Desarrollo_emocional_0a3_simples
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conclusiones<br />
A modo de conclusión, queremos abrir el pensamiento, la creatividad, la participación, la invención y<br />
el compromiso de todos aquellos que se acerquen a la lectura de este documento.<br />
Y queremos puntualizar algunos aspectos del recorrido que realizamos, para jerarquizarlos, subrayarlos,<br />
con el deseo de que fertilicen el lugar y el rol que cada uno tenga para acompañar el desarrollo<br />
<strong>emocional</strong> y vincular de los primeros años de vida, prevenir los padecimientos tempranos y contribuir<br />
a una salud integral, pensando en el futuro de cada niño y de cada comunidad.<br />
Remarquemos entonces que:<br />
• La formación sobre lo esperable en el desarrollo <strong>emocional</strong> del niño permitirá acompañar y<br />
estimular el crecimiento integral.<br />
• La formación en la detección temprana de los signos de alarma de sufrimiento precoz permitirá<br />
llegar antes que las dificultades se instalen y prevenir alteraciones vinculares de mayor gravedad,<br />
generadoras de restricciones en la autonomía y la independencia.<br />
• El trabajo de promoción, prevención y asistencia solo es posible si se realiza en red, con todos<br />
los sectores que intervienen en la primera infancia (salud, educación, acción social, comunidad,<br />
recreación, etc.), dada la complejidad de los procesos que intervienen en este momento<br />
de la vida. No hay lugares hegemónicos y cada intervención requiere de la intersectorialidad y<br />
de la interdisciplinidad, de las políticas públicas y las gestiones privadas para que la equidad<br />
y el respeto por los derechos de cada sujeto sean una realidad.<br />
• Todos los niños deberían poder quedar incluidos dentro de esta mirada preventiva sobre el<br />
desarrollo <strong>emocional</strong>, de la salud integral, para no dejarlos por fuera de una oportunidad que<br />
les permita organizar mejor su futuro. No mirar, no escuchar, no intervenir frente al sufrimiento<br />
precoz implica un modo de exclusión y es responsabilidad de todos los actores comunitarios<br />
públicos o privados que esto ocurra o no.<br />
• “Cuidar cuidando” es una consigna permanente para el cuidado de todos aquellos responsables<br />
e intervinientes en la crianza de un bebé y de un niño. Es fundamental que los cuidadores<br />
primarios y los agentes comunitarios reciban el sostén y el acompañamiento en su tarea para<br />
no sentirse ni excedidos ni desolados.<br />
Es nuestro deseo, nuestra intención, que este documento genere puentes entre todos los que trabajamos<br />
en los temas vinculados al desarrollo integral de la primera infancia. Acordamos con Nelson<br />
Mandela cuando dice: “It takes a village to raise a child” (Se necesita de un sistema comunitario para<br />
criar a un niño), (Salvador Celia, citado por Gorodisch, 2003). Esperamos que este documento sea<br />
un aporte para ello porque, como dice el Dr. Bernard Golse (1999): “Invertir en los bebés tal vez sea<br />
la última utopía para tener una ciudadanía y una sociedad más sanas, menos violentas”.<br />
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