narrativa - Le chasseur abstrait

BMD
Al igual que nosotras, a partir de los cuarenta,
también son víctimas de la ley de gravedad, con la
diferencia que, mientras a las mujeres la fuerza de
gravedad nos afecta parcialmente varias partes del
cuerpo, a ellos sus efectos se localizan en una parte
específica debajo de la cintura, causando desequilibrio
emocional, físico, automotriz, financiero y cornamental.
Sus competencias y habilidades para la vida (ja!
Esos términos están de moda para elevar la calidad
de… de todo, ¡ajá! Y engañar al lector o interlocutor
que se sabe de lo que se habla) los ratifican como
proveedores, principalmente. La madre Naturaleza los
hizo fuertes para el sustento de la familia y la Madre
(así a secas) los hizo inútiles en todas las áreas de
monopolio femenino engañándolos con el inteligente
y poderoso argumento que servirles nos causaba placer
y era la materia prima de nuestra felicidad. Lo
peor de todo es que se lo creyeron y son capaces de
soportar un matrimonio sin amor con tal de tener
quien les lave sus calzones, les haga su comida y se
haga cargo de sus cositas, si aun les sirven.
En fin, las bella mujeres (o sea, todas) hemos evolucionado
y entendemos que esos artificios morales y
educacionales ya son obsoletos, pues ya nos cansamos
de lo inútil que resulta tener a un inútil junto a
nosotras. Además, como tampoco es época de desperdiciar
nada, ni lo inútil, varias macroempresarias
intelectuales decidimos invertir para asegurar nuestro
retiro en alguna playa nudista de las Bahamas al crear
el BMD.
Este proyecto financiero se basa en la consigna
lógica de que por cada mujer enamorada habrá un
marido en potencia, que por cada mujer feliz hay un
amante clandestino involucrado y que por cada esposa
frustrada existe un esposo frustrante.
narrativa
Junio 2012
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