Urbanismo - Aparejadores de Madrid

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Gestión
lud y medio ambiente, seguridad de utilización, protección contra el
ruido, ahorro energético y aislamiento térmico que son ahora tan familiares
gracias al Código Técnico de la Edificación.
La directiva 2004/35, sobre responsabilidad en relación con la prevención
y reparación de daños medioambientales, traspuesta por la
Ley 26/2007 y uno de cuyos resultados es el RD 105/2008, que regula
la producción y gestión de los residuos de construcción y demolición.
Esta nueva normativa está impulsando un cambio en la construcción,
que será cada vez más visible en los próximos años, que podríamos
denominar de profesionalización, formalización o incluso de industrialización,
si bien no se basará sólo en la idea clásica del traspaso
de actividades de la obra al taller, sino en la aplicación de los conceptos
que han ayudado a desarrollar el resto de la industria desde
el final de la Segunda Guerra Mundial, cuando empezó a variar la
orientación desde la capacidad de producción a la satisfacción del
cliente.
Tres facetas distintas, pero similares
Aparentemente, estos tres aspectos relativos a la seguridad y la salud,
el control de calidad y la gestión ambiental de la construcción no guardan
ninguna relación entre ellos. Esto es así, en principio, si se consideran
desde un punto de vista exclusivamente técnico. Son diferentes
las medidas a tomar para evitar el riesgo de los trabajadores, la forma
de controlar la ejecución para obtener un resultado final satisfactorio
y los procedimientos para minimizar el impacto de la construcción
en el entorno.
Sin embargo, quienes han profundizado en la aplicación de estas diferentes
facetas de la construcción, o quienes provienen de otros sectores
industriales, observan más relación entre ellas que las que se
muestran a simple vista.