You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
“Cada uno <strong>de</strong> los movimientos <strong>de</strong> todos los individuos se realizan por tres únicas razones: por honor, por dinero o por amor” (NAPOLEÓN BONAPARTE)<br />
Los libreros<br />
y viajes al Centro<br />
Cuando a uno le gusta leer es capaz <strong>de</strong> convertirse<br />
en un arqueólogo en busca <strong>de</strong> tesoros. Esos<br />
tesoros que llamamos libros y son verda<strong>de</strong>ros<br />
portales para otros mundos. El <strong>de</strong>talle es que<br />
para el resto <strong>de</strong> personas que no les agrada leer somos<br />
consi<strong>de</strong>rados “seres extraños”. Quizá tengan razón, quizá.<br />
Mientras crecía no me preocupé tanto por encontrar libros,<br />
en esas eda<strong>de</strong>s <strong>de</strong> <strong>de</strong>scubrimientos los estantes <strong>de</strong> las casas<br />
<strong>de</strong> mis abuelos eran suficientes. Sin embargo, al crecer la<br />
historia trajo nuevas aventuras.<br />
La curiosidad creció conforme fui <strong>de</strong>scubriendo que la<br />
biblioteca <strong>de</strong> casa se quedaba corta, y <strong>de</strong> que el mundo <strong>de</strong><br />
los libros era inmensamente ancha. Incluso resultó todo<br />
un impacto el día en que Evelyn Pastori me obsequió una<br />
antología <strong>de</strong> Rubén Darío y un libro <strong>de</strong> Gustavo Adolfo<br />
Becquer. El primero lo conocía, mi mamá recitaba algunos<br />
<strong>de</strong> sus poemas, pero <strong>de</strong> Becquer no sabía nada.<br />
Al superar la adolescencia el nombre <strong>de</strong> autores comenzó<br />
a <strong>de</strong>sbordarse, eran cientos <strong>de</strong> apellidos que jamás había<br />
pronunciado y aquel trío que nos guío en el mundo literario<br />
(Geovani Galeas, Carlos Santos y Ricardo Lindo) compartió<br />
sus tesoros. Galeas me hizo conocer a Jorge Luis Borges y a<br />
Arturo Pérez Reverte, don Ricardo nos compartió a Herman<br />
Melville, mientras que Santos me <strong>de</strong>jó su biblioteca al<br />
marcharse <strong>de</strong> nuevo a Canadá. Así que los libros comenzaron<br />
Bitácora<br />
MAURICIO VALLEJO MÁRQUEZ<br />
COORDINADOR<br />
SUPLEMENTO TRES MIL<br />
a inundar mis horas, pero se fueron haciendo pocos y el<br />
hambre por más autores no se saciaba.<br />
Las librerías no siempre tienen los autores que uno busca,<br />
aunque a veces nos ofrecen buenas opciones. Un día en<br />
medio <strong>de</strong> esas incansables búsquedas me encontré con<br />
un manantial en pleno Centro <strong>de</strong> San Salvador: don Jesús<br />
Villegas, o como le llamamos todos sus clientes don<br />
Chusito, el dueño <strong>de</strong> la Segunda Lectura, quien se hizo mi<br />
principal proveedor. Don Chusito no sólo me conseguía los<br />
libros que yo buscaba, también me recomendaba narradores,<br />
ensayistas. El hombre sabía <strong>de</strong> libros. A veces me escapaba<br />
<strong>de</strong>l trabajo por unos <strong>30</strong> minutos para escarbar entre las pilas<br />
<strong>de</strong> libros y polvo, y pesqué buenas obras y más <strong>de</strong> alguna<br />
alergia. Con el tiempo ya no he vuelto a la Segunda Lectura,<br />
pero siempre recomiendo a la gente que lo visite. Espero<br />
pronto bajar hasta allá, quizá el pueda ayudarme a conseguir<br />
La mancha humana <strong>de</strong> Phillip Roth y algún libro <strong>de</strong> Toni<br />
Morrison.<br />
Claro que no todo está perdido, porque ahora existen jóvenes<br />
libreros y poetas que me sacan <strong>de</strong> apuros como el caso <strong>de</strong><br />
Alberto López Serrano y Wally Romero <strong>de</strong>s<strong>de</strong> Maktub,<br />
quienes siempre tienen alguna sorpresa bajo la manga.<br />
