Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
una vez<br />
/Sangre, lata, heno, 1999.<br />
Vi a mi padre desnudo, una vez, abrí<br />
la puerta azul <strong>del</strong> baño,<br />
que él siempre trababa –si se abría, no había nada–<br />
y ahí, rodeado de brillantes cerámicas<br />
turquesas, sentado en el inodoro, estaba mi padre,<br />
todo él, y todo él<br />
era piel. En un instante, mi mirada lo recorrió<br />
de un único, súbito, limpio<br />
tirón, hacia arriba: dedos <strong>del</strong> pie, tobillo,<br />
rodilla, cadera, costilla, cuello,<br />
hombro, codo, muñeca, dedos<br />
mi padre. Se veía tan desprotegido,<br />
sin costuras, y tímido, como una nena en el inodoro,<br />
y si bien yo sabía que estaba sentado ahí<br />
para cagar, no había vergüenza,<br />
había una paz humana. Él me miró,<br />
yo dije Perdón, retrocedí, cerré la puerta<br />
pero lo había visto, mi padre un cordero esquilado,<br />
mi padre una nube en el cielo azul<br />
<strong>del</strong> baño azul, mi ojo había subido<br />
por la montaña, la ruta sinuosa <strong>del</strong><br />
hombre desnudo, había doblado la esquina,<br />
y descubierto su costado frágil – tierna<br />
barriga, borde de la cuna pélvica.<br />
Salto <strong>del</strong> Ciervo / Sharon Olds / Traducción de Natalia Leiderman y Patricio Foglia<br />
33