hecho <strong>de</strong> que la discusiónsobre temáticas educativas esté permanentementeen la palestra mediática, estambién una forma <strong>de</strong> promover la i<strong>de</strong>a<strong>de</strong> que se hacen cosas al respecto y queno es necesario la movilización social.Los jóvenes <strong>de</strong> hoy han <strong>de</strong>sarrolladoen el camino estrategias particularespara enfrentar el mundo que se lespresenta. Algunos <strong>de</strong> sus itinerarios parecenrespon<strong>de</strong>r a los estereotipos elaborados<strong>de</strong>s<strong>de</strong> el po<strong>de</strong>r político, la sociedadcivil y los medios <strong>de</strong> comunicación;tanto es así que muchas acciones juvenilesrespon<strong>de</strong>n reflejando en un gradoimportante dichas miradas.Estos mismos jóvenes tienen hoyotras vivencias, lo que los lleva también aabrir nuevos espacios <strong>de</strong> participación enel mundo que viven y, como consecuencia,a agruparse bajo otros estandartes.Fuertemente conectados con la industriacultural, la juventud <strong>de</strong> hoy imprime ensus itinerarios otra ética, estética y política,aunque parece que los conflictos queviven no son muy diferentes que los vividospor generaciones previas, aunqueposiblemente éstos sean más radicales.La reflexión toma sentido como problemacuando la intención es imaginarcaminos don<strong>de</strong> coincidan los mapas cognitivos<strong>de</strong> los distintos actores con los iti-48 CIDPA | <strong>Ibase</strong> | Pólis
nerarios juveniles, y construir así una políticapública a<strong>de</strong>cuada a las vivencias ytránsitos <strong>de</strong>l joven <strong>de</strong> hoy.Abordar las situaciones tipo <strong>de</strong>s<strong>de</strong>los discursos que la juventud elabora,ya sea sobre su propia situación, sobreel resto <strong>de</strong> los actores involucrados,o acerca <strong>de</strong>l entorno que viven, invita areflexionar en la pertinencia <strong>de</strong> una Política<strong>de</strong> Juventud que privilegie la correlaciónteórica y práctica entre itinerariosjuveniles y los mapas conceptuales <strong>de</strong>lresto <strong>de</strong> los actores .Una política que efectivamente respondaa las necesida<strong>de</strong>s, intereses y, sobretodo,a los tiempos juveniles. Unacosa son los mapas que se elaboran, otrason los itinerarios juveniles, la Política <strong>de</strong>Juventud <strong>de</strong>biera ser un tercer elemento,actuar como mediador crítico, trabajarcomo instrumento fundamental en laconstrucción <strong>de</strong> mapas lo más fi<strong>de</strong>dignosposibles a la geografía nacional.VALPARAÍSO (CHILE),18 DE OCTUBRE DE 2007<strong>Informe</strong> <strong>Nacional</strong> <strong>de</strong> <strong>Chile</strong>49