13.05.2013 Views

Tema 19: Las vanguardias históricas - Antoniohernandez.es

Tema 19: Las vanguardias históricas - Antoniohernandez.es

Tema 19: Las vanguardias históricas - Antoniohernandez.es

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Vanguardias Históricas © José Mª Fernández Navarrete<br />

algunas figuras la petrificación de los rostros y la <strong>es</strong>quematización arquitectónica<br />

de las figuras.<br />

124 ► Estaba naciendo el Cubismo, cuyo manifi<strong>es</strong>to <strong>es</strong> “<strong>Las</strong> chicas de la calle<br />

Avinyó” (mal llamada “Señoritas de Aviñón”), iniciada en <strong>19</strong>06 y terminada al<br />

año siguiente, obra que rompe con el arte amable de Matisse e introduce a la<br />

pintura en un mundo demoníaco y mágico.<br />

Época del Cubismo y etapa clásica<br />

Su incansable capacidad de aprendizaje le llevó a <strong>es</strong>tudiar la obra de Cézanne,<br />

inv<strong>es</strong>tigando las posibilidad<strong>es</strong> de la geometría como lenguaje expr<strong>es</strong>ivo. La<br />

culminación de <strong>es</strong>ta experimentación condujo a Picasso a crear el Cubismo<br />

(<strong>19</strong>07), movimiento que d<strong>es</strong>arrolló en sus dos modalidad<strong>es</strong> (sintético y analítico)<br />

hasta <strong>19</strong>14, y que sin duda fue su contribución más importante a la evolución<br />

del arte contemporáneo.<br />

En <strong>Las</strong> señoritas de la calle Avinyó, al influjo de la <strong>es</strong>cultura negra y del arte<br />

ibérico se añade el impacto de Cezanne del que en <strong>19</strong>07 se celebra una exposición<br />

conmemorativa. En las cabezas puede distinguirse una gradación creciente<br />

de la geometrización, pero no <strong>es</strong> todavía plenamente un cuadro cubista;<br />

una cristalización más acusada de las formas puede encontrarse en los paisaj<strong>es</strong><br />

de “Horta de Ebro”, del verano de <strong>19</strong>09 ( 125 ►).<br />

En los años siguient<strong>es</strong> el Cubismo se somete a una serie de ensayos y pasa<br />

por varios períodos: analítico, sintético, hermético, período cristal. Tras la ruptura<br />

de líneas del objeto del primer período se acentúa en el Cubismo sintético el<br />

recelo del color y Picasso utiliza para las perspectivas la proyección de los planos<br />

y la transparencia; el Cubismo hermético <strong>es</strong> el punto culminante en la liberación<br />

del tema, el adiós total a la naturaleza; en el período cristal el cuadro se<br />

convierte en un juego de formas coloreadas en el <strong>es</strong>pacio. ( 126 ►)<br />

Al término de la I Guerra Mundial, aunque ya no abandonará totalmente el Cubismo,<br />

que reaparece en la figura humana de las dos version<strong>es</strong> de ( 127 ►)<br />

“Tr<strong>es</strong> músicos” y en el Cubismo curvilíneo de <strong>19</strong>23-<strong>19</strong>25, la paz y dos acontecimientos,<br />

un viaje a Italia y el contacto con los ballets rusos, abren una etapa<br />

clásica. En Italia Picasso contempla las obras de la Roma antigua, Pompeya, el<br />

Renacimiento. Es el momento creador de las máscaras, en las que con un dibujo<br />

portentoso inmoviliza la expr<strong>es</strong>ión mientras se limita a apuntar las otras<br />

part<strong>es</strong> de la figura. ( 128 y 129 ►)<br />

La metamorfosis<br />

A partir de <strong>19</strong>25 la temática cambia y algunos tratadistas hablan de una fase<br />

surrealista. En efecto el pintor <strong>es</strong>pañol mu<strong>es</strong>tra por entonc<strong>es</strong> una gran admiración<br />

por los <strong>es</strong>critos teóricos de Breton y por la obra de Arp, Miró y Tanguy,<br />

pero en él la repr<strong>es</strong>entación de lo onírico no pasa de ser un ensayo, un intermedio.<br />

130 ► Sin dejar de atender a la realidad no pasan d<strong>es</strong>apercibidos para su pupila<br />

analítica ciertos síntomas amenazador<strong>es</strong>, como el ascenso de los fascismos<br />

o una economía d<strong>es</strong>bocada en un consumismo creciente. Su amor por la<br />

vida no le oculta los absurdos, y poco a poco se inclinará hacia una repr<strong>es</strong>entación<br />

inédita de la realidad, en la que llega a inventar la anatomía.<br />

Página 42

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!