Alcide d'Orbigny y Esteban Echeverría - Estudios – Revista de ...

víctimas sangrientas inmoladas en Haití a causa de vuestros furores; ¿no osbastan, digo, o aún queréis sacrificar nuevas víctimas y ver el mundo y el Africaenvueltos en nuevas calamidades y miseria? (Ibid: 336).La mención de Haitítiene como referente inmediato la política colonial francesa. Yno es improbable que toda la invocación aluda a la ya mencionada invasión en Argeliaen 1830. Esa referencia explicaría también la perspectiva de la última pregunta, abiertaal futuro. Sintomáticamente, las composiciones de Echeverría vinculadas al tema delviaje a Europa se demoran o bien en la partida, o bien en el regreso. La experienciafrancesa sinécdoque es "Europa"- sólo aparece mediatizada. Puede aducirse-suque Echeverría solamente compuso el fragmento inicial de "Peregrinaje de Gualpo",pero que evidentemente el texto proyectado aludiría más adelante a esa experiencia. Elhecho es que Echeverría abandonó el proyecto. El ámbito en el que localizaría suspoemas de ahí en adelante, sería el más cercano; era también el que más lo preocupabay ocupaba32.3. NuestromáspingüepatrimonioEs el caso de La Cautiva, una contrapropuesta al topos de la huida del héroeromántico a una naturalezaexótica33. La topografía del poema es la zona de contacto yde conflicto entre la naciente civilización, representada por Brián y María,la parejablanca que huye de los indios, y las fuerzas salvajes del desierto. como señala JeanFranco, los topoi del romanticismo europeo aparecen aquí invertidos (1990; 6lss.). Lanaturaleza no ofrece a la pareja un refugio que la ponga a salvo de los males de lacivilización, sino que, por el contrario, la amenaza con peligros mortales. Noé Jitrikobserva que Brián y María adoptan siempre ante la naturalezaque los rodea un punto33Sin duda Echeverría captó con lucidez las tendencias románticas europeas y sus posibilidades para lafundación de una literatura argentina, pero la experiencia de la monarquía francesa hizo que no volvieraa Buenos Ai¡es deslumbrado, sino cuidadoso de las posibilidades y las limitaciones de la culturaeuropea que había conocido."El Desierto" escribe Echeverría en la Advertencia preliminar al poema, "es nuestro, es nuestromás pingüe patrimonio, y debemos poner conato en sacar de su seno, no sólo riqueza paranuestro engrandecimiento y bienestar, sino también poesía para nuestro deleite moral y fomentopara nuestra literatura nacional" (1972:45 1). El programa político y literario de la Generacióndel'37 a la que Echeverría pertenece junto con Alberdi, Sarmiento, Gutiérrez, Mármol, estáorganizado, en buena medida, en torno a esa imagen del desierto: Desierto es Argentina comoun espacio ahistórico, en el que el pasado colonial no ha dejado huellas, y como naturalezaamenazante en la que dominan las fuerzas del caos. Desierto no es aquí una región árida ensentido geográfico: es la región habitada por los indios. En este sentido, el desierto debe ceder,pero como "nuestro más pingüe patrimonio" debe ser incorporado a la literatura en tanto símbolode la identidad argentina (Altamirano y Sarlo, l99l: XIV ss.).57