Un profeta della carità _spagnolo_ - Beato Luigi Monza
Un profeta della carità _spagnolo_ - Beato Luigi Monza
Un profeta della carità _spagnolo_ - Beato Luigi Monza
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
DON LUIGI MONZA - SARONNO: UN RETAZO DE CIELO 42<br />
Jesucristo. La ley de este amor va más adelante y dice que desea amar aun a los<br />
enemigos y hacerles el bien ... .Se debe, pues, amar al prójimo porque es la imagen de<br />
Dios, como se venera el crucifijo porque representa el instrumento de nuestra salvación<br />
por la muerte de Jesucristo».<br />
Éste era el ideal que Don <strong>Luigi</strong> gradualmente hacía fraguar. Semejaba en aquel<br />
momento un restaurador con el cometido de sacar a la luz un antiguo fresco recubierto de<br />
yeso. Debía hacer un trabajo lento y delicado, sin hundir mucho los instrumentos para no<br />
comprometer irremediablemente la pintura. Y así Don <strong>Luigi</strong> muy pacientemente quitaba la<br />
capa de cal, descubriendo poco a poco rostros de personas que le seguirían en su camino.<br />
De hecho, después de Clara, tocó el turno de Teresa.<br />
Teresa Pitteri se había dirigido al rector del santuario de Nuestra Señora de los<br />
Milagros solicitando permiso para fundar una sección de Acción Católica femenina en la<br />
parroquia. El rector, además de dar su consentimiento, nombró a Don <strong>Luigi</strong> asistente<br />
eclesiástico del naciente grupo. Era el 29 de marzo de 1933., En cuanto presidenta de la<br />
asociación, Teresa tuvo numerosos y frecuentes contactos con Don <strong>Luigi</strong>, quien se convirtió<br />
en su director espiritual. Don <strong>Luigi</strong> manifestó a Teresa, cual lo había hecho a Clara, el<br />
proyecto de constituir una comunidad que viviese en caridad como los apóstoles.<br />
Teresa afirma en sus escritos 28 que, inicialmente, el proyecto de la obra preveía<br />
miembros los cuales, por diversos motivos, no habían podido entrar en institutos religiosos a<br />
su debido tiempo, y a los que después en la edad madura se retiraba la posibilidad de<br />
consagrarse al Señor. Es un dato que cuadra con lo expuesto por Dajelli.<br />
Solían reunirse con Don <strong>Luigi</strong>, en casa de Clara, ésta, Teresa y otras. Si Clara estaba<br />
ausente, iban a casa de la señorita Pollini, simpatizante de la obra, si bien no participó<br />
después en ella, como tampoco otras señoritas de los primeros tiempos 29 .<br />
El 6 de septiembre murió el prefecto del santuario, Don Edoardo Fassi, sustituyéndole<br />
provisionalmente el vicario monseñor Croci, preboste de Saronno 30 .<br />
En enero de 1935 fuele conferido el cargo de vicario del santuario a Don Attilio Zaroli.<br />
En abril del mismo año, sin embargo, el arzobispo encomendó la dirección de la parroquia y<br />
del santuario a la congregación de los Oblatos de la Tercera Familia. Como consecuencia,<br />
el padre oblato Felice Sambruna, del colegio de Porlezza, trasladó su residencia al santuario<br />
de Saronno, y las habitaciones del rector fueron habilitadas para albergar a una<br />
comunidad 31 .<br />
La elección de los oblatos respondía a una precisa exigencia pastoral del cardenal<br />
Schuster, quien tenía en sus manos las riendas de la diócesis ambrosiana desde 1929 32 .<br />
Los Oblatos de Santos Ambrosio y Carlos fueron fundados por san Carlos Borromeo en<br />
1578 como instrumento de reforma pastoral de la diócesis. Se estructuran en cuatro familias:<br />
oblatos misioneros, oblatos vicarios, oblatos diocesanos, y oblatos menores o laicos.<br />
Ante Don <strong>Luigi</strong> se desplegaron nuevas posibilidades.<br />
La casa de Vedano<br />
28<br />
T. Pitteri, Appunti sulla fondazione dell'opera <strong>della</strong> Nostra Familia, p. 1, en APL.<br />
29<br />
Ibd.<br />
30<br />
Cf. Cuaderno de Binda, o. c.<br />
31<br />
Ibd.<br />
32<br />
Para la biografía del cardenal Schuster véase el párrafo El cardenal Schuster y Don <strong>Luigi</strong>.