3.-Un millón de mundos contigo.pdf · versión 1

Sostengo mis manos para señalar a los jeroglíficos. -No, en realidad, esto es Wisconsin.
Casi sonríe. -Egipto. Mi acento es más fuerte aquí ...
-Tú eres el propio egiptólogo del zar, estas trabajando con mamá y papá en la expedición. Tenemos
estas tiendas enormes, este café locamente fuerte , y camellos vivos reales. Mamá lleva incluso un
turbante.
La consternación de Paul me trae más cerca de la risa, la cual no he tenido en mucho tiempo. -
¿Tenemos que montar los camellos?.
-No lo sé. Todavía no hemos llegado a eso.
-Espero que no.- Justo cuando siento que podríamos estar pasando lo peor de todo, vuelve a
intentarlo. -Espera. ¿La otra Marguerite Malvada ella vino aquí para matarte? ¿Cómo a la última
Marguerite?.
-Ella está cerrando puertas, me está cerrando de más y más universos.- El plan retorcido se ha vuelto
más claro para mí después de una noche para reflexionar sobre las cosas. -Triad está tratando de
asegurarse de que no pueda salvar los universos en cuestión. No puedo salvar un universo al que no
puedo alcanzar. No puedo alcanzar un universo donde ya estoy muerta. Así que van a matar a todas
estas Marguerites una tras otra a menos que siga a Malvada y ponga las cosas bien. Tengo que
seguirla, Paul. Tengo que salvar a las otras Marguerites. No sólo porque me permite alcanzar esas
dimensiones y protegerlas, sino porque. . . No puedo dejar que las otras versiones de mí sean
sacrificadas. No si tengo el poder de detenerlo.
Paul quiere objetar, lo sé. Sin duda piensa que mi plan para rescatar a las otras Marguerites es
demasiado peligroso. Sinceramente, estoy de acuerdo. Es demasiado peligroso. Pero eso es lo que
tengo que hacer. Tal vez siente mi determinación, porque en lugar de discutir, simplemente
pregunta.
-¿Qué pasó en esta dimensión? ¿Cómo intentó asesinarte?.
-Intentó enterrarme en una cueva. Uno de los pasillos no era tan estable. Lo conseguí bien, excepto
por la parte en la que una momia antigua se cayó sobre mí. Camino menos divertido de lo que
parece en Raiders of the Lost Ark.
Paul frunce el ceño. -Eso suena supervivencia. Obviamente. Pero…
Rápidamente explico por qué los métodos de Malvada van a ser menos peligrosos en el futuro, y al
principio Paul asiente, aceptando conmigo. Pero su mirada se vuelve lentamente más lejana, incluso
confusa. Luego se acaricia la barba corta un gesto que parece familiar, incluso estudiado y dicho,
sus consonantes gruesas y borrosas con su acento ruso.
-Espera. Recuérdeme, lo sé. ¿Quién es malvada, señorita Caine?.
Mierda. Paul de este mundo está aquí nuevamente. Me acerco más, lo que enciende la esperanza
en sus ojos hasta el momento en que me meto en su camisa, agarro su Firebird y establezco un
recordatorio.
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