crónica de la guardia civil - orden y ley asoc. duque de ahumada de ...

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Orden y Ley Guardia Civil
CRÓNICA DE LAS COMUNIDADES AUTÓNOMAS
explosivos –, su actuación en los terribles
atentados de Atocha, El Pozo y Santa
Eugenia y la detención del grupo terrorista
en Leganés demostraron que eran los más
dignos merecedores de tal honor.
En un ambiente mucho más sobrio y
menos distendido que en anteriores años, el
evento congregó a protagonistas de la vida
política: Concepción Dancausa, presidenta
de la Asamblea de Madrid, el ex alcalde de
la capital, Álvarez del Manzano, el defensor
del Menor, Pedro Núñez Morgades y los
portavoces de los grupos parlamentarios,
Antonio Beteta (PP), Fausto Fernández (IU)
y Rafael Simancas (PSOE), quien un año
antes se disputaba ante las urnas la alcaldía
de Madrid. Simancas declaró sentirse más
que satisfecho por los resultados electorales
y repitió las mismas palabras que el ministro
José Bono cuando le preguntamos por el
nombramiento de un General del Ejército
del Aire como máximo responsable de la
Guardia Civil, esto es, que el hecho de ser
militar no debería impedirle acceder a un
puesto de tal categoría. Asimismo, añadió
que la no viabilidad del mando único en
este momento no significa que no vaya a
hacerse real en los próximos años.
Cabe señalar que las Fuerzas y Cuerpos
de Seguridad del Estado no pronunciaron
discurso alguno; hubiera sido de agradecer
que la Presidenta les hubiera, al menos,
reservado tiempo para agradecer el galardón.
Acudieron a recoger la Medalla Don
Vicente Faustino Pellicer, Subdirector
General de Operaciones de la Guardia Civil,
y Don Pedro Díez-Pintado Moraleja,
Subinspector General Operativo del Cuerpo
Nacional de Policía. Tras la foto de rigor,
volvieron a sus asientos para dejar todo el
protagonismo al Alcalde de Madrid.
Alberto Ruiz-Gallardón, amigo de largos
discursos, recordó una y otra vez sus años
pasados al frente de la Casa de Correos y
alabó también una y otra vez la maravillosa
labor del socialista Joaquín Leguina. Hizo
balance de sus gestiones como presidente de
la Comunidad a lo largo de ocho años y
subrayó los avances que en todos los aspectos
la capital se ha beneficiado, en especial,
el transporte público, que se sitúa entre los
mejores del mundo.
Tras comprobar las buenas relaciones y
la admiración mutua que se profesan
Alcalde y Presidenta, ambos salieron a la
Puerta del Sol para presenciar la parada
militar y a depositar una corona por los caídos
en 1808 así como otra ante la placa que
recuerda a los fallecidos el 11M. El ágape,
que normalmente se ha venido celebrando
tras el homenaje, se suspendió ya que el
gobierno de la capital no lo consideró adecuado
al sentirse de luto por los acontecimientos.
Las fiestas de la Comunidad tuvieron
su último acto de homenaje en la
Retreta militar de época que cada año se
inicia en la Plaza de Oriente, recorre el centro
de Madrid y acaba en la Plaza Mayor. La
lluvia y el ambiente poco festivo de los
madrileños no ayudaron a hacer de ese día
uno de los mejores dos de mayo.