Listín Diario 28-04-2024

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8 THE NEW YORK TIMES INTERNATIONAL WEEKLY
DOMINGO SÁBADO 28 27 DE ABRIL DE 2024
A R T E Y D I S E Ñ O
Escritor sobrevive a un ataque brutal, y no se acobarda
Por SARAH LYALL
En mayo pasado, nueve meses
después del ataque con arma blanca
que casi lo mata, Salman Rushdie
hizo una aparición sorpresa en
la gala literaria PEN America 2023,
donde recibió el Premio Centenario
al Valor.
vSu voz era débil y estaba notablemente
más delgado; uno de los
cristales de sus lentes estaba oscurecido
porque perdió el ojo derecho
en el ataque. Pero cualquiera que se
preguntara si el autor seguía siendo
el mismo de antes se habría sentido
tranquilo por la forma en que
comenzó sus comentarios, con un
chiste.
Un orador anterior había mencionado
El valle de las muñecas, la
novela de Jacqueline Susann.
“Quiero recordarles a las personas
en la sala que tal vez no recuerden
que El valle de las muñecas fue
publicada en la misma temporada
editorial que La queja de Portnoy,
de Philip Roth”, dijo Rushdie. “Y
cuando le preguntaron a Jacqueline
Susann qué pensaba de la gran
novela de Philip Roth” —con su
protagonista entusiasta del autoplacer—
“dijo: ‘Creo que es muy
talentoso, pero no me gustaría estrecharle
la mano’”.
Fue una señal triunfante de que
su roce con la muerte —más de 30
años después de que el ayatolá Ruhollah
Jomeini de Irán emitiera
una fatua pidiendo el asesinato de
Rushdie por la novela Los versos
satánicos— no había debilitado ni
su espíritu ni su determinación de
vivir la vida abiertamente.
Su nuevo libro, Knife (Cuchillo),
es un impactante relato del ataque
y sus consecuencias. También es
una historia de amor profundamente
conmovedora que atribuye gran
parte de su recuperación y buen
humor al apoyo de quien ha sido su
esposa durante tres años, la poeta
y novelista Rachel Eliza Griffiths.
CLÉMENT PASCAL PARA THE NEW YORK TIMES
Salman Rushdie, que perdió un ojo tras ser apuñalado en 2022, tiene un nuevo libro.
“Quería escribir un libro que tratara
tanto del amor como del odio
—uno superando al otro”, dijo Rushdie
en una entrevista reciente. “Y
por eso es un libro sobre nosotros
dos”.
Rushdie ahora está más robusto
que cuando apareció en el escenario
hace aproximadamente un año.
Pero todavía está lidiando con periodos
de fatiga.
Un lado de su boca se tira un poco
cuando habla, resultado del daño
a un nervio en su cuello. Su mano
izquierda solo se ha recuperado
parcialmente y su ojo derecho está
permanentemente inutilizable.
Sin embargo, la voz de Rushdie
ha recuperado su rico timbre y su
aire de diversión. Su actitud es tan
relajada y su mente tan flexible como
siempre.
Cuchillo puede significar muchas
cosas, escribe Rushdie. Es un arma
y un recurso artístico en libros,
películas y pinturas. En el libro de
Rushdie, es una metáfora de la comprensión.
“El lenguaje puede ser ese tipo de
cuchillo, que corta hasta la verdad”,
Su nuevo libro es un
relato de terror y una
historia de amor.
dijo. “Quería utilizar el poder de la
literatura —no sólo en mis escritos,
sino en la literatura en general, para
responder a este ataque”.
La agresión se produjo mucho
después de que parecía haber disminuido
el peligro para su vida. El
12 de agosto de 2022, Rushdie estaba
en el escenario de la Institución
Chautauqua en el oeste del estado
de Nueva York, hablando sobre
City of Asylum, un programa que
brinda refugio seguro a escritores
amenazados. Un hombre vestido
de negro, Hadi Matar, subió corriendo
al escenario empuñando
un cuchillo. (Matar se declaró inocente
de los cargos de agresión en
segundo grado e intento de asesinato
en segundo grado y está esperando
juicio).
La hoja penetró a Rushdie 10 veces.
Le cortó todos los tendones y la
mayoría de los nervios de su mano
izquierda. Penetró en su ojo derecho
justo antes de llegar al cerebro,
destruyendo el nervio óptico. Le
cortó el cuello, la parte superior del
muslo derecho y la línea del cabello,
y le atravesó el abdomen.
La gente corrió a auxiliar a Rushdie,
encabezada por el cofundador
de City of Asylum, Henry Reese,
de 73 años, quien sufrió una herida
menor de cuchillo y un ojo derecho
muy magullado mientras sujetaba
al agresor.
“Esa mañana en Chautauqua
experimenté lo peor y lo mejor de
la naturaleza humana, casi simultáneamente”,
dice Rushdie en el
libro.
En junio, Rushdie cumplirá 77
años. “Estuve muy cerca de la
muerte”, dijo. “Y cuando te acercas
tanto, cuando la miras muy bien, se
queda contigo”.
Sin embargo, no tiene miedo.
“¿Alguna vez viste el musical
Spamalot?”, continuó. “Hay una
carretilla con víctimas de la peste
que cruza el escenario. Y cuando
llegan al centro del escenario, todos
saltan de la carretilla y cantan
esta canción, Él todavía no está
muerto.