Así que no <strong>de</strong>jamos <strong>de</strong> leer. Aunque, como dice Carlos<br />
Fuentes no logremos leer todo lo queramos en esta vida,<br />
seguiremos leyendo un buen rato más.<br />
@vallejomarquez<br />
vallejomarquez.blogspot.com<br />
Mauricio Vallejo Márquez<br />
Un crimen y una equivocación: Chivo expiatorio<br />
E<br />
n el libro Memorias <strong>de</strong> Fouché<br />
1759-1820 se relata el siguiente<br />
evento durante la consolidación<br />
<strong>de</strong>l imperio napoleónico (fragmentos):<br />
“es preciso aterrorizar o perecer” –Napoleón<br />
Bonaparte-… “Supe al día siguiente<br />
que <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> mi partida se había celebrado<br />
consejo, y que durante la noche<br />
Savary había procedido a la ejecución<br />
<strong>de</strong>l <strong>de</strong>sgraciado príncipe. Se hablaba <strong>de</strong><br />
circunstancias atroces. Savary se había<br />
resarcido, según <strong>de</strong>cían, <strong>de</strong> que se le<br />
hubiese escapado su presa en Normandía,<br />
don<strong>de</strong> tuvo la ilusión <strong>de</strong> atraer al cepo,<br />
mediante los hilos <strong>de</strong> la conspiración <strong>de</strong><br />
Cadoubal, al duque <strong>de</strong> Berry y al con<strong>de</strong><br />
<strong>de</strong> Artois, a quienes hubiese sacrificado<br />
<strong>de</strong> más buena gana que al duque <strong>de</strong><br />
Enghien. Réal me aseguró que él lo cogió<br />
tan <strong>de</strong> sorpresa la ejecución nocturna,<br />
que a la mañana siguiente había ido a<br />
Vincennes, esperando llevar al príncipe<br />
a la Malmasion, imaginándose que el primer<br />
cónsul acabaría este gran negocio <strong>de</strong><br />
un modo magnánimo. Pero a Bonaparte<br />
le pareció indispensable aquel golpe <strong>de</strong><br />
Estado para atemorizar Europa y <strong>de</strong>struir<br />
todos los gérmenes <strong>de</strong> conspiración<br />
contra su persona. La indignación que<br />
yo había previsto estalló <strong>de</strong>l modo más<br />
sangriento. No fui yo, por cierto, quién<br />
expresó con menos paliativos sobre este<br />
atentado, que atropellaba el <strong>de</strong>recho <strong>de</strong><br />
Como hijo <strong>de</strong> pobre<br />
“<br />
Como hijo <strong>de</strong> pobre” se titula una popular<br />
prosa <strong>de</strong>l escritor, periodista y empresario<br />
uruguayo Constancio C. Vigil (1876-1954),<br />
fecundo responsable <strong>de</strong> medio centenar <strong>de</strong> libros,<br />
<strong>de</strong>dicados a los niños, y exitoso fundador <strong>de</strong> la<br />
Editorial Atlántida, que tantas revistas produjo,<br />
entre ellas, la muy apreciada “Billiken” (1919).<br />
Dos personajes extraordinarios nacieron <strong>de</strong> la<br />
pluma y <strong>de</strong> la imaginación inagotable <strong>de</strong> Vigil:<br />
“El mono relojero” y “La hormiguita viajera”,<br />
que hicieron la <strong>de</strong>licia <strong>de</strong> generaciones <strong>de</strong><br />
pequeños lectores.<br />
La composición citada, la conocí, en la infancia,<br />
gracias al celo <strong>de</strong> mis padres, que no sólo me<br />
la hicieron memorizar y recitar, sino colocar<br />
en un lugar <strong>de</strong>l comedor <strong>de</strong> la antigua casa <strong>de</strong><br />
San Salvador. Decía el referido texto: “Es<br />
absolutamente necesario que se comprenda el<br />
error <strong>de</strong> aquellos padres que se proponen darle<br />
al hijo felicidad, como quien da un regalo.<br />
Lo más que se pue<strong>de</strong> hacer es encaminarlo<br />
hacia ella, para que él la conquiste. Difícil,<br />
casi imposible, será <strong>de</strong>spués. Cuanto menos<br />
trabajo se tomen los padres en los primeros<br />
