State, community, individual - Societal and Political Psychology ...

El sentido psicopolítico
de la dinámica social actual
La dinámica individuo-sociedad hace mucho
que constituye el meollo del enfoque psicosocial
y político. Tanto más que los lazos socioafectivos
mezclados a la vez por el proceso
económico y la crisis política global que atraviesan
las naciones del mundo entero. Un sentimiento
agudo de ansiedad penetra el corazón
y sacude el pensamiento.
Estamos en medio de una época de articulación
entre una modernidad que agoniza y una
nueva era que se busca a través de una pluralidad
de hechos inquietantes y de pistas contradictorios
La crisis de la deuda pública de los países
occidentales (previsible pero inesperada) se ha
precipitado sobre Europa como una peste. La
repetición de la tristemente célebre crisis de
1929 demuestra que la libertad de los mercados
sin regulación de los Estadios soberanos solo
puede conducir a los excesos del capital fi nanciero
y a la ruina “electoral” de la democracia.
Se trata de introducir la ley de la selva y que se
salve quien pueda.
La lección de los años treinta no ha sido
sufi ciente. La Psicologia política de crisis se
repite. Somos víctimas una vez mas de la voracidad
de las oligarquías económicas y de la
cobardía de las elites políticas. En resumen, la
irracionalidad del sistema conduce a la destruc-
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ción de los regímenes existentes comenzando
por los eslabones mas débiles.
Sin ningún asombro las revueltas árabes
de comienzos del 2011 se han producido sin
un proyecto político alternativo ni una elite
democrática de cambio. Sin ningún asombro
las multitudes de “indignados” de New York
hasta Madrid esgrimen sus cóleras sin llegar a
crear las condiciones de una mutación política
verdadera.
La clave para entender el momento presente
es analizar lo que los pueblos esperan.
Nadie puede dudar que una transformación
de las condiciones de económicas se ha vuelto
necesaria, tanto como un nuevo proyecto de
vida y de trabajo. Por cierto, la crisis de consciencia
moral siempre precede la toma de las
“bastillas” por las masas que deben así hace su
aprendizaje político.
Resulta inútil de lanzar un llamado a los
buenos sentimientos sin conducir acciones de
coraje. De allí la importancia de un sobresalto
del bien común en el sentido republicano del
término. Puesto que todo el sistema de creencias
y de representaciones sociales se desmorona
bajo nuestros pies y ante nuestra vista. Una
ardorosa lucidez se impone.
Lavinia Betea y Alexandre Dorna