dosierUn músico innovadorCari Philipp Eraanuel Bach ha sido y es uno de los músicosmás innovadores de todas las épocas, a la vez que do el transcurso de sus vidas y obras, existen entre padre eVistos desde la perspectiva de su época y, en especial, siguien-uno de los que todavía no han encontrado su auténticaposición en el cuadro de valores de la historia de la músi-Como compositor-intérprete, Cari Philipp consolida el pro-hijo un número considerable de puntos afines.ca y en nuestro entorno musical actual. La sombra de su gran ceso iniciado por su padre, quien creaba e interpretaba en elpadre y la influencia de la obra de éste en el mundo musical denominado estilo mixto, una fusión de los estilos francés edel siglo XIX, y hasta nuestros lares musicales, nos han hechover en C.P.E. Bach un compositor extraño, galante (siem-cuenta es muy importante a la hora de juzgar y analizar laitaliano, que fue la gran obsesión de J.S. Bach. Tener esto enpre en comparación con estilos anteriores) y, sobre todo, de obra de padre e hijo. El completo oficio como teclista y compositorde Cari Philipp no seria posible de entender sin unaenrarecidas ideas estético musicales en parangón con su augustopadre. Con la restauración en el romanticismo de la obra línea directa de enlace con Johann Sebastian.de J.S. Bach, totemizada enAlemania por el latente prusianismogermánico, apareció elmito de un C.P.E. Bach (inclusoexisten pastiches y composicionesirónicas al respecto)hijo indócil, que no se entendíacon su padre, que no admirabala inmensa obra paterna,que vendía las partituras deJuan Sebastián, y, antes quenada, no seguía los caminosdel gran músico, que tantosfrutos ha dado a la historia dela música.En primer lugar, se debeafirmar que todas estas teoríasse hunden por sí solas documentale históricamente, convirtiéndoseen puras especulacionesanímicas que tiendena ensalzar la enorme figurade Johann Sebastian Bach.Hubo naturalmente un conflictogeneracional entre padre ehijo, pero éste discurrió porcauces estéticos y en ningúnmomento personales, ésio envirtud del compromiso históricoque cada cual estaba convencidode llevar a término.Johann Sebastian Bach, querámosloo no —y quizás graciasa Dios— se sintió llamadoa consolidar muchas cosas desu entorno musical, renunciandoa la modernidad y convirtiéndoseautomáticamente enlo que hoy llamamos un conservador,cuya música en el vibrantemundo alemán de suépoca llevaba ya muchos añosfuera de moda.Cari Phiüpp Emanuel, por elcontrario, institucionalizó ycondujo lo que hoy llamaríamosla vanguardia, sin la cualno hubiera sido posible el inmensocambio de estructurasque dio paso al clasicismo ensus diversas fases y vertientes. Fríednch Goiilieb Klopstock, 178072 <strong>Scherzo</strong>
Cari Philipp Cmanual BochOtra faceta heredada de su padre, bastante silenciada porlos biógrafos de ambos, pero trascendental para comprendera Cari Philipp Emanuel Bach, es su absoluto desinterés porla todopoderosa ópera de su tiempo, e igualmente su desprecioolímpico por los espectáculos teatro-mus i cales tan dominantesen el ambiente musical de entonces. A JohannSebastian Bach le costó muchos disgustos e incomprensioneseste distanciamiento, pero piénsese en Cari Philipp, asalariadoen Berlín en la real corte de Federico 11 de Prusia, rey músicototalmente poseido por la fiebre de la ópera, para el quesu cembalista no compuso absolutamente nada en este estilo,siguiendo con terquedad luterana las normas heredadasde su augusto padre. Su estancia en Hamburgo como maestrode capilla (ciudad a la que J.S. Bach siempre quiso ir),donde existia la fuerte tradición operística creada por Mattheson,Haendel y Telemann (este último su antecesor), no cambióla actitud hacía el género de nuestro famoso kapellmeister.Cultural mente, ambos procedían de dos mundos distintos.Johann Sebastian Bach enraizaba su persona en toda la tradiciónde creadores muy influenciados por la reforma luterana,con su estatus de cultos artesanos de formacióneminentemente práctica, y cuya cultura irradiaba sus propiosmoldes de trabajo, de una afinidad fundamental de su mundocon el religioso. Asi comprendemos la falta de textospoético-religiosos de una calidad parecida a la de la músicaen las obras vocales de J.S. Bach. Por el contrario, algunosson poseedores de un supino mal gusto. Sin embargo, CariPhilipp Emanuel Bach, estudiante de leyes, decide hacerse músicoy desde su estancia en Leipzig se rodea de poetas y filósofospropios de su época. Más tarde, y tanto en sus obrascomo en la famosa tertulia de su casa de Hamburgo, se codeacon lo más interesante del mundo poético e incluso pictóricode su tiempo. A la cabeza de sus libretistas de textosprofanos (no hay que olvidar la importancia de Cari Philippcomo compositor de üeder) y religiosos se encuentran filósofosy poetas del rango y la inquietud intelectual de Lessing,Ramlez, Klopstock, Gerstenberg, etc.Naturalmente el nuevo estilo encuadrado dentro del llamadoSlurm und Drang no fue un invento de Cari Philipp, aunquesí fue éste quien concretó e institucionalizó todo este periodo,donde los afectos dominan sobre los bloques y donde otravez se vuelve a nombrar hasta la saciedad esa unión poéticaenlre verso y música, dándole al discurso musical un contexéittiC)tt CtrUtln8 n f í I i 41 # t f i i atSttioWa ium Singcn ttp frtm ffíottím«un>•• 3*l"> ('••'• í ri.lt, iiu.Edición de Cantos Espirituales. Hamburgo 1781ti pmior J.S. Bmhto silábico, poético y retórico de mayor importancia que enla época anterior. Si verdaderamente el paso del renacimientoal manierismo y al llamado barroco sólo es posible bajola decisiva influencia de Monteverdi y Frescobaldi, tampococabe entender a Mozart, Haydn y Beethoven sin pasar porla obra total e inmensa de Cari Philipp Emanue! Bach. Sóloasi se explica la gran veneración de estos tres músicospor Cari Philipp, del que escriben con enormeselogios y cuyas obras interpretan. Mozart, por[ ejemplo, obtuvo un éxito señalado con la interpretaciónen Viena del oratorio La resurrección y ascensiónde Cristo, presidida por un retrato delpropio Cari Philipp.Volviendo a las relaciones de padre e hijo, es seguroque J.S. Bach quiso que su hijo fuera abogado,ésle, por el contrario, llevado del veneno de lamúsica, decide, como muchos jurisconsultos de todaslas épocas, dedicarse al arte de los sonidos. CariPhilipp llama a su hijo igual que su padre, JohannSebastian Bach, y desea ardientemente convertirloen músico, pensando en ampliar y continuar la sagade los Bach, llamada inexorablemente a desaparecer.J.S. Bach (júnior) se hace pinlornaturalista y marcha a Roma (historia casiromántico-chopiniana), donde muere de tuberculosis.Cari Philipp, en medio de dolor por la muertede su hijo, consciente del final de la saga musicalde los Bach, compone un Rondó hermosísimoa modo de lamentación, en el que las notas~* B-A-C-H si bemol, transportadas, son siempre cortadasen el discurso musical, sin que se completela palabra Bach, como intuyendo el final de lafamilia.José Rada<strong>Scherzo</strong> 73