años, más, muchísimo más, tendrán en lo futuro.<br />
Habitúalo, madre, a poner cada cosa en su sitio,<br />
y a realizar cada acción a su tiempo. El or<strong>de</strong>n<br />
es la primera ley <strong>de</strong>l cielo. Que no esté ocioso,<br />
que lea, que dibuje, que trabaje, que te ayu<strong>de</strong><br />
en alguna tarea, que se acostumbre a ser atento<br />
las naciones y <strong>de</strong> la humanidad. “¡Es<br />
doble mal, porque es un crimen y una<br />
equivocación!” Memorias <strong>de</strong> Foché<br />
/ Joseph Fouché España: Desván <strong>de</strong><br />
Hanta, 2015 pág 175<br />
El relato nos recuerda la guerra civil<br />
<strong>de</strong> los años ochenta en nuestra nación,<br />
con tal fuerza que el asesinato <strong>de</strong> los<br />
sacerdotes jesuitas parece reproducir<br />
Intimissimun<br />
CARALVÁ<br />
FUNDADOR<br />
SUPLEMENTO TRES MIL<br />
aquellas escenas <strong>de</strong>l imperio napoleónico,<br />
ese evento trágico continuará por<br />
generaciones, como un símbolo <strong>de</strong> “un<br />
crimen y una equivocación” como lo<br />
afirmó Foché. Durante la historia <strong>de</strong> la<br />
humanidad existen acciones similares<br />
que fácilmente se pue<strong>de</strong>n encontrar con<br />
un poco <strong>de</strong> voluntad e investigación<br />
histórica.<br />
Los académicos actuales usan el concepto<br />
<strong>de</strong> “Chivo expiatorio” así: “se utiliza<br />
la expresión para <strong>de</strong>nominar a aquél que<br />
ha pagado las culpas <strong>de</strong> otra persona o<br />
y servicial. Deja algo en el suelo para que él<br />
lo recoja; incítalo a limpiar, arreglar, cuidar,<br />
o componer alguna cosa, que te alcance<br />
ciertos objetos que necesites; bríndale, en<br />
fin, las oportunida<strong>de</strong>s para que emplee sus<br />
energías, su actividad, su voluntad, y lo hará<br />
con placer. Críalo como hijo <strong>de</strong> pobre, y lo<br />
enriquecerás; críalo como hijo <strong>de</strong> rico y lo<br />
empobrecerás para toda la vida”.<br />
Y bajo estos preceptos transcurrió mi<br />
educación y crianza. A pesar <strong>de</strong> provenir<br />
<strong>de</strong> un hogar don<strong>de</strong> jamás<br />
Claraboya<br />
ÁLVARO DARÍO LARA<br />
ESCRITOR Y POETA<br />
faltó lo necesario, pues<br />
mi padre fue siempre un profesional y<br />
funcionario <strong>de</strong> gobierno, muy trabajador y<br />
<strong>de</strong>dicado al ámbito familiar, rara vez se me<br />
prodigó en exceso. Mis padres trataron, en<br />
lo posible, <strong>de</strong> inculcarme (como se <strong>de</strong>cía<br />
antes) el valor <strong>de</strong>l or<strong>de</strong>n, el aseo y la bondad<br />
<strong>de</strong> levantarse temprano para empren<strong>de</strong>r las<br />
tareas diarias.<br />
Juguetes, diversiones, entretenimientos,<br />
grupo, librando a estos <strong>de</strong> represalias.<br />
También es posible que la persona víctima<br />
<strong>de</strong> éste fenómeno termine mintiendo su<br />
efectiva responsabilidad para aliviar la<br />
situación pidiendo una especie <strong>de</strong> perdón<br />
o porque recibió una amenaza coactiva,<br />
lo que a veces la empeora y hace difícil<br />
encontrar la verdad confundiéndose a la<br />
víctima como victimario. En Sociología,<br />
el término se utiliza para <strong>de</strong>signar a una<br />
persona o grupo por el cual los más<br />
afectados por la frustración redirigen su<br />
agresión. Un chivo expiatorio también es<br />
conocido como Cabeza <strong>de</strong> turco” –wikipedia-.<br />
El proceso contra los militares salvadoreños<br />
involucrados en ese procedimiento,<br />
no escapa al juicio <strong>de</strong> la historia, algunos<br />
libros incluso parecen <strong>de</strong>velar esa situación:<br />
