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Pasado,presente y futuro
de la licenciatura
de Veterinaria en España
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En los diez últimos años, el programa educativo de la licenciatura de Veterinaria ha
experimentado numerosos cambios en nuestro país. El excesivo número de alumnos
es uno de nuestros principales problemas a la hora de ofertar una enseñanza de calidad;
no obstante, la tradicional figura del veterinario español como profesional de la salud pública
y de la seguridad alimentaria hace que, ante crisis agroalimentarias, sea uno de los más valorados.
De julio-agosto 2001
a febrero 2002
años contigo
Los estudios conducentes a la obtención
del título de licenciado en Veterinaria han
variado de forma intensa en el territorio
español. La mayoría de las once facultades
de Veterinaria españolas ya estaban creadas
y en pleno funcionamiento hace diez
años y, por lo tanto, durante este tiempo
se ha hecho un trabajo basado en la experiencia
obtenida en esas facultades, añadiendo
multitud de nuevas iniciativas provenientes
de las recién creadas. A las
facultades que podemos denominar como
“clásicas” (Complutense de Madrid, Córdoba,
León y Zaragoza), se unen a partir
de 1982 otras nuevas (Barcelona, Cáceres,
Lugo, Las Palmas, Murcia, Valencia, y, la
más reciente, Alfonso X El Sabio de
Madrid, con poco más de cinco años de
vida), por lo que, en los últimos años, se
ha asentado una mayor oferta de plazas
para poder cursar estudios de Veterinaria
en nuestro territorio. Podemos decir que,
en conjunto, se ofertan alrededor de 1.300
plazas y más de 3.500 personas solicitan
su ingreso en una facultad de Veterinaria,
siendo la mayoría de estas demandas en
primera opción, lo que no hace sino confirmar
el elevado componente vocacional
de esta carrera.
El principal déficit observado
en la formación de nuestros
estudiantes es una aparente
falta de adecuación de los
estudios al mundo laboral.
Una característica diferencial de nuestra
licenciatura de Veterinaria es que es la
única titulación en Europa que sufre evaluaciones
periódicas de la calidad de su
docencia por un organismo en el que la
Unión Europea ha delegado este tipo de
acciones. Se trata de la Asociación Europea
de Facultades de Veterinaria (Europe-
an Association of Establishments for Veterinary
Education -EAEVE-) cuyos objetivos
son, entre otros, promover, desarrollar y
armonizar la educación veterinaria y dirigir
el Sistema Europeo de Evaluación de
las Enseñanzas Veterinarias. Las evaluaciones
de las facultades españolas comenzaron
a principios de los años 90, inicialmente
con malos resultados (ninguna
facultad fue capaz de superar la primera
inspección), aunque, tras las necesarias
reformas (principalmente con la creación
de las exigidas infraestructuras, entre las
que destacan los hospitales clínicos veterinarios
universitarios o las granjas docentes),
varias facultades españolas han superado
con éxito las sucesivas evaluaciones.
Cifras y calidad de enseñanza
Pese al esfuerzo realizado por las diversas
facultades, el número de plazas ofertadas
en nuestro territorio se antoja elevado.
Objetivamente, sería recomendable
que se produjera una reducción significativa
del número de alumnos que ingresan
cada año. Este aspecto no sólo redundaría
en una mejora de la calidad docente,
si no que disminuiría el claro exceso de
licenciados en Veterinaria que hace que
predomine, en los primeros años, una
excesiva precariedad laboral, hecho que
se puede agravar en el futuro dada la
juventud de los profesionales en ejercicio
actualmente. Esta necesaria reducción del
número de alumnos permitiría, además, la
puesta en marcha de nuevas metodologías
docentes, requeridas (aunque no exigidas)
para poder converger en el Espacio
Europeo de Educación Superior (EEES) y
que implican, necesariamente, la creación
de grupos reducidos.
Con el número actual de alumnos en
nuestras facultades, este tipo de docencia
resulta difícil, si no imposible.
Actualmente, cuatro de las facultades
españolas aparecen en la Lista de Facultades
Evaluadas y Aprobadas por la EAEVE,
esto es, y por orden alfabético, Barcelona,
Complutense de Madrid, Lugo y Murcia.
Otras están pendientes de ser revisitadas
(una facultad que no supera la inspección,
cuando considera que ha solventado
las deficiencias detectadas, solicita ser reevaluada
tan sólo en los puntos que recibieron
informes negativos) o reinspeccionadas
(sufren una inspección completa).
Estoy seguro que, próximamente, y dada
la calidad de la docencia en veterinaria en
nuestro país, la mayoría de las facultades
españolas aparecerán entre las mejores
facultades de Europa
Una característica diferencial
de nuestra licenciatura de
Veterinaria es que es la única
titulación que sufre evaluaciones
periódicas de la calidad de su
docencia por un organismo
designado por la U. E.
Si nos referimos a las salidas profesionales,
los licenciados en Veterinaria acceden
de forma rápida al primer puesto de
trabajo (todos los estudios demuestran
que el paro en nuestra profesión puede
considerarse como “técnico”), aunque se
observa una preocupante precariedad
laboral (demostrada por un significativo
aumento del pluriempleo) y unos salarios
bajos, poco acordes con la cualificación
obtenida tras largos años de aprendizaje y
la responsabilidad social de nuestros profesionales.
El principal déficit observado en la formación
de nuestros estudiantes es una
aparente falta de adecuación de los estudios
al mundo laboral. Por lo tanto, el
desarrollo de los nuevos planes de estudio
actualmente en marcha deberá tener
en cuenta la demanda de la sociedad y las
Vive como si fueras a morir mañana. Aprende como si fueras a vivir para siempre. Mahatma Gandhi
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J. GOYACHE