Tema 19: Las vanguardias históricas - Antoniohernandez.es

Vanguardias Históricas © José Mª Fernández Navarrete
de la desorientación, del humor, y de la iniciativa dada a la imaginación. No se
puede negar su originalidad, los temas obsesionantes muestran un universo
íntimo coherente, bajo el signo del erotismo, del sadismo, de la putrefacción.
Las influencias de CHIRICO, ERNST y TANGUY, se asimilan con simplicidad.
Bajo el signo del MODERN STYLE, la tradición DADÁ y los READY-MADES. trabajó
también en la ILUSTRACIÓN DE LIBROS, en el TEATRO, en el CINE, colaborando
con Buñuel, ( 100 ►) "Un chien andalou" (1928); “La Edad de oro" (1930); con
Walt Disney “Destino” ( 101 y 102 ►) y con Alfred Hitchcock “Recuerda”.
En 1936 Dalí anuncia una vuelta espectacular al CLASICISMO italiano, que consagra
su ruptura con el surrealismo histórico.
En 1940, se trasladó a Estados Unidos, donde permaneció hasta 1955, año en
el que regresó a Cataluña. Durante estos años, además de pintar numerosos
cuadros religiosos, Dalí se dedicó a autopromocionarse y a crearse una imagen
de personaje extravagante y original que le acompañaría toda la vida.
Cuando vuelve a España se instala en Port Lligat, en 1958 celebra su matrimonio
religioso con Gala. Bebiendo de todas las fuentes -REALISMO HOLANDÉS y
BARROCO ITALIANO ( 103 ►) "Cristo de San Juan de la Cruz" (1951), tanto como
de la ACTION PAINTING y del POP ART- despliega un gran talento publicitario para
crear y mantener su mito personal y, a fuerza de inventos y acrobacias, de insinuaciones
a la buena sociedad, de compromisos con el poder político y religioso,
termina por imponerse a los ojos del público como el auténtico representante
del Surrealismo: ( 104 ►) "Pesca del atún" (1966-67).
Vida y obra se confunden entonces en una impostura general, que podría perfectamente
ser también una obra de arte.
En 1974 se creó en Figueras un museo fundado por él mismo, y otro museo, en
Cleveland, que alberga la colección Reynold Morse. Está representado en los
principales museos europeos y americanos.
Su arte busca inquietar y sacudir la conciencia del espectador a través de la
atmósfera que irradian sus obras, una atmósfera representativa de estados
anímicos. En sus metáforas visuales predominan las imágenes de alucinación y
deseo junto a la magia onírica de sus dilatados espacios donde plasma seres
extraídos de nuestro mundo interior, combinando lo humano con lo monstruoso
y apoyando la inquietante fuerza expresiva de sus composiciones en una rigurosa
y sistemática repetición formal.
Su surrealismo puede ser considerado como "figurativo", ya que su inspiración
parte de una realidad muy concreta en la que formas, aire y luz se solidifican
adquiriendo un extremado carácter de corporeidad, que él acentúa mediante la
utilización de una espléndida técnica dibujística con la que define masas y cincela
superficies, logrando efectos de gran calidad plástica.
En la concepción de su obra influye la lectura de Voltaire y Nietzsche, la de
Freud, la pintura del Bosco, Vermeer, Rafael y Leonardo, estos últimos sobre
todo en su etapa religiosa. Sin embargo, no estará muy influenciado por los
grandes de la pintura española. Quizá sus propias palabras al afirmar su principal
interés por "lograr una fotografía instantánea en colores de las imágenes de
la irracionalidad concreta" constituyen la mejor definición de su arte, donde se
funde el recuerdo del pasado y un hálito renovador.
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