REVISTA PESCA NOVIEMBRE 2016
La revista Pesca es un medio de información alternativo referido a temas del mar y de la pesquería. Difunde información obtenida de muchas fuentes, ideas y opiniones que tienen por objeto exponer: la necesidad de hacer sostenible la extracción de los recursos marinos; la urgencia de actuar en beneficio de la seguridad alimentaria nacional; y el cuidado del ambiente
La revista Pesca es un medio de información alternativo referido a temas del mar y de la pesquería. Difunde información obtenida de muchas fuentes, ideas y opiniones que tienen por objeto exponer: la necesidad de hacer sostenible la extracción de los recursos marinos; la urgencia de actuar en beneficio de la seguridad alimentaria nacional; y el cuidado del ambiente
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
EDITORIAL<br />
Eventualmente se hacen públicas algunas denuncias o se difunden noticias relacionadas con la pesca; pero en términos<br />
generales, una vez pasado el impacto mediático, se olvida el asunto y no pasa nada que genere un cambio. Este tipo de<br />
información coyuntural no surte efecto práctico y real de cambio para mejorar las cosas, simplemente crea impactos temporales<br />
que son rápidamente olvidados.<br />
La ciudadanía peruana no pesquera, no tiene posibilidad de incrementar su conocimiento e información sobre la pesquería,<br />
en gran parte debido a la ausencia de información; pero también por desinterés ya que no tiene motivación para preocuparse<br />
por el mar y la pesca.<br />
Las autoridades políticas tampoco evidencian conocimiento suficiente sobre esta materia como para asumir su administración<br />
en forma eficaz. Por otro lado cambian demasiado frecuentemente y los planes de trabajo duran poco, se descontinúan<br />
y/o se inventan nuevos sin respetar los existentes.<br />
El manejo político de la gestión pesquera es sensacionalista y cortoplacista, busca figurar en la foto mientras dure el<br />
mandato, el cual es generalmente más corto que el gobierno mismo. Basta con echar una mirada a la cantidad de ministros<br />
y viceministros designados en los últimos 10 años, para darse cuenta del daño que le hace al sector la excesiva rotación<br />
de funcionarios. Porque cada cambio genera movimientos adicionales de personal en la estructura. Entre 2006 y<br />
<strong>2016</strong> se ha tenido 11 Ministros de la Producción y 9 viceministros de Pesquería (un promedio de uno por año).<br />
El insuficiente conocimiento sectorial sumado a la velocidad con que rotan, limita la capacidad de confección de planes de<br />
largo plazo; pero además convierte al funcionario en fácil presa de lobistas y operadores políticos que tienen agendas<br />
particulares, o de parte, orientadas a satisfacer intereses de sus empleadores. A menor conocimiento e inexistencia de<br />
políticas de largo plazo, mayor capacidad de influencia del lobista.<br />
Lo que sabemos es que el aspecto más elogiado por la prensa y alabado por los agentes económicos es la exportación.<br />
Nos han inculcado la idea de que somos buenos porque exportamos y/o pretendemos exportar mucho más. Si eso es lo<br />
mejor para el futuro alimentario del país, es discutible. Si la participación del Estado en la renta generada por la pesca y<br />
sus exportaciones es la justa, también es discutible.<br />
Deberíamos tener presente que la Constitución establece en su Artículo 66°, que los recursos naturales, renovables y no<br />
renovables, son patrimonio de la Nación. El Estado es soberano en su aprovechamiento. Por ley orgánica se fijan las<br />
condiciones de su utilización y de su otorgamiento a particulares. La concesión otorga a su titular un derecho real, sujeto<br />
a dicha norma legal.<br />
Por tanto los pescadores artesanales, los empresarios y los trabajadores de la industria no son los propietarios de los recursos<br />
pesqueros, sino la Nación. Es obligación del Estado regular las condiciones de las concesiones que otorga, priorizando<br />
el interés nacional y no los intereses de parte. El bien común de las mayorías peruanas necesitadas de proteína<br />
que puede provenir de la pesca, se antepone a las necesidades e intereses de los administrados.<br />
Aparentemente la inadecuada comprensión del mandato constitucional ha generado la errónea percepción de que existen<br />
propietarios de los recursos pesqueros, o que unos tienen más derechos que otros a su explotación. La verdad es que no<br />
es así. El único propietario es la Nación, o sea todos los ciudadanos peruanos. Nadie tiene más o menos derechos que<br />
otro. Es el Estado quien establece las reglas para su manejo y debe hacerlo ajustándose al mandato constitucional en la<br />
forma más eficiente y eficaz posible.<br />
Revista Pesca Noviembre <strong>2016</strong> 2