“nuestro buen nombre y reputación<br />
<strong>de</strong>pen<strong>de</strong>n más <strong>de</strong> lo que ocultamos que<br />
<strong>de</strong> lo que revelamos. Todo el mundo comete<br />
errores, pero quienes son realmente<br />
hábiles y sagaces se las arreglan para<br />
ocultarlos y hacer que otros carguen con<br />
la culpa. En tales momentos, siempre se<br />
<strong>de</strong>biera tener a mano un oportuno chivo<br />
expiatorio”. Po<strong>de</strong>r /Robert Greene. Buenos<br />
Aires: Atlántida, 1999. – pág 259<br />
Fe <strong>de</strong> errata:<br />
El sábado anterior se tituló esta columna por error:<br />
“Histeria <strong>de</strong> amor árabe-cristiano”, siendo lo correcto:<br />
“Historia <strong>de</strong> amor árabe-cristiano”. Solicitamos favor<br />
<strong>de</strong> tomar nota.<br />
nunca me fueron negados. Pero siempre,<br />
bajo el criterio que en el mundo existían<br />
personas menos afortunadas, a quienes<br />
<strong>de</strong>bíamos apoyar, volviendo su vida<br />
menos difícil.<br />
Por otra parte, se me estimuló el trabajo,<br />
en alguna temporada navi<strong>de</strong>ña; y<br />
luego, al alcanzar los dieciocho años,<br />
hice mi ingreso laboral, en forma.<br />
La experiencia fue enriquecedora, no<br />
sólo por el <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong>l sentido <strong>de</strong><br />
seguridad personal y <strong>de</strong> autonomía, sino<br />
por todas las buenas prácticas sociales e<br />
individuales que el trabajo genera.<br />
Es lamentable, que en la actualidad,<br />
pongamos exageradas cortapisas –<br />
institucionales o laborales- para que<br />
los niños y los jóvenes tengan reales<br />
oportunida<strong>de</strong>s salariales. El trabajo educa<br />
y dignifica.<br />
Por <strong>de</strong>sgracia, el mal uso <strong>de</strong> las remesas<br />
-enviadas con tanto sacrificio- y el<br />
peligroso facilismo <strong>de</strong> las activida<strong>de</strong>s<br />
<strong>de</strong>lictivas, están perdiendo a nuestra<br />
juventud, alejándola <strong>de</strong> la vida honrada,<br />
que construye esforzadamente su<br />
presente y porvenir.<br />
Urge, que como país y como familia,<br />
pongamos <strong>de</strong> moda, nuevamente, el amor<br />
al trabajo; volviendo a una formación<br />
más realista, como <strong>de</strong>cía don Constancio<br />
C. Vigil.<br />
El único suplemento cultural<br />
<strong>de</strong> El Salvador<br />
2 TRESMIL Sábado <strong>30</strong> / enero / <strong>2016</strong><br />
Director Diario Co Latino: Francisco Valencia.<br />
Coordinador: Mauricio Vallejo Márquez.<br />
Colaboradores: Caralvá, José Roberto Cea, Augusto Crespín, Julio Iraheta<br />
Santos, Álvaro Darío Lara, Tirso Canales, Luis Antonio Chávez, Rob Escobar,<br />
Elvis Aviv Guzmán, Wilfredo Arriola y Bilal Arif Portillo. Armando Molina (San<br />
Francisco), Dora Olivia Magaña (Los Ángeles), Rafael Lara-Martínez (Nuevo<br />
México), Manuel Iris (Cincinatti), Alfonso Velis-Tobar (Canadá), Perla Rivera Núñez<br />
(Honduras) y Edgar Quisquinay (Guatemala).<br />
Suplemento Cultural <strong>30</strong>00 fue fundado el 24 <strong>de</strong> marzo <strong>de</strong> 1990 por Gabriel<br />
Otero y Caralvá. Durante 25 años lo han coordinado en diferentes periodos<br />
Gabriel Otero, Caralvá, Walter Raudales, Otoniel Guevara (2) , Luis Alvarenga,<br />
Álvaro Darío Lara, Colectivo Coordinador* y Mauricio Vallejo Márquez.<br />
* Salvador Juárez, Roberto Quezada, Mario Castrillo, Luis Alvarenga, José Roberto Cea y Mauricio Marquina<br />
Toda colaboración <strong>de</strong> artículos, cuentos, ensayos, poesía, ilustración, pintura y fotografía<br />
pue<strong>de</strong> enviarse al correo electrónico: suplemento<strong>30</strong>00@gmail.com