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Juegue su mejor golf
Secuencia del swing
e llevó a Adam casi
L
una década para llegar
al PGA Tour pero solo
cinco torneos para ganar. Digamos
que estaba deseoso por demostrar
que pertenecía. “Uno
nunca sabe si tiene madera
para ganar”, dice Long, “pero
ahora creo que me gané el derecho
de estar aquí, jugando con
los mejores”.
Long jugó mejor que Phil
Mickelson y Adam Hadwin para
ganar el Desert Classic en enero,
anotando una vuelta final de
65 golpes incluyendo dos chips
embocados.
“Fue una vuelta donde uno
no piensa en su swing – solo
juegas al golf”, aclaró Long.
Cuando sí piensa en su swing,
lo hace más que nada con relación
al timing y al ritmo, dice,
y se asegura de que su cadera
izquierda rote hacia atrás y alejándose
en el downswing.
“Siempre que siga en movimiento,
puedo descargar el
palo tan fuerte como quiera sin
pegar hook”, agrega. El trabajo
de Long con los instructores
Brian Fogt y Josh Gregory ha
producido un swing de driver
que combina una distancia decente
(291,2 yardas promedio)
con precisión (63 por ciento de
fairways acertados).
“Realmente no tiene puntos
débiles en su juego”, opina Gregory.
—ron kaspriske
Adam Long
Un novato en el PGA Tour
que tiene el swing de un
veterano
ABIERTO PARA LA
ESTABILIDAD
Long prepara el golpe
algo abierto a su objetivo
con el pie izquierdo, pero
sus hombros están en
escuadra, dice su profesor
Josh Gregory. “También
abre un poco sus
pies para conseguir más
estabilidad. Dos cosas
que me gustan aquí: La
posición de la bola no
está demasiado atrasada
y no tiene tanta inclinación
de la columna”.
USO DE LOS ABDOMINALES
Long está usando los abdominales
superiores para
arrancar el swing, dice
Gregory. El error de aficionado
es iniciar solo con
los brazos, lo cual fuerza
al palo hacia arriba de
manera prematura. “Los
abdominales superiores
mueven el cuerpo, los
brazos y el palo juntos”,
explica Gregory. “La sensación
para Adam es que
se está apilando sobre la
pierna y cadera derechas”.
ESTIRADO
A Gregory le gusta cómo
el brazo izquierdo de
Long permanece en el
backswing. “Al igual que
todo buen pegador de
bola, él ha mantenido
la amplitud del swing.
Un tema menor es que
la pierna derecha sigue
flexionada. Me gustaría
ver esa pierna enderezada
mientras se apila
sobre la cadera derecha,
con las manos más a lo
profundo”.
16 Golf Digest | junio 2019