(=) ISBN 978-980-227-250-1

2014
activadas en varios lugares de la ciudad. El Presidente
denuncia que “la realidad de los afectados por el fascismo
no es mostrada por los medios audiovisuales de comunicación”
porque atienden a una agenda de violencia.
Maduro acusa directamente a la internacional CNN,
que mantiene una corresponsalía en Caracas y diariamente
utiliza sus pantallas para decirle al mundo: “En
Venezuela hay una guerra civil”; da instrucciones a su
ministra de Comunicación e Información, Delcy Rodríguez,
para iniciar un proceso administrativo que genere
su inmediata salida si no rectifican. “¡Ya basta de tanta
propaganda de guerra de CNN!, si no rectifican, ¡fuera
CNN!”, declaró.
21 de febrero. El presidente Nicolás Maduro,
en conferencia de prensa en el Palacio de Miraflores,
mientras analizaba para los periodistas la cadena
de acontecimientos violentos desatados desde el día
12, anuncia que tomando el planteamiento de su homólogo
Barack Hussein Obama, quien dijo: “Se debe
convocar a un diálogo”, él convoca a uno de altura y
claridad: “Un diálogo entre la Venezuela patriota y revolucionaria
y los Estados Unidos y su Gobierno, acepto
el reto, vamos a iniciarlo y pongamos sobre una mesa
la verdad”. El presidente Maduro también propone que
se designen embajadores en ambos países para que
se sienten a dialogar, porque Venezuela quiere es paz,
respeto y cooperación, no violencia.
25 de febrero. La portavoz Jen Psaki informa
que el Departamento de Estado ordena la expulsión
de tres funcionarios de la embajada venezolana en
Washington, en respuesta a una medida similar de
Venezuela ocurrida la semana pasada y les dan 48
horas para que abandonen el territorio.
En Caracas, el canciller Elías Jaua comenta que la acción es
una represalia, pues no se puede hablar de reciprocidad
dado que los funcionarios venezolanos en ningún momento
se activaron contra el Gobierno de Estados Unidos.
Jaua anuncia que el presidente Nicolás Maduro, como
un gesto de la más firme voluntad de establecer sinceras
relaciones diplomáticas de respeto y honestidad,
propone a Maximilian Arveláez como su nuevo embajador
en Estados Unidos.
27 de febrero. Los senadores Robert “Bob” Menéndez
(demócrata) y Marco Rubio (republicano) presentan
una resolución en la Cámara Alta del Congreso
estadounidense para rechazar “la represión violenta de
las manifestaciones pacíficas en Venezuela” y solicitar al
presidente Barack Obama imponga sanciones contra el
Gobierno de Nicolás Maduro. Insisten en que “los violadores
de los derechos humanos deben rendir cuentas
por los crímenes que cometieron, y su presencia no
debe ser bienvenida en nuestra nación”.
28 de febrero. En Washington, el secretario de
Estado, John Kerry, confirma que “ha estado trabajando
de cerca” con Colombia y otros países para “buscar
una solución negociada” y poner fin a la crisis política
en Venezuela.
3 de marzo. El canciller Elías Jaua denuncia ante
el Consejo de Derechos Humanos de la Organización
de las Naciones Unidas (ONU) que el objetivo de las
protestas opositoras es derrocar al Gobierno constitucional
de Nicolás Maduro. “La comunidad internacional
debe saber que la naturaleza de la agresión es política
e ideológica (…), hay una alta carga de odio social
contra los sectores populares afectos a la Revolución
Bolivariana”.
6 de marzo. Danny Glover, actor estadounidense
de visita en Caracas, manifiesta: “Aunque sea una tarea
difícil, sabemos que ustedes van a poder defender con
determinación a Venezuela y no van a permitir que se
rompa ni se viole su soberanía (…). Venezuela representa
un liderazgo en toda la región y es también una
tarea para todos nosotros unir todas las naciones”.
7 de marzo. La Organización de Estados Americanos
(OEA) aprueba por 29 votos a favor y 3 en contra
(Estados Unidos, Canadá, Panamá) una declaración de
12
#ObamaDerogaElDecretoYa