Maria Rosa Janoher Batalla

Sesión del Buen RolloEl grupo vivió con gran expectación la sesión, se encargaron deavisar a personas que no podían asistir regularmente al grupo y apersonas que se habían alejado del grupo. Llegado el día de lasesión todos estaban presentes para la sesión, prácticamente nohubo rueda verbal, todos querían empezar ¡YA!Ayer a la hora dedespedirme, sentíamucha proximidad yconexión con todos ycada uno, aunque seaun abrazo sin palabras...Gracias por invadirmecon vuestro cariño(¡os doy permiso!).¿Y para cuando lapróxima invasión?¡Espero que muy pronto!Mensaje de un miembro del grupoEl resultado fue absolutamente orgánico para el grupo, el cual sesintió reflejado, tanto desde el punto de vista individual comogrupal, en todo momento en la curva, y la vivencia de la sesióntuvo un carácter potenciador de la integración grupal. A partir deella, el grupo comenzó a autodenominarse Tribu del Bon Rotllo(“Tribu del Buen Rollo”) y, efectivamente, aunque ellos lo desconocían,ese había sido el objetivo fijado para la sesión.Quisiera resaltar un momento particular de la sesión:● Positivización de experiencias y conexión con el placer:Una persona del grupo propuso una canción desde elrecuerdo de un momento difícil y doloroso de su vida.Utilizar esa canción en la rueda final de activación progresivapermitió que el grupo la reinterpretara, transmitieravitalidad y afecto a esa persona que, a partir de esa vivencia,ha sumado a ese recuerdo triste una experiencia positiva,logrando conectar con el placer y sintiéndoseplenamente miembro del grupo.Al finalizar la sesión el grupo se resistía a separarse. En los díassucesivos, nos inundamos los correos electrónicos de mensajesque intentaban transmitir la emoción, la fuerza de la vivencia.37