3.-Un millón de mundos contigo.pdf · versión 1

Los edificios de metal y hormigón a ambos lados de nosotros se ciernen como un acantilado, y
nuestro sendero es un valle. -¿Estás seguro de que sabrás cuando llegamos al suelo?
"El sensor de altitud nos mostrará." Señalo a la galga que realmente, realmente espero es el sensor
de altitud.
Cuando llegamos al suelo, la oscuridad está casi completa. La única iluminación, además de los faros,
proviene de unas cuantas sentadillas donde viven los más pobres, donde vemos el resplandor de las
linternas y el parpadeo de las velas. Probablemente estamos despertando a todos, que no pueden
ser los mejores Manera de mantener la ubicación de la resistencia en secreto. Pero sin los faros, voy
a estrellar esta cosa con seguridad.
A medida que avanzamos lentamente, a unos diez pies sobre el suelo, Romola se abre a las casuchas
improvisadas, los escombros que solían ser aceras o tierra, y las pasarelas destartaladas y los
puentes de cuerda que conectan las viviendas aquí abajo. "Parece un campo de refugiados", susurra.
-Supongo que lo es.
Excepto que la gente no se haya escapado, ellos han corrido hacia abajo.
"A estas alturas el coche está escudriñando la ubicación que ingresamos -la dirección de mi casa de
los padres, de la base de datos de Triad- porque hasta hace un par de semanas la resistencia no
estaba muy lejos (en sentido horizontal, al menos). No hay necesidad de que yo navegue: Todo lo
que tengo que hacer es seguir empujando el coche hacia adelante y asegurarse de que no golpeo
ninguna de las pasarelas. "Entonces, dime, ¿cuál es exactamente tu trato?"
-Te pido perdón? El tono de Romola se vuelve helado y levanta una ceja. "Mi trato'?"
-¿Por qué eres tan fiel a Conley? ¿Incluso cuando normalmente es un psicópata gigantesco? Quiero
decir, he visto otra versión de ti establecer una dimensión para ser destruido. No lo hubieras hecho
por tu cuenta, pero lo hiciste por él.
"No puedo responder por una Romola que no he conocido." Después de una pausa, añade, "Sin
embargo, si yo fuera a especular, siempre soy una persona muy leal a cualquier persona que me
importa. En mi mundo, Wyatt Conley resulta ser un empleador y mentor extraordinariamente
inspirador. En una dimensión como ésta -donde el dinero es todo lo que importa y donde la gente
piensa en sus corporaciones como si fueran iglesias- debe parecer un profeta ".
Aunque me gustaría burlarse de esa imagen, no puedo. En un mundo tan fríamente ambicioso que
podría convertir a mis padres en asesinos, Conley sería el líder definitivo.
Eso no excusa lo que la otra Romola ha hecho. Pero me hace capaz de ver a esta Romola como a sí
misma.
Me dirijo a un puente de cuerda caído. Su sombra corta a través de las vigas de los faros del coche,
haciendo que el paisaje desigual, desordenado alrededor de nosotros parezca como si se ha roto
por la mitad.
Romola frunce el ceño ante una de las pantallas del tablero. -Eso demuestra nuestra ubicación,
¿verdad?
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