Infoindustrial_103

G R A N D E S I N F R A E S T R U C T U R A S
potencia necesaria, lo que evita condenar la
instalación a potencias y densidades fijas.
La explotación del data center ha de ser predictiva
y proactiva para acometer este proceso
de la manera más eficiente y que minimice
el impacto tanto en los niveles de inversión
como de disponibilidad. Hay que disponer
de un sistema de actuadores y sistemas de
gestión que permitan no solo la monitorización
sino también actuar de manera remota, finalizando
con un sistema que permita predecir
estados repetitivos de inestabilidad y adelantarse
en el tiempo. Este proceso se consigue
a partir de modelos de gestión basados en ISO
20000, ISO 27000, ISO 16000 e ISO 14000.
Esta preocupación sobre el futuro desarrollo
también marca una gran diferencia sobre un
diseño clásico y el proyecto Walhalla.
Como conclusión podemos destacar la alta
fiabilidad, disponibilidad, seguridad, modularidad,
adaptabilidad, eficiencia y control de
un proceso respecto a modelos actuales, que
priman una falsa robustez, una extremada
rigidez, una escasa atención a posibles modificaciones
y una gestión totalmente dependiente
de elementos externos.
Equipos de almacenamiento de datos. Foto: Tissat.
Las claves del proyecto
Ubicación: Un correcto posicionamiento
garantiza el acceso a todas las infraestructuras
que dan servicio primario como
energía, telecomunicaciones o almacenes
de suministro.
Selección tecnológica: Hay tener claro
cómo va a ser el suministro energético:
saber si vamos a optar por un modelo
de suministro sobre el cual no tenemos
control –compañía eléctrica– u optaremos
por medios de generación energética.
Nivel de seguridad: Hay que definir los
requisitos de seguridad que queremos que
tenga nuestra infraestructura: TIER I, TIER
II, TIER III o TIER IV.
Eficiencia y densidad de carga: Se debe
marcar el punto máximo de pérdidas en
nuestro centro para acondicionar nuestras
TI y sobre todo qué densidad de carga
podremos ser capaces de suministrar.
Mantenimiento y operatividad: Hay
que rentabilizar y minimizar los posibles
fallos de la instalación, además de llevar
un control exhaustivo de la necesidades
y potencias necesarias para prever situaciones
críticas, propias del funcionamiento
continuo del data center.
más info:
tissat.es/walhalla
INFOINDUSTRIAL IV TRIMESTRE 2011 39