“O te dejas llevar por el miedo a la
muerte, o no”, dijo.
Salvar la Bienal de Venecia, sin presiones
Por ZACHARY SMALL
Sólo los adictos al trabajo y los
optimistas que se autoengañan
deberían organizar una Bienal de
Venecia, como descubrió el curador
brasileño Adriano Pedrosa durante
los innumerables
vuelos
y juntas que
han llenado su
agenda durante
los últimos
dos años.
“Esto prob
a b l e m e n t e
Adriano
Pedrosa
habr ía re -
querido cinco
años y un
equipo de investigadores
intensos”, dijo Pedrosa en una entrevista
en video, si no hubiera pasado
más de una década reflexionando
sobre las posibilidades, más
recientemente como el influyente
director artístico del Museo de Arte
de Sao Paulo.
Ahora que ha abierto la 60 exposición
internacional, otros juzgarán
si el curador de 58 años ha capturado
el espíritu del arte contemporáneo
con su exposición doble,
Extranjeros en todas partes, en los
Giardini y el Arsenale.
El título es una provocación,
ponderada por las agendas antiinmigrantes
de Italia, Hungría y
otros países en los últimos años.
Sin embargo, Pedrosa habla de
celebrar al extranjero y las olas
históricas de migración en todo
el planeta, ofreciendo un catálogo
de sinónimos —“inmigrante,
emigrado, expatriado”— incluso
mientras amplía el concepto. “Tomo
esta imagen del extranjero y la
desdoblo en el queer, el externo, el
indígena”, dijo.
Esos temas están personificados
por 331 artistas, la mayoría de los
cuales resultarán desconocidos incluso
para experimentados esnobs
del arte.
Un curador ofrece
sorpresas
del pasado.
En Venecia se dividen en dos secciones
principales, una centrada
en el arte contemporáneo y otra
dedicada a obras realizadas en el
siglo XX. La mayoría ha llegado del
sur global sin una representación
importante en galerías ni un punto
de apoyo en el circuito de museos.
Para muchos visitantes, será la
primera vez que experimenten las
abstracciones fragmentadas de
Zubeida Agha (1922-1997), de Pakistán;
los expresivos retratos de
Hatem El Mekki (1918-2003), de
Túnez; y las coloridas fantasías del
brasileño Emiliano di Cavalcanti
(1897-1976), entre otros.
Los críticos notaron que Extranjeros
en todas partes serviría como
un punto de inflexión sombrío —algunos
dicen lúgubre: es la primera
Bienal de Venecia en los últimos
años que muestra más artistas
muertos que vivos.
Pero el elemento sorpresa tiene
mucho tiempo de ser la tarjeta de
presentación de Pedrosa. En el Museo
de Arte de Sao Paulo, o MASP,
sus distintivas exposiciones Historias
han unido obras de arte entre
el tiempo y el espacio, trastocando
las narrativas dominantes de la cultura
occidental.
Su exposición de 2018 Historias
afroatlánticas ejemplificó el enfoque
al abordar la diáspora africana
y temas relacionados como la esclavitud
a través de alrededor de 500
obras.
“Quejarse de las bienales es uno
de los pasatiempos favoritos del
mundo del arte: no hay suficientes
artistas jóvenes, hay demasiados
artistas jóvenes; no hay suficientes
artistas locales, demasiados artistas
locales”, dijo Claire Bishop, profesora
de historia del arte en la City
University de Nueva York.
“Lo importante es qué tipo de
argumento general se está presentando.
La mayor preocupación, que
todo el mundo está perdiendo de
vista, es que la Venecia de Pedrosa
VÍA YINKA SHONIBARE Y GALERÍA JAMES COHAN, NUEVA YORK
pueda ser nuestra última declaración
intelectual aventurera en muchos
años”.
Se refería a la inclinación hacia la
derecha de la política italiana que
ha sacudido al sector cultural después
de la elección de Giorgia Meloni
como primera ministra en el
2022. Pedrosa dijo que el Gobierno
no ha interferido. “Tuve total libertad”,
dijo.
Al enterarse de que la edición d
2022 de la Bienal incluía 95 artistas
muertos, representando el 44 por
La escultura de
Yinka Shonibare
“Astronauta
Refugiado II” (2016)
es parte de la 60ª
Bienal de Venecia.
La exposición
“Extranjeros en
todas partes” contó
con la curaduría de
Adriano Pedrosa.
ciento de los participantes,
ARTnews declaró
que la estadística
era “impresionante”.
Este año la proporción
de artistas muertos en
la exposición es del 55
por ciento.
Y entonces Pedrosa
ha enfrentado la pregunta:
¿Qué significa
realizar una exposición
de arte contemporáneo
cuando tantos
artistas no están
vivos?
“Creo que es una lástima”, dijo
Dean Kissick, un crítico cultural de
Nueva York, quien señaló que casi
50 artistas de la Bienal actual nacieron
en el siglo 19.
“No hay fe en el futuro ni visión
del mismo”.
Pedrosa discrepó. “Muchos de
los artistas están muertos, pero el
arte está muy vivo”, dijo, añadiendo
que los curadores estaban descubriendo
artistas que habían sido
pasados por alto en su época.